Así que, tengo bloqueo de escritor, bloqueo de escritora de fanfiction, como sea. Por lo que escribiré drabbles de la "A" a la "Z" porque no sé que otra cosa hacer.
Si tienen sugerencias de palabras con una letra especifica no duden en escribirla en un comentario.
A: Aquarius
Sebastian, rey de los dioses, gobernante del Olimpo, ve por primera vez al joven de troyano al caer la noche. Una noche de verano, cuando el calor se apodera de la atmósfera y los grillos cantan insomnes.
El muchacho es fuerte y bello como suelen serlo todos los jóvenes en Troya a su edad pero Sebastian ve algo más, Kurt es bello como ningún otro.
Músculos flexibles y casi invisibles bajo su piel blanca como el mármol y sus túnicas azules. Alto, con ojos del color de un arcoíris reflejado en agua pura. Mejillas rojas y pómulos altos y resaltados.
El chico está a las orillas de un rio, sosteniendo una vasija pesada y grande, extrayendo agua de la corriente. El agua se mueve a través de sus brazos y Sebastian no puede dejar de admirarlo. Sebastian no es estúpido, él sabe que el trabajo de buscar agua se le otorga usualmente a las mujeres y a los débiles, el muchacho parece de todo excepto una mujer o un ser débil.
Sebastian recuerda por un momento la estupidez troyana y como nadie en esa ciudad sin leyes además de la fuerza podría llegar a apreciar al aguacero en el río. No como él podría. La apreciación de la belleza es inherentemente olímpica y de no ser por Prometeo y su personalidad altruista esa capacidad jamás habría sido otorgada a los humanos.
En un momento de espontaneidad, Sebastian envía a su mascota Aquila por el muchacho. El chico lucha con el ave, siempre un luchador en el corazón pero se retiene a sí mismo cuando podría golpear al águila y liberarse si quisiera. Un troyano con corazón, con respeto a la naturaleza, ahora eso es algo nuevo.
El chico se llama Kurt, Sebastian recuerda conseguir el nombre de su aguacero; pidiendo, rogando, a un humano como si se tratara de Hermes y no del rey de los cielos.
El chico se convierte en el encargado de su agua, siempre con una vasija llena y las gotas cristalinas corriendo por sus piernas. Corriendo por los rincones del palacio por el día y descansando en la cama del rey del Olimpo por las noches.
Sebastian ama al joven Aquarius, ama la forma en que Aquila lo acompaña cuando va a buscar agua y la forma en que Hermes besa su mano siempre que tiene un mensaje que entregar en el castillo y se encuentra con el chico. Ama la forma en que Kurt tararea al trabajar y canta al correr por el palacio, sin una preocupación en el mundo.
Su amor por el joven mortal no pasa desapercibido por nadie. Pero no importa cuán molesta se vea Hera, al tener a un simple chico calentando los aposentos de su esposo, o a un simple mortal haciendo el trabajo que bien podría hacer su hija Hebe, incluso cuando le grita la primera vez que ve a nadie más que un niño montando a Aquila como si no fuera nada.
Él no podría amarlo menos y no podría dejar admirar su belleza, no hay manera en que podría dejar de tratar de descifrar el color de los ojos de su Aquarius.
No importa. Porque Kurt, Aquarius, se ha ganado su lugar a su lado.
Y en las estrellas.
Espero que les haya gustado.
