Hola a todos! Hoy traigo un pequeño one-shot de esta pareja que ya hemos visto es canon! Ojala también nos den el Nathloe, pero en fin. Agradecimientos a Thomas Astruc por crear tan geniales personajes y sin nada más qué decir aparte de un gracias por pasarse a leer… COMENZAMOS!
…
Unas copas de más.
Capítulo único.
Alya despertó con resaca ese día, sentía que su cabeza iba a explotar. Cuando se levantó se puso su bata favorita de color naranja con flores blancas que había sido un regalo de Marinette y fue a la cocina a por un vaso de agua. Pero la resaca no era lo suficientemente fuerte para no fijarse en lo que veía...
-¡Aaaah! ¡Nino! ¡Ven rápido!
El moreno llegó tropezando mientras se ponía su pantalón gris.
-¡Alya! ¿Qué ocurre?
-¡Alguien ha entrado a robarnos! Mira esto.- Nino se acomodó sus gafas y miró a Alya.
-Esto no lo hizo un ladrón.
-¿Qué? Entonces...- señaló a Nino pero este negó con la cabeza viéndola fijamente hasta que con dedo tembloroso ella misma se señaló y Nino asintió.
-No puede ser...
-Podemos hablar pero primero debo reacomodar el sofá.
-¿Dónde están las sillas del comedor?
-Una en el baño, otra en el balcón y las otras dos terminaron rotas.- Alya sintió que el alma se le caía a los pies.
Alya admitía que tenía un problema. Y es que después de una dura jornada de trabajo si estaba demasiado estresada se bebía una copa o dos, y cuando se emborrachaba después no tenía idea de que había pasado.
-No me puedo creer que hiciera esto...- dijo mirando alrededor con horror.
-Debo admitir que te transformas al beber.
-¿Que paso anoche?
-Pues...
~Flashback~
Nino había adelantado algo de su trabajo en la computador. Se estiró en su asiento adolorido y Wayzz con sus pocas fuerzas empujó una taza de té en su mesa. Nino sonrió y acarició la cabeza de su kwami.
-Gracias amiguito.
-De nada joven aprendiz. Debe cuidarse mucho.
-Tranquilo. Por esta noche he terminado. Es hora de dormir.- bostezó Nino ansioso de poder ponerse el pijama.
Un estruendo hizo saltar a los dos. Rayos, seguro Alya venia de malas, pensaba Nino, pero lejos de la realidad, por esta vez. Alya entró al departamento tambaleándose un poco con la cara roja.
-Nino...
-¿Al? ¿Qué te paso?- la morena lo miró y esta con una sonrisa boba se echó encima de él, que apenas y pudo mantener el equilibrio en la silla.
-¡Niiiiiiino! ¡Te amoooooo!- el beso que le dio le sacó el aire al moreno y Alya enredó sus piernas en torno a la silla.- ¡Te amo! ¡Te amo! Y quiero devorarte como el sexy y delicioso chocolate que eres.
-¿D-Devorarme? ¡Ah! ¡Alya!- gritó al sentir la mano de Alya apretarle justo en medio del pantalón.
-¡Bon appetite!
-¡Huye Wayzz! ¡CORREEEEE!
~Fin de Flashback~
Alya al escucharle estaba pálida.
-¿Y-Y yo hice todo esto?- Nino asintió.
-Lo hicimos hasta que terminaste satisfecha. Aquí, en el balcón, en el baño, en el cuarto, hasta en el armario. El único lugar que respetaste a medias fue la cocina.
-¿Como que a medias?
-Solo diré que ya no tenemos ni chocolate, ni crema batida, ni tampoco cerezas. ¡Ah! Ni jamón, ni paté.
-¿Cómo?
-Y debo admitir que no sabía que te iba el bondage.- dijo mostrando en su muñeca marcas de ataduras.
-¡Ay, Nino! ¡Lo siento!
-Fue un trauma...- Nino tenía una expresión de muerto en vida.
-¡Lo siento tantooooo!
Tardaron en arreglar su departamento y esa noche en la cena, cortesía de Nino, este le propuso algo.
-¿Salir? No lo sé. ¿Y si bebo mucho de nuevo?
-Yo estaré allí contigo. Y a mí también me apetece una cerveza o dos.- Alya sonrió.
-Está bien pero si te emborrachas voy a grabar todo y luego a subirlo a internet.
-Me parece justo. Yo haré lo mismo.
-Entonces es una apuesta. Hay un nuevo lugar al que he querido ir hace tiempo...- decía Alya emocionada, mientras que Nino pensaba en como vigilar a Alya para que no volviese a caer presa del alcohol o él la pagaría.
El restaurante italiano tenía muy buena pinta, los platillos se veían deliciosos y el ambiente y la música eran agradables.
Pidieron una copa de vino para iniciar y Nino chocó su copa con la de Alya.
-Brindo por mi hermosa, lista y asombrosa prometida, y porque soy el hombre más afortunado al tenerla.
-Y yo por mi adorable y grandioso prometido, que me hace sentir la persona más especial del mundo.
Cuando llegaron los platos y la charla fluía, Alya se sirvió otra copa, todo bien ya que Nino se sirvió igual.
De postre Alya pidió unas peras en almíbar y helado con crema de licor. Al salir dieron un paseo por la Rue de Grenelle, donde Alya comió un postre de frambuesas y chocolate con un ligero toque de vino, y después pasaron por el antiguo club donde Nino trabajaba antes como DJ para bailar y al sentarse esta pidió una piña colada cuando Nino no la veia por saludar a un amigo, aunque se le olvidó decirle que era sin alcohol...
-¡Alya!- le quitó el vaso que estaba a la mitad.- ¿Qué tomas? ¡Agh! Alya, te prohíbo beber una gota mas esta noche. ¿Me escuchaste? O acabarás borracha.- intento hacerse escuchar por la música y Alya que lo miraba al principio perpleja, sonrió ampliamente.
-Ninoooo~- se lanzó en brazos de su prometido que con otro beso matador casi lo asfixió.
Alya tenía resaca otra vez. Estaba desnuda, en la cama y Nino dormía plácidamente tapado hasta las narices a lado suyo.
Se cubrió con la sabana un poco y tomó sus gafas de la mesa de noche donde había un papel que no pudo leer hasta que se puso las gafas y casi le da un ataque.
-¿¡UNA MULTA POR ACTITUD INDECOROSA EN EL AUTO!?- comenzó a mover a Nino.- ¡Nino! ¿Qué ocurrió anoche?- Nino apenas despertó pero se acurrucó más en la cama.
-Mmm... revisa tu celular.
-¿Mi celular?
-Anoche fue... indescriptible.- balbuceó antes de volver a dormir y Alya miraba con horror su celular.
-¡No volveré a beber jamás en la vida! ¡Publique el video en un sitio web para adultos! ¿24 horas para retirarlo? ¡Ninooooo!- chilló Alya sin ver la sonrisa de su prometido. Después de todo, una apuesta es una apuesta. Y estaba seguro que Alya solo bebería zumo y soda de ahora en adelante, aunque beber una copa en casa no sería tan malo para él…
…..
Y… espero que les haya gustado! Gracias a todos por leer, dejen review, nada de tomatazos y nos leemos en la siguiente. Y sin nada más qué decir… UN ABRAZO! UN GUSTAZO! Y HASTA LA SIGUIENTE!
