Konichiwa! Bueno, Konbanwa en mi pais xD sonlas 3 i media de la mdrigada (yey!) pero como estoy de vacaciones (oh yeah!) nopasa naa XD Nunca puse una historia de esta pairing pero me fascina i q mejor q estrenarla por navidades? =D Se q el titulo es muy cliche pero qedaba genial! xD Asi que disfruten ;)

Disclaimer: Hetalia no es mio (T^T) Tampoco lo es la navidad (D:)

Warnings: Yaoi, fluff, englandxjapan (don't like? DON'T READ! =D)

Si dejais reviews pondre una secuela con el año nuevo! (leemooooonnnn yeah)


All I want for christmas is Kiku

POV: Arthur

Mire por la ventana de mi salón observando cómo los copos de nieve caían tapando a Londres con una capa blanca. Me gire y observe si los adornos habían quedado bien. Les di mi aprobado asintiendo con la cabeza y me dirigí hacia la cocina para ver si estaba todo lo que necesitaba. La comida (no hice scones… porque nadie se los comía los otros años), y… ¡Mierda, la bebida! No me había acordado de comprar ni Coca Cola, o ni siquiera alcohol, y Russia sin alcohol era simplemente… horroroso.

Y también tenía que ir a buscar a Kiku al aeropuerto, ya que me lo pidió porque su vuelo llegaba más temprano que el de los otros. Salí corriendo hacia mi coche dándome cuenta de que ya llegaba tarde.

Era bastante complicado ir en coche por Londres y nevando. Cuando al cabo de casi una hora pude llegar al aeropuerto de Gatwick aparque y me fui corriendo hacia dentro para ver si ya había llegado. Gracias a dios su vuelo se había retrasado y acababa justo de aterrizar. Bufe más tranquila y espere delante de la puerta de llegada.

Empezaron a salir gente, bastantes japoneses por lo que supuse que serian del vuelo de Kiku. No pude evitar que una sonrisa apareciera en mi rostro cuando lo vi salir por la puerta. Me dirigí hacia allí, pero el parecía distraído mirando a su alrededor. Tardo unos segundos al darse cuenta de que lo estaba mirando fijamente, pero cuando me vio su rostro se ilumino y sonrió. Me fui hacia él y sin aviso previo, y aun sabiendo que a el no le gustaban mucho, le abrace sin poder evitarlo al ver lo hermoso que estaba.

-Feliz navidad Kiku.- le dije con el aun entre mis brazos. A él no pareció molestarlo el abrazo, es más, me correspondió enroscando sus pequeños brazos a mí alrededor.

-Feliz navidad Arthur-san.- me contesto. Des de que habíamos hecho una alianza entre Japón y yo había crecido una amistad muy fuerte, aunque deseaba mas. Aquel era mi deseo por aquellas navidades, tener a Kiku.

Nos separamos poco a poco, los dos bastante sonrojados. Nos fuimos hacia el coche y mientras yo subía su maleta en el maletero el se sentó en el asiento del copiloto por petición mía ya que parecía estar congelado.

-No te molestara que vayamos a comprar unas cosas ¿verdad? Es que me olvide de hacerlo ayer…- dije avergonzado.

-Para nada.- me contesto con una sonrisa. Puse la radio mientras íbamos en coche de nuevo hacia Londres. Kiku parecía absorto mirando por la ventana. Le estuve observando un rato y pude ver una pequeña sonrisa melancólica asomarse a sus labios.

-Me gusta esta costumbre cristiana de la navidad, es tan cálida y bonita. Que toda la familia se reúna para celebrarlo…- suspiro melancólico.

-Es muy bonito, lástima que América nos tenga que obligar a hacer una fiesta cada año para terminar todos borrachos.

-Bueno, el no te obliga a beber, así que es tu decisión acabar borracho o no, yo no me he emborrachado nunca. – le mire y sospese la idea de no beber. Estaba bien, porque así podría recordar la noche, ya que solía tener las noches de navidad un poco borrosas siempre. Y tenía la sensación que aquella navidad iba a ser especial, por Kiku.

Paramos a un supermercado y entramos. Las canciones navideñas típicas estaban puestas, y Kiku estaba escuchando atentamente para entender la letra. Le tome de la mano al ver que se quedaba parado constantemente observando los estantes y le dirigí hacia donde estaban las bebidas.

Mientras yo compraba el alcohol Kiku miraba las bebidas como la Coca-cola i la Fanta. Mire si lo teníamos todo y fuimos a pagar a la caja. Kiku se sorprendió por la indiferencia que tenían las cajeras con la gente, ni siquiera nos dijeron feliz navidad. Ya sabía que en su país todos eran mucho más educados, así que debía ser un shock el estar en Europa para él. No todos eran gentlemans como yo…

Cuando por fin llegamos de nuevo a mi piso Kiku muy amablemente me ayudo a poner el resto de las cosas a punto para la fiesta. Aun faltaban dos horas, pero sabía que pronto empezaría a llegar la gente, como si no los conociera ya…

Mire como Kiku estaba mirando el árbol de navidad, bola por bola, con fascinación. Me acerque a él, pensando en lo mono que estaba mirando con esa mirada de curiosidad suya.

-¿No tenéis de estos en tu casa?

-No, bueno… Algunas familias lo hacen pero no es lo más común. La navidad en mi casa es más comercial, porque nosotros no tenemos vuestras creencias religiosas, pero por año nuevo decoramos tres palos de bambú que ponemos como decoración en la puerta de las casas. – me explico. Asentí con la cabeza recordando haber leído algo sobre aquello, cuando me venían ataques de fascinación hacia la cultura de Japón.

Me senté al lado del japonés i los dos nos quedamos mirando por la ventana, sin necesidad de llenar el espacio con ruidos, contentos con la compañía del otro. Mire la mano de Japón, estaba reposando sobre su pierna, completamente relajada. Con sigilo acerque la mía a la suya y entrelace nuestros dedos dulcemente. Al principio él se quedo en shock mirando nuestras manos, los dos violentamente sonrojados.

Me regalo una de sus hermosas sonrisas y me sorprendió cuando me apretó un poco la mano y puso su cabeza en mi hombro.

Por mala suerte aquel hermoso momento duro demasiado poco porque cierto estúpido americano llego demasiado temprano y se puso a tocar el timbre como loco.

-¡Ya voy bloody git!- grite deshaciéndome suavemente de la mano de Kiku. El levanto la cabeza de mi hombro y me miro triste. Abrí la puerta para el que una vez fue mi pupilo me abrazase casi espachurrándome.

-¡Merry Christmas England!- grito a todo pulmón.- Veo que te lo has currado bastante bien ha-ha!- comento antes de irse a saludar al japonés con otro abrazo de oso. Detrás suyo iba su hermano Canadá.

-Feliz navidad, Arthur.- me deseo tímidamente.

-Igualmente Matt, pasa. – fui a cerrar la puerta cuando oí la voz de uno de los seres más molestos del universo.

-¡Arthur! ¡No cierres la puerta mon amour!- -me grito. Chirrié los dientes y mire como el Francés acababa de subir las escaleras.

-Feliz navidad Francis.- masculle cuando me abrazo.

-Joyeux Noel Arthur.- murmuro en mi oreja haciendo que un escalofrió recorriera mi espalda erizándome el bello. Le lance una mirada mortífera mientras gritaba que no se acercara a mí.

Pronto llegaron el resto. Los siguientes fueron China y Russia que evidentemente vinieron juntos (ya todo el mundo estaba al tanto de su relación… Que era muy extraña), seguidos de los subordinados de Russia. España, los dos hermanos italianos y Alemania también aparecieron juntos. Todo el mundo iba llegando menos Grecia, Turquía y Egipto que fueron de los últimos (gracias al griego que se había quedado dormido).

Pronto perdí la vista de Kiku entre tanta gente. Alfred llevo algunos de sus CDs así que estaba sonando música navideña sí, pero techno.

Vi que Russia ya llevaba más de dos botellas de Vodka y se estaba comiendo los morros con China en el sofá. Francia continuaba siendo pervertido con todo el mundo, pero parecía haberla tomado con el pobre canadiense que se iba escondiendo detrás de su ruidoso hermano. Podía ver a todo el mundo menos al pequeño japonés que estaba buscando.

Cuando por fin lo encontré, resguardado de los demás en un rincón, sentado en uno de los múltiples sofás, observando al resto de las parejas, con alegría por ellos, pero cierta tristeza por estar solo.

Sin dudarlo un solo segundo me acerque a él y me senté a su lado con una sonrisa.

-Hey Kiku, ¿Por qué te quedas aquí solo? Ve con los demás.- le anime. El negó con la cabeza.

-No… Cada uno tiene su pareja, y a mí no me gustaría que alguien se metiese en medio mientras estoy con la personas que amo.- musito. Pude ver la tristeza reflejada en sus ojos.

-¿Amas a alguien?- le pregunte con miedo a que su respuesta fuera negativa. Pero aun si era positiva ¿Cómo podría saber si era yo? Aunque yo sabía que lo amaba con todo mi corazón.

-Eh… Si…- contesto tímido con un sonrojo en sus mejillas.

-Je je, no te preocupes no eres el único.

-¿También te gusta alguien Arthur-san?

-No… No es que me guste, lo amo.- le conteste mientras le miraba directamente a los ojos.

-¿Esta en esta fiesta?-pregunto con miedo. Asentí con la cabeza. – Vaya… ¿Y cómo es?

-Bueno… Es tímido, muy tímido. No le gusta mucho el ruido, pero le encanta el té como a mí. No es europeo. Hm… Tiene un perro muy pequeño, que es tan dulce como él. Y aunque rehúye el contacte humano, esta mañana he podido comprobar que le gustan mis abrazos.- acabe, mientras sentía que mi cara se ponía roja, aun sin dejar de mirarle a los ojos le tome las manos y entrelace por segunda vez en aquel día nuestros dedos.

-De verdad que…¿me amas?- me pregunto en estado de shock.

-Sí, estoy cien por cien seguro. ¿Y cómo es la persona que tu amas?- Kiku sonrió y miro nuestros dedos mientras apretaba levemente mi manos con sus finos dedos.

-Es rubio… Y tiene los ojos verdes. Es bastante soñador, le gustan las hadas y los seres fantásticos, mucha gente dice que está loco, pero eso es lo que me gusta de él. Es tsundere, pero sé que yo puedo sacarle todo el amor que lleva dentro. – murmuro con voz suave.

-Se que puedes sacarme todo el amor que llevo dentro, porque me lo he estado guardando todo para ti Kiku…- susurre notando quela brecha entre nuestros labios se iba haciendo cada vez más pequeña. Nuestros labios se encontraron en un suave y tímido beso, que no fue a más, ya que los dos nos separamos, y buscamos en los ojos del otro la respuesta, si nos había gustado. Los dos sonreímos sonrojados y volvimos a unirnos en un beso, esta vez mas apasionado, más intenso. Enrosque mis brazos alrededor de su pequeña cintura mientras el rodeaba mi cuello con los suyos.

Me separe lentamente de Kiku, queriendo que aquel momento durara para siempre.

-Arthur-san… Tengo un regalo para ti, pero lo tengo en la maleta… ¿Lo voy a buscar?

-Mejor me lo das después, cuando estemos solos, así yo también te podre dar el que te compre a ti. Ahora quiero que te quedes aquí, para que pueda estar contigo...- susurre mientras ponía mi rostro contra su pelo, oliendo a lavanda y flores de cerezo. Le beso el pelo mientras él se apretujaba más contra mi pecho. Mire al resto de las personas para ver si alguien nos estaba observando. Pude atisbar la mirada de Yao, que sonreí por encima del hombro del ruso. También pude ver que Alfred me estaba mirando con una sonrisa. Me alegre que se sintieran felices por nosotros.

Aquella era la mejor navidad de toda mi vida (y era larga…) gracias a cierto japonés.

-Ah y Kiku…

-¿Hm?- respondió contra mi pecho.

-El regalo de navidad no era necesario, porque All I want for christmas is you, Kiku…


Aww q lame el final XD pero bueno, me cuesta hacer finales asi q tampoco ha qedado tan mal!=D

Dejadme muchos reviewws yy...

FELIZ NAVIDAD Y FELIZ AÑO NUEVO A TODO EL MUNDO!

I wish you a merry christmas

I wish you a merry christmas

I wish you a merry christmas

And a happy new year! (L)

Sayonaraa