"¿Ostrencia?, ¿Me escuchas?"

Susurro Bea al teléfono intentando comunicarse con su amiga. Era mas de media noche y el ''Prom'' ya había acabado.

"Nena, ¿a donde te has ido? Desapareciste de la nada y no te encontré por ninguna parte" Contesto Ostrencia algo molesta.

"Lo siento..." Bea dio un pequeño silencio antes de continuar, "Es solo que pasaron cosas inesperadas... es todo"

"¿Inesperadas?" Pregunto su amiga con curiosidad. Ya quería oír el resto.

"Si... Umm... Solo te llame para avisarte que estoy bien, por si a caso te preocupaste o algo así..." Dijo Bea rápidamente, ya que en ese momento sus pensamientos corrían por su mente sin poder saber cuales eran esos nuevos sentimientos.

"Aja... Pues, cuenta. ¿Que fue lo que sucedió?" Dijo Ostrencia teniendo una idea de lo que le sucedía a su amiga.

Bea trago saliva antes de seguir, no estaba segura de si contarle a su amiga o solo guardárselo como un dulce recuerdo "...Nada..."

"Si, claro. ¿Es algo que intentas ocultar? ¡Vamos nena, No te juzgare!" la curiosidad de Ostrencia llegaba hasta las nubes, No pensaba en colgar el teléfono hasta que le diga que fue lo que sucedió.

"¡Okay, okay!... Pero..." Bea cada vez estaba aun mas nerviosa que antes, pero ella sabe bien que cuando Ostrencia quiere saber algo, no la dejara en paz hasta saberlo "Yo..."

"¿Tu?" Contesto su amiga dejándola continuar

"Yo... Fui al Hockey Poke. Tenia hambre, y... Pues... Quería desahogarme de lo triste que estaba por lo de Steve que me abandono en pleno baile lento, oh bueno, en toda la fiesta... mejor dicho"

Bea en la mentira, pero al igual que ella Ostrencia Mas sabía que algo sucedió.

"¿Y fuera el único acompañado de un pez?" DIJO Ostrencia buscando mas información

Bea se quedo callada. No sabia cómo y qué contestar. Si mentía ella no le creería, y si le decía la verdad era mas que probable que hayan malas reacciones.

"¿Nena? ¿Estas ahí?" Pregunto Ostrencia sabiendo que Bea estaba demasiado nerviosa para contestar.

"Si... Lo-lo siento... umm" Dijo Bea ruborizándose mientras tartamudeaba en el teléfono.

"La verdad … Es que..." Dio un Suspiro largo por un momento antes de continuar "Si. Alguien me hizo compañía mientras estaba llorando allí. Eso es todo"

Bea fue cortante y tartamudeaba demasiado. Ella solo esperaba que su amiga no sospeche con quien estaba toda la noche.

"¿Oscar?" Pregunto Ostrencia por ultima vez, ya sabiendo lo que paso.

Bea se dio por vencida. Ella misma sabe que Ostrencia la conoce lo suficiente para saber que fue lo que paso allí, y aunque esperaba una reacción diferente, decidió contarle.

"¿Prometes que no se lo dirás a nadie?" Dijo Bea con mucha seriedad en su voz. Ostrencia, aunque no es muy buena amiga que guarda secretos, sabe muy bien que no se lo dirá a nadie ya que es algo personal de su mejor amiga.

"De acuerdo... No te preocupes, nena. Cuenta conmigo" Dijo Ostrencia, esta vez sin poder creer lo que estaba diciendo. Bea se esperaba mas bien una reacción involuntaria, ya que esa es la que siempre hace cuando a Bea le gusta los chicos que para Ostrencia son ''poca cosa''.

"¡Oh, Gracias Ostrencia!" Contesto Bea un poco menos nerviosa. Al menos solo lo sabe Ostrencia. Era poco probable que Oscar se lo cuente a su hermano Milo, ya que éste cuenta todo acerca de la vida personal de su hermano.

Bea empezó a contarle a su mejor amiga sobre lo que paso y sus nuevos sentimientos. Ambas son mejores amigas, y si se tienen que guardar secretos, lo harán sin duda alguna.