NO TENGO ESPERANZA

Twilight y sus personajes pertenecen a SM. Historia inspirada en un capítulo de una serie de TV policíaca.

Prefacio

"El infierno está aquí, entre nosotros. Detrás de cada pared, de cada ventana... Es el mundo detrás del mundo" -Constantine (película)

Los últimos rayos de sol en el cielo hacen de éste una visión hermosa con sus tonos rojos, dorados y celestes; y para aquella mujer que vive de noche, que pertenece a la oscuridad del mundo y a la ilicitud de éste, ella que siempre contempla el horizonte a esta hora, todos los días, todas las semanas y años desde que él, con su omnipresente poder sobre ella la obligo a llevar éste camino, esta vida que no puede llamarse como tal, es un regalo valioso, algo que nada ni nadie le pueden quitar, algo que perdurará, no importa lo que pase.

Ella sigue observando el movimiento que se sucede en el firmamento, lo ha observado durante tanto tiempo ya y aun así le sigue sorprendiendo, le maravilla, tal vez en otra vida, piensa ella tanto para apaciguar la tristeza que siempre lleva a cuestas y que es escondida bajo montones de maquillaje barato, tanto para no morir en la desesperanza de los sueños fracturados; tal vez en otra vida ella pueda estudiar astronomía, pasar horas y días descifrando misterios de mundos lejanos, mundos hermosos en la distancia, en la lejanía, mundos puros y sin macula, pues en esos mundos, por lo menos hasta donde sabe ella que la tecnología permite ver, no existen estas criaturas aborrecibles, perversas y sádicas que se hacen llamar humanos.

Pero es sólo en esta vida donde se vive el cielo o el infierno, y ella, ella definitivamente está en el infierno.

Los últimos rayos de sol caen, la noche se hace presente y ella deja de lado sus sueños, fantasías e ilusiones para poder continuar. Ella camina por las calles oscuras, hace frío en Chicago pero no es tanto como el frío de Kazán*, frío que se ha quedado en sus huesos y en su corazón. Ella camina por esas calles oscuras subida en unos zapatos de plataforma y usando ropa ajustada y diminuta, podría hacer ese recorrida con los ojos cerrados, sabe a dónde tiene que ir y él lo sabe también, es por eso que no huye, porque él sabe todo acerca de ella, no hay lugar a donde escapar.

Antes de dar vuelta en una esquina ella lo siente, lo percibe, voltea a su derecha y una camioneta negra está ahí, esperando, es él, piensa ella, pero esto no es lo usual, él esperaría hasta estar en el burdel con las otras chicas... algo en su interior le dice que algo va mal, muy mal y por instinto y adrenalina ella corre en la dirección contraría, no lo pensó más que unos segundos y echó a andar con todas sus fuerzas.

Ella corre, o intenta correr con esos zapatos de tacón grotesco, escucha el motor encenderse para ir detrás de ella, el frío se ha ido de su cuerpo para alojarse en su corazón que bruscamente se ha cristalizado, paralizado del miedo, de la certeza de lo que esto significa. Lagrimas empiezan a caer por sus mejillas, estas le impiden la visión y uno de sus tacones se atora en una grieta, ella tira fuertemente de él, desesperada, agonizante, como un animal herido que lucha a pesar de saber que ya ha perdido.

Él la ha alcanzado fácilmente, la puerta de la camioneta es abierta para él por uno de sus perros falderos, él baja grácilmente y ella recuerda como de hermoso le pareció la primera vez que lo vio y ahora, su rostro de facciones hermosas se le asemejan a un demonio.

Él camina hacia ella, ella ha dejado de moverse, de luchar, en realidad, dejo de luchar hace tanto tiempo ya que esto es sólo la cúspide y el final del poder de él sobre ella. Él ha llegado junto a ella, con sus manos toma su rostro manchado de rímel y limpia sus lagrimas con lo que pareciera ternura, ella en cambio, siente odio, un dio profundo, desgarrador y eterno hacia él. Él levanta su rostro para poder mirarla a los ojos; los ojos de ella están velados de resignación, los ojos de él tienen una chispa de curiosidad, diversión y un poco, muy poco, de pesadumbre.

—Lo siento— dice él con suave voz y una pequeña sonrisa en los labios.

—Por favor, hazlo rápido— ella cierra los ojos y deja atrás la oscuridad, porque ahora puede contemplar en su memoria sus ocasos de sol llenos de colores cálidos, fantasías y mundos lejanos.

Ella siente el frío cilindro de metal en su frente y en ese momento se siente liberada, ligera, feliz...y piensa en el más hermoso de los cielos que ha contemplado mientras escucha como jalan del gatillo.


*Kazán: es la capital y ciudad más poblada de la república de Tartaristán, en la federación Rusa. Su temperatura promedio anual va desde los -15 C° hasta los 25 C°

Si hay alguien por aquí, siéntase libre de expresar lo que sea hacia esta pequeña historia.

K.M ;D