Love Live! Sunshine! pertenece a Sakurako Kimino.

Este fanfic tiene contenido sexual.


Chika no está


Chika no está. Por eso cada vez que Riko piensa en ella, You juega con su entrepierna.

Chika no está. Por eso cada vez que You la busca, usa la lengua de Riko para satisfacer sus deseos.

El grupo está disuelto y las que mantienen el contacto no aprueban esa "relación", que básicamente consiste en lamer las heridas de la otra ante la pérdida de quien aman. Porque si algo tienen en común Riko y You es el amor desenfrenado que sienten por Chika.

La desaparecida. La muerta.

La que dejó tras de sí un enorme vacío.

You fue su novia durante años a pesar de que la engañaba con Riko. Lo descubrió una vez ella se fue y (casi) no le importó, porque su ausencia pesó mucho más que cualquier infidelidad. Se quedó con fotos, viajes, promesas inconclusas y un sinfín de recuerdos.

Riko solo se quedó con su pasión por la música, los encuentros furtivos y sus mejores orgasmos.

Es por eso que hacen el amor cada vez que la extrañan. Buscan a Chika en la otra para reconocerla y acariciarla, para hacerla presente.

Es una relación de tres aunque solo son dos en una cama.

— Chika-chan… — Suspiran al unísono mientras cierran los ojos y echan a correr su imaginación.

Intentan no gemir demasiado fuerte para no interrumpir las fantasías de la otra, por lo que acaban recurriendo a besos llenos de pasión y violencia para acallar sus voces. Lo hacen aun cuando es un arma de doble filo que les recuerda que jamás encontrarán el sabor de Chika en otras bocas.

You nunca sería Chika. Y por eso Riko le araña la espalda, los muslos, la intimidad.

Riko nunca sería Chika. Y por eso You la golpea de vez en cuando, dejándole la piel enrojecida y los dedos marcados.

Porque detrás de todo ese amor perdido no solo hay deseo, sino también resentimiento y celos enfermizos. Porque no serían capaces de hacer nada de eso si no se odiaran entre sí y a sí mismas, si no reconocieran que la autodestrucción es la única forma de lidiar con el dolor.

Los pezones de Riko danzan sobre You mientras esta le arrebata el orgasmo a mordidas. Y luego, lo de siempre. Un sollozo ahogado luchando por salir. A You no le importa, al contrario, disfruta más su sufrimiento que su placer. Sabe que es la única forma de arrancarle a Chika del cuerpo. A su Chika.

Y Riko, por su lado, se jacta secretamente de los oscuros sentimientos de You, a quien Chika consideraba maravillosa pero insuficiente. Y así como deja que se desquite con su cuerpo endeble, entre lágrimas se regocija de su propia superioridad. Porque Chika es suya y de nadie más.

Pero cuando el sexo les arranca la necesidad solo queda el vacío y una cama fría. Sin dos ni tres. Sin una siquiera.

Porque Chika no está. Y ambas pueden perdonarle todo, las mentiras, la desconsideración, la infidelidad. Pero la ausencia jamás.


Fin