Shining StaRt

Aspiró una gran bocanada de aire y cerró la puerta tras si. Se acomodó el cabello, se subió el cierre de la campera y metió las manos en el bolsillo. Suspiró, no había encontrado nada, esto se estaba tornando un problema cada vez más grande.

Caminó por el callejón hasta salir a la avenida totalmente transitada. Miró hacia los dos lados, antes de meterse en la marea de gente que iba y venia. Comenzó a avanzar al compás de las personas en su alrededor mientras miraba algunas vidrieras distraída. La verdad, le encantaba este trabajo. Que pena que no era detective, pero siéndose sincera diseñar motos le gustaba muchísimo más.

Pasando frente a un nuevo callejón una joven un poco más alta que ella se incorporo a su lado. Continuaron caminando como si hace un buen rato que viniesen juntas. No pudo evitar mirarla de reojo, los años habían asentado la belleza de esa mujer, eso no podía pasar de inadvertido, inclusive a ella.

-¿Y encontraste algo?- preguntó la muchacha mas alta

-Nada relevante- doblaron en la esquina- ¿y vos?

-Mucho menos

-Uhum- suspiró- ¿supuestamente donde nos íbamos a reunir esta vez?

-Creo recordar que Mai le dijo a Natsuki mil veces que en el local que esta en la intersección de la 55 y la 12-le contestó en falso reproche

-Si mama

Caminaron sin ningún apuro mirando vidrieras y charlando de trivialidades. Después de todo, hacia tiempo que no se veían, todavía permanecían en contacto gracias a la tecnología, pero no era lo mismo. Llegaron hasta la dirección asignada. Frente a ellas se encontraba un bar donde jóvenes de diferentes edades entraban y salían constantemente

-Otro bar?- protesto la castaña- estoy arta d elos bares

-¿Qué pasa? Kaicho-sama no esta acostumbrada a esto?- bromeo la otra

-Ha hecho cosas peores- le guiño un ojo y camino hacia la entrada.

Natsuki la vio ingresar y pondría asegurar que la castaña le guiñó un ojo a un grupo de chicos. Con el seño fruncido la siguió al interior, no sin antes fulminar con la mirada al mismo grupo, nunca pudo entender porque tenía esas actitudes. Los muchachos parecieron no comprender y le devolvieron una lluvia de impertinentes piropos. Siguió a Shizuru hasta una de las apartadas esquinas, se sentó frente a ella y contempló un poco el local.

En una punta de la barra un grupo de hombres tomaban sin piedad, mientras uno le contaba sus desgracias al cantinero. Del otro lado de la misma, un joven trataba de ligarse a una chica, le estaba yendo fatal por cierto. En la mesa de pool un grupo de seis jóvenes de ambos sexos competían por quien pagaba las rondas de la noche. En la esquina opuesta a ellas una pareja se mandaba mano sin importarle nada.

La puerta del local se abrió dándole paso al grupo que había visto hace un rato. Uno de los chicos miró a su dirección y guiñó un ojo, de refilón pudo ver como la castaña se lo devolvía.

-Pará ya-gruño

-¿Por qué Na-Chan?

-Agh, Shizuru, no vinimos a flirtear

-Mmmm-llevó uno de su dedo índice a sus labios en forma pensativa-¿no será que Natsuki esta celosa?

-Ni lo sueñes

Contesto aun mas agresivamente de lo que le hubiese gustado, sin embargo de respuesta tubo una leve risita. Cuando alzó la mirada para fulminar a la castaña percibió que ya no se encontraban solas.

-¿Por que parece que detuvimos una batalla campal?

-No te preocupes Mai-san- comentó la castaña- sabes que siempre gano yo- dijo guiñándole un ojo

La pelirroja río y se sentó en la mesa seguida de Mikoto. La pelinegra miro su reloj de pulsera, habían pasado cinco minutos de la hora acordada ¿es que nadie podía ser puntual hoy en día? volvió a mirar el bar. La verdad estaba agradable, por lo menos no era de mala muerte, como todos aquellos que recorrió durante la semana. Observó a las chicas que la acompañaban, estaban charlando entretenidamente, de valla uno a saber que. Una casi imperceptible sonrisa se le dibujo al ver que su mejor amiga sonreía sinceramente.

Habrían pasado un poco mas de media hora desde que había visto el reloj y gracias a dios estaban todos los implicados. Las ex Himes se encontraban inmersas en sus propias conversaciones. Shijo y Akira charlaban con Yukino, Akane estaba totalmente concentrada en su celular, probablemente respondiéndole algo a su Kazu-kun. Natsuki no pudo evitar rodar los ojos ante esa escena, esa chica desprendía demasiada azúcar. Siguió observando el ambiente, Nao le susurraba algo a Mai que ahcia que esta se sonrrojara. Era mejor no incurcionar ahí. Y para su sorpresa Mikoto y Shizuru charlaban amigablemente. Ya había pasado 8 años desde aquel odioso festival.

-Bueno creo que debemos comenzar la reunión, no?-

Dijo Mai y todas las chicas ahí presentes le prestaron atención como si fuera la líder indiscutible. Natuski pudo notar como la pelirroja se ponía incomoda. Sonrío de lado, su amiga seguía teniendo las mismas costumbres que siempre. Tokiha se aclaro la garganta.

-Entonces todas sabemos porque estamos reunida de nuevo

-Hubiese estado bueno que no sea por esto- comento Akane

-Tenes razón, pero es lo que hay- respondió Akira- ¿Alguien averiguó porque la estrella Hime brilla nuevamente?


Aqui llego con una nueva historia, la verdad que no se bien que va a salir de esto o si la voy a terminar. Espero que si.

Les quiero aclarar algo, tengo la incapasidad de escribir capitulos largos, asi que no esperen testamentos cada que postee XD

Desde ya muchas gracias por haber leido hasta aca yyyy... denlen al boton de los comentarios, que es lo unico que me levanta el ego como para postear :p