Disclaimer: Tristemente no soy dueña de Vampire Knight.

Nota: Mi primer One-shot de Vampire Knight en español, espero que sea de su agrado y perdonen que sea tan corto. ¡Feliz Navidad a todos!

Dedicado a mi amiga Mich, alias Miyuki, ¡espero que te guste!

Bajo el Muérdago

Hay quienes hacen todo lo posible para unir a los amantes para que estén juntos más rápido. En los cuentos de hadas, generalmente este papel lo hacen las hadas y uno que otro animal parlante; mas en este cuente, este papel lo cumple un simple ex cazador de vampiros y actual director de la Academia Cross.

Kaien Cross ya se había dado cuenta del amor que estaba naciendo entre los perfectos. Para él era la oportunidad perfecta para que Zero olvidara a Yuuki Kuran, princesa de los vampiros, y encontrara el verdadero amor en su sobrina Miyuki Cross.

Todo estaba perfectamente planeado: en la cena de Navidad, los obligaría a pararse debajo del muérdago y se dieran el tan esperado casto beso.

Los dos adolescentes llegaron a la casa de Cross. La joven estaba emocionada, después de todo era Navidad. Zero estaba melancólico, recordando todas las navidades que pasó con Yuuki y su gemelo. Mientras Zero suspiraba, el director y su sobrina empezaron a contar chistes malos y a reírse sin parar, provocando el enojo de Zero.

- ¿Qué significa Onomatopeya? – Cross preguntó.

- No lo sé, tío. – Miyuki se dio por vencida.

- Una ardillita diciendo: ¡Oh no! ¡Me atropellan! – Los dos se empezaron a reír a carcajadas.

- ¡¿Podrían parar de reír?! – Zero les gritó.

- Zero, que mal sentido del humor tienes. – Le contestó la pelinegra.

- ¡¿A eso llamas sentido del humor?! – El prefecto le gritó.

Así su discusión continuo, y sin saberlo, se terminaron parando debajo del muérdago que Kaien había colgado.

- Ahem. No es por interrumpirlos, pero miren hacia arriba. – Cross les dijo.

Los prefectos subieron la mirada y notaron que estaban bajo el muérdago. Ambos se pusieron rojos como Rudolph el reno.

- Creo que ya saben lo que tienen que hacer, ¿cierto? – Cross les dijo, riendo por lo bajo.

Zero le sonrió a Miyuki, y ésta le devolvió la sonrisa. Zero se inclinó para besarla y ambos cerraron los ojos. El beso fue corto, pero muy dulce; se miraron a los ojos cuando ¡Flash! El director les había tomado una foto mientras se besaban.

- ¡¿Qué cree que está haciendo?¡ - Zero gritó.

- Pero Zero-kun, tú y Mi-chan se veían tan lindos. – El ex cazador contestó.

- ¡Aun así no es para que nos tome una foto! – Zero siguió gritando.

- Es para que se la enseñen a sus hijos en un futuro. – Cross se defendió.

- ¡¿Hijos?! – Zero y Miyuki gritaron, antes de que Zero se desmayara de la conmoción.

Iba a ser una noche muy larga, bueno por lo menos para Zero y muy entretenida para el director.