Contigo a mi lado ya no me siento triste.

Una noche de fiesta con fuegos artificiales. Zoro se siente deprimido pero la compañía de alguien lo reanimara.

ººººº

Una llamarada de colores se hizo presente en el cielo por breves momentos antes de ser seguida por otras muchas mas.

Era una noche de fiesta, y no había mejor forma de celebrarla que con fuegos artificiales. Toda la gente gritaba y reía al ver los bellos astros momentáneos tan coloridos y llenos de vida. Solo por esa noche la alegría y la felicidad reinaba en los corazones de todos. Bueno... en casi todos.

En una parte mas alejada de la multitud que victoreaba se encontraba sentado un hombre de cabellos verdes, junto con sus preciadas espadas a un lado. El también veía el cielo con los demás, había reído y celebrado con sus nakamas, pero cuando empezó lo de los fuegos artificiales decidió apartarse del grupo, dejándoles que disfrutaran de su alegría sin estorbarles por su melancólica actitud.

Suspiro luego de ver el destello azulado, que había cambiado a un dorado brillante mientras se apagaba y desaparecía. No podía explicarlo, simplemente era inherente en él. No era que no le gustaran ni nada de eso, pero cada vez que todos celebraban y empezaba con esta parte de la fiesta, por alguna razón el se sentía desanimado. Al observar esas luces sentía como su ser era embargado por una delgada sombra de melancolía.

Muchas veces había pensado en esto, pero ni el mismo comprendía porque esto le sucedía. Quizás el breve destello de color en el cielo negro le recordaba inconscientemente la propia finitud de la vida. Como saberlo?

Con el tiempo había aceptado esto, y se hacia a un lado, yéndose a alguna parte solitaria para contemplar a los demás como disfrutaban de la celebración. No quería arruinarles la noche preguntándole que le ocurría o si sentía bien, no quería molestarlos con su estúpida actitud. Estaba bien así igual.

Ya se había acostumbrado a esa sensación de ajenidad, de que los demás la pasaran bien mientras el estaba al margen de todo. Era decisión suya, que solo le afectaba a el mismo y a nadie mas, así que qué importaba si se quedaba solo?

Los colores continuaban explotando en el oscuro firmamento. Dejo salir otro suspiro mientras que se abrazaba a si mismo, cerrando los ojos, esperando que todo terminara.

Pero de pronto se sobresalto al sentir un tibio contacto. Alguien lo abrazaba por la espalda. Mirando de reojo descubrió un sombrero amarillo de paja.-Luffy... que haces...?

-Haciéndote compañía-dijo simplemente el chico de goma.

-Pero no deberías estar con los demás?-inquirió sin entender el extraño comportamiento de su capitán.

-Ellos estarán bien... además nadie debería estar solo en una noche tan especial como esta...-dictamino Luffy apoyando su cara en el hombro de su primer oficial.

Zoro lo miro impresionado. Sonrió. Sin importar lo que le dijera el chico no se iría de su lado. Luffy nunca le dejaría solo, y agradeció al cielo por eso. Tomo la mano del capitán entre la suya.

En el cielo, un ultimo resplandor rojo y verde se dejo ver, iluminando los rostros de dos chicos que sonreían abrazados en las sombras.

OWARI

En Zoro demuestro parte de mi propio sentir, porque nos parecemos en muchos aspectos. Y supongo que es también la razón de que sienta cierto afecto cariñoso hacia el chico del sombrero de paja.

Hn... no lo se...

Igual les deseo muy felices fiestas a todos/as y un prospero año nuevo. (::n0n::)

De Kakushi Miko.

Ja ne.