Capítulo 1: La Pareja Dispareja

N/A: Buenas tardes, días o noches, donde sea que estén gente, aquí les saluda Spcter con un nuevo trabajo sobre una de mis series que se está volviendo una de mis favoritas, este fic nació luego de re-leer el fic de jibster, "The luckster and his luck", un fic que es básicamente pure lemon, y me gustó mucho como iba armando las escenas para llegar a la escena H, pero lamentablemente se quedó detenido, no sé si esta en hiato o no….pero no voy a quedarme esperando, digo, no es el único…¿O no? Así que aquí estoy con mis propios lemons para ustedes.

Antes que nada aclaro un par de cosas.

-A diferencia de jibster, no hare una encuesta, iré mostrando a cada chica del universo Danganronpa en un orden por clase ¿Qué quiere decir esto? Que iré por un orden de las clases de la Academia. Si digo que estamos en la clase 77 hare caps con esas chicas y solo esas chicas. Cuando las muestre todas, al menos un cap x cada una (después si quieren pedir una escena particular envíenme un PM y lo charlamos ¿Si?).

-Al igual que Jibster, mostrare una especie de resumen con las categorías de lo que espera en el lemon; mamada, anal, vaginal, etc.

-A cada chica le corresponderá un epilogo o dos, depende mucho de cómo sea el primer capítulo ya que estos quedaran abiertos para nuevas escenas.

-Los cap pueden ser NC y C, esto quiere decir No Canon y Canon respectivamente; para quien no lo sepa, cuando ponga al comienzo de cada cap, y lo hare en cada cap, si pongo NC quiere decir que no sigue el argumento, ósea que no hay fundación futuro, ni Tragedia ni nada de eso mientras que C significa lo opuesto.

-Algunos pueden estar relacionados entre sí, ya sea porque son la continuación de su respectivo arco o para una escena con dos o más chicas con Naegi.

-Aparecerán las chicas de Danganronpa V3. En este caso serán las kouhai de la clase 78. Si hablamos cronológicamente sería durante el segundo año de Makoto.

-Siguiendo con el V3, la personalidad de cada personaje de este nuevo arco de Danganronpa será basado casi exclusivamente en gameplays de youtube, ya que aún no consigo el juego, en caso de ser necesario los caps con las chicas de V3 serán reescritos desde cero, claro, serán avisados.

-Algunos caps serán con los genderbender de los chicos, aunque no todos, digo, se imaginan a Hagakure fem con Naegi, porque yo no, en casos como estos depende más de ustedes que de mí, si quieren un shipeo que parece absurdo o imposible al menos denme una razón y una escena, no digo que me hagan todo el cap, ese es mi labor al fin y al cabo pero una ayuda será muy agradecida.

-NO HARE YAOI. Ojo, no tengo nada en contra, esta comunidad es grande, hay gustos para todos, el que le gusta bien, y el que no, también, así de simple, pero en mi caso el escribir esto….sinceramente no es lo mío, espero sepan entender.

-Habrá cap especiales del tipo harem y por fechas festivas (aunque estos últimos no saldrán directamente esa misma fecha).

Creo que eso es todo en cuanto a notas importantes, bien, dejemos este lio y pasemos a lo que queremos todos. Disfruten.

Contenido adulto: mamada, sexo vaginal, ligero maledom, semi público, sexo áspero, inside cum, paizuri, facial, sexo&amor. Este capítulo es NC.

(Normal POV)

Kibougamine Gakuen, también conocido como la Academia Pico de la Esperanza, o simplemente Pico de Esperanza, uno de los lugares más destacados del mundo, reside su sede central en Japón, una academia que entrena a los SHHL o también los llamados súper, personas jóvenes que son el pináculo de su clase y talento u oficio, lo mejor de lo mejor, no importa que campo sea, un establecimiento creado para llevar ese talento hacia la cima, sin límites algunos, muchas personas diferentes estudian y se matriculan aquí, claro que al ser la elite de la elite son algo…Especiales por ponerlo de manera suave.

Por ejemplo, si uno va directamente al salón de la clase 78 vera algo…..interesante por decir lo menos, cada alumno es único en cuanto a personalidad, desde amables y bondadosos hasta snobs y arrogantes pero no cambia el hecho de que son la representación física de su talento, que lo dominan como si fuera nada, algo tan natural como respirar.

Entre ellos están algunos bastante destacados, siendo un ejemplo aquel que es cuestionado desde entrada por los demás miembros del lugar tanto alumnos como personal, un chico que se ve simple, casi aburrido, uno más del montón que se encuentra prácticamente en cualquier lado sin mucho esfuerzo, alguien que va contra la corriente, pese que porta un título, que según dicha persona debería ser lo opuesto, el llamado SHHL Luckster o súper afortunado de nombre Makoto Naegi.

Apariencia: simple. Salvo sus ojos verdes y su antena/ahoge.

Notas: promedio.

Deseos/aspiraciones: como todo el mundo "normal".

En otras palabras alguien más, así de simple, siendo lo único recalcable de dicho chico su optimista personalidad, su ferviente deseo de seguir adelante a pesar de como estén las cosas de mal, su esperanza no flanquea ante nada ni nadie, esta actitud según los demás es lo que puso en el lugar en el que está ahora….

Sirviendo de amigo/compañero/ayudante de su clase ya que otra vez el SHHL motorista y el AllStar estaban a punto de irse a los puños….otra vez por cuarta vez en la semana, con todo el mundo ya sea mirando desinteresado, tratando de ayudar un poco a pesar de los humos, el único tratando de imponer orden siendo el SHHL compas moral que no lograba nada sino avivar la furia de los dos….

Naegi suspiro resignado e intento de nuevo calmarlos, cosa que le valió un puñetazo de Mondo en medio de la cara tirando al suelo y dejándolo fuera de combate. Los dos estudiantes al ver esto cesaron su pelea y corrieron inmediatamente a socorrer al chico tirado con el resto de la clase detrás, los 15 estudiantes salieron corriendo del salón pero la voz del profesor les ordeno regresar; a regañadientes volvieron no sin antes dejar a Naegi en la enfermería con alguien velando por él, y para su "mala" suerte ese alguien era la SHHL Fashionista, Enoshima Junko, una rubia/pelirrosa alta, de ojos azules, cuerpo de infarto y muchos, muchos, muchos demonios internos.

Durante un rato la chica normalmente "juguetona" y muy bromista, deseosa de molestar a los demás y causarles desgracias y disfrutar esa desgracia ajena estuvo leyendo una revista desinteresada de todo, cada tanto mirando hacia la cama de la enfermería donde estaba el castaño descansando, interiormente preguntándose cómo es que este simplón niño herbívoro logro pasar su análisis y no dejar nada de información para ella y sus futuros planes; Naegi es una persona abierta, casi no oculta nada a nadie salvo que sea para ayudar a dicha persona, era casi un libro abierto a cualquiera con dos dedos de frente para leerlo, un tipo sencillo, jodidamente, aburridamente sencillo….

Entonces.

-¿Cómo mierda no logro entender? Tú y tu patético optimismo, siempre consiguiendo algo de los demás, sin siquiera desearlo….upupupu que desesperado-se dijo por lo bajo Enoshima mientras se reía calmadamente, pero un borde peligroso estaba en su voz. Lentamente la bombilla de una idea se encendió en su cabeza, Naegi podrá ayudarla en sus planes, es tan inocente y fácil de engañar, un niño pequeño prácticamente, si, servirá de manera perfecta, solo necesita un estímulo….

Enoshima se quedó paseando por la enfermería mientras pensaba en cómo ponerlo a prueba, ver de que estaba hecho aunque eso se veía muy claramente, Naegi era la clase de tipo que no lo haría daño a nada ni mucho menos nadie, y si de alguna forma resultaba así de seguro se sentía muy pero muy mal. Por el momento la chica desesperada decidió ver como se daban las cosas y actuar desde ahí, claro que ya tenía un par de planes de antemano.

-Esto será muy divertido upupupu-se rió para sí mientras se volvía a sentar mientras fantaseaba sobre la desesperación, viendo especialmente como la esperanza y el optimismo de Naegi caían lentamente a pedazos sin que pudiera hacer nada para impedirlo, verlo completamente roto, quebrado, vulnerable ante los caprichos y deseos de cualquier enfermo y loco, para que pudiera hacer con el niño lo que sus más bajos deseos le instaban, ohhh esa solo imagen bastaba para hacerla babear y sonrojarse como las demás colegialas estúpidas que suspiraban por su amor de novela barata.

*movimiento* *gemido* *movimiento*

Enoshima vio como Naegi estaba recuperando la conciencia luego de estar más de una hora tirado en la cama, de seguro se hecho la mona. Lentamente Naegi estaba abriendo sus ojos mientras aún seguía en la tierra de los sueños ya que no parecía reconocer donde estaba, la modelo cansada y aburrida decidió tomar cartas en el asunto, con su mano derecha tomo una de las mejillas de Naegi y la estiro bastante duro mientras disfrutaba la mueca de dolor y sorpresa que venía del chico recién espabilado.

-shueltame poff favofff-apenas podía hablar ya que se lo impedía el dolor, mientras Junko sonreía decidió que no era suficiente así que lo dejo ir, vio cómo se sobaba la zona afectada y se ponía algo roja, le recordó a un animal doméstico, prácticamente era como tener un cachorro torpe.

-Ya era hora Naegi-kun, me aburría de hacer de enfermera-dijo algo altiva pero no cambiando a sus demás facetas, luego de estar un par de meses en la academia casi todos sabían de las tendencias de Enoshima para cambiar de "personalidad" cada tanto, aunque no eran muy frecuentes, si eran bastante impactantes, al menos para quien lo presenciaba por primera vez.

-Así que Oowada me dejo en la enfermería de nuevo, je, bueno, no hay nada que hacer, ahh, cierto, gracias por cuidarme Enoshima-san, no sé qué haría sin ti-le dijo alegre Naegi mientras le daba una de sus famosas sonrisas, durante unos segundos Enoshima no supo que sentir además del asco por su ingenuidad e inocencia, pero una muy diminuta parte de ella le agrado el gesto completamente desinteresado.

-Sí, sí, lo que sea, me voy-dicho y hecho Enoshima se levantó de su asiento para marcharse cuando de repente la voz exaltada de Naegi la retraso, no esperaba esas palabras saliendo de la boca del chico.

-Espera Enoshima-san, déjame compensarte, quiero decir….bueno…déjame ayudarte, así como me ayudaste, es lo justo-le explico Naegi con determinación y convicción, por otro lado la chica se llevó una mano al mentón mientras pensaba para sí sobre esta oferta; por un lado podría rechazarlo de manera tajante y disfrutar esa efímera pero placentera molestia así como desesperación por haberle ignorado de manera cruel o….

Podría "hacerse" su amiga, tenerlo cerca, y cuando menos lo espere, ZAZ, el cuchillo por detrás, ya puede verlo, la cara de Naegi al saber que siempre jugo con él, que no era nada más que una simple herramienta, su asquerosa sonrisa convertida en una mueca rota, eso sí será divertido. Enoshima tembló durante unos segundos mientras se relajaba y obligaba a parecer normal, al menos en parte ya que aún se notaba su sonrojo y su sonrisa de loca, aunque no era demasiado.

-Upupupu, bueno, poniéndolo así, creo que me puedes ayudar en algo Naegi-kun ¿Me darás una mano?-Enoshima le pregunto con dulzura obviamente falsa pero Naegi siendo el chico bondadoso y despistado que es no lo vio, solo asintió con una sonrisa aún más grande.

-Claro que si Enoshima-chan, te ayudare con gusto-le respondió con entusiasmo, Junko por un lado quiso vomitar ante la escena tan jodidamente dulce pero se contuvo, además de que sentía su cara un poco caliente aunque debió ser por el hecho de que no hizo nada desesperante durante un par de horas, debe estar pasándole factura….

-Bien mortal, siéntete agradecido, esta reina lo ha elegido para llevar a cabo sus designios, no cualquiera lo hace, cumple mi cometido y serás recompensado, falla y lo pagaras….-fue la advertencia de la "Reina", Naegi ya estaba acostumbrado a esto, los cambios de personalidad, solo sonrió mientras asentía y le seguía la corriente a Enoshima, esta estaba parada con los brazos cruzados mientas lo miraba con una sonrisa arrogante y su corona en la cabeza, entre ambas colas.

-No te emociones mucho mortal, cometerás equivocaciones si sigues así. Estate atento a mi llamado, y no me hagas esperar-le dijo seriamente mientras se marchaba de la enfermería dejándolo solo, Naegi se recostó de nuevo mientras sentía como se mareaba un poco a causa del golpe antes recibido pero por otro lado estaba feliz, él sabía de primera mano cómo era Junko, bastante saliente y directa, en especial con esas personalidades y muy problemática siendo incomprendida por el resto de la Academia en especial por el resto de su clase, pero sabía que había algo bueno en ella, y esta era su oportunidad para demostrarlo. Ese pensamiento le trajo una sonrisa mientras se imaginaba a Enoshima sonriendo, pero su verdadera sonrisa, no la falsa que muestra siempre.

-Apuesto que debe ser muy bonita cuando sonríe de verdad-se dijo para sí mismo Naegi mientras pensaba en la Enoshima que nadie conocía, y si fuera el él primero en ello de verdad lo ponía de buen ánimo. Con ese último pensamiento en mente se dejó abrazar por el sueño que de nuevo lo estaba invadiendo.

-mientras tanto, con Enoshima-

(Normal POV)

La súper modelo estaba caminando por el pasillo distraída en sus nuevos planes, desde que salió de la enfermería solo estaba pensando en las múltiples variables con las cuales llevaban al mismo resultado, el quiebre de Makoto Naegi, cada una más mala que la anterior pero durante breves segundos, momentos efímeros que apenas aparecían y desaparecían en su mente sobre las palabras dulces del niño; ohh, para Junko era muy conocida esa pureza asquerosa y enfermizamente dulce que cautivaba a las demás chicas, lo veía prácticamente a diario, incluso su buena para nada e inútil hermana mayor había caído presa del encanto silencioso del niño "afortunado" pero eso no era problema, las niñas eran muy cobarde como para hacer un movimiento, claro. El verlos juntos más tiempo de lo normal de seguro despertaría sospechas entre los miembros de su clase pero nada que no pudiera manejar, al fin y al cabo hubo un tiempo cuando Togami había estado "pidiendo" la ayuda de Naegi para algo y todo el mundo pensó que ambos estaban bateando para el otro lado…..

-Veamos, debo conseguir un par de cosas primero y luego ponerme a ello, upupupu esto será fabuloso-se dijo para sí misma mientras su mirada se hacía más fría y despiadada con un borde de locura bordeando el sadismo, una sonrisa malvada llego a su rostro mientras entraba en la tienda de conveniencia del campus; estuvo un buen rato consiguiendo materiales para su "plan"; antes de ir a por las grandes ligas decidió jugar un poco con el niño primero. Lo haría ir por el campus buscando a los demás y dejarles "lindos regalitos" tan "buenos" que la gente estaría encantados con Naegi y ella, luego lo vendería al director….no, eso era muy cliché, muy fácil y predecible, necesitaba algo mejor, algo que no se vea diario…..

-lo tengo, upupu Junko eres una genio-hablaba para sí mientras se volvía a su cuarto, saco su celular al estar caminando y marco un número, desde luego sabía muchas cosas de los demás alumnos tanto de su clase como del resto de la Academia, en especial aquellos que tenían un cierto asunto con Hagakure.

-¿Quién habla?-la voz firme y fuerte así como áspera se escuchó del otro lado de la línea telefónica, Junko contuvo una risa, debía jugar bien este papel, en especial para su plan.

-Ohh nadie importante, pero tengo información que te gustaría saber en cuanto a uno de tus deudores upupu ¿Te interesa?-le pregunto con la voz linda y dulce pero se notaba el veneno dentro de la misma; del otro lado se hizo silencio, basto un par de minutos para que respondiera al fin.

-Si estás jugando con nosotros lo pagaras…habla-fue la sentencia de la voz misteriosa.

-Bueno…..-y así Junko Enoshima orquesto un plan para el desafortunado Naegi Makoto….

-Un par de días después, distrito comercial-

(Normal POV)

El llamado luckster iba caminando por la calle con un par de bolsas de su más reciente compra, útiles para sus clases y alguna que otra chuchería para darle un poco de vida a su cuarto así como un nuevo cd, el nuevo álbum de su amiga Maizono, la idol. Luego de cruzar un par de calles vio como una furgoneta negra iba cerca de la acera pero no le dio importancia, al momento de llegar a un cruce con el semáforo en rojo el vehículo se detuvo, está por otro lado abrió sus puertas y un par de manos lo sujetaron del cuello de su sudadera con capucha para meterlo de golpe en el interior e irse a quien sabe dónde.

-en un tejado cercano-

(Normal POV)

Enoshima Junko estaba sentada en una silla reclinable mientras miraba a través de unos binoculares el secuestro del luckster, su cara era una sonrisa, la fase uno estaba hecha, ahora solo debía esperar, solo debía llamar a la policía, darle los datos del lugar donde estarían "atendiéndolo", mientras tanto podría soltar al perro de su hermana para que vaya a entretenerse y de paso ganar unos puntos con el chico del ahoge, se lo había ganado luego de cumplir con cada una de sus demandas en estos días, ya que claro fue su hermana quien hizo la mayoría del trabajo físico, no estaría de más darle un hueso al lobo encadenado.

-Muy bien, sigamos chicos-dijo a la nada mientras hacía la susodicha llamada a las fuerzas de la ley.

-con Makoto, en algún almacén-

(Normal POV)

El pobre muchacho estaba ahora atado a una silla, las cuerdas dejando marcas bastante doloras en sus muñecas y brazos así como las piernas, en su cabeza una bolsa negra aumentando sus otros sentidos, podía escuchar como los diversos pares de pies se paseaban por la zona en la que estaban, murmurando para sí mismos o para sus otros compañeros, en algún momento pudo atrapar las palabras "mercado", órganos y precio; cosa que no le cayó nada bien al chico que empezó a temblar de sobremanera.

-Calma mocoso, te necesitamos relajado no tenso, eso no es bueno para la mercancía que guardas en tu interior Jejeje-le dijo uno de los tipos mientras se reía de su broma negra, el niño solo pudo tragar un poco de saliva mientras pensaba en cómo salir de esta, aunque las cosas se veían muy malas, demasiado malas.

-Escucha chico, hay dos formas de hacer esto, la manera fácil, sencilla, rápida o la manera lenta, dolorosa y divertida para nosotros ¿Cuál eliges?-le pregunto voz más fría la que supuso era el líder del grupo.

-…la primera-dijo Makoto a duras penas mientras pensaba en lo que le sucedería si hacia algo malo. No quería pensar en ello.

-Eso pensé, iré directo al grano, uno de tus compañeros nos debe dinero, mucho, mucho dinero, y el mercado negro de órganos está en alza en este momento; aquí entras tú. Puedes decirnos donde está tu amigo, te dejamos ir y no viste ni sabes nada de nosotros, todo el mundo contento…..o…no hace falta decir que es lo que sucederá contigo ¿O sí?-le pregunto al fin de manera tortuosa, Naegi solo se quedó callado mientras pensaba en la información recién adquirida, de entre todos sus amigos solo le llego a la mente uno que pudiera tener problemas monetarios y ese era su amigo adivino, Hagakure Yasuhiro, pero no podía entregarlo, no podía, simplemente iba en contra de todo lo que sabía y conocía, era traicionarse a sí mismo y lo que le habían enseñado.

-Mira niño, tiempo ni paciencia tengo, no será muy difícil hacerte hablar, o si de por casualidad puedes aguantar simplemente podemos ir a por esa chica rara que nos llamó dándonos la información sobre ti-eso si llamo su atención, alguien lo había delatado.

-Digo, no será nada del otro mundo dar con ella-el hombre seguía amenazando y dando oportunidades para que Naegi hablara pero de un momento a otro escucho como algo o alguien golpeaba la puerta de donde sea que estaban y los gritos de euforia, enojo, rabia o confusión ya que no sabía cómo diferenciarlos se escucharon de golpe, pasaron unos cuantos segundos para que algo pasar rosando las ataduras de sus muñeca en un sprint veloz apenas registrable para el chico, sin perder tiempo aprovechando su suerte efímera se quitó la bolsa de la cabeza y se desato los nudos de las piernas y el resto del cuerpo que lo retenía a la silla. Tomo un par de segundos para que viera la situación loca en la que estaba mido hasta el cuello; podía ver de un lado a los mafiosos disparando contra los uniformados policías anti narcotráfico o las fuerzas especiales, claro que no sabía nada de nada y tampoco le interesaba el seguir en ese mismo lugar esperando una bala que le quitara la vida.

Con eso en mente salió corriendo por el lugar semi agachado buscando una salida, un lugar para refugiarse, algo; con eso en mente registro por primera vez el lugar donde estaba, un almacén del puerto, vio unas escaleras que lo llevaban hacia la parte de arriba y decidió ver si encontraba alguna ventana abierta, sino podría romper una e irse de ahí, o eso esperaba. En su ascenso noto que en una de las oficinas tenía la puerta semi abierta, entrando con cuidado vio como uno de los gorilas estaba metiendo papeles y dinero en un maletín lo más rápido posible para irse del lugar.

Naegi trato de regresar por donde vino para no alertarlo pero fue demasiado pronto ya que el sujeto se dio la vuelta y lo vio, levanto su arma e intento disparar pero de golpe en un ataque de suerte repentina la luz del almacén se cortó dejándolo imposibilitado para efectuar el disparo, desesperado intento salir corriendo de la oficina pero al estar todo oscuro el tipo choco contra la baranda de la escalera y se vino abajo sobre un par de cajas destruyéndolas y quedando fuera de combate, momentos después la luz vino de vuelta exponiendo a muchos de los mafiosos entregados a manos de la ley, Naegi se quedó estático mientras miraba lo que había sucedido en pocos segundos. Era algo muy raro el cómo trabajaba su suerte. No noto como una sombra lo miraba desde afuera en el techo del almacén vecino, luego de esta situación uno de los policías lo encontró y lo llevo afuera donde estaban los reporteros, chismosos, otros policías que controlaban la situación y finalmente las ambulancias para tratar a los heridos; Makoto estuvo al menos unas tres horas declarando y otras hora y media en la comisaría local registrando los hechos desde su punto de vista, al final lo dejaron irse con su familia, esa noche se quedó pensativo en las palabras del tipo, aún estaba preocupado por aquella chica que podría estar en la mira de los mafiosos. Debía estar atento a las cosas de ahora en adelante, al menos hasta que todo se calme una vez más.

-salto de lugar, lugar desconocido-

(? POV)

-Encuentren a esa chica y háganla pagar, por su culpa perdimos a una gran cantidad de hombres, no me fallen-dijo la voz carente de emociones más allá de la rabia y el rencor, los que estaban inclinados delante suyo se levantaron para irse de la oficina oscura dejándolo solo.

-Lo pagaras niña, solo espera, tenemos un lugar para las golfas como tú en el mercado, pagaran mucho por ti Jejeje-se dijo para sí mientras miraba una fotografía de su nueva víctima, Junko Enoshima.

-al día siguiente, Hope's Peak Academy-

(Normal POV)

Naegi había vuelto a clases y luego de responder una gran cantidad de preguntas de sus compañeros ya que había aparecido en televisión en la noticia de la caída de varios miembros de una de las mafias que controlaban la zona por medio de lavado de dinero, soborno con funcionarios corruptos, prostitución y tráfico de personas, pero entre todos sus compañeros faltaban dos de ellos, las hermanas gemelas, esto llamo la atención de Naegi pero no pudo pensar demasiado en ello por la constantes preguntas de sus amigos así como la llegada de su maestro, por ahora la búsqueda de las hermanas debía esperar ya que a pesar de había pasado el peligro Makoto aun sentía una bola en el estómago, un mal presentimiento que no podía decir de donde venía ni porque pero no debía ignorarlo. Un par de horas de estudio, un almuerzo interrumpido más de una vez para satisfacer la curiosidad de los demás alumnos después, ahora Naegi se encontraba solo caminando por el campus de la Academia pensando, en su caminata no vio por donde iba y acabo en el tercer piso, específicamente fuera del mismo en las escaleras que daban una vista perfecta de toda la parte trasera de las instalaciones, el gimnasio, el pabellón de actividades prácticas, en especial para aquellos cuyas habilidades son manuales en vez de teóricas, llena de talleres y demás.

Pero algo le hizo mirar en una dirección en concreto; cerca de un costado del gimnasio estaban un par de sujetos que no pudo identificar, además de estar actuando de manera sospechosa y que se estaban moviendo con sumo cuidado; dudo un poco pero decidió seguirles, el tiempo que paso ayudado a Kirigiri en sus casos le dio buenas habilidades de sigilo y con eso pudo ver que era lo que hacían sin dejarse descubrir. Durante una hora estuvieron yendo de acá para allá buscando algo, en la mano de Naegi su celular preparado y marcado para llamar a la seguridad de la Academia de ser necesario; luego de que giraran en una esquina los sujetos, cuatro en total se detuvieron y vieron algo para luego asentirse mutuamente, Naegi trato de ver que era lo que estaban observando y cuando lo consiguió abrió sus ojos en la realización, estaban viendo a Enoshima, la chica se encontraba sentada en una banca escribiendo en un cuaderno sin cuidado en el mundo mientras se reía cada tanto.

Makoto vio como los tipos se apresuraron a salir de la academia, cosa que los extraño bastante y decidió acercarse a la chica para advertirle, aunque conociendo como es de seguro será cosa bastante difícil.

-Hey Enoshima-san-le llamo su atención, la mencionada levanto su cabeza del cuaderno y dio una sonrisa burlesca mientras hacía el gesto de la paz hacia Naegi.

-Ahh Naegi-kun ¿Qué pasa?-cuestiono Junko, Makoto se quedó un momento quieto mientras pensaba bien en las palabras que diría, al final decidió que no tenía pruebas y le mintió esperando que se lo creyera para luego irse, Naegi no vio como Junko lo miraba fijamente mientras se iba, su boca contorsionada en una sonrisa del gato de Cheshire.

-Upupupu solo un poco más-con eso dicho Enoshima se fue para ver si esos cuatro que la estaban buscando Irían a por ella y por consecuencia también Naegi, solo debía dejarse atrapar, jugar a la doncella en peligro, vender a Naegi y ver su esperanza quebrada y convertida en desesperación, como quitarle un dulce a un niño. Se levantó y rápidamente dejo los terrenos del campus sin importarle que la vieran los demás alumnos, supo que era seguida aunque algo no encajaba del todo; ella es la súper analista, puede ver una gran cantidad de variables numéricas en el espacio que desencadenan las reacciones de los fenómenos así como los sucesos antes de que pasen, claro que solo ve las posibilidades, de entre todas ellas les suma los datos que va recogiendo para saber qué es lo que sucederá con un gran margen de acierto pero dentro de todo esto algo era tan difícil de leer, no, un error, prácticamente no podía leer la suerte/mala suerte de Naegi en ninguna de las variables posibles, era como ver un abismo negro infinito y caótico así como arbitrario, no regido por reglas, simplemente dejado al azar total….pero…

¡¿Dónde mierda esta la diversión si no?!

-salto de lugar, distrito comercial-

(Normal POV)

Por un lado estaba Enoshima Junko caminando mientras comía algo de taiyaki que compro en un puesto cualquiera mientras podía ver las acciones de aquellos que la estaban siguiendo cada vez más cerca, en primer lugar los yakuza de algún clan sin valor ni importancia para ella y por el otro lado lucky boy los seguía a ellos y la negrura que era su "lectura" es desesperadamente buena, no saber qué sucederá la ponía en éxtasis puro pero de golpe casi regala lo que le sucedía en los rincones de su mente retorcida; sus lecturas donde antes eran miles de líneas que representaba cada acontecimiento con su respetivo conjunto de acciones posible ahora era algo completamente negro, como el abismo que es Naegi Makoto, no podía leerlos de ninguna manera posible, esto era algo completamente nuevo, algo que nunca hubiera imaginado como analista, siempre estaban ahí, esperando a ser leídos y descifrados de manera precisa pero ahora se habían marchado dejándola prácticamente ciega vulnerable hacia todo lo demás….

Cuan desesperado era.

Intento hacer algo para ver qué sucedería en consecuencia teniendo una idea de lo que puede ocurrir, mientras seguía su camino sin rumbo tomo su celular para hacer una llamada donde su hermana pero para su impresión la muy buena para nada no atendió, es más, le había respondido la contestadora automática pidiendo un mensaje a ella, la mente maestra, ja, parece que las cosas serían mucho más interesantes ahora que tenía que velar por ella misma sola sin un respaldo. Con eso en mente se metió en un callejón y espero, no tuvo que hacerlo durante mucho tiempo ya que los cuatro gorilas la encerraron en una esquina sin salida cuando se había adentrado más en el mismo, Enoshima podía sentir como la desesperación se iba apoderando de ella, cuan delicioso y placentero pensamiento surcaba su mente, ¿La violarían? ¿O tal vez la golpearían hasta dejarla inconsciente? Puede ser que hagan ambas cosas con ella, el solo pensarlo, estar sola, sin nadie que venga en su rescate después de ganarse la antipatía, e incluso odio de sus semejantes, sabiendo que podrían escucharla pero nunca ayudarla.

Upupupu esto es lo que quiero

Pensaba mientras sonreía sin dejar que los gorilas la vieran al estar de espaldas; uno de ellos se acercó para tomarla del hombro y darle la vuelta.

-Vaya, vaya, vaya, ¿Pero que tenemos aquí?-dijo el primero de ellos mientras sonreía y se lamia los labios, Junko por dentro estaba cerca del éxtasis.

-Sí, mira nada más que pedazo de mujer-le siguió su compañero.

-Ohh dios, aquel bastardo que la compre será un suertudo, mira esas tetas-dijo el tercero con su mirada clavada en el generoso busto de la Fashionista, está por dentro solo asentía esperando a que las apretara con violencia y brusquedad.

-Vamos, debemos darle un poco de cariño, ese cuerpo pide una polla a gritos, además debe ser virgen, es una gran modelo, nos sacaremos la lotería con ella, sea pura o no jajajajaja-el cuarto afirmo mientras cerraba y abría sus manos como garras, los otros tres tenían una sonrisa ruin en el rostro, Enoshima retrocedió fingiendo miedo hasta que choco contra la pared, esto solo se añadía a su plan, ahora que estos cuatros la violarían y se sintieran poderosos, luego los cazaría y los destrozaría, no le interesaba matarlos, eso no era divertido, pero el verlos en el suelo quebrados y rotos mendigando por piedad, piedad que nunca le darán a ella por más que ruegue y suplique, la venganza es dulce….

Los cuatros pares de manos comenzaron a tocarla despacio, yendo de arriba abajo, sobre sus pechos, sus caderas ahora descubiertas cuando movieron su camisa, sus muslos y cara, incluso uno era tan repugnante que paso su lengua por el cuello de la chica, esta tembló pero no de miedo, estaba por dejar salir un gemido cuando los cinco lo escucharon.

-¡ALTO! ALEJENSE DE ELLA AHORA-se escuchó un grito que venía desde atrás así como un olor a quemado, cuando se doblaron o se acomodaron para ver la fuente vieron a un enojado Naegi y al lado suyo…

Un puesto callejero, de fuegos artificiales que había tomado de un pobre tendero que estaba cerca, estaban en un barrio comercial y lleno de casas de antigüedades así como cosas como esta, además de acercarse las fechas festivas solo aumentaba la presencia de tenderos como estos. En su mano una mecha encendida lista para ser usada.

Naegi miro durante unos momentos a los cuatro gorilas para luego bajar la mecha hacia las de los cohetes y con un rápido movimiento encendió un buen par de las mismas y como estas saltaban en todas direcciones encendieron todas las demás para comenzar a correr en su dirección, precisamente hacia Enoshima mientras los cohetes y petardos volaban por todo el estrecho callejón provocando una serie de explosiones de colores que entorpecían la visión de los presentes pero Naegi teniendo un ataque de suerte repentina no fue golpeado por ninguna de ellas, es más, las explosiones abrían caminos y saco de en medio a los matones que trataron de sacar sus armas o ir contra el niño valiente pero los petardos explotaban ya sea en su cuerpo o cara, ambas muy dolorosas o pasaban a cm de ellos deteniéndolos el suficiente tiempo como para que el chico tomara la mano de la chica y se largara de ahí, en su camino llamo a la policía y las autoridades de la academia sin mirar atrás ni mucho menos hacer caso a las amenazas de los matones, no tomo mucho tiempo para que la policía llegara al lugar y viera la situación para tomar medidas…

En este momento Naegi y Enoshima ya se había separado bastante del lugar de los hechos, el luckster no sabía cuánto estaban corriendo ni mucho menos donde estaban pero no le importaba, cuando miro hacia atrás para ver si los estaban persiguiendo y al no ver a nadie se permitió un descanso ignorante del caos de emociones y pensamientos que era la modelo. Enoshima estaba más que desconcertada, las anteriores emociones que estaban dentro de ella, el deseo y anhelo por su hermosa desesperación aún estaban presentes pero las nuevas que solo las provocaba el luckster se estaban haciendo cada vez más y más fuertes, el abismo que lo representaba ahora se estaba convirtiendo en blanco, como una llama o una luz que brillaba con un fulgor similar al de una estrella, no podía ver nada, solo podía sentirlo dentro de sí, un calor abrasador que la estaba devorando de a poco, suave, poderoso, tierno y cálido en su estómago; durante segundos o minutos, no estaba segura, los rostros de sus compañeros se hicieron presentes en su cabeza pero no era como antes, si, siguieron mostrando nada más que desprecio y asco por ella pero de un golpe fueron azotados por el chico que la sujetaba firmemente, un apretado pero protector agarre sobre ella ignorando sus pecados y demonios internos, la sonrisa de Naegi, la misma de la enfermería estaba grabada a fuego en su cabeza…era como ver a un cordero suave y mullido, asquerosamente mullido pero tan…tan….tan….

Apetecible…delicioso y suculento…..

Una sonrisa taimada y depredadora se abrió paso en su cara de a poco, carente de malicia o perversión, pero siendo reemplazado por algo mucho más instintivo y animal, un deseo oculto que no se había mostrado ya que no estaban los detonantes para el mismo; pero ahora, la cosa era muy distinta. Makoto era la presa, el herbívoro, y Junko….era la cazadora…la depredadora….

Y tenía hambre de su herbívoro.

Makoto tuvo poco tiempo para recuperar su aliento ya que la chica por la que había arriesgado su pellejo ahora lo estaba arrastrando a quien sabe dónde. Durante unos quince minutos estuvo siendo arrastrando mientras Enoshima se hallaba buscando algo, luego de girar en una esquina se hallaron frente a un callejón doble, con dos posibles salidas y una parte del mismo que era una intercepción en forma de V, siendo un costado del mismo dando a una pared bastante cubierta por los transeúntes, cuando lo llevo ahí Naegi estaba bastante nervioso, aún más cuando sin previo aviso Enoshima lo estampo contra la pared con bastante fuerza y clavaba ambas manos a los costados de su cabeza imposibilitando su escape. Makoto Naegi estaba por completo a merced de su "captora", no pudo evitar tragar duro, no estaba tan nervioso con los matones, esto era mucho peor.

-…-el silencio proveniente de la chica era bastante aterrador, vio su mirada clavada en al de él, sin parpadear, solo mirándolo fijamente sin decir o hacer nada, pero sabía que estaba pensando en algo, solo eso se le podía ocurrir en un momento como este.

-…-

-….-

-…-

-Ehhhh…Enoshima-Naegi trato de hablar pero la interrumpió, su voz sonaba fría pero al mismo tiempo fuerte, poderosa, casi como una reina, y no estaba en ese modo.

-¿Por qué?-fue su única pregunta en esta descabellada situación. Solo eso deseaba saber la chica, deseaba saber el enigma arbitrario que era el chico justo debajo de ella, incluso en esta descabellada situación Naegi se llevó un dedo a su mejilla para rascarse tímidamente mientras pensaba en una respuesta que fuera tanto sincera como del agrado de la chica delante y encima de él, literalmente estaba encima de él.

-Bueno…para ser sincero….estaba preocupado por ti, no podía simplemente dejarte sola, y menos en esta situación…sé que no hice mucho pero…..no quería verte lastimada-con esas palabras el agarre de Junko sobre la pared se hizo aún más fuerte y poderoso, vio cómo su cara se contorsionaba en una mueca de rabia y molestia. Casi de odio total.

-¿Por qué mierda te interesa mi estado? No ganas nada al jugar al niño bueno, ninguna mierda, nada de nada, solo un jodido sentimiento de satisfacción patético…no me hagas reír Naegi, dime de una puñetera vez que mierda ganas con todo este acto tuyo-le amenazó con dureza mientras clavaba ahora sus uñas afiladas en sus hombros no dejándolo ir hasta que entendiera que era lo que estaba sucediendo, las líneas ahora no se podían leer, eran completamente invisibles, no se mostraba ninguna información o dato relevante; por otro lado las emociones eran una completa vorágine ahora en su interior, la desesperación de que por primera vez en su vida estaba completamente desprotegida, a la merced del "destino" y que el único causante de todo esto estaba justo delante de él, ohhh, una gran parte de ella deseaba solo matarlo aquí y ahora para volver a ser lo que era antes pero otro mucho más, gritando por saber la verdad, por entender este enigma plantado delante suyo, un verdadero desafío luego de muchos años de aburrimiento.

-Ahhhh….porque sé que esa no es tu verdadera cara Enoshima, hay algo que ocultas de todo el mundo, sea un conocido o un completo desconocido, incluso de tu propia hermana, pero lo más importante, lo estás ocultando de ti misma, esto no es lo que buscas, no es lo que deseas, todo el día molestando o haciendo bromas incluso yendo hasta el punto de hacer algo malo a la gente, no eres tú en lo absoluto-por primera vez Enoshima escucho la voz firme y varonil de Naegi, quien siempre es suave y apacible, ahora tenía un tono fuerte y firme, el de un hombre; Junko no pudo evitar temblar un poco por ello aunque no sabía que era el causante de dicho escalofrío.

-¿Y qué es eso que busco?-esta vez su voz salió mucho más baja y tranquila, pero aun firme, Naegi la miro directamente a los ojos, las palabras brotaron de manera natural de su boca sin ningún ápice de duda.

-un igual, alguien que te entienda…y al mismo tiempo alguien completamente diferente a ti para que te mantenga en la línea, no, alguien diferente para complementarte o incluso desafiarte…..-esas fueron las palabras del luckster para con la Fashionista, Junko parpadeo un par de veces mientras el mensaje se grababa a fuego en su cabeza, las indicaciones tanto visibles como ocultas dentro del mismo siendo analizadas….

Un igual, alguien que este conmigo, alguien diferente, mi opuesto, alguien que pueda saber complementarme…..solo hay un posible resultado…..

Un mari….

-EEEEEEEEKKKKKKKKKKKKKKKKKK-el grito afeminado de Enoshima estaba a punto de reventarle los tímpanos a Naegi, este se llevó sus manos hacia sus oídos por mero acto reflejo mientras veía a la chica que acababa de gritar de tal manera…..y la vista era jodidamente hermosa.

Los ojos grandes que brillaban de un azul cautivador, las manos en la boca tapándola un poco pero dejando ver los labios temblando de sobremanera, un sonrojo más que rojo pintando sus mejillas, se notaba lo nerviosa que estaba ahora luego de recibir dicho mensaje de parte del luckster.

-¿Qué es-pero no pudo terminar el mensaje ya que Enoshima retrocedió unos dos pasos para apuntarle con un dedo acusador algo tembloroso.

-Naegi, no vayas diciendo tales cosas de la nada….hyyyyaaaa, eres muy atrevido-lo último lo dijo más para sí pero por el lugar Naegi lo pudo escuchar muy bien, estuvo unos segundos bloqueado pensando porque su reacción hasta que algo hizo click en su cerebro, repaso cada palabra que le dijo hasta que entendió el mensaje que le llego a Enoshima.

-Espera, espera, espera, lo que pasa, es que….ahhhh…bueno, tu sabes…..solo quiero ¿Eso?-trato de defenderse Naegi pero era algo muy simple sus intentos de ello, por otro lado Enoshima estaba pensando a mil por hora mientras pensaba y repasaba cada situación que tuvo con el chico delante de ella desde el primer momento en que se vieron hasta el actual, cada uno de ellos Naegi era siempre lo mismo, atento, dulce, comprensivo, todas esas mierdas que les gusta a las colegialas vírgenes que sueñan con el príncipe azul o el dichoso caballero de brillante armadura…..

-Tú….me entiendes, solo tú…..-se dijo más para sí mientras se iba acercando a su cara, con los ojos mirándolo sin cesar poniéndolo nervioso en especial el acercamiento, Naegi sabía que iba a suceder ahora pero aún no estaba listo, si, soñó con esto muchas veces pero que le suceda justo aquí y ahora…trato a duras penas de ganar un poco de tiempo, un par de segundos para calmar su corazón loco en su pecho pero no pudo mucho, con cada momento que pasaba el fruto que es Enoshima Junko se acercaba más y más a él, tan tortuosamente lento que era como si estuviera jugando con su persona, la llamo por su apellido y no respondió.

-Junko *beso*-fue lo último que dijo Naegi antes de sentir el primer par de labios en su vida chocando y uniéndose a los suyos, Junko se le quedo mirando un poco viendo su cara de completa sorpresa por el tacto repentino, una parte de ella se desesperó de no ser de su agrado, otra se preguntaba porque carajo le importaba y la última solo deseaba seguir saboreando esta deliciosa fruta carnosa; vio como Naegi de a poco se iba dejando llevar por el beso….bueno, solo tenían sus labios juntos sin moverse pero vio como el chico al ser primerizo estaba cayendo presa de la comodidad y la sensualidad, vio como sus ojos se fueron cerrando hasta estarlo por completo, lo escucho soltar un pequeño suspiro de placer; esto por alguna razón aumento con creces el sentido de orgullo de Junko, aunque no sabía por qué pero no le importó en lo más mínimo, con sumo cuidado de no alterarlo poso sus manos detrás de su cabeza y en su nuca, cuando las yemas de sus dedos se encontraron con el cabello más suave y esponjoso que haya tocado en toda su vida sintió como su presa se tensó unos dos segundos para calmarse y dejarse tocar así como empezó a tocarla. Las manos firmes e inquietas se depositaron en su cintura para moverse lentamente hacia su espalda, despacio la atrajo hacia el tanto como pudo.

Enoshima gimió por lo bajo de gozo mientras comenzaba la danza de los labios con Naegi, saboreándolos de a poco tomándose su tiempo, cerro sus ojos para dejarse llevar, los labios se probaban tentativamente, pero estaba claro que Enoshima tenía el control por ahora, jugaba con ambos, tomo el superior y lo succiono un poco para soltarlo con un ligero POP pero sin separarse de su "fruta", luego hizo lo mismo con el inferior mientras sonreía para sí y acariciaba su cuello como cabeza. Naegi por otro lado trazaba círculos pequeños en su espalda baja para terminar sujetándola firmemente de la cintura y atraerla aún más contra sí, podía sentir perfectamente sus enormes senos siendo presionados con fuerza contra su pecho.

Junko tomo su cabeza para tirar hacia ella mientras gruñía un poco necesitada y hambrienta de todo esto, en verdad lo necesitaba, saco su lengua y la paso de lado a lado contra los labios de Naegi burlándose de él y al mismo tiempo pidiendo en silencio permiso; Naegi sintió esto pero decidió jugar un poco con la chica a la que estaba besando, cuando entre abrió su boca saco su lengua para meterla en la boca de la chica al momento en que esta necesitara algo de aire. Junko no pudo contener el gemido que salió de su boca cuando sintió el apéndice rozar sus dientes superiores para luego meterse aún más dentro de ella….

Estaba extasiada y al borde de la ebriedad lujuriosa, el calor de la lengua invasora que bailaba y se abrazaba de manera casi armoniosa con la suya y su sabor…..dios, ese almizcle varonil y fuerte al mismo tiempo dulzón, era como saborear ambrosía para ella, sus manos se depositaron en sus mejillas mientras lo acariciaba con ternura pocas veces vista en ella, las lenguas bailaban una contra la otra para luego tratar de dominarse entre ellas empujándose y aplastándose en la boca de la fémina; las manos una vez quietas y tranquilas ahora estaban aún más tentadas a recorrer el cuerpo del otro durante la sección de morreo, las del chico surcaron la curvatura de su cintura para luego ir mucho más abajo hacia sus muslos, los acaricio con pereza y suavidad para luego darles un apretón en la zona interior del mismo; por otro lado la chica bajo sus manos hacia la espalda y apretó su forma, dura, pequeña, firme, solo…perfecta para ella. Sintió como Naegi se apoyó contra la pared buscando algo de comodidad para seguir con su sesión caliente, le vino una idea mientras ahora era ella quien asaltaba la boca del luckster; usos sus piernas para abrir las de su compañero mientras se iba apoyando en él para acomodarse lo mejor que podía encima de su regazo en una posición semi sentada y de inmediato se froto contra él, la fricción comenzó lenta, así como tentativa pero rápidamente escalo niveles en la calentura, siendo cada vez más dura, áspera, impaciente así como erótica. Enoshima podía sentir sus pezones completamente erectos, muy duros pegándose contra su brasier causándole tanto molestia como placer, deseaba dejarlos libres, necesitaba algo de alivio, movió una de sus manos donde estaban las de Naegi y tomo una de ellas, la otra volvió a sostenerla de la cintura tratando de apaciguar su asalto.

Guio la mano del chico hacia uno de sus pechos, no había que ser un genio para saber qué era lo que quería; Naegi dudo unos segundos pero el gruñido molesto así como impaciente de la chica lo hizo actuar, dio un apretón suave y tentativo. Junko separo su boca con un sonoro ruido dejando una gruesa, larga estela de saliva que los una mientras tiraba su cabeza hacia atrás, dando un ronco gemido para volver a plantar su frente contra la de Makoto, detuvo su fricción contra su entrepierna sensible y la dura polla del luckster que amenazaba con romper los pantalones. Azul vidrioso se encontró con el verde ansioso.

-Más, quiero más-eso fue lo único que dijo Enoshima antes de plantar sus labios contra los de Naegi de nuevo siendo el beso ahora completamente abrasivo; salvaje y apasionado, labios amasándose uno encima y contra el otro, succionándose entre sí, dientes picando, mordiendo con suavidad, dureza, salvajismo, dejando los labios hinchados, rojos, sensuales, apetecibles, lenguas sumamente húmedas frotándose, intercambiando saliva con un ruido característico que era música para los dos amantes.

Las manos de Naegi viajaban por el cuerpo de Enoshima explorando sus reacciones viendo cuan sensible es una chica, su mano derecha apretaba su seno, desde abajo, arriba y el contorno, surcando su areola haciéndola temblar. Armándose de valor acompañado por el deseo metió su mano en la camisa para tratar de tener un mejor margen de maniobra en la zona erógena, uso sus dedos para apretar y pellizcar el pezón oculto obligando a Junko a morderse los labios para evitar gritar ya que la acción al ser repentina hizo que sintiera una descarga en su columna, sus ojos se abrieron de golpe mientras volvía a terminar sus besos de manera abrupta.

Junko reacciono clavando sus uñas en el cuello y hombro de Makoto marcándolo un poco haciéndolo sisear pero eso solo amentaba el libido de ambos, paso sus manos hacia su nuca y cabeza enterrándola en su escote ahora mucho más destacado como abierto para el luckster, este empezó a besar y lamer la zona provocando que ella tire de sus cabellos o que lo empujara aún más contra su cuerpo; por otro lado mientras Naegi llevaba a cabo sus ministraciones Enoshima bajo sus manos para acariciar sus bíceps y vientre con movimientos lentos y suaves, tentándolo, luego siguió bajando hasta su entrepierna, se levantó un poco para que su mano pudiera acceder a ella, abrió los ojos cuando sintió un duro, firme, muy caliente apéndice en sus dedos, casi podía imaginar su forma, haciéndola babear; lo froto, acaricio, apretó un poco para luego ir a por sus testículos, Naegi apretó sus dientes de tal manera que podrían romperse, estaba temblando por ello. La chica vio por el rabillo del ojo unas cajas que estaban a su lado y empujo a su amante para que se sentara, sin perder tiempo se sentó encima de él, precisamente encima de su notable erección.

Naegi respiraba con dureza, tener la cara enterrada en el escote no le dio mucho aire, ahora sufría las consecuencias, consecuencias sumamente atractivas para su compañera. Enoshima vio el lío erótico que era Makoto, su pecho subiendo y bajando con rapidez, su ropa desaliñada y suelta, sus ojos empañados por el deseo, sus labios maltratados, tan hinchados, tan rojos, tan apetecibles pero lo mejor era su sudor, ver las gotas del mismo surcando la curvatura de su adorable y linda cara, como bajaba por su clavícula para perderse en el cuello de su ropa, no señor, debía ver el resto del espectáculo. Tiro de los hombros de la chaqueta y se la quitó, luego se apoyó en su pecho y tomo el cierre de la sudadera con los dientes para bajarla quedando ella arrodillada con la cara justo en la entrepierna, en este punto Makoto estaba haciendo una excelente imitación de un tomate maduro. La sudadera ya se había caído a los pies de ambos.

-Upupupu-Junko se rió un poco al ver la reacción del chico pero siguió no obstante, solo quedando una remera negra, la única prenda que la separaba del torso desnudo de su deseo carnal; puso sus manos en la cintura y subió su cabeza justo encima de la entrepierna, muy, pero muy despacio fue despojándolo de dicha prenda mientras dejaba una estela de besos así como lamidas en el vientre, pecho, cuello, clavícula hasta volver a besarlo mientras tiraba la remera en algún lado y volvía a sentarse en su regazo. Para sorpresa de Junko, Makoto la tomo de la cintura y la separo de su cuerpo, por un segundo la desesperación abordo la mente de la fémina, tembló de manera errática, al borde la histeria pero eso fue reemplazado por la sorpresa, la calentura y por primera vez, la timidez. Naegi en su segundo ataque de atrevimiento la dio vuelta para sentarla de nuevo encima de él, la obligo a recostarse en su pecho mientras usaba ambas manos para manosear sus pechos, Junko tiro su cabeza hacia atrás y tomo la del luckster mientras lo obligaba a besarle el cuello, cansada de gemir cerro sus labios contra los suyos en un beso tan febril como los anteriores mientras el manoseo junto a las caricias aumentaban más.

Makoto quiso un poco de venganza por la vergüenza que paso antes, desabrocho su camisa de manera lenta, muy despacio haciéndola temblar, su mujer gruño cuando no estaba apresurándose así que decidió seguir, cuando desabrocho todos los botones le quito su camisa dejándola solo con la corbata y su brasier negro; tomo sus pechos amasándolos hacia abajo, arriba y adelante enfocándose en la areola junto a los pezones, Junko era un lio babeante así como temblante ahora.

Luego de jugar con los senos durante unos minutos decidió dar el primer salto de fe, la movió con cuidado exponiendo su espalda, guio sus manos hacia los ganchos del brasier para quitarlos….

Si solo fuera tan sencillo, resulta que la suma de la timidez, el deseo junto a la inexperiencia impidieron a Makoto retirárselo, Junko parpadeaba un poco recuperando algo del enfoque perdido, cuando noto la mala suerte de su amante no pudo evitar reírse de ello.

-¿Te ayudo lucky-boy?-le pregunto para recibir un asentimiento bastante enérgico, sonriendo pícaramente se quitó su brasier junto a su corbata y los tiros a la pila de ropa quedando desnuda de cintura para arriba, se recostó en el pecho de Makoto y le dio el visto bueno para seguir; el luckster trago duro mientras levantaba sus manos temblorosas y las guiaba hacia los pechos desnudos, Junko miraba expectante y ansiosa, se lamio los labios y sus manos se abrían y cerraban emocionadas, estaba muy caliente, sus muslos se cerraron para friccionarse entre sí tratando de detener el ardor de su mojada vagina que estaba lubricándose para lo que venía con seguridad. Con un último suspiro Makoto tomo los dos orbes de carne y los apretó ganando un gemido/grito de Junko, tiro de los pezones hacia afuera logrando que la Fashionista se mordiera los labios de sobremanera dejándolos aún más rojos, cuando los soltó vio el rebote más hipnótico y sensual de su vida así como un súcubo en carne propia tan bella y sensual, solo para él; Junko ahora era similar a una gelatina de frutilla, completamente temblorosa, roja a más no poder, y el sudor que la hacía brillar….no supo cuando reclamo su boca de nuevo con necesidad pero el beso no duro mucho ya que estaban ambos muy agitados.

Junko no podía más, solo un poco más de los cuidados de Naegi y terminaría tocando el cielo, era increíble la habilidad del chico o su suerte estaba a tope, pero ella no se quedaría atrás, sintió la erección palpitante así que decidió tomar cartas en el asunto. Salió de su "trono" y se arrodillo en una posición bastante sugestiva, de piernas abiertas, los pechos desnudos sobre su polla y la cara arriba de la entrepiernas mientras besaba la zona con algún que otra mordedura amorosa, todo esto sin dejar de verlo directamente. Bajo su cara donde el cierre y lo tomo con los dientes para tirar de él, al mismo tiempo deshizo su cinturón, con un movimiento algo brusco le quito el pantalón mientras luchaba con sus zapatillas rojas, las prendas terminaron apilándose al montón cercano a ellos.

Enoshima se relamió los labios, la boca seca deseosa de tomar algo, algo caliente, la baba cayendo de la misma mientras su mirada enfocada en su "premio", podía ver el miembro de Naegi haciendo una carpa en sus bóxer, con sus uñas agarro de esta última barrera y con un solo movimiento rápido se lo quito. La polla larga y dura la golpeo en la nariz, sus ojos se pusieron aún más vidriosos, ahora estaba completamente borracha por el almizcle y sudor masculino, la cabeza del miembro justo entre los ojos, paso su lengua por sus labios una última vez antes de comenzar sus mimos…

-ARRRRRGGGGGGHHHHHHHH-fue el gemido áspero que broto de Makoto cuando sintió por primera vez la lengua caliente de Junko surcar el contorno de su polla suavemente, lentamente, tortuosamente lento. Desde la base subió hasta quedar justo en el prepucio que al ser el chico herbívoro un virgen estaba cubriendo la cabeza, siguió esto durante un minuto o dos para mojarlo bien; Naegi mientras tanto apretaba los dientes y las manos en la caja en la que estaba sentado, y era solo el principio. Junko agarro la piel de la cabeza con las dos manos y tiro de la misma hacia afuera exponiéndolo un poco, acto seguido introdujo su lengua para hacer movimientos en el sentido de las agujas del reloj y cada tanto pasarla por su corona provocando un temblor así como un jadeo de gusto de su amante; cuando la polla comenzó a segregar pre-cum decidió ser aún más audaz, metió la cabeza y solo la cabeza en su boca para besar, chupar y mordisquear la piel que cubría el eje, subió hasta que solo sus labios estaban apenas posados sobre el prepucio para bajar una vez más en un ritmo lento, así logro pelarlo dejándola expuesta. Lo soltó con un "POP" para ver su trabajo.

La polla "libre" para ella era magnifica, su cabeza roja como cereza, el eje temblando cada tanto, el frenillo expulsando pre-cum, perfecto para lubricarlo, esto era bueno por la mirada de completa dicha de Naegi, levanto su mirada para verlo mientras relamía en forma de burla su polla de nuevo teniendo especial énfasis en la corona.

-Ahhgg..Aggghh…p….po…..por….fa….f…fav…agghrHHHH….favor…..Jun….JUNKOOOOO-al intentar pedirle a su amante que fuera un poco más suave ya que era su primera vez Naegi creyó que esto no sería mucho más difícil de soportar, cuan equivocado estaba ya que Junko enterró el miembro entre sus bollos y los apretó con las manos, la parte expuesta del falo tembló de manera errática cuando la suavidad de los pechos lo estrujaron en un masaje repentino ascendente.

-Upupupu y viene lo mejor Ma-kun, aguanta-esa fue la única advertencia de Enoshima al detener su paizuri; Makoto bajo la mirada algo decepcionado al no sentir ese celestial placer y lo que vio solo lo puso aún más caliente así como nervioso. Junko estaba salivando mucho, más que de costumbre, vio en primera fila la estela de saliva caer de su boca….ohhh Kami esa boca que llego a saborear antes y como quería hacerlo de nuevo, los labios tan rojos e hinchados, la lengua afuera, la línea gruesa del lubricante de Junko cayendo directamente en el frenillo de su polla para terminar separándose en todo el contorno tanto del busto como del miembro prisionero.

-Junko….-era todo lo que podía decir Naegi, en su mente solo estaba esta mujer que tanto placer le estaba dando y en la psique de la dama estaba el puro gozo de causarle esto y ninguna otra al hombre que estaba complaciendo, escucharlo decir su nombre era simplemente tan gratificante, erótico, sensual….

-AGGGHHHHH…-fue el grito ahogado de Makoto cuando su polla fue cubierta por la boca de Junko, esta reanudo su paja rusa con fervor, en especial cuando Enoshima tuvo cuidado de que el eje del miembro sintiera los duros pezones acariciándolo, al mismo tiempo tanto el frenillo como la corona eran asaltados por la lengua emocionada de la chica y sus labios carnosos.

*chupar* *besar* *sorber* *sorber* *chupar* *mordisquear* *chupar* *sorber* *chupar* *chupar*

Junko noto como Makoto estaba temblando demasiado, su cabeza prácticamente era un vibrador en su boca, cosa que le gustó mucho, cansada de estar meneando su boca hacia arriba y abajo decidió tomar aún más del eje en su garganta, pero no se detuvo ahí, cuando tomo la mitad del pene de Makoto en su boca comenzó a tatarear, causando una vibración que lo puso en la borda, Naegi por acto reflejo agarro las colas de Enoshima y la sujeto con fuerza mientras trataba inútilmente de sacar aunque sea un poco su miembro de su ansiosa boca, pero al ir sacándolo de a poco, noto que las vibraciones de su tatarear se concentraban en su parte más sensible. Estaba al borde, a un paso de acabar.

-P..pa…..para…..por…..por…ARGGGHHHH…y….ya…ya…..c…cas….casi-murmuraba Naegi o jadeaba el contenido de su boca, sus ojos cerrados con fuerza; Junko al ver este estado de euforia no pudo sino sonreír, intentarlo mejor dicho al tener su boca llena así que decidió dar un último golpe para hacerlo venir, paso sus dientes sobre la punta del falo durante unos segundos y luego lo mordió. Ese mordisco no era duro ni áspero, sino suave pero al mismo tiempo ligeramente contundente, ese acto sorpresa basto para que Makoto se llevara las manos a la boca y se mordiera sus labios para contener su grito de placer ante tan dura corrida, Junko cerro sus ojos mientras sentía las cuerdas gruesas, calientes, espesas, pegajosas de semen correr por su garganta, el sabor salado inundándola, el olor fuerte que venía cuando lo saco de ella, la lengua colgando afuera pintada de blanco, para su deleite vio como el pene de Makoto siguió tirando las cuerdas blancas, estas aterrizaron en sus labios, con cada tiro si bien seguían siendo abundantes así como todo lo demás iban perdiendo fuerza, bajaron por su cuello y senos hasta el suelo. Naegi respiraba con fuerza cuando arrojo su cabeza contra la pared, el placer abrasador de su orgasmo junto al post orgasmo eran demasiado para él, su antebrazo se depositó en su mirada, sobre sus ojos mientras se los refregaba intentado quitar lo vidrioso de sus ojos, cuando pudo ver bien….el espectáculo lo puso duro de nuevo.

Ahí, arrodillada en su entrepiernas estaba Junko Enoshima, la SHSL Fashionista con las manos en sus pechos levantados hacia arriba, la lengua pasando por ellos recogiendo su semen perdido, saboreándolo y tragándolo, así hasta que dejo sus senos completamente limpios, luego siguió el resto, su cuello con su nuevo "collar de perlas" para terminar con los restos de sus labios, aunque era muy poco, la chica le devolvió la mirada lujuriosa, le guiño un ojo, luego abrió su boca mostrando los restos de su semilla y se lo trago con un audible sonido para él, solo para él. Naegi no pudo hacer otra cosa que tragar duro.

-Upupu delicioso Ma-kun pero-con eso dicho Enoshima se levantó y se apoyó contra la pared, bajo su cuerpo en algo similar a un striptease mientras se quitaba su panty, luego se levantó para apoyarse por completo en la pared, levanto su falda, abrió las piernas y se dio una nalgada en su hermoso culo, el sonido del golpe hizo que se crispara la polla de Naegi; Enoshima se dio una segunda palmada en la otra mejilla pero no la soltó, la sostuvo marcándola con sus uñas y la estiro exponiendo su completamente lubricada y lista vagina así como un ano que se expandía y contraía esperando ansioso.

-No es suficiente, ven lucky-boy, reclama tu premio-le dijo con tanto amor, lujuria, excitación como adoración en ella. Makoto prácticamente podía ver los corazones en los ojos de Junko, era palpable su deseo para con él y para ser sinceros estaba encantado, Naegi se acercó hasta ella mientras miraba por primera vez si había alguien más aquí aparte de ellos, luego de todo el ruido que hicieron le pareció raro que nadie se halla acercado por chismoso, al no ver a nadie se pudo relajar un poco pero al sentir el culo desnudo, precisamente la raya de Junko aprisionar su pija mientras la meneaba arriba y abajo logro que toda su atención se enfocara en ella.

Makoto vio como Junko le dirigió una mirada desde un costado, una sonrisa taimada, así como coqueta mientras seguía frotándose contra su miembro endurecido de nuevo, por acto reflejo Naegi llevo sus manos hacia sus caderas sujetándola y empujo las suyas hacia adelante para tratar de sentirla mejor, pudo sentir el abrumador calor de los pliegues de la pelirrosa contra su eje.

Vamos Ma-kun, lo quiero dentro ahora-le dijo con descaro, Naegi retrocedió sin separarse por completo de ella, llevo su mano derecha a su falo y lo sujeto mientras apuntaba contra la zona intima de Enoshima, lo movió contra los labios inferiores en movimientos lentos ascendentes y descendentes haciéndola gemir y suspirar deseosa, inclusive gruño cuando espero un poco demasiado.

-Makoto o lo metes de una vez o AHHHHHHH-fue el gemido que corto la frase de la Fashionista cuando sintió la punta del luckster entrar en ella con tanta suavidad que no parecía posible, ambos cerraron los ojos mientras sentían algo que nunca antes hubieran experimentado. Naegi sintió como su pene entraba de a poco en las entrañas de Enoshima, lentamente las paredes internas lo apretaban con un fuerte agarre sumado a la caliente y húmeda fricción. Junko por otro lado solo podía experimentar las corrientes de electricidad en sus nervios así como el fuego en su zona baja, la polla de su amante se abrió paso dentro de ella, expandiéndola, marcándola, su túnel de amor se abrazó al invasor de manera dura, en primer lugar por el asalto repentino y luego con posesividad, su interior se adaptó a su compañero hasta que en los órganos sexuales de ambos lo notaron…

Una barrera, algo que impedía el paso a más placer, la prueba de la pureza de una dama, la última frontera, los dos tuvieron un escalofrió cuando la tocaron y sintieron como era tocada respectivamente.

-…..-

-…-

-…..Adelante Makoto, hazlo-la voz de Enoshima era como una de sus personalidades, la más suave pero aún más todavía, Junko se movió para que su espalda se apoyara en el pecho de Makoto, apoyo su cabeza en el hombro y tiro de él en un beso, el luckster noto el mensaje, tiro sus caderas hacia atrás hasta que solo quedara la punta dentro de la Fashionista y luego la enterró hasta su base de un solo empuje; la corriente de placer y dolor fue tal que Junko tuvo un mini orgasmo provocando que sus paredes aplastaran a Makoto, este gruño en el beso mientras intentaba con todas su fuerzas el no acabar aun, ambos se quedaron así, besándose, unidos en cuerpo y mente, sus latidos ahora uno solo, completamente sincronizados. El pecho de Junko subía agitado provocando que sus senos bailaran para Makoto, quien no pudo evitar llevar una de sus manos para amasar ese bollo tan hermoso. Estuvieron así unos minutos para acostumbrarse, de otra forma sería demasiado abrumador.

-Muévete-le susurro contra los labios Enoshima, Naegi no necesito escuchar más, comenzó a moverse, un vaivén lento y calmo para adaptarse a su interior, con cada golpe enterraba su miembro en las profundidades de su amante hasta que no podía más, para Junko sentir las mejillas de su culo ser abofeteadas por la entrepierna de Naegi, sumado al sonido de la piel chocando contra piel y su vagina ser expandida con cada azote era tan placentero, pero desesperadamente quería más de él, sin pensarlo comenzó a mover su zona baja para que coincida con el ritmo del chico, solo un minuto o dos basto para que se pueda oir como ambos cuerpos impactaban uno con el otro y el sudor que caía de manera erótica por la piel era tan estimulante de ver así como un aceite improvisado.

-Más…..más…..joder más…..-pedía Junko ahora con la lengua afuera cuando sentía el ritmo acelerar, las bofetadas eran mucho más seguidas como erráticas, las manos de Naegi una vez quietas ahora parecían tener mente propia, la izquierda bajo hasta su vagina y la frotaba cada tanto, teniendo atención extra en su vulva y mucho más en su clítoris, Enoshima apretó los dientes mientras su boca babeaba sin control, su zona inferior no se quedaba atrás, la otra mano dejo el seno que estaba masajeando para apretar y pellizcar un pezón.

-HIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII-Junko de golpe soltó un estridente gemido/grito cuando si clítoris fue sujetado entre los dedos pulgar e índice para pronto ser pellizcado de manera algo áspera, su vagina ahora expulsaba algo de sus jugos de su anterior orgasmo producido por el dolor, el sonido del chapoteo entre las zonas erógenas era bastante estimulante, Naegi vio que su culo era bastante rollizo y firme pero ahora era un descontrol, dejo su seno libre provocando que la chica maullara dolida por ser dejada pero tiro su cabeza hacia atrás cuando su mano derecha agarro una de sus mejillas y la estiro hacia afuera pero en el movimiento ligeramente rozo su ano.

-Por favor, por favor, por ahí….tamHYYYYYYYYAAAAAAAAAAAAAAA-grito Enoshima, sus ojos abiertos mientras le brotaban algunas lágrimas de placer, cuando el dedo índice de Makoto entro en su ano sin ningún aviso pero Naegi siendo quien es solo lo dejo y espero mientras seguía empujando sus caderas lo mejor que podía, cuando Enoshima comenzó a besar su mejilla con cortos, suaves y dulces picos lo tomo como señal para seguir sus ministraciones.

-Aghhhhh…..ahhh….ahhh….aggghhh…..hyyyaaa…..Ma…..makoto….más-era los pedidos vagos de Junko, su boca abierta babeando dejando caer su saliva sobre su pecho y bajando sobre su vientre, los ojos vidriosos enfocados en ninguna parte, llenos de lujuria, sus pechos rebotando cuando se apoyó sobre la pared, las uñas clavadas en el ladrillo; Makoto por otro lado dejo los empujes rápidos y los reemplazo por los contundentes, salía de ella hasta que solo quede la cabeza y entraba como un pistón para repetir la acción una y otra vez, su dedo invasor dentro del ano moviendo en círculos hacia dentro, expandiendo, sintiendo como su interior se contraía para agarrar ambos invasores. Hubo un momento en que el coño de Enoshima se contrajo y afirmo aún más el agarre en el falo de Naegi, este la empujo contra la pared quedando sus pechos siendo comprimidos sobre la misma y la cara de perfil mirándolo con corazones en los ojos y la sonrisa coqueta, la puso de costado, saco su dedo de su culo y dejo su vagina una vez más solo con su miembro, tomo una de sus piernas por los muslos, la apretó y la levanto para tener un mejor margen de maniobra, en esta nueva posición comenzó su asalto descontrolado.

-Haaaa….aggg…..mmmmm…Ma-kun…cerca….esta cerca…..arrgggggg…..ahhhh-gemía Junko mientras comenzaba a llorar de placer, apretó sus labios para no intentar gemir tan alto ya que podía escuchar como algunas personas se estaban deteniendo fuera del callejón para preguntarse qué era ese ruido; puso una de sus manos en el pecho de Naegi para detenerlo un poco, este la vio sorprendido y con algo de duda, duda que se convirtió en preocupación al imaginar que le había hecho algo, esta solo se rió un poco cuando mostro que era lo que deseaba, su pierna alzada que antes estaba en el hombro de Makoto ahora se abrazó a su cintura por atrás de él al igual que su otra pierna, se sujetó de la pared mientras el luckster avanzo para usar su cuerpo como sostén para ella, la agarro de las mejillas de su culo y la levanto con un poco de esfuerzo, Junko rodeo su cuello con sus abrazos, esta nueva posición hizo que los dos cuerpos quedaran casi por completo pegados, los pezones duros de la chica se friccionaban contra la piel sudorosa de Naegi, su culo subía para bajar rebotando contra el pene de su amante, esto le permitió ir aún más ya que al tener su culo abierto el miembro podría ir aún más adentro, como consecuencia había llegado a más de mitad de camino cuando sintió como su cérvix era tocado, frotado y golpeado con fuerza con cada empuje del pistón caliente de Makoto.

-Argg…no podre..a…a…aguantar...mucho…Junko-decía Naegi entrecortadamente mientras aumentaba sus embestidas convirtiéndolas en sumamente cortas como erráticas, Junko por su parte araño su espalda con fuerza cada vez que sentía su puerta ser asaltada con violencia orgásmica, solo un poco más, solo podía aguantar un poco más, sus pezones temblaban mientras lograron friccionarse contra los de Makoto, ella llevo su cabeza contra la del chico y cerro sus labios hacia delante contra los suyos, el beso era salvaje, las lenguas enrollándose con furia dentro y fuera de la boca, los labio siendo mordidos, lamidos y succionados en estridentes ruidos opacados por el golpeteo de la piel en la zona inferior, Naegi se llevó a su amante hasta sentarse de nuevo en las cajas, ella nunca lo dejo ir, es más. Se aferró aún más a él, ahora con una base podía moverse; sus movimientos eran esporádicos, cortos, rápidos y contundentes con el continuo chapoteo de su vagina como su culo rebotando sobre el falo del luckster sumado a los besos húmedos que estaban compartiendo. Naegi se separó del beso para decir algo pero la lengua desesperadamente necesitada de Enoshima lo hizo callar, ella dio un último gemido ronco cuando levanto su culo y lo aplasto hasta la base del falo llevándolo hasta penetrar un poco su cérvix desencadenando su fuerte orgasmo, Makoto al sentir las paredes cerrarse contra su miembro con fuerza gruño para luego explotar dentro de ella, su miembro temblaba mientras disparaba su segunda carga; el beso de ambos callo los gritos que salieron de sus gargantas, Enoshima sintió por segunda vez la descarga de semen inundar su interior, como su cérvix estaba abierto por la constantes embestidas la semilla blanca entro directamente en su vientre llenándola de calor, sus paredes lo siguieron conteniendo en su lugar pero aflojaron su agarre, cesaron sus movimientos lentamente mientras se dejaban llevar por la dicha del post orgasmo, las llamas abrasadoras de sus corridas ahora era una flama suave y cálida, tan acogedora que los relajo, dejaron de besarse para descansar, aun siendo uno solo, Junko apoyo su cabeza en su hombro mientras descansaba un poco. Makoto por su parte se puso un poco mimoso, comenzó a dejar suaves besos en el hombro de la pelirrosa con suavidad y pereza, solo podían escuchar sus corazones latiendo en paz, sincronizados.

-Ne…Ma-kun…-le llamo de repente Junko, Makoto estaba algo somnoliento.

-¿Esto es cosa de una vez o….-dejo la pregunta al aire, Naegi se sonrojo mucho al pensar las implicaciones que estaba haciendo ver Enoshima, por un momento vino a su mente todas las veces que interactuó con ella, como era y lo demás pero así es como le gustaba; cuando sintió como las uñas rojas se clavaron en su espalda algo sensible con varias marcas de rasguño denotando la impaciencia de Junko.

-Si….si….si en verdad estas bien….con alguien como yo bueno…yo-trataba de seguir hablando Naegi sin tartamudear o ponerse rojo, parecía una quinceañera virgen, lo que es irónico ya que acaba de perder su virginidad no hace apenas meros segundos, Enoshima se río cuando pensó en eso.

-¿Sí?-le pregunto con la voz cantarina y algo aniñada, el luckster trago un poco de saliva pero se armó de valor.

-Junko ¿Quieres ser mi novia?-le pregunto a toda prisa y mucho más rojo, ella solo se rió con dulzura para cerrar sus labios con él.

-Kukuku es obvio mortal, tú perteneces a la reina, a nadie más, aprende tu lugar-le dijo cuándo Naegi noto la tan conocida corona se manifestó en su cabeza, se rió un poco para volver a besarla mientras hablaba entre besos.

-Como*beso*usted*beso*diga-le dijo a duras penas, ambos siguieron besándose un poco para luego relajarse en los brazos del otro, pero Naegi no noto como el abrazo de Junko si bien era tierno y amoroso denotaba también un deje obsesivo, casi maniático o loco…..

-Mortal, cierra los ojos, ahora-Naegi sin entender solo accedió, tan pronto como lo hizo sintió un par de caninos cerrarse sobre su cuello en un fuerte mordisco seguido de un conjunto de besos para calmarse; su primer instinto fue gritar pero el dolor rápidamente fue reemplazado con el placer. Junko le dejo su marca, en su mente esto era la señal de que la pequeña esperanza ahora le pertenecía a ella y solo a ella, al fin logro entenderlo, donde hay desesperación siempre hay esperanza, logro encontrar a su mitad, su opuesto y su igual.

Era desesperadamente placentero….

-Shhhh calma mi rey, esa es mi marca, me perteneces, así como soy tuya, eres mío, upupu-dijo por lo bajo pero Naegi la escucho, no sabía si estaba temblando por euforia, excitación o un poco de miedo, pero le gustó mucho.

Parece que gane una novia, Jejeje es muy bonita esta sensación, no creí que Eno…digo, Junko tenga este lado, en verdad soy muy afortunado al tenerla. Pensaba inocentemente Naegi.

Upupupupu esta es la luz de la esperanza, tan ansiada y codiciada, que trae desesperación a quien no la consiga y al mismo tiempo desesperación por perderla y ahora es mío, mi dulce y pequeña esperanza.

Ambos se quedaron en los brazos del otro disfrutando el momento, tanto lo disfrutaron que Naegi se quedó dormido, Enoshima sonrió con dulzura mientras lo acunaba, luego de un rato se separó de su abrazo para vestirse y vestirlo, no pudo evitar gemir un poco al sentir el semen escapándose de ella…

-Muuu, y eso que cerré mi flor…oh bueno, Ma-kun tendrá mucho más para mi después upupupu-se dijo a sí misma como si fuera una niña, una vez vestida y semi arreglada ella con su nuevo novio lo tomo al estilo princesa no sin antes de sacar su celular y llamar a un taxi para irse de nuevo a la academia. Una vez habían llegado a la misma lo llevo directamente a su habitación, por suerte ya era tarde y la mayoría de los estudiantes o se habían marchado a su casa o habían regresado a la residencia; una vez dentro de su cuarto lo recostó en su cama, lo desnudo, se desnudó ella y se acostó encima suyo para descansar.

-Buenas noches Makoto-le susurro por última vez antes de cerrar los ojos y abrazarlo con fuerza.

Afuera de la habitación de Junko, por el pasillo iba caminando una figura que por la noche no se notaba quien era, su andar era tranquilo, calmo, tan silencioso como un fantasma, lo único que se notaba de esta figura desconocida eran sus manos apretadas en nudillos tan fuertes que estaban pálidos y extrayendo sangre junto a las lágrimas que caían en ellas, en una de sus manos se notaba el tatuaje de un lobo…

Al día siguiente la clase 78 estaba regresando de la asignación deportiva, los chicos se habían separado de las chicas en sus respectivas actividades, los primeros con básquetbol y las segundas con natación, luego de reunirse de nuevo en el salón y aprovechando que el maestro aun no llegaba Kuwata León llamo la atención de todo el mundo, esto era raro, cosa que en verdad capto el interés del grupo.

-Saben algo, creo que nunca sentí tanto orgullo por uno de mis amigos, esto debe ser como cuando un viejo sabe que su hijo se volvió hombre, jajajaja joder tíos, nunca lo había esperado pero sucedió-dijo de manera espectacular al abrir los brazos como si estuviera en una función.

-¿A qué se refiere Kuwata-dono?-pregunto Hifumi mientras se acomodaba sus lentes.

-Si tío desembucha-le cuestiono Mondo.

-Bueno, hasta ahora creía que la gente tímida y reservada le tomaría mucho tiempo para encontrar algo de diversión-lo último lo dijo con las cejas levantadas, todos sabían que estaba insinuando.

-Kuwata-san, ese comportamiento no está permitido en un ambiente escolar-le regaño Kiyotaka mientras le señalaba con un dedo.

-Ya tranqui colega, bueno a donde iba, hoy descubrí que los callados son los más salvajes, ¿No es así Naegi?-esto último obtuvo el completo interés en toda la clase, cada cabeza estaba dirigido al luckster que apenas y podía decir media palabra bien.

-Ehhh Naegi-kun, no lo creo-dijo Sayaka con una sonrisa algo divertida por verlo tan nervioso.

-Eso, Naegi-kun no es el tipo que hace eso, debe ser una broma o algo-dijo alegremente Asahina mientras sonreía con su habitual optimismo.

-No estoy del todo segura Asahina, Naegi es un hombre, todos ellos sienten deseo en algún momento, sea temprano o tarde-explico sabiamente Oogami.

-chicos-trato de hablar Makoto pero todos ellos estaban hablando por encima.

-Urggg….lujurioso…..per-per-pervertido-le dijo Fukawa mientras se refugiaba detrás de Togami, muy para el disgusto de este último.

-Na..na…na….naegi y alguien más Uwaaaa-se dijo Fujisaki mientras se llevaba las manos a la cara para tapar el sonrojo.

-….-Mukuro no dijo nada, solo se concentró en afilar su cuchillo, Makoto por alguna razón se sintió acechado, como si estuviera siendo cazado.

-NAEGI-SAN, ESO NO ESTA SIENDO TOLERADO BAJO NINGUNA CIRCUNSTANCIA, INAPROPIADO PARA EL AMBIENTE ESCOLAR-le grito Kiyotaka mientras lo regañaba con el peor y más largo sermón hasta ahora.

-Jajajaja no creí que el camarón lo tenía-se reía Mondo para sí mismo.

-Y si no me creen, bueno, Mondo-san, Hifumi-san, sujétenlo, Ishimaru, quítale la chaqueta con la camisa, ahí tienen la evidencia-rápidos como un rayo los dos estudiantes fornidos lo sujetaron de ambos brazos mientras el tercero le quitaba la ropa a pesar de las protestas de un vergonzoso luckster, al final los jadeos, risas y demás murieron cuando Makoto quedo desnudo de cintura para arriba…

-….-

-…..-

-…..-

El silencio era increíblemente ensordecedor ante la inusual y nunca antes pensada vista, las chicas se sonrojaron bastante mientras los chicos tenían las mandíbulas desencajadas excepto Leon que ya lo había visto antes en las duchas de los chicos.

El torso de Naegi estaba lleno de marcas de rasguños, las uñas que fueron marcando un camino por toda su piel sumado a las marcas de labios gracias al lápiz labial de un rojo cereza, los rasguños estaban rojos, no tanto pero esto demostraba que no hacía mucho tiempo desde que se los hizo, lo más llamativo era el gran corazón sobre su bíceps izquierdo hecho con el mismo material.

-NAEGI-SAANNNNNNNNN, DETENCIÓN, INACEPTABLE, INCONCEBIBLE, IRRESPETUOSO PARA LA MORAL, LAS REGLAS, ESTAS MMMFFFFFFFF-agitaba sus brazos cuando el de Mondo se hallaba alrededor de su cuello.

-Gau Naegi… ¿Qué te asalto? ¿Un gato? Y porque diablos no me di cuenta antes-esto se preguntaba Mondo así como la mayoría de los chicos.

-Fácil, porque cada uno estaba entre sus cosas y Naegi era el más cercano a la puerta y el primero en terminar-dijo con Sorna Leon, los demás perdieron su ensoñación cuando lo asaltaron con una infinidad de preguntas.

-Dime Naegi, ¿Esto significa que lograste ganarte el corazón de esa pollita a la que le tenías el ojo puesto? Eh, Eh, Eh, Jejeje picaron, bien hecho, pero en serio, joder, que mujeron, todo un bomboncito-dijo para la clase Leon, algunos lo miraban curiosos, Enoshima estaba más que roja mientras sonreía y se reía, cada tanto meneaba sus pestañas en la dirección de su novio o le arrojaba un beso discreto, si se enteran a su chico lo más probable es que se muera de vergüenza.

-¿Cuál chica estas sugiriendo Kuwata?-le cuestiono Kirigiri con su cara estoica normal, este sonrió como si supiera algo muy valioso.

-Si Kuwata-chi, no nos dejes con la intriga-le pidió de buena onda.

-Simple, la chica esa pelirroja de tercer año, una de nuestras sempai, linda cara, ojos dorados, un cuerpo de infarto, tienes buen gusto Naegi jajajaja-se reía a expensas de su amigo Kuwata mientras lo sostenía por los hombros, el mencionado estaba completamente rojo pero enseguida se puso pálido, ya que sentía como un par de ojos lo miraban con lo único describible como furia ciega asesina, trago duro, muy duro al saber las consecuencias.

-Chicos vayan a sus asientos que la clase esta p…¿Por qué Naegi esta semi desnudo?-pregunto el profesor cuando entro al salón.

Luego de superar otro regaño de parte de Ishimaru, uno del profesor diciéndole que debe contenerse y murmurar algo de los chicos hoy en día la clase siguió su curso. Al momento del almuerzo Naegi rápidamente había huido fuera para comer tranquilo ya que sabía que iban a seguir hostigándolo con preguntas sobre su supuesta amante, cuando llego a las escaleras del segundo piso se inclinó contra una pared pero algo o mejor dicho alguien le dio la vuelta y lo estampo contra la misma pared dejándolo preso a su merced, sudo frío cuando vio quien era….

-H..H….h-h-h-ho-ho-ho-hola Jun-jun-Junko-trato de mantenerse sereno pero la mirada mordaz de la modelo en verdad lo ponía nervioso.

-¿Con que "bomboncito rojo" ehhh?-le pregunto, no mejor dicho lo afirmo, Naegi estaba por defenderse, decirle que antes que todo esto él tenía a alguien que le gustaba y planeaba confesarse antes pero ahora la quería a ella pero fue muy lento cuando los labios de Enoshima abrazaron los suyos, unos segundos después los mordió con dureza casi para extraer sangre.

-Parece ser que debo recordarle a este perro lujurioso quien es su única dueña-fue todo lo que dijo antes de tirarlo al suelo y comenzar a besarlo con avidez y desenfreno, Naegi trato de decirle que el lugar era muy público, que alguien vendría, que deberían aunque sea ir a un salón o algo.

-Ma-kun, estamos en el *beso* edificio extracurricular, es sábado *beso* solo hay *beso* actividades *beso* hasta *beso* *el *beso* mediodía-le decía Junko, ósea que estaban en un edificio vacío ya que al ser fin de semana muchos de los alumnos estaban en sus cosas, luego vendrían pero por ahora….

-Ahora….dale a mama un poco de azúcar-le dijo Junko con una sonrisa depredadora, Naegi solo pudo soltar un EK cuando su nueva novia se le arrojo encima otra vez…..

N/a: y eureka, aquí está el primer cap, espero que les haya gustado; y no se preocupen, sé que algunos piensan en que Junko se hace buena o algo así pero sigue siendo la loca que todos queremos, piénselo, ella quiere desesperación y que desesperación es tan mala e implacable como la del amor, desesperadamente te amo, desesperadamente no quiero que te vayas, tengo esperanzas de que te quedes conmigo…etc. Makoto la tiene difícil. Y más ahora con el siguiente cap. "El Compañero de la Loba".

Nos vemos.