Disclaimer: Nada más que la -corta- trama me pertenece.
Este fic participa en el reto especial "Diciembre de Fiestas, Villancicos, Vampiros y más" del foro Sol de Medianoche.
Titulo: Pensamientos como copos de nieve.
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Rosalie se ubicó frente a la ventana sin mirar nada en particular.
La noche del 24 de diciembre era fría y los copos de nieve bailaban en el aire en perfecta armonía.
Renesmee rio a su espalda y un pensamiento se deslizo en su mente. Sus ojos se cerraron y su imaginación la llevo a un lugar muy lejos de allí.
Se vio sentada junto a una cálida chimenea en un salón repleto de adornos navideños y un gran árbol adornado que ocupaba parte de la sala. Más allá vio a sus hijos cenando, junto a ellos estaban sus nietas, dos preciosas niñas que trataban de comer correctamente con el tenedor. Se vio a si misma con el cabello canoso. Se vio sonriendo. Satisfecha. Feliz.
Vio cómo su esposo caminaba hacia ella con dos copas de champaña en sus manos. Se sentó a su lado y el fuego resalto los preciosos hoyuelos en sus mejillas, a pesar de la edad no los había perdido. Brindaron y Emmett le regaló una hermosa sonrisa y un beso.
Rosalie abrió los ojos y se vio reflejada en la ventana. Perfecta. Hermosa inmortal.
Se odio más de lo que se había odiado durante todos esos años. Quería ser como su imaginación. Envejecer. Reproducirse.
Pero en sus sueños había algo que no cuadraba, no estaba Carlisle ni Esme o Renesmee, ni ninguno de sus hermanos.
Secretamente sonrió mientras los veía en el reflejo de la ventana. Las sonrisas cariñosas de sus padres adoptivos y los risos saltarines de Renesmee. El amor entre Bella y Edward. El entusiasmo de Jasper y Alice. También vio a su esposo, bajo las luces de colores sus músculos resaltaban aún más mientras se dirigía hacia ella.
Tenía su familia perfecta de una manera peculiar. Mientras estuviera con ellos todo estaría bien.
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¡Feliz navidad, gente! ¡Les deseo lo mejor en estas fiestas!
Les mando un montón de abrazos ciberneticos, se les quiere c: