Las tmnt no son de mi propiedad, es de sus respectivos escritores, la historia a continuación es invento mío, esperando un día que solo dejen de usarlas como objeto de los medios de comunicación para fines comerciales y de carácter mercantil.

Basada en la serie 2012 de nickelodeon.

Capitulo uno" Y de las cenizas renacer"

Han sentido alguna vez en su corazón, que por un instante el mundo se olvida de ustedes, como escapar de tu hogar, escuela o trabajo y que nadie se preocupe o se dé cuenta de su ausencia, para muchos tal vez parezca exagerado pero, no a los que en verdad ya lo vivieron, aquellos que se han acostumbrado a la pura y sincera compañía de la soledad; y ahora viven ocultándose y buscando no ser percibidos por aquellos que consideran activos pasivos de la sociedad.

Las grandes ciudades, ahora actualmente conocidas como, selvas de asfalto, tienen el mayor índice de personas con este estilo de vida, pero lo que muchos no saben es que en ellos se esconde la vulnerabilidad del ying yang.

Dependiendo solo de aquellos de buen corazón para ser guiados por el buen camino, y redirigir la decisiones sobre la raíz de amargura, y dar esperanza donde ya esta se había desmoronado.

Autor M.A.H

En la isla de Japón, se contemplaba un doyo en la cima de un pequeño monte alegado de la enorme ciudad de Tokio, este era rodeado por cuantos arboles se contaban; en él se llevaba a cabo un entrenamiento, donde cuatro jóvenes demostraban las pocas habilidades que avían obtenido en tan solo cinco años, unas katanas se escuchaban chocar contra un par de Saiz, un chico de unos catorce años dominaba las katanas con una habilidad notable, el era poco alto con pelo rubio y ojos extrañamente rojizos, su contrincante una chica de trece años, se mantenía muy difícilmente a raya en la pelea, manejaba los Saiz en un estilo defensivo muy improvisado, su altura era considerada, con su pelo largo y negro hasta la cintura y unos ojos verde azulados que despedían un destello en cada ataque que le remetía a su oponente,

-¿Que te ocurre Riana ya te cansaste?- dijo en voz retadora el joven de las catanas,

- ¡no me fastidies Cory¡- respondió la joven con apariencia de agotamiento, claramente ella no podía seguir su ritmo de lucha, el simplemente detenía sus ataques si ningún tipo de contra ataque" que sorpresa " se decía a sí misma, esa distracción le costó el triunfo, sus saiz salieron volando, y la hoja de su katana termino amenazadoramente en su cuello, ella sonrió en respuesta de su adivinada suposición,

-bien otra victoria para nuestro joven futuro líder- la joven se retiro a sentarse a un lado del doyo, en unos segundos otro combate comenzó,

-AYAME- se escucho al iniciar el duelo, unos ninchicus atacaron sin pleno aviso a un chico de unos doce años, que lograba defenderse con su vara boo, el era delgado y algo corto de estatura, su pelo era castaño y rizado, sus ojos tenían un claro café que eran ocultos por un par de lentes; fue acorralado por una joven de uno ocho años, su pelo color zanahoria y sus ojos azules turquesa era lo único que se notaba en cada movimiento, no era más alta que él, pero en una distracción de la joven, este arrastro una patada por sus piernas y esta cayó al suelo, era muy habilidosa por lo cual no tardo en levantarse, lanzando nuevamente sus ataques asía el joven,

-¡buen golpe Dexter! - inquirió la joven si dejar su ataque, pero en un segundo la chica rodo sobre si para quedar detrás de él y soltarle una patada en su espalda, este cayo sin previo aviso, rodando hasta la pared cercana,

- pero volví a ganar- dijo en voz presuntuosa.

-que graciosa Miriam- el chico respondió irónicamente, al levantarse de un solo salto, se sacudió el polvo, en eso fueron llamados y ellos se arrodillaron en frente de cuatro maestros,

-recuerden que el carácter de un ninja debe reflejar compasión y paciencia, demostrar serenidad en sus próximo movimiento y rapidez en su ejecución, será la diferencia entre la victoria o derrota,- el principal maestro comenzó a hablar.

-sus enemigos jamás dejaran pasar las debilidades que les demuestren, así que el confiarse en un campo de batalla solo dejara una trágica escena- el maestro era una tortuga gigante, tenia una banda azul que cubria sus ojos color castaños,

-hay, maestro Leonardo- los chicos dieron una reverencia,

- vayan a cambiarse, o llegaran tarde al colegio- se escucho decir a Miguel Ángel ellos partieron a sus respectivos cuartos, dejando solos a los maestros.

-que fastidio, si creía que tus sermones de regallo eran aburridos entoces me equiboque- replico un Rafael fastidiado, los otros dos hermanos solo podían opinar en sus pensamientos, dado a la reacción de su hermano mayor.

-¿que quieres decir con eso Rafael?- Leonardo se acerco donde él se encontraba todavía indicando,-si no te...- Leonardo fue interrumpido por Miguel Ángel quien le dedico una cara de suplica.

-si me necesitan estaré en mi cuarto meditando- el líder solo se retiro lo más rápido que pudo, en su sentir sabía cómo reaccionaba su hermano gruñón cuando no salía por más de un mes, pero ya era cuatro meses de cautiverio para los cuatro maestros,

- " si esto sigue así nuestra situación se complicara aun mas"- se sumergió en sus pensamientos mientras caminaba a su cuarto; -"se cumplirían ya cinco años los cuales avían estado lejos sin ser recordados por nadie en casa, nadie más que entre ellos cuatro podían recordar, aquellos sucesos que los llevaron a tener que huir para no terminar en el olvido total."-

La casa quedo sumergida en la tranquilidad de la mañana, Rafael se avía llevado a Miguel al jardín trasero, necesitaba hablar con él, Dónatelo cada mañana desde hace cuatro meses se dirigía a su laboratorio, y no se le veía hasta pasada la tarde, pero en unos segundos todo quedo abrumado por los gritos de una joven acompañado de unos golpes de una puerta,

-¡Miriam volviste a tomar mi secador de pelo!- se escucho algo molesta a la joven kunoichy,

-te lo devuelvo en un rato, deja de hacer tanto escándalo-le respondía la pelirroja desde dentro de su cuarto,

-! Ya te he dicho que no me gusta que tomes mis cosas!- decía en tono severo

- tu escándalo se escucha asta Guatemala- dijo Miriam abrió la puerta, sosteniendo la mencionada secadora.

-aquí tienes señorita personalidad- le estiro la mano entregándosela, ella se la arrebato de un manaso, el pleito continuo hasta llegar a oídos de Leonardo, quien era quien se encontraba mas cerca de las jóvenes.

- tu bendito pelo ni siquiera necesita acondicionador de que te quejas-

-jajá solo te quieres ver bien por ese tonto Hansel, no te das cuenta que ni siquiera te nota-

-eso a ti no te interesa, además tú solo eres una niñata...- la joven fu interrumpida por una presencia extra,

-¿no son muy chicas para pensar en jóvenes?- pregunto Leonardo con tranquilidad, las chicas no respondieron, y no queriendo iniciar un sermón como les decía su hermano Rafael, acorto su regaño,

-a las dos se le hará tarde para ir a la escuela, después hablaremos de sus frecuentes pleitos, está claro - el pobre maestro se sobo la cabeza a la amenaza de una migraña.

-hay maestro-Leonardo se retiro a la cocina, donde se encontró con Miguel preparando el desayuno,

-tan puntual como siempre hermanito- en cuanto termino de poner el pan en la tostadora, le dedico una sonrisa a el mayor de sus hermanos,

-¿luces desanimado te ocurre algo?- Miguel se sentó a un lado de leo

- no te preocupes Mickey todo está bien- intento una sonrisa pero pareció más una mueca.

En la sala se encontraban Cory y Dexter alistando sus cosas, cundo el chico de lentes no encontró su tablet en su mochila,

- ¡Riana¡ - dijo en lo bajo, dirigiéndose a la avitación de la joven,

-¿a dónde vas Dex? – le pregunto su compañero no se detuvo a contéstale por lo que no le dio importancia, de repente el pasillo se lleno de humo, el joven rubio se alarmo y corrió por el extintor a la cocina, los dos maestros se extrañaron al verlo correr a las avitaciones, Miguel y Leonardo se asomaron al pasillo y al darse cuenta del humo corrieron detrás de el, que al entrar al cuarto tropezó con un bulto en el suelo y activo el extinto,

-¡aaaaaaaaaaaaaiiiiiiiiii¡- gritaron las dos jóvenes kunoichis, Miguel entro a la avitación directo a abrir la ventana, y el humo comenzó a dispersarse, la escena revelo a Dexter en el suelo sobándose el estomago, Cory tirado sobre él y dos niñas mojadas por la espuma del extintor, Leonardo observaba desde la puerta.

- ¿cual es tu problema?- Miriam le reclamo al rubio, Leonardo ayudo a Dexter a levantarse

-bueno y ¿por qué tanto humo? - Miguel pedía una explicación

- al tonto de Dexterse le cayó una bomba de humo que modifico, - respondió Miriam, pero Miguel seguía sin entender

- ¿y qué le paso a dexter?- pregunto Leonardo levantándolo con cuidado,

- le remetí una patada por descuidado, no debe entrar repentinamente a los cuartos ajenos- respondió Riana

- aun que creo que me pase- la chica noto lo adolorido que estaba el joven.

-¿tu crees?- Miguel perdía la paciencia, tal vez sería el encierro de cuatro meses, por las constantes peleas entre sus hermanos mayores o probablemente el tiempo reducido que tenia para entregar su último libro, lo único que iso que no se saliera de sus casillas,

-huele a que algo se quema- Cory olfateo un poco,

-!aaaa la avena de Rafa ¡- grito Miguel saliendo corriendo a la cocina, observado por los presentes,

-por favor déjense de tonterías, vayan a desayunar - les ordeno Leonardo, Cory y Dexter fueron los primeros en Salir a la cocina, seguidos por Leonardo, Miguel ya avía puesto la mesa, los huevos revueltos y tocino estaban en un plato en medio de la mesa, el se encontraba limpiando la olla que se avía quemado, Dónatelo entro a la cocina por un café, pero al oler lo que su hermano avía preparado se sentó al lado de Cory, las dos jóvenes entraron y comenzaron a desayunar, Rafa entro y del refrigerador saco jugo de naranja,

- sírvetelo en un vaso Rafa- Lo reprendió Miguel, poniendo en la mesa un tazón de avena que avía logrado salvar, el se sentó y comenzó a devorar su desayuno,

- ¡sabe raro¡- se quejo con un gruñido, pero igual se la termino; los jóvenes al terminar pusieron sus platos en el fregadero y salieron a la sala por sus mochilas, la única que se quedo a ayudar a lavarlos era Riana, ella apreciaba mucho a Miguel, lecausaba conflicto que Miriam fuera su aprendis y no ella, al terminar Miguel le dedico una sonrisa y ella se sonrrojo, ella salió a la sala por su mochila,

-toma llorón- Riana le entrego a Dexter la tablet,

-pudiste pedírmela- dijo el chico algo molesto,

-así, no lo creo- la chica comenzó a ir a la salida, resignado puso la tablet en la mochila, y la siguió a la salida, el jardín principal estaba lleno de flores, y lo adornaban cuatro bancas a lo largo del pasillo, que llegaba a un portón enorme de color rojo, tenían que girar una joya en medio del portón para poder abrirlo, el exterior de la casa estaba lleno de arboles enormes, un gran escondite, al dejar la colina el portón de la casa iba desapareciendo conforme se alegaban, pasaron unos quince minutos y llegaron a una avenida al final del sendero de ahí a la vuelta se encontraba el tren electrico;

Sus maestros eran toda la familia que ellos tenían, de no ser por ellos tal vez hubieran terminado como criminales o en la calle, no sabían mucho de su pasado, pero lo preferían así, aunque en los últimos meses los notaban muy alterados.

En tanto en los edificios de Tokio, se observaba un par de sombras saltado, parecían que buscaban algo,

-el rastro se pierde aquí Sra. Morgs- el hombre Sondrio le informo a su compañera,

-no pueden estar muy lejos- le contesto la mujer algo serio,

-al parecer están usando magia para ocultarse- el hombre sostenía un relicario en forma de reloj de arena.

-! Miguel Ángel!- replico la mujer con enojo

- tranquila jefa los atraparemos-el hombro sonrió malévolamente.