Card Captor Sakura y sus personajes le pertenecen a las reinas del Shojo, CLAMP
Aquí
En parte era su culpa. Por haber sucumbido a la ilusionada mirada hermosa que lo miraba en busca de una razón para negarse. Su culpa estaba en no decirle la verdad, en no decirle que esa persona no le amaba ni le correspondería.
Llovía torrencialmente, las gotas diminutas no pegaban contra él por el paraguas que portaba; del alguna forma predecía ese inusual clima mientras esperaba. Una nube de amargura con las suposiciones que ametrallaban a su cabeza cada hora. Cada minuto que se le hacía eterno pensando que quizá se había equivocado. Quizá…
Quizá, que no existía. Era inútil pensar en un error
El momento llegó junto con la cálida presencia acercándose a toda velocidad hacia su dirección. El acostumbrado escalofrío que lo llenó por completo lanzando descargas eléctricas por su espina dorsal, aunque esta vez resultaba diferente. Porque esta vez haría para lo que nunca estuvo preparado pero en lo que orientaba su vida toda.
Le vio tropezar, e impidió su caída con frágil sutilidad. Lo esperaba mas no lo suficiente para evitar en sentir quebrarse en partículas al ver su rostro marcado en lágrimas. Muriendo en la sorpresa notada por su presencia.
-¿Hiragizawa?
-Eriol ¿Cuántas veces he de pedírtelo…? –puso su mejor sonrisa, una de las que hechizaba a cualquiera y que expresó la más extrema suavidad en ese momento. Una suavidad diferente, tal vez amarga.
-¿C-cómo…?
No respondió. Su albina mano viajó a la mejilla trigueña, recogiendo lágrimas insolentes que deseaba mortificar a la persona más querida para él. Acercó su mentón como un suspiro, susurrando a su oído frases de consuelo y sutil guía
Porque aun si el corazón tan idolatrado estaba roto, aun si el llanto que escuchaba contra su pecho no fuese para él…aun si él jamás le dejase entrar así a su corazón, él estaría allí no importa qué. El sólo estar esperando cuando necesitase un consuelo.
Aquí estoy yo...y aquí estaré siempre.
Mientras escuchaba pasó una mano delicadamente por su cabello castaño.
-Todo va a estar bien…
El gracias fue todo lo que necesitó para sentirse satisfecho. Pleno, en una triste felicidad de poder secar su rostro al menos por un instante.
Realmente era todo lo que necesitaba.
N/A. ¿Qué diré de esto? A los que han llegado hasta acá, mil gracias. No es bueno, lo sé pero la hermosa canción de Luis Fonsi, David Bisbal, Noel y Aleks Syntek me empujó a escribirlo; aunque sea un shonen-ai. La historia es parecida a un rechazo por parte de alguien hacia... ¿Lo adivinan? y como Eriol logra consolarle, es cursi pero no pude evitarlo ^^. Comenten con sinceridad.