OHAYO!

He vuelto!-un rato después de haber actualizado otro fic-Les traigo ahora una nueva idea :) veré que tal me va.

Esta historia está inspirada en la película "Titanic", tomaré como base la idea principal pero cambiaré algunas cosas. La pareja es Levi x fem!Eren, así que el nombre en femenino del chico titán será Ellen, y será Reincarnation!AU. Espero que sea de su agrado.

Los personajes no me pertenecen sino a Hajime Isayama. Sin más preámbulos disfruten la lectura ;)

MY HEART WILL GO ON

I

"–(…)… ¿Crees en la reencarnación?

¿Por qué me lo preguntas?

Simple curiosidad…

Tch, para ser sincero, todo eso siempre me ha parecido mierda, pero…

¿Pero?...

Si toda esa mierda fuera cierta… espero volver a encontrarte…"

El tenue sonido de la calle y los rayos de un nuevo día empezaban a filtrarse por la ventana de su habitación. Aunque al principio lo trató de ignorar, poco a poco tuvo que abrir sus ojos color aqua. Era Miércoles, apenas la mitad de la semana.

–Agh ¿Por qué ya no puede ser Viernes?–susurró, haciendo una mueca de molestia y ocultando su rostro en su mullida almohada. No solo era ese día, anteriormente se había sentido con un humor del carajo-por no decir que todos los días-, pero ¿Qué era realmente? ¿Acaso era por los sueños que tenía? No, imposible, siempre los había tenido desde que tenía memoria.

Nunca le habían molestado, al contrario, la hacían sentir en cierto modo feliz, pero cuando cumplió los 16 años, empezó a despertarse de esa forma. A partir de entonces, cuando oía aquella voz fría pero amable de sus sueños, le daba alegría pero también tristeza, y lo peor de todo: en todos esos años, jamás, JAMÁS había podido escuchar el nombre de aquella persona, cada vez que iba a ser mencionado había un breve silencio. Tal vez no tendría que tener importancia, pero quería, NECESITABA saber el nombre…

Pensaba en eso, hasta que la voz de su madre desde la planta baja la sacó de sus pensamientos:

–¡Ellen! ¡Ya levántate que se te hará tarde!

10 DE ABRIL DE 1912

–Ellen–la azabache sacudió suavemente el hombro de la chica–despierta, ya llegamos…

Ellen abrió los ojos, irguiéndose con algo de pereza. No había podido dormir mucho la noche anterior por estar acomodando los últimos detalles del viaje.

Ellen Jaeger, hija del reconocido doctor Grisha Jaeger, y su madre Carla Jaeger, una dama respetada y propietaria de una de las boutiques más reconocidas de Inglaterra. Su familia era de origen alemán, pero desde hacía muchos años se habían mudado de país.

–No tengo ganas de salir a alta mar realmente–comenta, bufando levemente.

–Reiner te invitó, hubiera sido una grosería de tu parte no haber aceptado–le respondió Mikasa, acomodándose su sombrero–la que no debería estar aquí soy yo…

–No quería venir sola, y quien mejor que tu para acompañarme, eres como mi hermana.

–Si, claro… lo que no querías era quedarte a solas con él y punto.

Mikasa, al igual que Ellen tenía 16 años. Era una belleza sin duda alguna, de piel aperlada, sus ojos levemente rasgados color negro y su cabello azabache que le llegaba por debajo de los hombros, sin duda era su mejor dote. Su madre era japonesa y su padre americano, quienes ya habían muerto desde hacía varios años, por lo que se tuvo que mudar a Inglaterra con un familiar, ahí fue donde conoció a Ellen y Armin, los tres eran grandes amigos desde entonces.

¿Y quién era Reiner? Un joven de 18 años rubio, alto y ojos dorados. Provenía de una familia de comerciantes que tenían tratos fuera del país, y sus padres tenían una amistad de muchos años con los Jaeger, y al nacer Ellen, acordaron que ambos muchachos se casarían en el futuro.

Reiner haría un viaje hacia Nueva York a bordo del nuevo barco Titanic junto a su amigo de la infancia Berthlodt. A pesar de que Reiner era un buen hombre-aunque algo mimado-y respetaba a Ellen, era muy posesivo con ella, la tenía denominada como propiedad suya desde que supo del compromiso, incluso con el pobre Armin había sido grosero por tener tan buena relación con la muchacha, ocasionando que ella no se sintiera cómoda con su presencia. Por eso, cuando Reiner la invitó al viaje y sabía que no tendría opción de negarse, puso de condición que Mikasa la acompañara. Y ahora allí estaban amabas en el carruaje, llegando al Puerto de Southampton, de donde partiría el barco.

Abrieron la puerta del carruaje, Ellen extendió su mano que vestía un guante de piel hueso, la cual rápidamente sostuvieron, dándole el paso para que bajara. La trigüeña vestía un traje de saco y falda en rayas color melón y negro, su cabello recogido en una cebolla baja atada con una trenza de su mismo cabello, y en su cabeza un singular sombrero negro con un listón del color de sus guantes. Atrás de ella salió Mikasa, con un vestido color azul rey y un saco de un tono más claro, guantes blancos en la mano y un sombrero con rayas azul rey y blanco, con el pelo acomodado en una cola de lado que descansaba en uno de sus hombros. Ambas voltearon hacia delante, admirando el gran barco, el cual el mismo arquitecto Erwin Smith, afirmaba que era tan resistente "Que ni siquiera Dios podría derrumbarlo".

–Es muy impresionante–comentó la azabache examinando con detalle el exterior del barco.

–La verdad no entiendo tanto el alboroto–respondió Ellen en tono aburrido–he visto más grandes…

–Vamos, no seas aguafiestas, disfruta el viaje…

–Señoritas, ustedes pueden ir subiendo al barco–les comentó el chofer–me encargaré de subir su equipaje.

Las muchachas aceptaron, para después encaminarse a la fila de primera clase para entrar al barco.

Mientras tanto, por otro lado, entre la fila y la gente de tercera clase, una muchacha de pelo rojizo atado en dos coletas bajas y ojos azules claros corría entre la gente, seguida de un azabache de ojos grises que iba a un ritmo más tranquilo.

–¡Vamos hermano! ¡Apresúrate!

–Paciencia Isabel, no hay que exaltarse…

–¡Mis polainas! ¡Ya están casi por partir! ¡Debemos aprovechar los boletos que le ganamos a esos idiotas!

Isabel de 18 años y su "hermano mayor" Levi, de 25, las habían ganado en un juego de cartas a un chico rapado y a una chica "aspiradora de papas" sus boletos de tercera clase en el Titanic cinco minutos antes de que este partiera. No tenían familia en Inglaterra y sus pocas pertenencias las tenían junto a ellos, así que no tenían nada que perder en encaminarse hacia América.

–¡Alto! ¡Deben pasar primero por la revisión de higiene!–el guardia detuvo el paso de las dos personas que estaban por entrar al barco.

–Ya pasamos por ella–mentira.

–Ah… en ese caso, pueden entrar…–el ignorante del guardia los dejó pasar sin problema, finalmente.

–¡Lo hicimos Levi! ¡Wuuuu! ¡Esto será fabuloso!–a pesar de ser ya una mayor de edad, Isabel siempre tenía el espíritu de una niña–¡América aquí vamos!

–Te dije que te calmaras–Levi le interrumpió dándole un coscorrón, haciendo que la muchacha balbuceara–vamos, debemos buscar el cuarto…

Seguido de tocar la puerta, la mucama asignada al cuarto, Petra Ral, deja pasar a un muchacho rubio junto a uno muy alto de piel morena y pelo negro entran al cuarto de las dos muchachas. Mikasa estaba leyendo mientras que Ellen se encontraba en el asiento de a lado, con un bloc de dibujo en sus piernas. Le había gustado el arreglo de flores de la mesa de centro y lo quiso dibujar.

–Veo que ya encontraron algo con que distraerse–dijo Reiner, acercándose a Ellen y agarrándola suavemente de los hombros–¿Qué tal el viaje?

–Muy agradable, gracias–contestó Mikasa, antes de su amiga pudiera decir otra cosa.

Reiner le responde con una leve sonrisa–Bueno, no les quito más tiempo. Venía a avisarles que a la hora de la comida tendremos a unos invitados en la mesa–comentó–el señor Erwin Smith y la señora Hanji Zoe nos acompañarán, nos veremos en el lobby a las tres de la tarde.

–Ahí estaremos…

–Ellen–susurró, llamando la atención de la nombrada–me gustaría hablar contigo.

La muchacha se paró dejando su bloc por un lado y siguió a Reiner al otro cuarto. El muchacho saca de su bolsillo una bolsa de terciopelo negro, de la cual saca un collar con cadena plateada, con un dije de un tamaño mediano que eran dos alas, una blanca y otra azul, incrustadas de piedras preciosas y diamantes. Era un collar hermoso, y Ellen no pudo evitar asombrarse.

–"Alas de Libertad"… ¿Maravilloso no?–le dice el muchacho, dándoselo en la mano.

–Sin duda alguna ¿De dónde lo conseguiste?

–Logré hacer un trato con Historia Reiss.

–¿Historia Reiss? ¿No es parte de esa familia que tiene relación directa con la realeza?

–La misma. Es una joya única de singular valor, y me pareció que mereces tenerla.

El ánimo de Ellen colapsó, haciendo que hiciera una mueca muy poco visible. Así que ese era "otro regalo de singular valor"…

–Es demasiado grande para que lo use…

–Lo puedes usar en momentos especiales, como en nuestra boda–le responde con una leve sonrisa, sin saber que con esas palabras a la ojiaqua se le revolvió el estómago. Volvió a meter la joya en la bolsa de terciopelo–iré a dejarlo en la caja fuerte…

"Si claro, las joyas son siempre tu solución a todo…"

–¡Soy la reina del mundo!–exclamó Isabel, extendiendo sus brazos por la esquina de la popa del barco. La tercera clase tenía acceso a la popa del barco, mientras que la primera clase a la proa–¡Mira Levi! ¡Tengo el control!

–Bien por ti–comentó el ojigris, sentado a lado de la muchacha mientras disfrutaba de un cigarrillo y del sol.

–Ser reina de la popa de un barco no es lo mejor–comentó una voz, llamando la atención de ambas personas hacia un muchacho de pelo grisáceo y ojos castaño claro, sentado del lado contrario de ellos y sonriendo levemente–entonces te conformas con cualquier cosa…

–¡Ni siquiera te estoy hablando a ti!–exclamó la ojiazul, columpiándose con sus brazos en las barras y sacándole la lengua–¡Y eso no es cierto! ¡Aprovecho positivamente lo que tengo!

–Y eso es lo que no te hace madurar…

–¡Levi!

–Coincido con el–continuó el peligrisáceo–hace rato en todos los cuartos se oían los gritos de una niña, ahora que oigo los tuyos me doy cuenta que son de la misma persona.

Isabel no dijo más, pero infló sus cachetes y le volvió a sacar la lengua, sentándose a lado de Levi, quien dio una leve risa silenciosa. Se irguió un poco y extendió su mano–Soy Levi, y ella es Isabel…

–Farlan, un placer–el muchacho al igual extendió su mano, respondiendo al apretón de manos de Levi–Entonces, el Titanic ¿no?

–Habíamos oído de él, pero no le habíamos tomado mucha importancia–respondió el azabache, apagando su cigarrillo–¿Qué buscas en América?

–Una mejor vida, nuevas oportunidades, he pasado toda mi vida en Europa y me gustaría vivir más allá de eso. Tuve mucha suerte de conseguir un boleto, literalmente se los arrebataban de las manos…

–Jajaja, eso no nos pasó a nosotros–respondió Isabel triunfantemente–les ganamos los boletos en el último momento a unas personas.

–¿En serio? ¿Cómo?

–¡Fue en un juego de cartas! Creyeron que no perderían, pero mi hermano les ganó sacando una flor imperial ¡no se lo podían creer todavía después de que nos fuimos! ¿cierto Levi?–Isabel le dio un codazo al hombre a lado suyo, pero no contestó.

Les había dejado de poner atención, estaba con la vista fija en alguien, una hermosa muchacha que se acercó al balcón de la proa para mirar al mar. Su cabello estaba peinado en cebolla con un trenza alrededor de esta y traía un vestido color naranja rojizo cubierto con una tela de gaza con destellos brillantes y con mangas que cubrían sus brazos de esa misma delicada tela. Por unos segundos sus vistas aqua y gris se conectaron, lo suficiente para que el azabache sintiera una sensación extraña por todo su ser, algo que jamás había experimentado… o no desde hacía mucho tiempo.

–Uhhh, ni un día a bordo y coqueteando–la voz de Farlan interrumpió los pensamientos de Levi, sin embargo, a pesar de que la trigüeña había desviado la mirada desde hacía unos segundos, simplemente no podía dejar de verla. De repente, un muchacho corpulento y rubio se acercó y la jaló del brazo, lo cual parece que le molestó a ella. No se podía oír nada de lo que decían pero de ambos lados no se veían contentos. Finalmente, el rubio la tomó de la cintura con una mano y con la otra su brazo, jalándola de nuevo para adentro, no sin antes que ella volviera a voltear y sus miradas conectaran nuevamente por un muy corto tiempo–Lástima amigo, al parecer hay prometido…

Siguieron en silencio, Isabel se recostó en la banca y acomodó su cabeza en una de las piernas de Levi, mientras él y Farlan fumaban un cigarrillo. Su cuerpo se encontraba ahí, pero la mente del ojigris se volando entre las nubes, recordando aquella hermosa mirada aqua.

"¿Por qué tengo la sensación de haberla visto antes?..."

Y aquí termina el primer capítulo!

Que tal? Les gustó? Merece un review? :3 Espero que haya sido de su agrado.

Pienso continuarla, y lo más probable es que no sea tan larga, pero aviso de una vez que en las siguientes dos semanas no tendré mi computadora y no podré escribir nada D: ya después que pase ese tiempo me pondré a trabajar en el segundo capítulo y lo subiré cuando pueda. Les digo esto por que luego me puedo llegar a tardar en actualizar-espero que no me pase pero por si las dudas-pero tienen mi palabra que NO PIENSO DEJARLA Y LA TERMINARÉ HASTA EL FINAL.

Los invito a pasar a mi otro fic que justamente hoy subí el último capítulo "Me importas" con Jean x fem!Armin como pareja :) por si gustan darse una vuelta.

Espero verlos pronto.

SAYONARA!

Miss Writer 04