-Because I'm stupid-

The memories of this tragedy
I shall keep them in my memory forever.
This scar will make me remember how selfish I was.
It's the part of my past I won't forget
Please Forgive Me

*¨*Capitulo Uno *¨*

x—Perdón

Mi vida siempre ha sido aburrida, siempre es la misma rutina todos los días me levanto para ir a la escuela mi nombre es Zero Kiryuu tengo dieciséis años; y y tengo un hermano gemelo su nombre es Ichiru él y yo somos muy unidos, también tengo una hermana menor, María, ella es muy tierna pero no habla después del accidente ella...

Todos los días me pregunto qué será de mí en un futuro no estoy muy seguro quisiera saber qué pasara cuando acabe la escuela estoy seguro que seguiré cuidando de Ichiru después de todo él es mi otra mitad mi hermano pequeño y yo debo protegerlo. Mi vida no tiene nada interesante simplemente voy al escuela, hago mis tareas, arregló mi habitación cuidado de Ichiru y de María, tengo un trabajo de medio tiempo en una cafetería del centro. Por lo general soy tímido y no tengo amigos soy solitario supongo que no hay nada interesante que pueda contar sólo que últimamente me he sentido raro como si alguien estuviera llamando tal vez estoy alucinado pero algo en interior me está llamando no sé muy bien que es ni que quiera a decir verdad estoy asustado es como si sintiera que algo malo a suceder me siento impotente creo que no podría proteger a mis hermanos de esto.

A pesar de que por mi culpa nuestros padres fallecieron Ichiru nunca me ha culpado él es un niño muy noble mi otra mitad desearía poder recorrer el tiempo, viajará el pasado evitar que ese maldito suceso no hubiera pasado; pero creo que esto solo es un sueño y yo jamás podría hacer eso… Perdón.

Hace cuatro años, nuestros padres fallecieron en un accidente automovilístico, aún lo recuerdo como si fuera ayer, aún escucho los gritos, las llamas. Si tan solo yo no hubiera sido tan egoísta, ellos estarían todavía con nosotros. Porque no pude ser más consciente, por qué no hice caso si tan solo yo….

xx- Flashback

Íbamos de regreso a casa después de haber pasado un fin de semana en Osaka, esa tarde estaba lloviendo, mis padres querían que nos quedáramos en el hotel pero yo quería regresar a casa. Al día siguiente Sensei iba a regresar junto con Kaito, habían ido de viaje a Australia, y Kaito me había dicho que tenía algo importante que enseñarme, yo quería regresar lo más pronto posible. Mis padres decidieron quedarse hasta que pasara la tormenta.

"Te odio!" Recuerdo que apreté mis puños y le grite a mi padre que lo odiaba, que era un mal padre, porqué nunca hacía lo que le pedía. Mi padre me miró un tanto sorprendido y enfadado, yo nunca le había gritado de esa manera, pero estaba molesto, por qué demonios no podíamos regresar en ese instante.

"Zero-chan discúlpate con tu padre ahora mismo" Recuerdo como oka-san me regañó por gritarle a oto-san pero yo estaba muy molesto, recuerdo que sus ojos rosas me miraron suplicantes pero yo la ignore.

"Nii-chan" Ichiru, tú me detuviste, tomaste mi brazo querías que no discutiera con ellos, tu mirada me hizo tranquilizarte pero terminé empujándote.

"Zero!" Mi padre me habló, pude ver que sus ojos grises me miraban molesto por empujar a mi gemelo pero también tenían una sombra de tristeza luego se hincó y me jaló cerca de él, paso su mano por mis cabellos. Recuerdo su toque, era cálido, lleno de protección, me sonrió y arregló mis anteojos, recuerdo que me sonrió gentilmente y beso mi frente luego también jaló a Ichiru y nos abrazó a los dos. Volteó a ver a mi madre ella sujetaba a nuestra pequeña hermana que estaba durmiendo.

"Creo que la tormenta está pasando" Dijo con una sonrisa aunque podía sentir que estaba preocupado, afuera no cesaba de llover.

"Entonces ya vámonos!" Yo grité, no pensaba en otra cosa que en llegar a casa.

"Cariño, estás seguro que" Mi padre se puso de pie y abrazó a mi madre dándole a entender que estaba bien. Salimos del hotel, mi hermano y Yo compartíamos un paraguas además de que llevábamos nuestras chamarras. Nos subimos al carro, mi madre colocó a mi hermana en la parte de atrás de la camioneta, en el siguiente espacio estábamos Ichiru y Yo, cada uno sentado de lado de cada ventana. Mamá se subió y nos obligó a usar el cinturón de seguridad, luego empezamos a conducir dejando atrás el hotel que se escondía entre el bosque, había mucha niebla y ya estaba anocheciendo, se escuchaban los truenos y el cielo se iluminaba por los rayos.

"Otou-san apúrate!" Yo repetía una y otra vez, sin darme cuenta de lo que estaba a punto de pasar. El camino por el que íbamos tenía muchas curvas, estábamos rodeando la montaña, había una parte recta, mi madre volteó para vernos, recuerdo que sonrió, Ichiru se había quedado dormido y Maria todavía no despertaba.

Vi una enorme luz, todo pasó tan rápido, escuche a mi hermana gritar, Ichiru cuando voltee a verlo veía un líquido rojo derramarse por su frente, sentía como dábamos vueltas.

Mi corazón se paró en ese instante, sentí como mi cuerpo salía volando fuera del carro y caía contra el húmedo aspalto. Jadeaba por aire, sentía algo húmedo en mi camisa, no había dolor físico, solo… Parpadeaba varias veces, a lo lejos vi el carro. Porqué nadie salía, que estaba pasando, no entendía, quería gritar, quería pararme pero. Sentía las lágrimas mojar mis mejillas. Luego alguien se acercó, sus ojos eran oscuros, me preguntó algo pero no escuchaba, todo se estaba tornando borroso, recuerdo la sonrisa de mi mamá, Otou-san. Quería cerrar los ojos…

"Eres Zero?" Solo alcance a asentir y sentí como esa voz pasaba sus manos por mi rostro.

Al día siguiente desperté en un hospital, solo tuve unos rasguños, me dijeron que había sido muy afortunado. Lamentablemente mis padres no lo fueron, Ichiru estaba en coma y mi hermana pequeña. No sabían si sobreviviría.

Nunca antes había sentido un vacío como este, ni siquiera cuando nuestro perro Dash murió, ni siquiera cuando me molestaban en la escuela porque usaba unos enormes anteojos de abuela. Sentí un dolor en mi cabeza, me escondí debajo de la cama y comencé a llorar, por mi culpa mis padres habían muerto. Esa noche no hice más que llorar, pero aun así el dolor seguiría latente. Esa cicatriz que se formó en mi cuello (su tatuaje) es el recordatorio de lo que hice.

x- Finaliza Flashback