ADVERTENCIA:
Este fanfic está basado en la película RE: Retribution, por lo cual si no has visto la película y la quieres ver te recomiendo que NO leas el fanfic ya que te explicaría el trama y contiene escenas sacadas de la película.
El fanfic es una loca idea mía de cómo ambos se encontraron en la película… solo el comienzo y el final son ficticios lo demás aparece en la película y le agrego ideas mías, como pensamientos y sentimientos que no aparecen en la película.
Y si no la has visto… te la recomiendo :3 es genial ^w^
Y si la viste y me preguntas que como recuerdo tantas escenas (solo vi la película una vez…) bueno tengo algún tipo de memoria fotográfica que me hace recordar cada detalle pero para mi mala suerte se desactiva cuando estoy en pruebas ¬¬ y por eso me va mal y termino castigada
Y bueno aquí me aventuro con una historia de amor de mi pareja favorita de la saga de juegos Resident Evil.
Espero que les guste… si me equivoco espero que me comprendan ya que no acostumbro a hacer historias de video juegos…
Dejen sus reviews ^.^ y enjoy!
Destino
Leon de ahora treinta y cinco años, conocido como uno de los pocos supervivientes de Racoon city. Seguía trabajando para el gobierno, a pesar de que este gobierno ya casi no existía aún seguía bajo las ordenes de los altos manos con intención de detener el desastre biológico que había arrasado con gran parte del plante y la humanidad, pero con su propio equipo de mercenarios.
El agente se encontraba en su cuarto, cualquiera pensaría que estaba hospedándose en algún hotel o casa, pero no, era imposible debido a la situación mundial que había destruido el mundo, su cuarto estaba ubicado en uno de los pisos de la casa blanca, así es la mismísima casa blanca, todo el mundo se había venido abajo y los pocos seres humanos que quedaban se habían confinado en lugares seguros y organizándose para poder exterminar la mayoría de las criaturas, estaba ordenando sus equipos, sus ropas y armas.
Tranquilamente se encontraba a pesar del horror que afuera se desataba y como no si se encontraba cansado, había regresado hace un rato de una misión que duro una semana para poder ayudar a unos sobrevivientes a refugiarse en los lugares capacitados.
Se sentía cansado y aletargado, pero aun así se mantenía atento, ¿atento a qué?, bueno a los sutiles pasos que alguien daba a sus espaldas, hasta que cuando estuvo lo suficientemente cerca se giro con pistola en mano apuntando a el intruso.
El destino los volvía a unir con esa manera tan peculiar y característica de ambos, uno frente al otro, apuntándose e intimidándose con pistolas, aunque esta vez era solo el, en cambio ella solo levanto las manos dando a entender que estaba desarmada.
-Ada- susurro con sorpresa al ver el rostro tan familiar y amado que estaba frente a él.
-¿Así es como saludas ahora, guapo?- le pregunto haciendo énfasis a la pistola que este le apuntaba.
-Si no entraras como ladrona te habría recibido mejor- dijo aun empuñando su arma apuntándola hacia ella.
-Bueno-dio unos felinos y lentos pasos moviendo sus caderas de forma seductora acercándose hacia el –Es más interesante así- dijo antes de tomas la mano que empuñaba la pistola y ejerciendo una leve fuerza lo insto a bajar el arma, y como tonto enamorado lo hizo inconscientemente. Estaba perdido en esos ojos de color - que lo miraban de forma tentadora, sin darse cuenta Ada le había quitado la pistola y puesto el seguro, la cual en un movimiento que hizo reaccionar a Leon, tiro sobre la maleta que se mantenía abierta y contenía otras armas.
-Espera- dijo al reaccionar -¿Qué haces aquí, como entraste?- le pregunto algo nervioso debido a que la distancia entre ellos no era muy grande.
-Abandone Umbrella- dijo alejándose un poco de él.
-¿Abandonaste Umbrella?- le pregunto sorprendido.
-Así es muchos abandonamos las instalaciones de las compañías- contesto caminando alrededor del cuarto observando cada detalle del cuarto que no era muy grande pero si amplio comparado a los otros de la casa.
-¿Muchos?, espera si abandonan Umbrella son aniquilados, ¿estás buscando protección de Wesker?- le pregunto asustado ante la idea de que Ada estuviera en peligro.
-No- dijo secamente mientras se sentaba en la cama del Kennedy
-¿Entonces?- dijo acercándose lentamente.
-El vino conmigo- dijo sin mirarlo y casi sin prestar atención al rostro sorprendido del hombre que estaba frente a ella mirándola con los ojos muy abiertos debido a la sorpresa de esto último.
-Debes estar bromeando- dijo sin creerlo mientras se sentaba junto a ella.
-No, la reina roja tomo control de las instalaciones provocando muertes innecesarias en el personal por lo cual quienes no teníamos los controladores dejamos las instalaciones y ahora Wesker debe estar con quien sería el presidente si no me equivoco, haciendo un trato- dijo Ada mientras miraba de pies a cabeza al hombre al cual alguna vez se le declaro pensando que era su final.
Y como no verlo, era imposible no fijarse en aquel adonis que estaba estupefacto junto a ella, pero a pesar de su expresión su rostro era aun mas varonil y menos jovial que la primera vez que lo conoció, sus facciones eran más maduras dándole un aire mucho mas varonil que de niño, su cuerpo era aun mas grande, sus músculos eran remarcados por la polera típica que usaba, a pesar de que ella era mayor que el por tres años el parecía ahora mayor, y que a pesar de que Ada se conservaba joven él se veía aun mas adulto de lo que realmente era, mas alto que ella, y la hacía ver pequeña debido a su ancha espalda, los músculos de sus brazos estaban remarcados, todo eso lo hacía perfecto a los ojos de ella, además de esa singular forma de ser de él, distraído, valiente, audaz, cuidadoso, cariñoso y algo inocente.
-¿Entonces ya no me traicionaras?- le pregunto embozando una sonrisa de lado.
-Bueno…- se acerco sutilmente hacia el –Ahora somos aliados- y tan sutilmente como se acerco rozo sus labios con la mejilla de él, en un casi beso de ella sobre la sonrojada mejilla. Pero no fue que los rozara porque si, aunque le gustaba la idea de tentarlo pero a pesar de que su juego podría haber durado más, los pasos de una persona que se dirigía hacia el cuarto de Leon la alertaron y se alejo.
-Agente Kennedy- dijo entrando un soldado –Lo solicitan en la oficina global- dijo mirando extrañado la cercanía que la pareja tenía.
-Está bien, ya voy- dijo levantándose
-¿Usted es la señorita Wong?- le pregunto.
-Así es- asintió la susodicha.
-Usted también debe ir- añadió y salió de nuevo al pasillo, ambos se miraron por unos segundos y Ada se puso de pie, juntos salieron y recorrieron los pasillos hasta llegar a la oficina global, al entraron la escena era simple, la oficina adornada como siempre pero con algunas cosas extras, sacos de tierra que llegaban hasta la mitad de las ventanas, un aspecto lúgubre y deteriorado, en el escritorio estaba sentado el presidente, amigo y jefe de Leon a pesar de que este trabajaba mas como mercenario, frente a este estaba parado nada más y nada menos que Albert Wesker, atrás de él su amigo Barry Burton, Luther West y otros miembros de la resistencia.
-Los estábamos esperando Leon- dijo el presidente.
-¿Qué sucede?- le pregunto mientras caminaba hasta el centro del salón y se paraba junto a Barry y Ada a su lado.
-Necesito que hagas una misión muy importante- le dijo mientras se levantaba –Señor Wesker, debo pedirle que se retire junto a la señorita Wong para poder hablar con el equipo- dijo de forma seria, Albert solo asintió y embozo una sonrisa, rápidamente salió junto a Ada, quien fue seguida por la mirada por león hasta que desapareció de el alcance de su vista.
-Y… ¿tiene que ver con Wesker?- le pregunto aun sabiendo la respuesta mientras se acercaba.
-Así es- asintió –Se que ha habido muchos problemas este último tiempo, pero ahora es necesario aliarnos con él, ya que tiene la solución a todo eso- tomo unas carpetas y se las entrego.
-¿Y usted le cree?- le pregunto mientras leía los papeles.
-Así es, bueno del todo no, pero es necesaria el arma que tiene- dijo señalándole una hoja en particular y se alejo. Leon la aparto de las demás y comenzó a leerla.
"(…) Programa Alice completo: adaptación 89% y aumentando. Cura 95% por ciento. Experimental: 5% (…)"
-¿Programa Alice?- le pregunto al leer esa parte del documento.
-Al parecer es el nombre de la cura, pero es necesario rescatar a quien la posee, se encuentra en unas instalaciones en el norte de Rusia, por lo cual necesito tu ayuda- dijo mientras se acomodaba en el sillón presidencial, entrelazaba sus dedos y tenía un semblante serio sobre otros papeles que repletaban su escritorio.
-¿Debemos ir por ella?- dijo, el presidente solo asintió.
-Albert Wesker tomara el mando mientras dura la misión, no sirvo de mucho interfiriendo en la búsqueda de la cura- Leon rápidamente lo miro. –No me retractare, es necesario y punto- Leon solo se cayó y volteo a ver a Barry quien solo levanto los hombros en expresión de intentando decir "no hay nada que hacer".
-Está bien- dijo resignado, ya no le importaba mucho, solo quería que todo se terminara.
-Diles que entren por favor- le ordeno a un guardia.
Tras unos segundos entro nuevamente Wesker seguido de Ada quien rápidamente recibió la mirada de Leon y una curiosa de Barry al buscar a quien Leon tanto miraba. Y como no si además de llamar su atención también lo hizo con los demás presentes, una mujer de treinta y ocho años de semejante cuerpo era increíble, sus piernas torneadas y largas eran exhibidas gracias al corte del vestido rojo tan característico de ella, ese vestido rojo ceñido a su cuerpo que remarcaba las curvas que tenia, su abdomen plano, sus brazos delgados pero con músculos no mus delineados, un escote que dejaba ver parte de sus senos, el cabello de corte un poco más abajo de las orejas y un rostro angelical, era una femme fatale completa.
-Ellos te ayudaran- dijo el presidente, Wesker volteo a verlos y volvió su mirada al presidente.
-Está bien, Ada ira primero- dijo mirándola.
-¿Qué?- pregunto sorprendido y preocupado Leon.
-Conoce las instalaciones del norte de Rusia, sabrá como entrar y salir rápidamente- la susodicha solo miro de reojo a Leon –Entre más rápido vayan más rápido Alice traerá el arma- dijo Wesker desinteresado.
-Un avión los llevara allá, también lo que sea necesario, viajaran hoy en la noche con tal de que lleguen de día para que inicien la operación, organizare todo- dijo el presidente antes de salir de la oficina.
-Ada prepara tus cosas, ingresare a la computadora desde aquí, lleva las gafas- Ada solo asentía y miraba de reojo a Leon –Ustedes harán lo siguiente- todos lo miraron, Leon con desprecio sabía que seguiría -Primero ingresara Ada y cuando este adentro me conectara a la sala central de control para desactivar la seguridad, eso también sucederá con quienes están bajo al mando de la reina roja, Ada tendrá unos minutos para sacar a Alice y ustedes para bajar a través de los ascensores que activaran en la caja de control en la superficie junto a los ductos de ventilación-
-¿Cómo sabremos donde esta todo eso?- le pregunto Burton.
-Los ductos serán fácil de encontrar-dijo embozando esa sonrisa tan típica y característica de el –Cuando estén viajando les daré los otros detalles, así no perderemos más tiempo con esto- dijo antes de que el presidente entrara rápidamente a la sala.
-Esta todo organizado, partirán en una hora más, vayan por sus cosas- les ordeno todos asintieron y Leon antes de salir le hizo una seña con la mano a Ada indicándole que lo siguiera.
-Nos veremos en el avión, iré en un rato- le dijo Leon a Barry quien solo miro a Leon y Ada para después asentir levemente, todos fueron a sus cuartos a arreglar las cosas que llevarían. La pareja llego al cuarto de Leon y este abrió la puerta invitándola a entrar, lo hizo y ambos entraron al cuarto y Leon cerró la puerta tras su espalda.
-Dime que no iras- dijo rápidamente en un tono serio y protector acercándose al escritorio sobre el cual estaba su equipo y cerrando una maleta.
-Vamos, no es la primera vez que voy a una misión sola- le dijo caminando hacia él.
-Es peligroso- dijo volteando y inclinándose lo suficiente como para verla
-Todo es peligroso, todo tiene riesgos- la cercanía de ellos nuevamente era tan corta que podían sentir sus respiraciones chocar, lo hacían inconscientemente, se atraían de manera instintiva y involuntaria, era la química que trabajaba y los unía, era el destino, la química o como quieran llamarlo -Incluso esto- dijo al ver en la manera en que estaban juntos –Te podría traicionar igual que como lo hice muchas veces antes y matarte- lentamente león se acerco más de lo que ya estaban, inclinándose lo suficiente como para que quedaran frente a frente y con su mano tomando el mentón de ella obligándola a mirarlo.
-Si me vas a matar… hazlo después- susurro con su voz ronca y seductora antes de besarla de manera apasionada y posesiva aun con su mano en el mentón de ella y el otro brazo rodeo la cintura de ella atrayéndola aun más hacia su cuerpo, ella correspondiéndole gustosa y sin medida, ese beso tan anhelado y deseado por tanto tiempo, cada encuentro los hacía desearse aun mas, y cada despedida los destruía por dentro, pero ahora, besándose con tanta pasión que les comenzaba a quitar el aire de sus pulmones rápidamente y tras esto rompieron el beso.
-No es el primero…-beso nuevamente los labios de ella rápidamente, un beso corto y dulce a la vez y volvió a separarse solo a unos milímetros de ella –Pero tampoco es el ultimo- dijo embozando una sonrisa la cual no quito cuando volvió a besarla. Rápidamente le correspondió, pero tan pronto los golpes sobre la puerta se escucharon se alejo rápidamente.
-Ni una sola palabra- dijo Ada antes de alejarse lo suficiente como para volver a sentarse en la cama.
-¿se puede?-pregunto un hombre tras la puerta
Continuara…
