Disclaimer: Harry Potter y todos sus personajes pertenecen a J.K. Rowling.
Advertencias: Drarry/Harco/EWE/OoC/R-16
Summary: Draco tiene un extraño fetiche sexual, que su novio está más que dispuesto a complacer y se encarga de alimentar.
Este fic participa en la "Drarry Week" del foro "El Mapa del Mortífago".
El Chico Dorado y el Príncipe de Slytherin
Por: Hana Usagi
Prompt 1
ஐ..•.¸¸•´¯`•.¸¸.•. Uniforme .•.¸¸•´¯`•.¸¸. •..ஐ
Si había algo que Draco disfrutaba más que nada era ver a su novio en uniforme. Cualquier uniforme.
Se había dado cuenta desde que estaban en el colegio, cuando lo veía caminar por los pasillos no podía evitar mirarlo fijamente de la cabeza a los pies, y no podía entender el por qué, pues Harry Potter, el niño que vivió, se veía como un completo desastre al tener la camisa desfajada y desabotonada en los primeros tres botones y con la corbata colgando de manera descuidada.
Potter no tenía nada de cuidado en su apariencia, y aun así se las arreglaba para provocarle una dolorosa erección a Draco si posaba su mirada en su persona por más de tres minutos. Y ni hablar del uniforme de Quidditch, ¡Dios!, muchas veces dejaba que Harry lo rebasara sólo para ver ese delicioso trasero enfundado en esos apretados pantalones blancos.
Y algo que disfrutaba aún más, era el sexo con los uniformes puestos.
Oh, cuánto disfrutaba cuando uno de los dos arrastraba al otro a un aula en desuso y hacían de todo cuidando de no quitarse una sola pieza del uniforme, porque Harry lo sabía, sabía que a su novio le excitaba que se lo follara con los pantalones puestos pero abiertos lo suficiente para que su miembro saliera al encuentro con su trasero, y Harry siendo tan buen novio, lo complacía.
Y al terminar un partido de quidditch, ellos no eran como Ginny y Dean o Montague y Warrington, que se iban a un cubículo de las duchas y follaban con el agua cayendo sobre sus cuerpos. No. Lo que a Draco le gustaba y Harry le cumplía, era encerrarse en el armario de las escobas, con sus uniformes puestos y hacerlo contra la pared.
Cuánto lamento Draco el salir de Hogwarts, pues en la Universidad para Pocionistas y la Academia de Aurores no se usaban uniformes.
Pero para su sorpresa, Harry estaba más que dispuesto de seguir alimentando y cumplir su extraño fetiche. Un día, cuando llegó de la Universidad, encontró a su sexy novio apoyado en la pared usando un maravilloso y excitante uniforme igual al de los guardias muggles que cuidan del palacio de Buckingham.
Poco le importaba que fuera un uniforme muggle, lo único que le importaba fue la erección que inmediatamente apareció bajo sus pantalones en el mismo momento en el que lo vio. El resto de ese día no volvieron a salir de la habitación.
La siguiente vez -porque sí, hubo más veces-, el uniforme elegido fue el del Colegio Durmstrang, como el que habían usado los alumnos en el baile de Navidad durante el Torneo de los Tres Magos. Es verdad que se parecía un poco al de los guardias, pero no por ello era menos excitante.
Y de esa manera siguieron usando varios uniformes para deleite y morbo de Draco, como el de los jugadores de los Chudley Cannons, policías muggles, alumnos de Beauxbatons, del equipo de Soccer Inglés, incluso de enfermeros y doctores de San Mungo.
Hasta un día, poco antes de salir de sus respectivas carreras.
Draco llegó a casa -el doce de Grimmauld Place, se había mudado un poco más de un año después de Hogwarts- y pensó que Harry no estaba en casa pues siempre salía a recibirlo en cuanto lo escuchaba. Dejó la mochila con sus libros sobre el sofá y se encaminó a las escaleras para subir a la habitación que compartía con Harry.
Al entrar pudo ver las cosas de Harry aventadas en uno de los silloncitos que él había exigido instalar en la habitación y escuchó el sonido de la ducha apagarse.
- ¿Harry?
- Ya casi termino, Draco - se escuchó desde el otro lado de la puerta del baño.
- ¿Ya terminaste todo el procedimiento para lo de tu graduación? - pregunto mientras se quitaba el saco y se desanudaba la corbata.
- Sí, también ya me dieron el traje que usaré en la ceremonia.
- Quiero verlo, ¿dónde está? - dijo pasando la mirada por la habitación.
La puerta del baño se abrió y Harry dijo:
- Aquí.
Draco volteó a ver el dichoso traje pero su boca se abrió de manera nada refinada para alguien de su clase cuando vio al imbécil -pero endemoniadamente sexy- de Harry Potter, recargado en el marco de la puerta y enfundado en un uniforme de Auror.
- Por Morgana - casi gimió al verlo tan fresco y como si no estuviera alborotando las hormonas con sólo verlo así.
- ¿Te gusta, Draco? - dijo con voz gruesa, excitada, Harry también había aprendido a disfrutar de ese extraño fetiche de Draco.
Por otro lado, Draco no podía articular palabra, con las mejillas sonrojadas, un nudo en la garganta y los ojos acuosos de lujuria, así que solo asintió. Harry se acercó a él, a paso tranquilo pero demasiado lento para el rubio, quien esperaba ansioso el encuentro con el prácticamente nuevo auror.
Al quedar frente a frente, casi rozándose los torsos, Harry rodeó con un brazo la cintura de Draco y lo atrajo a su cuerpo con algo de fuerza que le sacó un gemido al rubio.
- Y bien señor Malfoy, ¿está todo en orden por aquí? - volvió a hablar con esa voz llena de excitación.
Draco gimió más fuerte y se aferró a los hombros de Harry con sus manos.
- No Auror Potter - jadeó -, tengo un grave problema.
- ¿Ah sí? ¿Y cuál es el problema?
- Este - dijo y empezó a frotar su entrepierna con uno de los muslos de Harry, quien al sentirlo, sonrió con lascivia, se acercó a la oreja de Draco y susurró:
- ¿Y cómo quiere que le ayude, señor Malfoy?
- ¡Merlín! - gimió - Ya sabes cómo - trató de recuperar algo de su orgullo.
- La verdad es que no - le mordió ligeramente la oreja -, no puedo ayudarle si no me dice lo que necesita, señor Malfoy.
Draco gimió, rodeó el cuello de Harry con sus brazos y se alejó solo un poco para verlo a los ojos.
- Necesito que me folle, auror Potter.
Harry sonrió satisfecho y se apoderó de la boca de Draco con fuerza, penetrándola con su lengua y obligando a la otra a encontrarse con ella. Llevó sus manos hasta el trasero de Draco y lo atrajo a su cuerpo para que sus entrepiernas se frotaran. Draco gimió entre sus bocas pero Harry no permitió que se separaran, le mordisqueó el labio inferior y volvió a profanar la boca contraria con su lengua.
Sintió cómo Harry lo levantaba del suelo y rápidamente envolvió las caderas contrarias con sus piernas, a los pocos segundos sintió su espalda sobre el colchón y las manos de Harry desabotonar su camisa, pero el no hizo ningún esfuerzo por desvestir al otro.
Draco sabía que Harry también ansiaba que le tocara la máxima porción de piel, y lo hacía, cuando hacían el amor, porque Draco está muy consciente que eso que hacen es sexo, pero cuando hacen el amor se desvisten completamente para disfrutar uno del otro por completo, por eso siente que tiene que decirle algo.
- Harry - lo llama - quiero que me folles con el uniforme completamente puesto.
Harry detiene sus esfuerzos por desabrochar el cinturón y lo mira fijamente a los ojos confundido.
- Te prometo que después te haré el amor y adoraré cada centímetro de tu cuerpo.
Harry sonríe con sus ojos brillando y Draco supo que había comprendido.
- Ahora auror Potter, ¿qué espera para follarme?
- No desespere, señor Malfoy, en breve podrá sentirme llenándolo.
Draco gimió y pudo sentir su entrada contraerse, lo necesitaba ya. Cuando Harry se deshizo de sus pantalones y ropa interior, Draco se apresuró a desabrochar el pantalón del moreno, metió la mano y acarició la hombría de Harry que estaba más que lista para embestirlo. La sacó de la prisión en la que se convirtieron esos pantalones grises y sin previa preparación la dirigió a su entrada, aunque a pesar de su urgencia, Harry recitó el hechizo de lubricación y de una sola estocada se enterró en Draco, para después empezar a moverse lentamente para desespero de Draco.
- Mmm… auror Potter, ¿por qué no mueve su varita más rápido y se encarga de mi problema?
Harry sonrió y aumentó la velocidad de las embestidas, amaba a su rubio y pervertido novio, con todo y su extraño y excitante fetiche por los uniformes.
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Uff… lamento cortarles la acción, no estoy preparada para el Lemmon entre Draco y Harry (siento que lo arruinaré, aunque no sea la primera vez que lo escriba).
Esta fue mi primera participación en el Drarry Week (aunque creo que me salió más Harco, es igual ¿no?)
Bueno, nos leemos con el próximo Prompt.
::: (_( :* .¸¸.•Hana
*: (=' :') :* .¸¸.• Usagi
•.. (,(")(")¤°.¸¸.•´¯`» 23/03/2016
