Cap 1

Alquimista

Abrió los ojos, no veia más que nieve helada que lo tenia preso hasta los pies. tenía heridas abiertas tanto en su brazo izquierdo como en las piernas. Ardían. Le dolia el cuerpo ya que habia recibido fuertes golpes considerables que le habian entumecido el cuerpo, trató de levantarse pero tanto el cuerpo como la cabeza le martilleaban.

—A-Alphonse...— susurró en un hilo de voz echo una furia, cerró fuertemente su puño y frunció el ceño.
vió una silueta entre la neblina de una quimera que hiba hacia el. La cimera se inco frente a el y le sonrió —Me llamo Samantha, ya te lo eh dicho....— acaricio su rostro y movio sus peludas y grandes orejas de gato.

—nhn...te matare...— trató de mover su automail, pero no pasaba nada...volteo el rostro y se percato de que su automail no estaba. No, no se habia desvanecido, simplemente fue destruido y todas las piezas estaban esparcidas en todo el terreno — que demonios...— susurró y luego se quedo perplejo

—Edward...— la quimera acarició el labio partido del rubio y luego sonrió —es hora de matarte....— comenzó a deslizar su garra hacia su pecho, haciendole una herida hasta que llego a su corazon —algun ultimo deseo?.

—Que lo sueltes.

La quimera se sintió amenazada desde atrás, sabia que un arma ya estaba en su nuca lista para dispararle, tanto Edward como la quimera se quedaron perplejos, la quimera miró a Edward a los ojos esperando a que este dijiera el nombre de quien la amenazaba como si le conociera. Nada. eso significaba que hasta Edward se sintió amenazado por el arma que nisiquiera apuntaba hacia el —Quién-eres-tu?— La quimera sonrió despues de preguntar

—Yo soy, Violencia— Edward pudo ver una sonrisa de oreja a oreja mostrando colmillos amenazantes debajo de la gabardina que cubria a ''eso'' , solo se le veia la mitad del rostro, parecia ser una Ishballana.
No lo penso, y disparó a la quimera, ésta última sin nisiquiera haber tenido la oportunidad de quejarse o dar batalla cayó muerta sobre Edward, desangrandose.

— Jamás subestimes a una descendiente de Xerxes.

Lo que parecia ser una chica le quito la horrenda quimera de encima a Edward y la aventó por ahi en la nieve. Se quitó la gabardina repentinamente, el la miró al rostro. Esos ojos afilados no pertenecian a una Ishballana desde luego Su cabello era negro, largo y lacio. Su ojo izquierdo era de un carmesí amenazante, el derecho de un purpura oscuro y su piel era parecida al de los comunmente llamados ''Ishballitas'' ya que era morena.

— Quién...eres?...— preguntó Edward algo confundido, se alejó lo que pudo, pero su intento fue interrumpido por un árbol que se encontraba ahi, topó con el y miró a la chica

— Soy Jeriko Akatsuki...— Jeriko le sonrió y le extendió la mano — no te haré daño, si no para que te hubiera salvado?— en ese momento un enorme hombre apareció detras de Jeriko con un enorme martillo — CUIDADO!!!— exclamó Edward casi ronco, el martillo la golpeo en la cabeza, partiendola a la mitad horizontalmente. La otra mitad salio volando y cayó en la nieve.

Edward se quedo perplejo y comenzó a sudar frío, y mas por que vio que el cuerpo de la chica seguia moviendose.
De inmediato la cabeza de la chica se comenzo a regenerar de nuevo, cuando terminó de regenerarse escupió un poco de sangre y luego se torció el cuello — Diablos...— susurró —yo que queria permanecer oculto....— unos rayos la envolvieron y poco a poco se comenzó a transformar en otra persona.
Un chico de cabellos largos y verdosos, su piel palida y un tatuaje de uroboros en la pierna, desde luego sus ojos afilados seguian ahi.
— quimeras molestas— el chico golpeó a la quimera en el estomago con tanta fuerza que pudo sacarle las entrañas y dejarlo muerto en la nieve

— BASTARDO!!!!!— alguien comenzó a dispararle sin detenerse desde atrás, desde luego aquel ''fenomeno'' o como le quisieran llamar, no caia muerto.
Volteó y se encontró con la chica en la que se habia transformado

— SI TE VUELVES A HACER PASAR POR MI TEN POR SEGURO QUE TE PARTIRE LA CARA MALDITO!!!!!.
Los ojos del chico peliverde se centraron en ella y luego sonrió — Hey...agradeceme que no fue para mal.

— Envidia...— susurró Edward mientras se levantaba adolorido — Edward no me hables con ese tono, te eh salvado— Envidia sonrió amablemente y se puso las manos en la cintura.

Salvarme?...— cerro su puño izquierdo y luego miró a la fregona con patas — vete al carajo, MONSTRUO!!!— espetó echo una furia, trató de correr hacia Envidia pero solo logró debilitarse más y caer de rodillas al suelo, con una herida en su brazo izquierdo miró fijamente a Jeriko y luego cayó inconciente a la nieve.

— Está muerto?— preguntó Envidia confundido — no lo sé....demo...deberia llevarmelo....no?— respondió Jeriko algo nerviosa
— Maldita perra, me disparaste demasiadas veces, que te crees? que soy de plastico?, no me jodas, el que sea un homunculo no significa que sea inmortal, solo estoy echo para durar mucho. Su enojo se marcaba en los dobleces que hacian sus cejas y sus puños apretados.
— gomene....— Jeriko guardó su arma y luego se dirigió a Edward para tratar de cargarlo y llevarlo a un lugar seguro, pero era demasiado pesado para ella — dejamelo a mi, yo lo llevo— Envidia se levantó y se transformó en un militar, luego lo cargó

Jeriko vió como El disque militar se alejaba con Edward a lo lejos.
Echo un suspiro. dibujó una sonrisa en su rostro y dio media vuelta encontrandose con un perro tras ella

—Llegas tarde— alzó su pistola y la cargó de mas balas apuntando al animal, el animal esquivó lo antes posible las balas y estas fueron a parar en el pecho frio de otra quimera ''no pretendia pelear en este frio...''dijo casi con arrogancia la voz de un muchacho que resonó en la cabeza de Jeriko mientras esta disparaba sin detenerse a la Quimera que por fin cayó muerta en la nieve.

—BASTARDO!!!!— volvió a darse la vuelta y se encontró con un enorme hombre de piel grisacea, unos enormes dientes y colmillos salian de su boca y su piel parecia padecer de un caso grave de Lepra, pero no era así, simplemente que estar encerrado por varios años hace daño... ''pobre diablo...'' el perro salto a aquel hombre y como un zorro comenzo a escurrirse por entre sus piernas, luego por debajo de sus brazos hasta llegar a lo alto de su espalda y morder su cuello con tal fuerza que la sangre salió disparada salpicando el pelaje del animal y la nieve
—KEI APARTATE!!!— el animal saltó de la espalda del monstruo y salio corriendo, a esto Jeriko estiraba sus brazos hacia afuera...el monstruo se sostenia el cuello y miraba a Jeriko con hambre —te prometo que te sentiras mejor...— el retrato macabro de la quimera comenzaba a desvanecerse debido a la perdida de sangre.
Jeriko aprovecho la situacion y levanto los brazos, a unos metros sobre sus manos en el aire flotaban unas rocas enormes envueltas en llamas negras —sayoo!— sonriendo bajó bruscamente los brazos, con tal fuerza que cuando las rocas fueron a dar sobre el cuerpo del monstruo la nieve casi va a dar al cielo, ante esto Jeriko y Kei quedaron sepultados bajo la nieve pero en un instante salieron de ahi —AAAARHG!! HELADOO!!!!— exclamó temblorosa Jeriko ''ME PREGUNTO POR QUE!!!'' la voz de aquel muchacho que provenia del perro retumbo en la cabeza de Jeriko, salieron con dificultad de la nieve.
Kei sacudió su pelaje negro, pero despues sintió un malestar extraño ''ASCO!!'' comenzó a jadear, y haciendo sonidos extraños escupió un pedazo de piel de la quimera ''QUE DIABLOS!!?'' el animal se escondió entre las rocas rodeado por un aura oscura ''odio ser perroo!!!mis pulgares!!!ademas la comida de perro no sabe a nada!! extraño el papel sanitario! dormir en una camaa! no andar desnudo!!!un retretee!! no soltar cabello!!!'' exclamaba mientras se frikeaba (?)
—ya...— Jeriko comenzó a acariciar su lomo —tan pronto te ayude a regresar a Xing regresaras a tu estado normal...— sonrió levemente mientras acariciaba con ternura su cuello ''al menos tu me dejarias dormir en tu cama?...'' pregunto Kei mientras movia la cola —NI IDEA!!! DEJARIAS MI CAMA LLENA DE PULGAS!!!!— Lo pateo tan lejos que los ojos del perro se quedaron en blanco —ya...hay que regresar...— comenzó a caminar mientras el perro la seguia, algo cansados ya encontraron un poste amarrado a una cuerda, Jeriko sacó dos cinturones, uno se lo colocó en su cintura y el otro en la cintura del perro, de sus bolsillos sacó dos cuerdas de seguridad muy bien enrolladas. El extremo de la primera cuerda lo engancho a su cinturon y el otro extremo al mecate, hizo lo mismo con la otra cuerda pero con Kei, se sujetó del mecate y comenzó a caminar en direccion al mecate junto a Kei, el aire cada vez soplaba mas fuerte y los empujaba mas.
tiempo despues llegaron a un lugar rodeado de campamentos Militares, los cuales no eran simples tiendas de campaña, si no extensas (cuando digo extensas es extensas D8) propiedades de acero, habian muchas, el mecate de Jeriko acabó en otro poste, el cual no tenia un mecate, si no 7, Jeriko desengancho las cuerdas de seguridad y las engancho en la segunda, y siguieron su camino hasta llegar a una fria, sucia, oxidada y vieja puerta de acero, Jeriko tronó sus nudillos y comenzó a abrirla con fuerza, la abrió y rapidamente entró con Kei —CALOR!!!!!!— apenas entró se tiró en una silla y Kei azotó la puerta con una de sus patas traseras cerrandola —MALDITO!!PUDISTE HAERME AYUDADO!!!— comenzó a ahorcarlo estilo homero simpson —PEQUEÑO DEMONIO!!!!— el animal sollozaba, pero su acto inmaduro fue interrumpido por una voz firme conocida para ella —tu trajiste a Edward Elric a creta!?— en efecto, era Roy...
—DISCULPA!!? quien es ese!?— luego empujó al perro casi muerto, se levantó y se puso al nivel de Roy mustang —yo...—un susurro interrumpió su discusión, el mismo chico rubio de estatura baja que Envidia salvó era el mismisimo Edward Elric. Aquél al que Jeriko protegeria de ahi en adelante
—Edward Elric?...— Kei y Jeriko se quedaron perplejos

-flashback-
—Padre, en donde están los hermanos Elric?...ya me cansé de esperar— caminaba sobre un pavimento viejo, humedo y agrietado cubierto de manchas de sangre y agua de goteras. El lugar era oscuro y solo se veia una especie de trono a lo lejos sobre el cual se encontraba sentado un hombre cuyo rostro era misterioso ya que la luz no alcanzaba a alumbrarlo
—Ya los conocerás...— Bradley apareció tras ella impidiendo a Padre contestar —tienes una nueva misión en Creta.
—Y padre?
—Estará bien...tus hermanos le protegen a todo momento...
—Demo...en donde está Kei?...
—está recuperandose de los experimentos...

Jeriko volteó a todos lados tratando de buscarlo, y lo vió en una camilla casi desangrandose, su pelaje grisaceo teñido de rojo cada vez se veia mas obscuro
—la hemorragia no lo matará....además solo es un perro...no entiendo por que pides esto...
—no lo entenderías...


—Algun problema?...— Edward frunció el ceño, parecia estar enfadado con Jeriko, esta sin saberlo decidió preguntar —mas bien cual es tu problema...te salvé y no entiendo por que me hablas con ese tono altanero— Edward enfurecido golpeó la pared con su brazo izquierdo —POR QUE TE ENTROMETES EN LO QUE NO TE IMPORTA!!? POR QUE MATASTE A ESA QUIMERA!!!!!!? ERA LA UNICA FORMA DE LLEGAR A MI HERMANO NO TE DAS CUENTA!!?— en ese momento en la habitación todos se quedaron callados, esto comenzaba a molestar a Kei, era muy sensible a los gritos y se enfadaba con facilidad, mas cuando era a Jeriko a quien le hablaban con ese tono...tenia deseos de callar a Edward pero no podia debido a la presencia de mustang, asi que decidió acercarse a Jeriko y rascarla con su pata delantera en la pierna y cuando tuvo su atención apuntó con el hocico a Mustang, Jeriko entendió la indirecta
—Mustang nos dejaria solos un momento?...—
—Después de esto exigo una explicación...