¿DE DONDE VIENEN LOS BEBES?

Una pequeña cabeza con cabello rojizo se asomó desde la puerta corrediza que daba a la pequeña estancia de la sala y allí los vio. Su padre tomaba una taza de té y su madre doblaba la ropa mientras que hablaban de cosas triviales.

Era un día común en el Seireitei. Bueno, no tan común ya que los dos tenían día libre y estaba feliz por ello, así podía pasar más tiempo con sus padres. Y es que, al ser su papá un teniente y su mamá una capitana tenían responsabilidades pero nunca olvidándose de ella. Aun así hoy era el día, tenía esa duda rondando su cabeza y no iba a desperdiciar la oportunidad que se le presentaba.

Entrando como si nada dio unos cuantos pasos y poniéndose seria se dirigió hacia ellos.

-Mamá, papá… ¿De dónde vienen los bebés?

¿D-de dónde vienen?- Pensaron al mismo tiempo sorprendidos y paralizados.

Hubo un pequeño silencio, hasta que Rukia saliendo de su sorpresa le contestó rápidamente.

-No sé acerca de otros niños, pero en tu caso… Un día cuando lavaba ropa en el río… una enorme piña vino con la corriente.

-Entonces, llevé la gran piña a casa. Abrí la piña con mi zanpakuto. Había una bebé dentro, a la que llamamos Ichika.

-¡Si! ¡Esa bebé eras tú! - Con una cara de satisfacción Rukia acabó con su gran historia inclusive se la imaginó pensando ella misma que su pequeña hija estaría conforme.

Pero lo que no sabía es que Ichika no creía ni una sola palabra de su monologo.

No creo en esa historia. Era justamente lo que pensaba la pequeña pelirroja. Entonces estallo.

-¡No quiero una historia! ¡En serio quiero saber!- La pobre Rukia pensó en que se parecía a ella con tal arrebato.

Renji, que había estado callado se preguntaba cómo demonios a su hija se le ocurría preguntar tal cosa. No es que no quisieran hablar con ella sobre el tema. Pero… ¿Que no tenían que esperar un poco más? la niña tenía 6… Que le habrían dicho o que habría visto. Patearía al que se haya atrevido a pervertir la mente de su niña.

Decidió intervenir.

-¡Oh mamá! no lo entiendes… -Eso es lo que pasa cuando tratas de engañar a un niño.- Menciono Renji arrogante a su esposa.

- Si tienes una mejor explicación, ¡pues hazlo!

El teniente se preparó para enfrentar a su hija, sabía que era tan testaruda como ellos.

-Ichika, ¿conoces la ceremonia Shinto?

A la pequeña pelirroja le brillaron los ojos, su papá tenía más lógica, no es que su madre no la tuviera pero a veces era muy dramática. Negó con la cabeza.

-Es un ritual que se lleva a cabo cuando las persona se casan. El espíritu del bebé se mete en el estómago de la madre… Luego crece en su pancita para finalmente salir.

¡Eso es! Pensó la niña con emoción.

-¿Eh?

-¡Nada mal, Renji!- Lo felicito su esposa sorprendida.

Pensando que habían logrado su cometido y viendo que su pequeña hija se iba dando saltitos respiraron con alivio y cada quien se fue a hacer sus actividades del día en casa.

Dos días pasaron desde aquella pregunta y mientras Renji y Rukia se alistaban para ir a trabajar, una pequeña sombra los veía escondida desde el closet.

¡Lo sabré de una u otra manera! Se dijo a sí misma. Sabía que sus padres por alguna razón mentían. Así que saltando a la espalda de su padre sorprendiéndolo y colgándose de su cuello empezó a hablar.

-¡Oye papá! ¡Tú y mamá dijeron que no tuvieron una ceremonia Shinto!

-Aquí vamos… ¿Cómo hacerlo diferente del mundo de los humanos? Pensó el pelirrojo con desgano.

-Entonces, ¿Cómo es que los padres que no se casan tienen hijos? ¿Por qué? ¿Cómo nací?

Renji se ahogaba entre tanta pregunta. ¡Carambas! ¿Que no había quedado conforme con su explicación?

-Tu explicación solo complico las cosas… dijo Rukia con una mano en su cabeza.

Afortunadamente para ellos Byakuya apareció en su casa ya que se había ofrecido llevar a su sobrina a sus clases, así que con ayuda del shunpo aprovecharon su distracción para salir rápidamente del embrollo, no sin antes despedirse con la mano de su hija.

Byakuya enarco una ceja. Como siempre a su hermana y cuñado se les hacía tarde. Agarro la mano de su sobrina para salir pero vio que ella no se movía y…

-Tío Byakuya…

Continuara…

No crean que Renji y Rukia se salvaron jajaja ya les tocará hablar.

Aprovechando que ha estado lloviendo todo el día desde antier, me puse a escribir. Este pequeño fic (ya que constara d capítulos) nace al leer una parte del comic de Norabaku, es más, las partes que están remarcadas en negro son de dicho comic. Así que el crédito para ella. Lo demás es totalmente sacado de mi imaginación. Si hay algún problema en que use esos diálogos no duden en decírmelo.

¿Sera que Ichika le hará la pregunta a su tío? Si es así ¿Cuál será su reacción?... No tengo idea a los cuantos años los niños empiezan a preguntar sobre el tema xD o si en verdad preguntan sobre eso.

El segundo capítulo ya está en el horno, solo falta editarlo ;)