PRÓLOGO

BPOV

Hace 8 años.

-¡Bells ven aquí mira esta mariposa que bonita es!

-Ya voy Ana - resoplé , mi hermana era demasiado nerviosa ¡no paraba quieta ni un segundo! La había echado tanto de menos. La observaba jugar con las mariposas que había en este prado del bosque a las afueras de Seattle donde vinimos a pasar unos días con mis padres y celebrar que estaba curada,me reí internamente ¡Si supieran! respiré hondo el ligero aire otoñal que había, después de haber estado internada en un hospital 2 años esto era increíble.

-¡Ven a jugar conmigo Bells!- sonreí y fui hacia ella mientras recordaba el porque de mi internamiento.

Desde que puedo recordar he visto y sentido cosas que el resto no podía, mis padres no le dieron importancia cuando era pequeña que tuviera " amigos imaginarios" como le decía ellos pero conforme fui creciendo si se lo dieron, sobre todo cuando murió la abuela y cometí el error de decirle lo que ella me encargó antes de cuando me lo dijo. La abuela me avisó y por estúpida acabe internada por casi 2 años, supongo que se imaginaba lo que iba a pasar.

Bella cielo no quiero que os sintáis mal por mi marcha , yo iré a un lugar mejor. Solo despídeme de ellos, no tuve tiempo de hacerlo antes de irme y quiero que lo hagas tu por mi mi preciosa niña especial , solo te pido una cosa - me miró seriamente- no se lo digas hasta que hayas cumplido los 18 ¿de acuerdo?- asentí sin entender mucho de lo que decía - bien preciosa cuidaos mucho tu hermana y tu , os quiero y lo haré siempre- así desapareció de mi vista.

Los primeros días lo cumplí pero yo al ver a mi madre tan triste decidí darle su mensaje antes de tiempo para que se animara y no se sintiera tan mal y lo que hicieron fue internarme en un hospital con un diagnostico estúpido y lo achacaron a la muerte de mi abuela. Al principio me opuse a todo ese circo montado ¡No estaba loca! Solo era especial con me decía la abuela, la única que siempre me apoyó fue Ana, a pesar de ser gemelas ella no había adquirido mi don , solo yo podía sentir o ver cosas que el resto no podía. Cuando llevaba allí unos 2 meses conocí a mi salvador y ahora mejor amigo, si ya se imaginaran que no podréis verlo , se llama Eric , un joven de unos 20 años que fue internado allí hace mucho tiempo y murió a consecuencia de unos de su tratamientos experimentales, quise ayudarle pero me dijo que su misión era cuidar de mi ¡Por fin alguien que lo hace después de morir mi abuela! Me hice la normal con los médicos siguiendo el consejo de Eric y así conseguí el alta en mas de un año, cuando se aseguraron que estaba bien .Así que he pasado casi 2 años internada por nada y para salir he tenido que hacerme la "normal". Mis padres están muy contentos por este hecho , pero a mi me asquea tener que aparentar ser quien no soy porque me tomen por loca ¡Debí hacer caso a la abuela!

-¿Bells? ¿Que te pasa ?- Ana me miraba preocupada.

-Nada solo recordaba a la abuela- ella me sonrió y abrazó - la echo mucho de menos.

-Si yo también- miró alrededor- quiero que sepas que no tienes que fingir conmigo Bells- la miré sorprendida - yo sé que esas cosas que ves están ahí, aunque no pueda verlas la conexión que tenemos como hermanas me dicen que lo están - me volvió a abrazar- y no necesito verlo como tu para creerlo- se señaló el corazón con la mano- me lo dice el corazón que es el único que nunca miente.

-Gracias Ana- se me saltaron unas cuantas lagrimas- te lo agradezco pero quiero que quede entre nosotras, no quiero volver a ese lugar nunca mas ¡Era horrible!

-Claro tonta, yo tampoco quiero que te vayas- nos quedamos un rato abrazadas.

-¿Que hora es Ana? - ella miró su reloj de pulsera de las princesas disney.

-Casi la hora de comer- se levantó y me dio la mano para ayudarme a levantarme - ¡Vamos!

Nos adentramos por el bosque para volver a la cabaña de mis padres cuando lo vi, era un niño de nuestra edad mas o menos y sabía que Ana no podría verlo.

-Ana ven tengo que hablar con alguien- me miró extrañada mirando al frente y entonces al no ver nada sonrió, me dio la mano y vino sin rechistar conmigo. Cuando estuve lo bastante cerca le hablé.

-Hola ¿Estas perdido?- el me miró esperanzado.

-Puedes verme - agachó la cabeza- hace mucho que nadie me ve- cerró los ojos- esta tan oscuro y lúgubre ahí abajo.

-¿Donde estás? ¿Te perdistes y nadie te ha encontrado?- no contestó se dio la vuelta y lo seguimos.

Supuse que seria un pobre chico perdido que habría muerto sin darse cuenta sobre todo al pasar por el lugar que nos guiaba, era demasiado inaccesible pero cuando llegué al lugar, unos escalofríos me subieron por la espalda y pude ver que no era una casualidad.

-¿Que pasa Bells? - miró alrededor del lugar - no veo nada ¿Seguro que el chico esta aquí?

-No hay solo un chico Ana- volví a mirar contando por lo menos 20 personas si no había mas ¡Dios! Las había de todas las edades, razas y géneros. Todos señalaron el suelo donde estábamos de pie, al mirar vi tierra removida por todos los alrededores, unas llevaban mas tiempo y otras menos. Nada de vegetación había sobre el terreno algo raro en un bosque y una zona tan escondida.

-¿Como que no solo un chico? ¿Que quieres decir? ¿Cuantos hay?- estaba un poco alterada.

-Hay unas 20 personas Ana- la miré preocupada- hay que llamar a la policía, si hay tanta gente aquí debe haber un asesino cerca - ella se asustó.

-¿Que? - empezó a ponerse mas nerviosa mirando alrededor- ¿Como que un asesino?

-¡Vamos!- la cogí del brazo tirando de ella hacía la salida- te dejaré en casa y volveré con un policía sin decirles a mama y papa- se paró abruptamente.

-Bells, si quieren llevarte de nuevo les diré que vi lo mismo que tú- le sonreí- no creo que nos internen a ambas.

-Gracias Ana- la abracé- ¡Eres la mejor! Pero espero que no sea necesario.

Me dirigí al chico que había encontrado.

-Acompañame, iremos por la policía y nos guiaras de nuevo aquí, no sé si podré acordarme del camino para volver- asintió.

Llevé a Ana a casa y fui caminando hacia el pueblo que estaba a solo 15 minutos andando, llegué a la comisaria y pregunté por un oficial para que me pudiera ayudar.

-¡Buenas tardes necesito que me acompañe un oficial para ver unos cuerpos que hay en el bosque!- la mujer que había allí me miró consternada.

-¿Como que unos cuerpos? ¿Es esto una especie de broma señorita?- vaya con la estúpida señora.

-No señora es solo que he visto…- entonces apareció un señor mayor con cara mas amigable que la señora de enfrente mía.

-¿Que pasa aquí señora Cope ?- ella le hizo ojitos.

-Señor Cullen - puso una voz demasiado dulce- esta jovencita esta aquí diciendo barbaridades y solo quería que se fuera a su casa donde debería estar- la miré con furia.

-¡No digo barbaridades, sé que están allí! Hay muchos cuerpos, están enterrados en un lugar del bosque muy difícil de llegar y es mi deber llevarlos hasta ahí para que los encuentren y seguir su camino!- lo dije muy enojada, la señora me miró igual o mas pero el señor sonrió y se agachó a mi altura.

-¡Esta bien señora Cope , iremos el señor Macarty y yo contigo preciosa!- asentí ya mas sonriente ¡Menos mal que había alguien agradable aquí!

-Bien gracias.

-Iré a buscarlo, espera aquí un momento- asentí y el se fue dentro.

Esperé sentada justo enfrente de la fastidiosa mujer que me miraba de reojo con muy mala cara, ya empezaba a hacer frío y no había traído mi abrigo, entonces un chico mayor se acercó y me dio el suyo.

-¿Tienes frío pequeña?- asentí mirándolo fijamente ¡Era el chico mas guapo que había visto en mi vida! Era moreno de ojos azules y sonrisa agradable.

-Si… esto...gracias- no pude evitar olerlo intensamente cuando me lo dio, olía muy bien.

-¿Ya tienes todo Macarty? -vino el señor mayor junto a nosotros.

-¡Si señor cuando quiera podemos irnos!

-¡Vamos pequeña tu nos guiaras!- rodé los ojos, yo no podía recordarlo bien , mas bien lo haría el chico que se sentó a mi lado en el coche. A Eric no lo había visto todavía ¿Me preguntaba donde estaría? No sabía porque había veces que desaparecía.

Fui dándoles las indicaciones que me daba el chico y cuando llegamos a la parte escabrosa del lugar, hubo que seguir a pie, fueron unos 10 minutos en llegar al sitio exacto.

-¿Aquí es?- asentí - me miraron extrañados y luego alrededor- ¿Donde están los cuerpos?- preguntó Macarty y señalé el suelo como hacían todos los que estaban allí.

-¿Me estas diciendo que debajo de este suelo hay cadáveres?- asentí apenada ¡Solo esperaba que no me tomaran por loca como mis padres!

-Señor hay muchos altibajos por aquí y nada de vegetación ,tal vez debería ir por las palas al coche y excavar un poco tal vez podamos encontrar algo- le sonreí agradecida al joven.

-Si ve, yo hablaré con ella- me miraba muy fijamente y agaché la cabeza avergonzada de lo que pudiera decir. Cuando se fue se acercó a mi.

-¿Ves fantasmas verdad?- abrí los ojos mirándolo sorprendida y aterrada a la vez.

-¿Que? No… yo…- me levantó el mentón para que lo mirara a la cara.

-No te avergüences pequeña, cada uno es como es - suspiró- hace muchos años conocí a alguien como tu y todavía sigue en mi vida- se veía muy feliz y orgulloso hablando de esa persona.

-¿Quien es?- me sonrió a la vez que me pasaba el brazo por los hombros.

-Hoy es mi mujer y la madre de mis hijos, el día que la conocí era una chica asustada que buscaba un lugar donde encajar ya que en su propio hogar no lograba hacerlo.

-¿Y lo encontró?- asintió.

-Si lo hizo conmigo y no puedo estar mas que feliz de tenerla a mi lado- suspiré con tristeza ¡ojala yo tuviera a alguien así a mi lado, aunque por lo menos tenía a Ana.

-Mis padres no me creen, ellos me han tenido internada en un hospital casi 2 años por lo que veo- me apretó el abrazo- he tenido que hacer creer a los médicos que ya no veo nada para lograr salir.

-No les diremos nada no te preocupes , será nuestro secreto- le sonreí de vuelta y llego Macarty con las palas y empezaron a cavar. Yo me senté en un lugar alejado sobre una roca, aferrándome al abrigo de Macarty y oliendo su delicioso perfume.

-¡Oh dios señor debería ver esto!- el señor mayor se acercó al joven, miraron ambos donde excavaba y luego vino hacia mi- pequeña.

-Bella, señor- le sonreí.

-Bella puedes llamarme Carlile y el es Emmet - me sonrió de vuelta- ¿Cuantas personas dices que hay aquí?

-¿Las cuento?- asintió con una cara un poco desencajada.

Me puse a hacerlo y había 23 pero como había 3 mujeres embarazadas supongo que eran 26.

-¿Las mujeres embarazadas cuentas como una o como 2?- Emmet que se había acercado a nosotros se echó las manos a la cabeza y se alejó maldiciendo, Carlisle me acaricio la cabeza.

-Serian 2, pero para contar los cuerpos solo 1, así que dime cuantas personas y cuantas embarazadas.

-23 personas y 3 embarazadas - suspiré- puedo decirles los nombres si quieren para saber quienes son.

-¿Podrías hacer eso por nosotros?- le sonreí.

-¡Claro!- me dio una libreta y un boli y me alejé donde estaban congregados para ir apuntando a todos, también me decían del lugar que eran por si hacía falta también.

Cuando estaba terminando llegaron muchos mas policías y personas de bata blanca y se dispusieron a buscar por todos los alrededores, yo me acerqué a Carlisle y le di su libreta y el boli.

-Aquí están todos Carlisle ¿los van a encontrar a todos?- asintió-me alegro, así podrán irse a donde deben.

-Gracias a ti podrán descansar en paz, solo hace falta encontrar al que lo ha hecho y hacerle pagar por todos y cada uno de ellos - abrí los ojos asustada.

-Eso espero, no me gustaría encontrarme con el por la calle.

-Si no deberían haber personas como esa sueltas por ahí- me revolvió el pelo- pero lo cogeremos no te preocupes y ahora ven que te llevaré a casa ya que es muy tarde- asentí, pero antes me acerqué a Emmet para darle su abrigo.

-Ten… - al verme sonrió y negó.

-Soy Emmet y quédatela, a ti te hace mas falta que a mi- sonrió.

-Gracias Emmet… yo soy Serena - le sonreí y el lo hizo de vuelta ¡Era tan guapo!

-No hay de que preciosa.

-Adiós debo volver a casa- se acercó a mi dándome un beso en la mejilla que me encendió como un farolillo de Navidad.

-Eres una joven genial y el día de mañana podrías ser una policía genial también- le miré asombrada- nos vendría alguien como tu en el cuerpo, así resolveríamos los casos mas rápidos.

-Si puede que lo piense, gracias Emmet- me volví donde Carlisle que me llevó de vuelta al coche y de ahí a casa.

Mis padres salieron asustados al ver las luces del coche de policía.

-¡Oh Bella hija !- empezó a mirame por todos lados y darme besos- ¿Estas bien?

-Si mama, es solo que tenía que informar de algo a la policía y pensé que era mejor ir sola.

-¿Que? - miró a Carlisle- ¿Que quiere decir mi hija?

-Encontró un cuerpo en el bosque y fuimos a investigar- ¡Vaya mintió por mi! Le agradecí con la mirada y el me sonrió- y estamos en busca de más.

Mis padres abrieron los ojos de la impresión y me abrazaron mas fuerte.

-¿Quiere decir que podría haber un asesino loco por aquí?

-Bueno visto así , si o puede que ya se haya ido, ahora debemos hacer las investigaciones oportunas y ya veremos que pasa- asintieron, Carlisle se acercó a mi dándome un tarjeta con su nombre y teléfono- Bella tengo que irme pero quiero que sepas que cualquier cosa me llames ¿De acuerdo?- la cogí muy contenta, después del comentario de Emmet me había puesto a pensar y tal vez tuviera razón y ese fuera mi destino.

-Lo haré y gracias por todo- me dio un beso en la mejilla y se iba hacia el coche pero se volvió hacia mis padres.

-¡Tienen suerte de tener una hija tan increíble! Cuídenla mucho, nos veremos- se fue.

-¡Oh dios Bella ! ¿Seguro que estás bien? No quiero que justo cuando has salido del…- ¡Mierda! Tenía que salir antes que dijera algo fuera de lugar.

-Voy a comer y acostarme un rato mama, estoy cansada- si lo estaba de siempre lo mismo, entré y Ana me esperaba junto a la isla de la cocina para comer conmigo.

-¿Ya ha pasado todo?- asentí.

-Comamos, me daré una ducha y dormiré hasta que el cuerpo quiera.

Cenamos todos en familia de forma callada e incómoda, estaba segura que mis padres temían que volviera a ver fantasmas y tuvieran que internarme de nuevo por haber visto un muerto ¡Que ironía! Mi hermana se veía loca por pillarme a solas y hacerme una entrevista profunda de lo ocurrido.

-Yo ya he terminado, subiré a ducharme y dormir.

-Bien cielo ¿No quieres nada mas?- negué.

-¡Yo también me voy!- saltó Ana de repente - ¡Estoy tan cansada! - se hizo la cansada bostezando de forma exagerada y rodé los ojos.

-¡Esta bien acostaos ya mañana hablaremos!- ni pensarlo, no iba a volver con lo mismo.

Cuando llegamos arriba mientras preparaba mis cosas para ducharme Ana empezó con sus preguntas.

-¿Que paso Bells? ¿Encontraron algo? ¿te creyeron?

-Si Ana los deje allí, buscando al resto y me…

-Si me creyeron ¿irónico verdad? No me creen mis propios padres y lo hacen unos desconocidos- suspiré en cansancio.

-No te pongas así me tienes a mi- le sonreí.

-Si pero si quieren internarme de nuevo eso no ayudara mucho ¿no crees?- suspiró apenada.

-Ya pero no te llevarán de nuevo ¿ellos les han dicho algo? - negué – Bien entonces cambiando de tema es que ¡puede haber un asesino en serie suelto! Como en la películas- me miró asustada ¿No averiguara que tu ayudaste a cogerlo y vendrá a acabar con nosotras verdad?- suspiré.

-No Ana, nadie hablará de mi, simplemente la policía encontró una pista y los llevo allí , listo- me miró fijamente.

-¿De quien es esta chaqueta?- ¡Vaya ahora se daba cuenta! No había querido quitármela al entrar.

-Es de Emmet , un chico guapísimo y muy agradable que conocí hoy- me sonrió picara.

-¿Es tu novio?- abrí los ojos sorprendida.

-¿Que? ¡No! Era uno de los policías, es muy mayor para mi- suspiré con tristeza.

-¿Que edad tenía?- lo pensé unos segundos antes de contestar.

-Unos 20 calculo yo pero pueden ser mas - le quitó importancia con un gesto de su mano.

-¡Eso no es nada! ¿Que son 8 ,10 años? ¡Eso no será nada cuando tu tengas 20 Serena !

-Tal vez, pero ahora solo soy una niña de 12 años …

-Ya mismo cumplimos 13 - rodé los ojos quedaban todavía 5 meses.

-Si lo que sea, quiero vivir lo que me he perdido y después iré a a la universidad y estudiare para poder resolver crímenes como esos policías- ella me miró con la ceja alzada.

-¿Que? ¿Quieres trabajar pasando el día viendo muertos?- le entrecerré los ojos.

-Esa es mi vida Ana- agachó la mirada apenada.

-No quería decir eso Bells, es solo…- levanté la mano para que parara.

-Lo sé ahora dejame ducharme y dormir ¿Vale?- asintió.

-Bien te espero aquí , así podemos conversar hasta que te duermas..

Me tome mi tiempo bajo la ducha pensando en lo que dije, tal vez ese era mi destino, tenía buena intuición, podía ver a las victimas , saber lo que ocurrió . Cuando terminé me acosté junto a Ana que se había quedado dormida en mi cama esperándome, la tapé y me acurruqué con ella.

Antes de caer en manos de morfeo estuve sopesando todo lo relativo al tema de la policía y tome la decisión que marcaría y mejoraría mi vida para siempre.

URSU.