Disclaimer: Twilight NO me pertenece y esto es sin fin de lucro.

Necesidad

—Debo ir —aseguré entre susurros mientras sentía la mirada penetrante de Jasper en mi nuca.

—No deberías. No vuelvas a Forks, Alice —pidió colmado de desesperación.

—Seguro está muerta, quiero comprobarlo… por el bien de Edward y por el mío —objeté intranquila y tratando de hacer que me entendiera.

Me tomó de las manos y las juntó mientras que sus ojos ámbares con rebeldes rayos negros se posaban en los míos, haciéndome sentir cohibida.

—Le habías prometido a Edward que no la verías, estás quebrantando esa promesa y la que hicimos, Alice —habló con tristeza y rudeza mientras me apretaba las manos y fruncía el ceño.

—Lo sé… pero es mi deber, no podré vivir el resto de la eternidad si no lo confirmo —admití. Su rostro se relajó y esa fue suficiente 'excusa' para darme ese pase de salida que tanto deseaba, a pesar de que me iría por un tiempo de su lado.

—No me gusta la idea; pero tampoco podría vivir viéndote destrozada la eternidad —aseguró con la voz cargada de abatimiento.

—Estarás bien, Jasper —reconocí entre susurros mientras me soltaba de su agarre y posaba mi mano derecha en su mejilla, haciendo que él cerrara los ojos por instinto y tomara mi mano para después besarme los nudillos.

—Regresa cuanto antes —solicitó con aflicción y me soltó la mano. Asentí y me di media vuelta.

Caminé destrozada por los pasillos del aeropuerto mientras que sentía cómo él tenía su vista clavada en mi nuca. Quería que me acompañara, pero él no daba crédito a lo que hacía, aún así no podía meterlo en la maleta para que viajara conmigo en mi desolación; no lo iba a forzar.

A cada paso que daba sentía cómo su don hacía estragos en la gente y en mi persona, podía ver a gente discutiendo, enojadas, claro está. A gente triste y algunas hasta llorando, cosa que yo no podría hacer. También veía a personas desesperadas y algunas con desconsuelo. Todas esas emociones también revoloteaban en mi cuerpo.

Quería llorar, en definitiva, y aunque no pudiera, debía ser fuerte o llegaría peor a darle el pésame a Charlie.

Cuando llegué con la azafata —quien me pidió mi pasaporte— volteé a ver a Jasper: él estaba ahí, inmóvil en medio de la multitud, con sus ojos fijos en mí y su boca fruncida. Por un momento me hipnotizó aquella mirada y todo alrededor de mí se hizo borroso, los sonidos se distorsionaron; pero él se veía nítido y podía escuchar su falsa respiración claramente. Sentí cómo la azafata me tocaba el hombro para que reaccionara; la volteé a ver, saliendo de mi trance y me encaminé al avión.

Iba con mucha amargura y me sentía impotente. Primero: encontraría a Bella en su ataúd (un lugar que no sé a ciencia cierta cuándo habitaré), descansando en la caja que se acoplara a su medida, más pálida de lo que ya era y, realmente me golpearía comprobar que está en un lugar mejor que este y… segundo: Jasper no estaba a mi lado para hacer más amena la agria situación.

Sólo esperaba que él fuera fuerte por los dos y me perdonará por romper nuestra promesa… Lo necesitaría mucho más cuando regresara.

FIN

Awww… Ñaaam; esto lo hice para una amiga. Sinceramente espero les agrade. No sé, siento que a la idea le di muchas vueltas.

Se admiten golpes *reza

Saludos

Ale Whitlock