Hello Neighbors! Ops! sorry, hahaa es que no debi mezclar mi nativa habladura con PoM. Y... mejor de ahi ni le sigo. Anyway, he aqui con mi pequeño proyecto (y tal es es la primera vez que escribo sobre AT) y mas que, si se trata de una de las melosas pero hermosas parejas que he visto (al menos puedo masticar a la Dulce PRincesa por eso XDD, hahahah I'm kiddn' XDDD)

En fin, como este este es un three-shot, es decir por parte de un especial de Valentine (algo que nunca me gusto ese dia aunque lo malo... mejor no hablo de eso ._.) pero en fin, espero que les gusten o si no, pues si no les gustan tanto al menos me valio la pena hacerla, ya que se trata de mi pareja mas flameante y ardiente de todas (a excepcion que no llevara nada de eso, snif...)

Espero que te guste Andrea, (Anfernarusaku), aunque el principio es un asco, pero ya se dxe como va la trama :3

AT no me pertenece ni sus personajes, aunque la historia es de la originalidad del autor sin fines de lujo.

asi que basta de blah, blah, blah, hay que darle!


A veces, pensamos de que en una vida como esta no queda más que significar de un gran valor. El valor de apreciar las cosas que tenemos y no dejar que otras cosas en las que has apreciado y más si también no sea nada que ni siquiera te das cuenta de que no te aprecia lo suficiente y más si se arrepiente de lo que nunca siente.

O al menos eso es lo que piensa a aquel joven rubio que tiene puesto un gorrito de orejas de oso, con pintas de un gran héroe.

En estos momentos, a cada mañana mirada el resplandor del amanecer, preguntándose a sí mismo de lo mucho que se ha desperdiciado en que la Princesa Bonnibiel captara su atención, de que algún día ella se enamoraría de él, aunque no fuese mayor que él.

A cada intento para conquistarla, a cada intento de un asqueroso fracaso.

Y como el terco héroe no se daba por vencido, hasta que en un día de lluvia y más de sus negaciones y un extraño sentimiento de que la Princesa siempre se alejaba. Distante, como si esa luz nunca perteneciera. O es un mal destino que nunca debió entrarse.

Pero de pronto, las cosas empezaron a cambiarse cuando conoció a la chica más feroz y difícil de manejar, aunque fue por una metedura de pata por parte de Jake, su mejor amigo y mas como hermano mayor para Finn de conseguir un nuevo interés, a la que se convirtió en un lazo de amor: La Princesa Flama.

Ella, antes no sabía de cómo intentar explicarse, pero cuando cruzaron sus miradas en el momento de que la atrapo para no caer y mas que impidió destruir en el Reino de los Duendes y con una pequeña lágrima, las cosas entre estos chicos apenas comenzaran.

Sin embargo, no todos pudiesen desear en un deseo como este, no muchos.

Y cada día, el tiempo sigue contando a cada minuto de grano de arena.

Era un hermoso día para la Tierra prometedora de Ooo, un bello día después de una semana dura de lluvias intensa, que hacía que nuestro héroe le impidiera salir en busca de aventuras y más que otras cosas que le vendría en la mente. Como por ejemplo en busca de esa aquella doncella flameante que, sin duda, su ardiente belleza pudiera destruir la vista de aquellos príncipes, aunque temía por lo temible que ella es.

Dándose cuenta de que Jake no estaba en la casa (y eso que se había tardado mucho tiempo), decidió salir de la casa del árbol para ir en su búsqueda de su dama, no sin antes dejarle una nota primero.

Casa de Fuego, entre las montañas del valle.

Como siempre, a cada mañana, la Princesa de fuego entrenaba a dura fuerza para poder controlar su elemento, procurando en más de no dañar lo que la rodea o que está en una brutal furia que por lo menos no intentara en destruir el mundo entero. Sin embargo, al menos quería que Finn la ayudara, aunque ve que todavía pensaba que lo lastimaría poco a poco. Al menos no está sola, pues en el medio del lago estaba la reina vampiresa, Marceline. Tocando el bajo en forma de hacha una tonada, en cuando veía a la joven princesa entrenando.

Le parecía algo aburrido para ella, así que decidió hablar.

-¿Por qué propósito practicas? Aunque pensando que así pudiese en controlar tu poder.-

Con una mirada irritada, viendo como flotaba después de interrumpir de su entrenamiento y aun continuando tocando una suave melodía que, ni ella sabia como describía.

-Bueno, al menos no podrías ayudarme ¿o no? Ya que Finn ha tardado demasiado.

Notando que su mirada seguía triste, aun pensando que, desde ayer, Finn sufrió otra quemadura de tercer grado al tocarla y más que por más que se esfuerza ignorando el dolor, no podía ni negarle ese hecho.

Y más que su rostro mostro algo de interés.

-Veo de que, por lo tanto que te guste Finn, no puedes evitarlo más en no poder hacer nada por él, ¿no es así?- eso hizo que la heredera del reino del fuego se sonrojara tanto.

De tanto que se quería, aun seguía algo masoquista de que Finn guardase ese dolor cuando este lesionado por sus flamas.

-Al menos que…-

-¡Hey! ¡Princesa!-

No pudo continuar lo que iba a decir que el joven héroe venia todo corriendo y como siempre trayendo sus cosas y su pinta de aventurero, a excepción de que aun sus manos seguía vendadas.

Y más que el rostro de la Princesa seguía en el mismo tono, haciéndola brillar con fuerza.

-¿Marceline? ¿Qué haces aquí? –pregunto el rubio mirando a la vampiresa confundido.

-Ah, es como estaba algo aburrida, así que vine a ayudar a tu noviecita a entrenar. –lanzo un pequeño guiño, haciendo que los dos jóvenes se sonrojase entre sí. Aunque la princesa pensaba que fingió, solo por la que está aquí es para fastidiarla o al menos que no esté sola cuando Finn llegase.

-¿En serio? Y eso que no lo sabía. –y de ahí se acerco de nuevo a su princesa. Vestida de una playera sin mangas y un pantalón totalmente corto. Ambos no pararon de mirarse y eso la hacía brillar aun más. No sabía de la forma que el describía de lo hermosa que es, hasta que…

-Ejem, oigan, si siguen viéndose de esa manera, les chupare la sangre a ambos.

No pudieron controlarse de tanto mirar del uno al otro y solo se limitaron a riese.

La luz del atardecer llegaba y mas que los muchachos estaban exhaustos y cansados. Finn decidió darse una bañada en el lago mientras que las chicas platicaban desde lo alto.

-¿Día del Valentine?-

-Así es, amiga mía. Es un día en el cual cada año se celebra en el Reino Dulce, una celebración en el cual amigos regalaban a otros amigos en honor de la amistad, pero también es un día para los enamorados, en este caso tu y Finn… -y de nuevo volvió a entonarse, pero también se siente algo de confusión, ya que es la primera vez que escucha algo nuevo para eso. –Entiendo de que sea algo nuevo para ti, pero para Finn es la primera vez que se lo celebra con alguien que al menos, que sienta lo mismo que el.

La joven peliflameada miro de nuevo a la vampiresa, confundida.

-¿Por qué dices eso?

-Porque, antes de conocerte, el intentaba que Bonnibiel fuese su compañera, pero como ella siempre lo rechazaba debido que solo le importa de sus estúpidos inventos científicos y más de que sea la anfitriona de ese tonto festival. El nunca va, aunque solo organiza una fiesta en el árbol con Jake, yo y los demás amigos del valle.

Confesiones dolorosas, solo mostrando una faceta de rabia hacia la princesa del Reino Dulce, pero también en una tristeza de que, el joven que ha intentado destruir, al que le robo la primera mirada cuando se encontraron y más cuando se declaro como alguien especial para él, aun estando que soportar a cada quemadura que recibía. Él no merecía un trato así, no lo soportaba. Pero aun así es un aventurero y un héroe proclamado que salva a los que más necesita. Pero aun así es un héroe, su héroe.

Marceline miraba el rostro de la Princesa. Nunca hubiese visto ese rostro que no solo se limitaba al no poder ser nada por su amigo y más que, de tanto dolor que tuvo que aguantar, no pudiese controlar.

Así que su mente tuvo una idea.

-¿Qué te parece si le organizas una cena romántica? –dejo de pensar en un momento y escucho a la idea de la vampiresa. –Es decir, en estos alrededores del valle se lanzara los cohetes desde el Reino Dulce y a simple vista de donde estamos. Así de esa forma le demostraras de lo importante que eres para Finn. Bueno, al menos así no se sentirá solo, ya que el festival es a casi de una semana.

No pudiera creer de lo que escucha. Es una única oportunidad que no pudiese dejar. Al menos de que la Princesa también es su primera vez que lo festeja y mas que ha estado más de medio mes desde que se escapo del Reino del Fuego y que viviera al lado de sus únicas compañías y claro, también está la reina vampiresa.

-Oye, no es tan mala idea. Si tú dices que los fuegos de chispas se vieran de esta vista, al menos por que no. Pero, ¿Cómo podría en hacer algo como eso? Es más, ni siquiera sé si eso funcionara.

-Funcionara, créeme. Y eso que, como es la primera vez que lo festejan juntos, yo te ayudo a realizarla y es más, podría en compositor una canción para ustedes.

-¿En serio lo harías? –los ojos de la princesa empezaron de brillar por múltiple.

-¡Claro! Es más, como me caes súper bien y ya que eres su novia, es lo más que puedo hacer.

Mostrando de las más hermosas sonrisas de todo el reino, la amistad entre ellas y aun así, algo como el amor es una arma tan fuerte que no se puede romper. Tanto como Flama y para Finn, una noche de la luz cambiaria sus vidas para siempre.

O es que, no habrá algo en peor si las cosas no resultasen como fuesen.


Como dije, creo que al principio salio un poco de... ugh! pero al menos hago lo mejor que puedo.

Se que debi subirlo esto ayer, pero como estaba totalmente enferma, y no pude, asi que tratare escribir hoy la segunda parte y creo que, antes del dia mencionado, podria la ultima parte, espero que lo haya disfrutado, pero aun asi hay trabajo que hacer.

PS: y si al menos hubiese otro fan de los pinguinos tanto como yo (en serio, tengo que ir a Pinguinescos Anonimos para una cura XDD) visiten de mis otros proyectos, al menos podria valer la pena de dar un vistazo que otra parte y mientras tanto que hay celebrar todo ese dia de melosos y acaramelados raices (en serio, me da gargaras que ni se como soportarlas XD)

Nos vemos en otro momento XD