Yo queriendo hacer algo corto y termine explayándome de más, si me pase de lo que debía pido disculpas u.u, pero escribir de ellas ─solas─ fue divertido, claro que el toque de Gruvia al final fue algo que no me pude resistir de poner xD. Lo siento y disfrutad de la lectura.

Disclaimer: Fairy Tail no me pertenece, es propiedad de Hiro Mashima. Este conjunto de drabbles participa en el reto Maratón de Brotps del foro: Cannon Island.

A pesar de la tormenta, condujo hasta su casa sin importarle que su licencia no fuera usable aún, que importaban las leyes, ella la necesitaba. Aparcó su auto frente a su casa, vestida en pijamas corrió hasta la puerta y tocó reiteradas veces el timbre, al tercer llamado la puerta fue abierta y una joven se asomó.

— ¿Erza-san? —preguntó soñolienta e incrédula, su amiga no esperó más y se adentró a la casa ante la mirada confundida de la dueña.

—Debiste avisarme antes —reprochó con una mirada seria, no estaba molesta pero sí preocupada —, en tu estado podría ocurrirte algo malo —siguió con su sermón, la chica agachó la cabeza como si estuviera siendo regañada por su madre ─aunque era parecido─.

—Juvia lo siente, no quería molestar a Erza-san… —dijo y a eso le continuó un estornudo, su nariz estaba roja y su voz ronca, obviamente tenía un pequeño resfriado.

—Iré por algunas cosas a mi auto —anunció, la chica iba a replicar pero la interrumpió —, traje sopa y una manta y me voy a quedar mientras me necesites —calló, supo que discutir era innecesario. Contra la inminente derrota solo volvió a estornudar. En un pestañeo la pelirroja ya había regresado.

—Vamos adentro, acá hace frío y no quiero que te dé fiebre —la siguió en silencio a su recamara, era consciente de que su amiga le pediría que le dijera todo así no lo quisiera, no quería causarle problemas. Pero cuando vio su mirada no evitó quebrarse en llanto y lanzarse a sus brazos.

— ¡Juvia lo siente! Sabe que Gray-sama y Natsu-san no lo hicieron con mala intención y por eso no dijo nada —hipó mientras ella sobaba su espalda planeando una muerte dolorosa para esos dos — Natsu-san se disculpó pero Gray-sama no, Juvia pensó que se enojó y no quiso molestarlo, Juvia no quiere que Erza-san pelee con ellos por su culpa porque… realmente los amas, ¿verdad? —alzó su rostro para secar sus lágrimas con los pulgares, luego le sonrió con una dulzura que no mostraba a menudo.

—Eres demasiado buena, sobre todo con el idiota de Gray —parecía un regaño aunque no luciera molesta —; son como los hermanos que nunca tuve, pero eso no quita el hecho de que lo que hicieron estuvo mal —iba a continuar cuando sonó el timbre, la pelirroja se levantó a atender, cuando abrió la puerta se quedó pasmada.

En frente de ella estaba nada más y nada menos que Gray, mojado por supuesto, con las mejillas sonrosadas y escondiendo algo detrás de su espalda, supuso que era un peluche o un ramo de flores.

—Bueno… —no la miraba, pensó que tal vez él creía que tenía delante a la peliazul — Lo siento —dijo a la par que extendía un peluche de un conejo azul agachando la cabeza avergonzado y ella, esbozó una gran sonrisa que él no podía ver.

Tal vez pueda perdonar al pelinegro por la broma hecha ─accidentalmente─ a su casi hermana.

Ojala pudiera ir más lejos pero no, siendo algo tan pequeño y con la inspiración a flote no podía dejarlo pasar, creo que tendré un poco más de tiempo libre ahora, eso sí, si es que no me consumen los concursos xD. ¡Gracias por leer y nos vemos!