¿Yo soy tú?, ¿Y tú eres yo?

La mañana despertaba lentamente en Konoha. Los pájaros dejaban escuchar su hermoso cantar, comenzaba a soplar la cálida brisa mañanera y los claros rayos de sol avanzaban hasta cruzar las finas cortinas de cierta casa, dejando asi percibir los rosas cabellos de Sasuke Uchiha...

-Disculpa... ¿Cómo que rosas?

Dejando atrás el comentarios del pelirrosa, continuemos avanzando por la ciudad, y detengámonos de nuevo en otra casa, no, más bien mansión, y observemos como Sakura Haruno abre perezosamente sus negros ojos..

-¿Perdona?

Se hace el silencio, cortado rápidamente por dos escandalosos gritos, que sonaron al unísono

-¿PERO QUE DEMONIOOS....?

Efectivamente, dos gritos: uno agudo, proveniente de la garganta de Sasuke, y otro grave, procedente de Sakura.