DESCUBRIENDO EL PLACER DEL AMOR R/H G/H (HOT)
por Agata Camil Espero que les guste, es mi primer fic, espero me dejen muchos Post
Agata
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Bueno antes que nada este Fic no es mió, como podrán darse cuenta.. Este fic esta incompleto la autora abandono la Web ademas del fic, asi que no se molesten si se quedan con ganas de mas historia, yo estoy igual jeje..
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DESCUBRIENDO EL PLACER DEL AMOR
Muy a su pesar los tres amigos habían regresado una vez más a Hogwarts, lo harían por corto tiempo hasta emprender el viaje en busca de Voldemort. Ron se encontraba en su cuarto del colegio solo, se preparaba para la cena. Este último verano su cabeza estaba hecha un pandemonio de pensamientos, por un lado estaba la ayuda que debía brindarle a Harry, por otro Hermione.
No lograba sacarla de su cabeza. Se miro en el espejo y noto con una sonrisa en los labios que su cuerpo había cambiado mucho, ya no era un niño, hacía bastante que notaba este cambio, sobre todo desde que había descubierto los placeres increíbles que le proporcionaba acariciarse. Por momentos sentía culpa y vergüenza de lo que hacía, pero en otros sus deseos eran tantos que no podía evitarlo.
La mayoría de las veces que conseguía estar solo con el mismo, su cabeza volaba imaginando a la castaña, siempre ocurría lo mismo en sus pensamientos, primero la besaba, le confesaba su amor, luego esa dulzura desaparecía mientras imaginaba que la desnudaba, la besaba y recorría su cuerpo con sus blancas manos. Ron descubrió aquello cuando tenía 14 años, fue por casualidad.
Estaba solo en su cuarto de la madriguera y se despertó excitado, al comienzo esa dureza le molestaba, no lo entendía del todo bien, en esa oportunidad había tocado su miembro sin saber lo que hacía, al rozarlo con sus manos sintió algo increíble, por instinto y en silencio siguió acariciándolo hasta que todo culmino en un gemido ahogado. En aquella oportunidad se sintió avergonzado sin saber el motivo, auque estaba solo en su cuarto, sus mejillas se pusieron casi tan coloradas como su cabello.
El tiempo fue pasando y trato de no acariciarse de esa forma pensando que estaba mal, muy mal. Fue su hermano Fred quien le dijo que eso no estaba mal, que era algo normal. Cuando tenia 15 años se encontraba en el baño de su casa, había entrado en él para darse un baño, bajo el agua por alguna razón que desconocía recordó a su pequeña amiga, fue inevitable que su miembro se excitara, a pesar de que sentía que eso estaba mal no pudo evitar continuar y acariciarse sin miramientos, estaba en lo mejor cuando Fred llamo a la puerta..
-..Ya va..-Había contestado con un gemido ahogado.
Ese día el gemelo lo espero en la puerta del baño, el pelirrojo salió del cuarto de mal humor por haber sido interrumpido, Fred lo llevo hasta su habitación y le pregunto que hacía en la baño, le costo bastante al gemelo sacarle la verdad a su hermano, cuando por fin este confesó, Fred le dijo que no diría nada, pero que no debía avergonzarse, que era un acto natural. De igual manera el joven se contenía para no hacerlo seguido.
Se termino de vestir para la cena, salio de su cuarto pasando por el retrato de la dama gorda, cuando llego al gran salón vio que Harry miraba a Ginny con la vista fija, se sentó junto a él y le pregunto por la castaña,
-..No se..-Respondió su amigo.
La ausencia de la chica lo preocupo y salió a buscarla, recorrió casi todo el castillo hasta que llego al baño de los prefectos, la llamo desde la entrada pero nadie respondió, vio la pileta llena de agua y se asomo, lo que vio lo impresiono, la chica estaba nadando bajo el agua, por eso no lo había escuchado, vio a través del agua cristalina la figura inquietante de la joven, trato de huir antes de ser visto, cuando estaba llegando a la puerta la chica saco la cabeza a la superficie y lo vio de espaldas..
-..¡Ron!..-Grito la chica.
Él se giro y pudo verla, su cabello estaba mojado y sus hombros húmedos brillaban a la luz.
-..¿Que haces aquí?..-Pregunto la chica..
El chico bajo la vista tan avergonzado que de su garganta en lugar de vos salio un susurro.
-..No te vi en el comedor y vine a buscarte, llame antes de entrar, pero no respondiste, y bueno, entre...
La castaña estaba ruborizada, lo único que podía vérsele desde donde estaba Ron eran los hombros y su rostro. Él seguía con la cabeza baja.
-..No estoy desnuda tonto, puedes mirarme...
El pelirrojo levanto la cabeza lentamente y la vio salir del agua con una maya enteriza, aquella imagen lo dejo sin habla, sin decir nada pego la vuelta y salio corriendo dejando a la chica sola.
Salio a toda velocidad por el pasillo, estaba acongojado, no podía creer lo que había visto, bueno ella no estaba desnuda pero era lo mas cercano a estarlo..
-..Es tan bella, tan perfecta..-Pensó.
Se paro en la mitad un pasillo y tomo aire, la quería, él sabia que la quería, la quería con toda el alma. Siempre la había querido, primero como amigos y luego la quería con la inocencia de sus primeros años de juventud, ahora todo era diferente, además de quererla, la deseaba, la deseaba con todo su corazón. Llego hasta el gran comedor y se sentó junto a su amigo.
-..¿La encontraste?..-Pregunto Harry..
-..No..-Mintió el chico, no sabía por que lo hacía, pero le mintió.
No quería compartir eso con su amigo, no en ese momento. Rato después la castaña llego al gran comedor con el cabello húmedo. Se sentó justo en frente de Ron, sin querer cada tanto él la miraba, trataba de no hacerlo pero sus ojos se iban solos hacia la chica, Harry noto que su amigo miraba a la castaña y no pudo evitar sonreír.
Luego de la cena todos partieron a la sala común, una ves allí, el pelirrojo dio las buenas noches y se marcho su cuarto, se tiro vestido en la cama, su moreno amigo lo siguió.
-..¿Que pasa Ron?-Harry.
-..Nada.-Dijo Ron
-..¿Es Hermione verdad?
-..¿Que dices?, Déjame quiero estar solo.
Se levanto de la cama y salio de la habitación circular, cuando llego a la sala común paso al lado de la castaña, sin querer rozó su mano en el cuerpo de ella, el chico la miro horrorizado, se giro y salio por el retrato. Hermione lo siguió por el corredor, el chico caminaba velozmente, finalmente lo alcanzo tomándolo del brazo, no le quedo más remedio que girarse y mirarla.
-..¿Que te pasa Ron?
El chico aparto su brazo de ella.
-..Nada déjame..
-..Pero dime, puedo ayudarte, puedes confiar en mí, ¿que pasa?
-..Nada, no me pasa nada, déjame en paz y no seas tan pesada.
Dejo a la pobre chica parada sola en la penumbra del pasillo, ella se sintió tan mal que regreso a la sala común y sin saludar a nadie subió por las escaleras y se tumbo en la cama. Por su parte el pelirrojo subía por las movedizas escaleras y llego hasta el séptimo piso, paso tres veces por la pared hasta que la puerta apareció, dentro de la sala multipropósitos había una cama y una jarra de jugo, al fondo un gran baño con una gran bañadera.
-..Era justo lo que necesitaba..-Se dijo..
Se denudo y lleno la bañera con agua, se metió dentro, el agua lo abrigo, apoyo su espalda en el respaldo de la blanca tina y hecho su cabeza hacia atrás, al cerrar los ojos la imagen de la castaña nadado en el agua se apodero de el, recordó la figura de la chica al salir del agua, apretó los ojos para no ver más esa imagen..
-..Piensa en otra cosa..-Se dijo, pero no podía ella seguía ahí, en su mente, su cuerpo se erizo, imagino que la besaba, que acariciaba su bello rostro, pero no era suficiente, su mente se la mostraba desnuda, se imagino que aquella joven se le entregaba de cuerpo y alma..-..No puedo..-Pensó..-..Es mi amiga..-Repetía.
Era inevitable, su cuerpo le pedía a gritos saciar su sed, se toco su miembro viril, estaba erecto, no quería hacerlo, no quería pensar en ella de esa forma, el deseo fue más fuerte, apoyo su mano derecha en su pecho, la bajo lentamente acariciando su estomago, su vientre, finalmente llego hasta su virilidad, con pudor y vergüenza, lo acaricio, una corriente eléctrica le recorrió las entrañas, solo en aquel cuarto, se entrego a su deseo, la veía claramente en su mente, ella lo besaba frenéticamente, le decía que estaba loca por el, se imaginaba que le basaba las partes mas recónditas de su cuerpo, no reprimió ni uno solo de sus gemidos, con gritos ahogados, termino su lujuria.
