Notas: ni Inuyasha o sus personajes me pertenecen, son obra de Rumiko Takahashi.

No es como parece

Prologo

Desde hace miles de años, más atrás de lo que muchos son capaces de recordar, los yokai se han enfrentado entre sí en su búsquedas por poder, ajenos a los humanos y sus problemas "mínimos" ante sus ojos.

Las reglas eran simples, solo aquellos más aptos serian capaces de liderar, mientras el resto debía someterse y tragarse sus ambiciones junto a su orgullo, por el bien de todos.

Uno de los más grandes líderes de la historia, fue alguien reconocido como Inu no Taisho, el mayor señor de las tierras del Oeste, que por varios siglos había sabido mantener su puesto de la forma más honorable jamás antes vista. El no era como "uno más del montón".

Su poder era grande, así como su honor y…su corazón. Y fue debido a esto último, que nunca faltaron aquellos que parecían insatisfechos con el arriba y trataron de derrocarlo.

Jamás lo lograron…seria otro, quien sería el que lo arrastraría hacia su muerte, pero esa historia ya todos lo sabían…

Pero…lo que nadie más sabia era que uno de sus más fieros enemigos planeaba regresar y cobrar su venganza, sin importar que su antiguo rival ya no existiera…para este ser, mientras la sucia sangre del general caminara por este mundo, jamás estaría satisfecho…

Confiaba en que nadie podría detenerlo esta vez….especialmente teniendo en cuenta que nadie lo vería venir….

…o eso creía.

Muy lejos de los infiernos donde aun seguía atrapado, había alguien. O mejor dicho, un par que si lo esperaba.

Llevaban siglos atentos y preparándose para el regreso de aquel terrible enemigo, ultimando hasta el más mínimo detalle para que nadie inesperado sucediera.

Allí, en medio de una vacía oscuridad, un ser sintió el infierno temblar, como un aviso hacia lo no muy lejano que se acercaba.

Sonrió.

Con que….ya es hora….

Hizo un gesto de fastidio preguntándose con que excusa iba a lograr convencer a su "señor" que regresaran a aquella aldea. No tenia caso hacer nada si "todos" no estaban enterados sobre lo que sucedía.

Oh…pero ella siempre es útil para esto….

Rio recordando a cierta niña humana de gentil sonrisa aunque…quizás ya no era justo llamarla "niña" en la actualidad.

Tranquilamente dejo a un lado sus pensamientos al oír a alguien acercarse. Al parecer su "nuevo" kohai también se había percatado de lo que sintió.

Eso lo alegro un poco, significaba que ya se estaba acostumbrando totalmente a sus instintos y obligaciones.

Eso era perfecto, odiaría estar de niñera en un futuro tan errático como el que les esperaba a partir de ahora.

_...sentiste eso…?-escucho aquella voz a su espalda.-…hay que avisarle al amo…

No volteo a verlo pero sonrió respirando hondo con una calma casi envidiable.

_descuida…yo me encargare de eso….-aseguro con parsimonia.

_pero…

_Bakusaiga…te preocupas demasiado….-mascullo con fastidio, logrando que su acompañante se callara.

Jamás debían dudar de su facilidad de convencimiento, por algo había llegado tan lejos como hasta ahora, no?

Al mismo tiempo, mientras terminaba su recorrido de rutina, el dai yokai que había heredado el puesto de aquel general tan formidable se detenía de golpe, asustando un poco al renacuajo que lo acompañaba.

_waa! S-sucede algo, amo bonito?! –pregunto apresuradamente, notando el ceño fruncido de su señor.

Le era tan extraño. Luego de tantos años finalmente….Tenseiga estaba palpitando violentamente.

Cerró los ojos un momento, sintiendo el hedor a muerte en el ambiente, como amenazante de un terrible enemigo acercándose lentamente.

Gruño por lo bajo volteando en sus talones apresuradamente. Ese aroma….se dirigía a un lugar en especifico.

_a-amo! A donde vamos?!-chillo el pequeño demonio aferrándose a su estola, en un intento desesperado para no ser dejado atrás.

Su señor simplemente apresuro la velocidad mascullando algo inentendible.

Debía ir por Rin cuanto antes.

Muy lejos allí, en una aldea de humanos muy cercana al pozo de huesos; cierto hanyo también noto esa extraña y pesada sensación, pero no le dio tanta importancia como debería. Aunque no negaría que sentía a tessaiga algo inquieta.

Mucho más adelante, cuando viera a Totosai acercarse presuroso a su hogar sabría que quizás no debió hacer eso.

El milagro no sucederá….y ellos nunca ganaran…

Notas finales: hola! Este es mi primer trabajo con este fandom, espero que les haya gustado owo

Debo advertir desde ya que todo esto se manejara como después del final del manga (así que si no has visto el final real de la serie, en kanketsu-hen, aviso que te arriesgas a ciertos spoiler)

Por otra parte, quienes ya lo hayan visto, quizás ya tengan una pista de quienes habían conversado antes de la aparición de Seshoumaru en la trama.

Espero les haya gustado! Review?