Era primero de marzo. Cumpleaños de Ronald. Aunque en ese momento estábamos enojados con el otro -por culpa de la odiosa de Lavender Brown, pensé- le había comprado un pequeño regalo. Un adorno en miniatura de los Chuddley Cannons, su equipo favorito de Quidditch.
Iba a buscar a Harry, para pedirle que le dejara el ya envuelto regalo en su cama. No me atrevía a dárselo personalmente.
Pero Harry me encontró antes. Venía corriendo hacia mí, pálido como un fantasma. Como si alguien hubiera muerto o algo similar.
"Her... Hermione" dijo tomando aire.
"¿Harry? ¿Estás bien?"
"Sí" Dijo recuperando el aire "Pero Ron..." agregó con preocupación
"¿Qué le pasó a Ron?" Pregunté algo angustiada. Por la cara que traía mi amigo, no podía ser nada bueno.
"Fue envenenado. Está en la enfermería" sentenció con tono sombrío. No había terminado de decirlo cuando yo había salido corriendo hacia el lugar mencionado, guardando el pequeño presente entre mi ropa. Al llegar de inmediato lo vi, inconsciente y más pálido de lo que estaba Harry cuando me avisó. De inmediato me acerqué a su cama, muy preocupada. Sin embargo, de repente escuché una voz -más bien un chillido- muy familiar, y solo pude arrugar el gesto
"¿Dónde está mi Won-Won?" Dijo Lavender, reparando en mí e imitando mi gesto. Aún no sabía como no nos habíamos matado con la mirada la una a la otra. "¿Y qué hace ella aquí?" agregó de manera despectiva, aun mirándome.
"¿Yo qué hago aquí? Puedo preguntar eso de ti" antes de que pudiera notar lo que había dicho, ella respondió:
"Yo, resulta que soy su novia"
"Y yo, resulta que soy su" iba a imitar su respuesta, recordando mis fantasías en las que Ron me pedía que fuéramos novios, pero no eran más que eso, fantasías. Ron jamás se interesaría en alguien como yo. "Amiga" dije para no quedar más humillada de lo que ya estaba en mi interior.
"¿Amiga? No le has hablado en semanas, pero como ahora se volvió Interesante..." Si no le hablaba es por ti, perra, pensé.
"¡Fue envenenado! Si crees que es interesante..." fui interrumpida nuevamente, pero esta vez, por unos gemidos incomprensibles por parte del pelirrojo
"¿Ven? Won-Won siente mi presencia" casi vomito al escuchar a Lavender decir eso. Pero unos gemidos más fuertes, esta vez algo más entendibles, me tomaron por sorpresa.
"Her... Hermione..." Me acerqué más a mi amigo y acaricié su mano, como para decirle que estaba ahí. Observé de reojo como Lavender salía corriendo, llorando sin decir palabra, y sonreí en mi interior, sin dejar de acariciar la mano de Ron, mientras él seguía repitiendo mi nombre. Luego escuché al profesor Dumbledore decir algo sobre el amor, y bajé la mirada para que los demás presentes no observaran mi sonrojo. Aproveché ese momento para observar el rostro de mi pelirrojo. ¿Mí? ¡Hermione, deja de fantasear! ¡Él sólo dijo tu nombre! Además, está con Lavender… O estaba. Sonreí por mi último pensamiento, para luego levantar la cabeza y percatarme de que todos –hasta la señora Pomfrey, la enfermera- Se habían ido, dejándome sola con un inconsciente pelirrojo del que lastimosamente me había enamorado. ¿Por qué lastimosamente? Porque él jamás le haría caso a una sabelotodo insufrible como yo ¿O sí?
