Disclaimer: nada de esto me pertenece... y, después de este fic, dudo que Rowling lo quiera de vuelta.
Notas: sí, sé que debería subir cosas "serias" (El Experimento y Swich y Tiembla, mundo, tiembla), pero estoy vaga. Y esto me estuvo dando vueltas en la cabeza, y, oye, siempre está bien probar cosas nuevas, ¿no? A lo que íbamos: a ver si os gusta.
Por cierto (reviews), ¿sabéis (reviews) qué es eso (reviews) de la publicidad subliminal (reviews)? Consiste (reviews) en poner imágenes (reviews) entre otras (reviews) de forma repetitiva (reviews), de manera que el ojo (reviews) no sea consciente (reviews) de que las capta (reviews) pero se queden (reviews) almacenadas (reviews) en el cerebro.
O algo así.
Revelaciones
(o lo maravilloso que es estar en familia)
-Parte I-
La gárgola se apartó enseguida una vez la contraseña - "Varitas de caramelo"- hubo salido de sus labios. Harry se precipitó escaleras arriba, sin esperar siquiera a que la magia surtiera efecto.
Llegó al despacho del director sin aliento, hecho polvo; pero la carta del anciano tenía ese tono urgente, cuando la recibió en mitad del desayuno, y Harry ya había aprendido, a esas alturas, lo que significa en realidad la urgencia. Así que entró sin más dilación, sin molestarse siquiera en llamar a la puerta; dentro le esperaba una sala atiborrada de gente, amigos y no-tan-amigos mezclados, sentados en sillas alrededor del escritorio del director.
Albus Dumbledore le dirigió una sonrisa y un guiño.
"Ah, Harry", dijo, "bienvenido. Ya estábamos impacientes"
Por la cara de ciertos individuos -Malfoy, por ejemplo, o Snape-, Harry dudó mucho que esa definición pudiera aplicarse a todos.
"¡Harry!" De pronto, el muchacho se vio envuelto en un abrazo casi paternal -vamos: espachurrante- que no tuvo más remedio que devolver con todas sus fuerzas. A saber qué hacía Sirius Black, alias Canuto, alias Hocicos, en Hogwarts; cosas de la vida.
"Hola, Harry" Y sí, también estaban allí, cómo no, Remus Lupin, licántropo residente, y Hagrid y Hedwig y Dobby y McGonnagall y los ya mencionados Draco Malfoy y Snape, y, claro está, Voldemort.
Un momento. ¿Voldemort?
En fin, la cosa es que, entre el abrazo casi que demasiado fuerte y la falta de aliento -el quidditch tampoco te deja tan en forma como para subir corriendo escaleras, no os vayáis a creer-, Harry no vio a nada ni a nadie -o no quiso verlo.
"Bueno, muchacho, lo mejor será que te sientes para esto. Va a ser difícil de asumir"
La verdad, Harry no tenía ni idea de qué podría serle difícil de asumir a él, a El-Niño-Que-Vivió-Mogollón-De-Veces; es decir, a menos que Dumbledore fuese a decirle algo así como que "Harry, eres un Horrocrux (que a saber qué narices es eso) y tienes que morir para después revivir y matar a Lord Voldemort, aquí presente, con un Expelliarmus, en lo que será un duelo patético que otros se ocuparán de embellecer en los relatos". Pues eso.
Pero, como Harry descubrió enseguida, Dumbledore no iba a mencionar nada remotamente parecido a eso (al fin y al cabo, era un viejecito aburrido cuyo único hobby consistía en ocultarle cosas a la gente). No, lo que Albus Percival Wulfric Brian Dumbledor le soltó fue algo más o menos así:
"Harry, tienes un hermano gemelo idéntico"
Y, ah, vaya. Porque a ver qué narices dice uno ante eso.
"¿Mande?" A excepción de lo que dijo Harry, claro, que para eso era un héroe.
"Verás... Resulta que tus padres tuvieron dos hijos, Harry, dos gemelos idénticos (a excepción del carácter, el pelo, los ojos, los genes y la fecha de nacimiento), uno de los cuales estaba destinado a acabar con Tom, aquí presente" Tom, muy educadito él, saludó con la cabeza- "Así que Tom, aquí presente, tomó una decisión: mataría a los gemelos, puesto que era imposible distinguirlos (a menos que te fijaras en el pelo, la cara, los ojos o la fecha de nacimiento, claro). Y tus padres, para salvaros, os separaron y os escondieron en sitios distintos, haciendo que os cuidara gente de su confianza, y luego resulta que Tom, aquí presente, cogió y decidió ir a por uno de los gemelos. Ese eras tú, Harry. El resto es historia"
Aquí, obviamente, Harry se quedó sin palabras. Más que nada porque todo le sonaba a chino, claro.
"¿Eh? Pero..." Y ahí se le ocurrió una idea "Pero eso significaría que mis padres... que James y Lily Potter no eran mis padres, ¿no?, sino sólo gente de su confianza"
Albus Dumbledore asintió, y volvió a guiñarle el ojo.
"Así es"
"¿Entonces?"
"¿Qué?"
"Entonces, ¿quiénes son mis padres?"
La sala entera miró hacia otro lado, claro. Esto no resultaría fácil para nadie.
"Pues... verás", empezó Albus, cogiendo un caramelito de limón y ofreciéndoselo al muchacho, "resulta que Severus, que ahora me mira con cara de mala idea (algo cotidiano, por cierto; creo que debe ser patológico), es tu madre"
"¿Cómo?" Harry, obviamente, no quería creerlo. ¿Snape? ¿SNAPE?
"Pues podría darte una lección de biología, claro, pero..."
"¿SNAPE ES MI... PADRE?"
Ahí, Dumbledore rió. El mago-murciélago en cuestión se limitó a mirar con cara de mala idea a su hijo, y a contener las ganas de regañarle, como venía haciendo estos años.
"No, Harry, has entendido mal", explicó pacientemente Albus. "Severus es tu MADRE"
"¿Eh?"
En ese instante hicieron su aparición dos figuras de lo más esperadas, a saber: Ron Weasley y Hermione Granger.
"Eso es anatómicamente imposible, profesor", protestó airadamente la castaña (adjetivo aplicable física y psicológicamente, hago notar).
"No, Hermione" Aquí se adelantó el antiguo profesor Lupin, licántropo residente, ya que las explicaciones de Dumbledore podrían llevarme días. "Resulta que en el mundo mágico hay una ciencia muy avanzada, nadie sabe por qué, y unas mentalidades muy abiertas, y no es raro en absoluto que sea un mago quien conciba al bebé"
Ante eso, todos se quedaron en silencio. Bueno, todos menos...
"Pero Harry se parece a James Potter" Ron, por supuesto.
"Eso es porque fue James quien donó el esperma" Ya puestos, aquí fue Hagrid el que habló, con su acento rudo y de semi-gigante y que no se aprecia en la traducción a español.
"¿Donar? ¿Por qué necesitaba donar nada?"
Y Hermione le soltó a Harry un larguísimo discurso sobre la solidaridad y el compartir partes de tu cuerpo y cosas así, que la autora no transcribe porque no viene al caso y porque le da pereza.
"Vamos, que lo que pasó fue que tu padre era estéril", aclaró Tom, allí presente, interrumpiendo malignamente a la castaña-en-doble-sentido.
"Pues eso", murmuró Hermione.
"Mi padre... Bueno, pero mi padre biológico sigue siendo James Potter, ¿no?" Miradas de confusión entre los magos, asentimiento general. "¿Y quién es mi padre... no biológico?"
Sirius levantó la mano.
Las bocas de Harry, Ron y Hermione se abrieron desmesuradamente. La de Draco Malfoy no, claro, porque era un Slytherin y estaba mejor educado. Hedwig graznó, no preguntéis por qué.
Después de levantar la mano, y por si a alguien le quedaba alguna duda de lo que suponía ser el padre adoptivo del hijo cuya madre era Severus Snape, se levantó a sí mismo y, acercándose al jefe de la Casa de Slytherin, le plantó un morreo monumental.
Diez minutos después -cuando Harry se despertó del desmayo, más o menos-, Hermione se acercó sibilinamente a Remus Lupin.
"Prof... Remus", empezó, no muy segura de si iba a meter la pata (aunque, en realidad, le daba un poco igual; siempre podría sacarla), "¿estás bien?"
El licántropo la miró, asombrado de que alguien pudiese hacerle una pregunta tan estúpida; pero, en lugar de contestar algo como "¿Qué te parece? Soy un hombre lobo, me mordisqueo a mí mismo por hobby, perdí la mitad de la vida, soy probablemente el último Merodeador que inventó Rowling y, encima, tengo que aguantar adolescentes durante un año entero de mi vida. ¿Crees que se puede estar mejor?", le dijo algo como:
"¿Por?"
"Ellos" Y Herms señaló en la dirección general de Sirius y Snape, que seguían a lo suyo.
"Oh, pues claro. Ya era hora de que se lo dijeran al pobre Harry, ¿no?"
"Pe... Pero..." Y ahí la chica pareció descolocada, porque, oye, su razonamiento lógico estaba perdiendo fuerza en su cabeza. "Pero yo siempre pensé que tú... y Sirius... érais..."
Remus se habría reído, claro, pero antes habló Ron.
"Pues yo creía que era con Snape... Una relación un poco... de D/s, ¿sabes?" Y se puso pelirrojo en la cara; es decir, se sonrojó. O se convirtió en zanahoria mutante, quién sabe.
"¿Eh? ¡Ni hablar!" Remus parecía divertido con las propuestas; se habría revolcado por los suelos de la risa, claro, pero no había espacio. "Creí que había quedado perfectamente claro después de la tercera película, ¿no?" Ante la mirada perdida de los adolescentes, se explicó: "A mí quien me gustaba era Lily."
"Pero ella estaba con James, ¿no?"
"Bueno, nos las apañábamos bien, los tres juntos. Un poco estrechos, pero..."
Harry se desmayó otra vez. Probablemente, pensó Dumbledore, esto no sea bueno para el suelo.
