¿Qué soy? Siempre me pregunto eso, ¿Soy un demonio? Mis flamas azules, mi cola y mis poderes lo demuestran ¿Soy un humano? Mis sentimientos por ayudar a las personas que aprecio y el dolor que siento al perderlas hacen que lo sea ¿Soy un arma? Cuando mis flamas y mi poder fluyen por mis venas, soy incontrolable haciendo que quiera destruir todo a mi paso, entonces… ¿Qué soy en realidad? Esa pregunta resuena en mi cabeza como un eco ensordecedor.
Cierro mis ojos sintiendo el fresco viento de la mañana, que mece mis cabellos e intenta llevarse mis pensamientos sin conseguirlos; no he ido a entrenar, no me apetece, estoy cansado, solamente no quiero pensar en nada, cosa que no funciona, otra vez esa estúpida pregunta de quien soy; en verdad odio esto.
-''Rin, Rin, ¿Estas bien?''-escuchó una vez conocida en mi cabeza y miro hacia un lado, donde Kuro mi familiar, un pequeño gato negro con dos colas me mira con preocupación y tristeza en sus ojos; solamente suspiro posando mi mano en su cabeza y le acarició.-Si, lo estoy-susurro mintiendo y miro al azul del cielo, seguramente ahora mi padre me esta observando desde el cielo; cierro los ojos con fuerza, no quiero recordar su muerte, muerte que fue por mi culpa, por protegerme, si solo hubiera sido más fuerte, si no hubiera dejado que Satán le hiciera nada, ahora seguiría conmigo y con Yukio, pero… No lo fui y el murió, por eso es que estoy en este lugar, para acabar con Satán.
Seguía metido en mis pensamientos hasta que tres voces interrumpieron todo.
-¡Okumura!
-R-Rin
-Nii-chan.
Reconocía esas voces, para no hacerlo eran mis amigos y mi hermano, sonreí y mire al frente, hay estaban todos, desde Yukio, Shima, Shiemi, Izumo, Konekomaru, Suguro hasta Shura; en verdad ellos son mis amigos, aún cuando saben que soy hijo de Satán y antes me temían, ellos saben que pueden confiar en mi. Me levante dejando que Blacky se subiera en mi cabeza; miré a todos con mi sonrisa habitual dejando ver mis dientes y luego camine hacía ellos, hasta que una brisa bastante fuerte me detuve y mire hacía el cielo escuchando una voz en mi cabeza ''estoy orgulloso de ti hijo'' abrí los ojos sorprendido, esa voz era del Fujimoto ¿Estaba orgulloso de mi? Nadie jamás me había dicho eso, baje la cabeza sonriendo, ahora sabía lo que era; no era un demonio, ni un humano, ni un arma, era… Soy Rin Okumura, el que se convertirá en el mejor exorcista de todos y acabe con Satán
-¡Rin, muévete, tu entrenamiento no se hará solo!-escuché el gritó de Shura e hice un puchero sonriéndoles a todos, para después sentir el viento acariciar mi cabello como si alguien me lo estuviera revolviendo, caminé hacía mis amigos y les sonreí, solamente soy Rin Okumura.
Notas Finales: Bueno ewe esto lo escribi en un día de depresión, pero ya estoy bien x3!y pues amo a Rin uwu y escribi esto, ¿Review? :3