En la misma sala de control de Diamante Amarillo, Diamante Azul se apoyó contra la puerta. Ella sonrió a su amante mientras trabajaba diligentemente en algunos trabajos, revisando las cosas de una lista y sin levantar la vista. Ella no pudo evitar admirar la forma en que su pareja frunció los labios y entrecerró los ojos para concentrarse.
"Mi amor ..." susurró ella, con una sonrisa en sus labios "¿hay alguna vez en que simplemente dejas de trabajar y te relajas? Tu próxima colonia es dentro de unos meses".
"Sí, sí, lo sé, Blue. Déjame terminar este pequeño ..." Pero antes de que pudiera terminar, la diamante más joven había arrancado el trabajo de sus manos y lo había escondido detrás de su espalda. Ella la miró.
"Muy gracioso, ahora devuélveme-"
"Tendrás que venir y conseguirlo", respondió ella rápida y juguetonamente, retrocediendo hacia la cama y manteniéndola fuera de su alcance. Diamante Amarillo se inclinó sobre ella y trató de agarrarlo, pero ella simplemente la tiró a un lado y la envolvió con sus brazos.
"Ahora te tengo y no puedes liberarte. Tú Diamante lo declara".Ella suspiró, fingiendo molestia.
"Está bien. Tienes mi atención. ¿Qué quieres, querida?" Ella pensó un momento y la besó con ternura.
"Sólo tú, Amarillo".