SEÑAS

By: K.G.Á.É.

Las señas son importantes para Mihashi, porque simbolizan la confianza entre el pitcher y el cátcher, y más… AbexMihashi.

Ookiku Furikabutte no me pertenece.

SEÑAS

Las señas son importantes para Mihashi, porque simbolizan la confianza entre el pitcher y el cátcher. Él no había tenido la oportunidad de compartir ese gesto antes de llegar a su actual escuela. Por eso, siempre tuvo miedo de que Abe-kun se enojara y dejara de hacerlas. Porque…

Abe-kun había sido el primero en darle aquello.

Tal vez sería extraño para otras personas si Mihashi les dijera que las señas, que eran normales entre pitcher y cátcher durante los partidos, lo hacían sentir acogido.

O, quizá, el más extrañado sería él mismo, cuando dijera de más, que eso pasaba porque era justamente Abe-kun quien las hacía.

Probablemente en ese momento se sonrojaría. Y comenzaría a llorar, al notar que tarde o temprano aquel gesto de confianza se perdería, pues la escuela llagaría a su fin y cada quien tomaría un rumbo distinto al graduarse.

Que Abe-kun no tendría problema alguno, porque él era un buen cátcher y se complementaría perfectamente con cualquiera. Caso contrario al suyo, quien sentía que llevaba la palabra perdedor por todo el cuerpo.

¡No quería que ese tiempo llegara!

¡Tampoco deseaba separarse de Abe-kun! Pero… simplemente no podía ir por allí siendo una molestia por sus sentimientos. Nunca podría perdonarse el ser tal cosa para Abe-kun…

A veces, pensaba que tal vez ya lo era; y comenzaba a llorar de pronto, como ahora lo hacía, estando sólo en los vestidores.

Odiaba sentirse así: abandonado y minusválido, sin razón. Pero estaba seguro que todas las cosas buenas eran señas del mal que se le venía, porque…

Dicen que la felicidad no dura para siempre…

—Mihashi—sintió su cuerpo tensarse al escuchar aquella voz.

—A-Abe…kun…esto…—trató inútilmente de parar sus lágrimas y hablar claramente entre el llanto.

—…uff…—pudo oírle suspirar y acercarse, escuchar con claridad el ruido de sus pasos en el silencio que les envolvía.

—Mihashi—le escuchó llamándolo, antes de girarlo para tomar su rostro con suavidad, viéndole severamente y con profundidad, acercando su rostro al propio, haciéndole cerrar sus ojos al contacto entre sus labios.

Abe-kun lo estaba besando, sabía que pudo haberlo evitado, porque vio las señas claras de ello, porque aquella no era la primera vez que pasaba…

No lo hizo.

Mihashi sabía que Abe-kun odiaba a los pitchers que niegan lo que el cátcher quiere hacer, y no quiere ser odiado por él. Esa es la razón. No obstante, si piensa detenidamente en ello, esta no sería la única.

El hecho de que aún con toda su timidez estuviera correspondiendo y siguiéndole en aquello nuevamente, debía significar que ahí había mucho más. Y era probable que Abe-kun lo supiera de antemano, porque los sonrojos, aquellos me gustas y esa búsqueda de protección en él iban más allá de una enferma codependencia. Y eran, sin duda, señas que él había sabido interpretar y los habían llevado a eso:

Abe-kun siendo el único cátcher para Mihashi,

sin importar ninguno más, corrección, nadie más…

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N/A: ¡GRACIAS POR LEER ESTO!

Y SI DEJAN REVIEWS ¡GRACIAS TAMBIÉN POR ELLOS!

Escribí esto cuando iba en el capítulo cuatro de esta serie, ojalá no hayan quedado muy OOC…

¡Espero les haya gustado!