Magi pertenece a Shinobu Ohtaka-sama. Escrito en el móvil, errores son sin querer. Muchas gracias a Yayoi y a todos los que leen por el apoyo.
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Capítulo 1 ¿Qué de todo lo que hizo?
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Notas del fic.
Bueno, pues esta historia es la más cruel que he escrito hasta ahora. Y es que bueno me gusta el Arba x Aladdin, si lo sé raro, y pues hay que ser sinceros la mujer está loca. Así que será mucho sufrimiento para mi personaje favorito y para mi en un fic que seguro nadie leerá porque está MUY FUERTE. Pero como sabe quien me conoce pienso que Magi merece variedad de historias y parejas, si esto no me mata de tristeza aquí estaré con la continuación. Además ya le hace falta un fic así al no yaoi porque al menos yo no he visto (en español). No seré la mejor autora pero está escrito con todo mi cariño :). La historia es simple, demasiado, más bien es sobre buscar la salvación de Arba en este caso una jija del maíz por nada más y nada menos que su víctima. Advertencias: todas las del mundo XD. Principalmente Lemon, Chan, tortura, parafilias y violación.
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Un joven de hermosa sonrisa camina con un costal de papas al hombro, llenando de calidez el corazón de todo aquel que le mira.
-¡Aladdin-onisan!-le llama un pequeño ante el cual detiene su andar.
-¿Necesitas ayuda? Se ve pesado. A duras penas lo aguantamos entre mi hermano y yo y eso que lo llevamos a rastras.
-Oh, ¿en verdad lo harías?
-¡Si!-entusiasmado.
-¡Cuento contigo entonces!
El peli azulino le dio el paquete quedando el mayor situado detras y siendo quien realiza casi todo el trabajo sin que sea advertido.
-¡Wow! Onisan creo que me sentó genial el desayuno porque no pesa.
-Ja ja ja, ¡genial!
-Ah, olvidé preguntar, ¿a dónde lo llevamos?
-A casa de Baba.
-¡Tu siempre los ayudas a todos! ¡Por eso te admiro!
El mayor se sonrojó por el comentario, no es adepto a recibir halagos aunque se den con frecuencia. En ese aspecto es bastante tímido.
Llegaron con la amable mujer y una vez entregado el paquete esta les agradeció y regaló una manzana a cada uno.
-¿Tienes más que cargar?-el infante.
-No, fué el último de hoy.
-¡Genial! ¿Podrías cantarme algo entonces?
-Uh, pero yo no...
-Sé que no lo haces en público pero el otro día te escuché por accidente y me gustó mucho. Por favor-con ojos suplicantes.
-Supongo que no hay problema.
El menor tomó asiento sobre una gran piedra y Aladdin se presentó sobre los surcos que deja el harado en la tierra. E inició el espectáculo, el oji zafiro se perdió por completo embriagado en la felicidad que le otorga el cantar. Una sensación electrizante y cálida que recorre no solo su cuerpo, sino su alma. La maravillosa voz de un ángel o de una inocente avecilla que poco sabe de la vida, atrae sin que se dé cuenta a una pequeña multitud de chismosos que en nada cayeron en su influjo y que no respiran o pestañean por temor a perderse un momento irrepetible. El muchacho finaliza con una gran sonrisa para luego quedar pasmado cuando al menos veinte personas le atravesaban con la mirada, en silencio.
«-¿Tan mal lo hice? Creo que no tengo talento para estas cosas.»
Bajó la cabeza avergonzado alzandola poco después ante el estallido del público.
-¡Que escondido te lo tenías!-un chico.
-¡Serás muy famoso!-su pequeño amigo.
-¡Debes compartir tu talento! ¡No, tu don al mundo!
-¡¿Eh?! P-pero yo no...
Si, cantar es un sueño que ronda su mente desde que tiene memoria. Pero tiene obligaciones que no le permiten abandonar su hogar. No puede ser egoísta.
-¡Para celebrar el hallazgo hoy fiesta en mi casa!-un hombre.
-¡Si!-el grito euforico de la multitud.
Aladdin fué tomado de la muñeca y arrastrado a ello. La comida, humilde por cierto, el jugo de fruta y uno que otro licor pasaron de un lado a otro en un festejo comunitario donde todos cooperaron un poco. Los niños fueron los primeros en caer rendidos. Y el muchacho animado a otra presentación. Cuando se hizo de noche todos volvieron a casa, a esa que el oji zafiro no quiere entrar pero lo hace.
-Hola papá, mamá.
Como siempre no obtiene respuesta. Hace unos tres años el río se desbordó, subiendo su cause como nunca antes por lo que estaba en riesgo un orfanato. Sheba y Solomon se ofrecieron para salvar a los pequeños, todos y cada uno de ellos volvieron pero la pareja...pasó a la historia como verdaderos héroes. Unos que dejaron a su pequeño de ahora quince años a su suerte. Claro que no fué ni de lejos su intención. ¿Quién planea morir de esa manera cuando está en la cima de la felicidad? Pero el destino tenía planes para ellos, y estos no los incluyen en el presente de quien más los necesita. El chico hace limpieza, toma un baño y se recuesta para descansar. Mañana tiene que madrugar para hacer el pan que todos aman en el pueblo. No puede darse el lujo de tener aspiraciones, además tiene que ser realista; no tiene ni el dinero para ir a la capital.
«-¡Estoy segura de que lograras tu sueño mi amor!»
Aún si Sheba dió su consentimiento y Solomon su bendición no es que pueda hacer la gran cosa. Primero debe mantenerse con vida y ayudar al pueblo que le ha procurado cual si fuera su familia.
...
Un par de semanas después.
El peli azulino caminaba con la canasta que contiene el pan. Como siempre este le era pagado ya fuera con dinero o especie puesto que no todos tienen los recursos, no por ello discrimina e incluso lo da más barato. Un grupo de mujeres se acerca a él con expresión sería. ¿Estarían enojadas? Bien, quizá sea un tanto pervertido y guste de tocar sus senos una que otra vez y solo cuando les halla descuidadas. Pero en su defensa tiene al menos tres meses que se contiene y todo porque la última agredida le dió tremendo pedradón que le dejó inconsciente tres días. También podría ser paranoico, puede que solo este en su camino. La esperanza se desvaneció en cuanto le rodearon cual turba enardecida, no sería la primera vez que le ocurriese y fué por la misma razón. ¿De dónde sacaria ese vicio a los pechos? Mmm tal vez las revistas que su padre guardaba en el armario, que según pertenecen a un tal amigo Ugo que nunca conoció y que vive en el extranjero convenientemente.
-¿Se les ofrece algo?-preguntó con torpeza, algo evidente.
-Bueno-la que parece ser la líder-el otro día te escuchamos cantar. Y bueno...quizá es mi idea pero, ¿te gusta?
-Si.
-¿Qué tanto?
-Es mi vida.
-¿Por qué no vas a la capital y lo intentas?
-...
-Vamos, confía en mi.
-No tengo dinero para el viaje y me preocupa dejar la granja de mis padres sin supervisión. Es verdad que solo planto algunas hortalizas pero sin mantenimiento la tierra terminará por arruinarse, y esto...es todo lo que me queda.
Una chica dió una fuerte palmada en su espalda provocando que casi se fuese de cara al suelo por perder el equilibrio.
-¡Que tonto! ¿Para que si no están los vecinos? Mí esposo se puso de acuerdo con los demás hombres y se turnaran para cuidarla, así nadie trabaja en exceso, y en cuanto a los medios-ofreció una bolsa.
-¿Eh?
-Ábrela.
Los orbes celestes se abrieron en demasía al contemplar no una enorme pero si considerable cantidad de dinero.
-N-no puedo aceptarlo.
-No te estamos preguntando-molesta-tus padres hicieron tanto por nosotros y tu no te has quedado atrás. Esto es algo que reunimos con esfuerzo para darte un presente, queríamos comprarte un horno nuevo. Pero lo hablamos y el que te ayude a cumplir tu sueño es mucho mejor.
-Podría fracasar.
-Lo dudo, y no quiero ser cruel pero mejor para nosotros.
-¡¿Eh?!
-Echaremos de menos tu pan pero ya que.
Se cruzó de brazos y enseguida fué abrazada con entusiasmo por el menor.
-A-Aladdin ¡me vas a partir a la mitad!
-¡Lo siento!-le liberó.
-¿Y bien?
-¿Están seguras? Aún podrían utilizarlo para...
-Si no quieres que alguien te golpee, mejor no digas nada.
¿Es correcto todo de cariño que le brindan desinteresadamente? Hoy se siente afortunado como pocas veces en la vida.
-Gracias, gracias, gracias.
Repitió hasta el cansancio a la vez que apretaba la bolsita contra su corazón. Las lágrimas corrieron por varias mejillas, no solo las suyas. Pronto le dieron un abrazo grupal.
-¡Debes ser muy feliz!
¡No los olvides!
-¡Aún si tienes muchos fans nosotros somos los primeros!
-¡No seas tan confiado es tu mayor defecto!
Mil y un consejos que atesoró en su alma.
...
Al día siguiente.
El mismo grupo de mujeres ya le esperaba fuera de casa armadas con palos, escobas, hazadones y hasta una pistola. Prácticamente le corrieron del pueblo con una mochila que contenía algunas prendas, una canasta con un bocadillo muy económico y una carta. Le llevaron a la carretera hasta que un conductor de trailer fué obligado a detenerse.
-¡Llévenselo todo pero no me maten!
-¡No es un asalto idiota! Mmm aunque no nos vendría mal un poco de dinero-negó-¿a dónde te diriges?
-A la capital.
Debe ser obra del destino.
-¿Podrías llevar a este muchacho hasta allá?-le apuntaron con el arma de fuego.
¿Acaso tiene de otra?
-Cuenten con ello.
-Donde nos enteremos que le pasa algo en el camino tu y amante se mueren.
-¿P-pero cómo saben que...?
-A la otra dile que no deje la ropa interior en el retrovisor.
-¿Eh?
La cogió enseguida, suerte que no se hubiese estrellado en las más de seis horas que lleva de trayecto. Además hay que tener muy buena vista para encontrar un hilo dental.
El peli azulino fué empujado dentro sin consideración y sin más el chofer se arrancó, no fuera que el grupo de sicopatas cambiaran de opinión y el quiere volver a casa y probar el estofado de su esposa. Ahora entra en razón de cuanto la ama. El chico se reincorporó como pudo y miró hacia atrás, todas lloraban al tiempo que le deseaban buen viaje. Su inocente corazón se comprimió con brutalidad pero sonrió. Al mal tiempo buena cara.
«-Prometo que algún día devolveré el favor.»
Las primeras tres horas el viaje se dió en total silencio, pero la alegría del muchacho derritió la barrera del conductor que ya hasta le miraba como un gran amigo.
-Uhh-y llora-que historia tan triste.
-¿Te parece? Yo pienso que soy muy afortunado.
-Buua...
Cuando tuvieron un descanso se pusieron a comer y durante el camino a platicar, de esa manera llegaron a su destino.
-¿Estarás bien ojisan?
-Uh-moqueando-si, espero te vaya genial-toma.
-¿Qué es?
-Un panfleto que me encontré en la ciudad anterior. Parece que están realizando audiciones para cantantes. Estas de suerte.
-¡Muchas gracias!
-Bueno, es hora de despedir...¿eh?
El sujeto se sorprendió al ser abrazado por su compañero de viaje, este le soltó y sonrió con amplitud, algo en su actitud dió mala espina al mayor.
-¿Estarás bien? Mira, si necesitas ayuda, yo podría acompañarte.
-Oh no, hizo demasiado por mi. Prometo ser cauteloso.
Se dijeron algunas cosas y cada quien tomó su camino.
...
Aladdin preguntó varias veces la dirección puesto que no conoce de nada el lugar. Por fortuna Al Thamen parece una disquera de bastante renombre.
-¡Aquí es!
Si todas las edificaciones le hicieron sentir pequeño, esta no tiene nombre. Pero irse no es opción, sería tirar a la basura el esfuerzo de mucha gente. No hay garantía de que hoy le reciban, quizá las audiciones se prolonguen por días o semanas, afortunadamente tiene dinero para buscar un sitio en el cual quedarse.
-Aaaaah~.
Suspiró y caminó a su destino. Un pequeño escalofrío le embargo, quizá alguna señal le pedía que girase y volviera por donde llego. Lo atribuyó al nerviosismo. Quizá debió prestar más atención a su sexto sentido.
Una chica de cabello naranja le saludó cordialmente.
-Hola, soy Falan, te daré un número y te avisaré cuando sea tu turno.
-Gracias.
Le pidió tomar asiento lo cual hizo con algo de trabajo porque en su estómago se efectuaba una guerra por culpa de la ansiedad.
«-No hay más que esperar.»
...
La directora de la empresa revisa papeles sin interes, harta.
«-La industria musical. Que perdida de tiempo. Me hubiera casado con un fabricante de armas o algo por el estilo, para variar el imbécil de mi esposo se murió y me dejó a cargo de esta basura. Si no fuera porque representa una mina de oro le llevaba a la quiebra. Falan sugirió encontrar a un nuevo cantante, ¿pero qué sentido tiene? Mocosos con dizque buena voz y que se creen soñados por ser apuestos. Me da asco siquiera tocarles. ¿Cómo le hace Sinbad para manosear a sus zorras, es decir secretarias?»
-Rechazado, no me interesas-le dijo a un candidato.
-¡Pero ni siguiera me hizo la prueba!
-¿Bromeas? Ni falta hace con la horrible voz que tienes.
-P-pero...
-Hazme un favor.
-¡Si claro!
-La próxima vez que pases la calle cierra los ojos.
-¿Eh? ¿Para qué?
-Para ver si tu cuerpo le es de más utilidad al mundo que ahora.
-¡Es una...!
Directora o no estaba a nada de golpearla, pero aún cuando ella no le miró le aterró con su presencia, mordió sus labios frustrado y se marchó sin más. Tocaron la puerta.
«-Otro incordio.»
Luego de veinte estaba tan hastiada que poco le faltaba para la histeria. Un poco más y podía ir a casa para platicar con su adorado padre, el único que le da sentido a su vida.
Cogió una hoja y comenzó a realizar un garabato, llamaron a la puerta nuevamente pero le valió.
-Ah, h-hola mucho gusto, soy Aladdin un viajero.
Algo en su tono llamó la atención femenina que alzó el rostro y así, sin más quedó prendada del apuesto e ingenuo jovencito que muestra la sonrisa más hermosa y sincera que haya admirado alguna vez.
«-Vaya, parece que el mundo aún tiene cosas que ofrecer.»
-Ah, disculpe. ¿Qué se supone que haga? Es la primera vez que estoy en un lugar así y...
-Perfecto.
-¿Eh?
-Eres el indicado para el puesto.
-Pero no he cantado.
-No es necesario-se puso de pie y comenzó a rondar al menor cual cazador a la presa-Tienes una voz preciosa.
-¿E-enserio?-se ruborizó.
Ella se colocó a su espalda y le abrazó por detrás colocando las palmas en el pecho contrario. Aladdin comenzó a temblar nervioso.
-A-agradezco la oferta, pero creo que es mejor que me retire.-asustado.
Momento que Arba aprovechó para deslizar una mano e introducirla en la camisa, jugueteando con el suave pezón.
-Mmm...
Gemido que escapó a traición de labios masculinos. El chico intentó escapar con cuidado para no hacerle daño, aún en semejante situación pensaba en ella. Pero la mujer lo impidió y le lamió el lóbulo.
-Si te niegas, juro que nadie en el mundo cumplirá tu sueño. Me encargaré de que no te dén trabajo, asesinaré a toda persona que haya entablado conversación contigo hasta el día de hoy-sonrió grotescamente-No te obligo, la decisión está en ti.
El chico estaba en shock. ¿Qué de todo lo que hizo le llevó a esto? Es lo que se interroga angustiado mientras la mano de Arba se desliza con lujuria hasta tocar su intimidad...
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Notas finales.
Oh ;x; no sé si mi corazón resista hasta el final, te culpo Johan por mi ser sádico y masoquista. Como imaginarán por las advertencias, nadie salvará a chiquito bebé ;x; ah~ podré escribir el capítulo que sigue? Mmm tengo qué porque no será la única ocasión en que ocurra. En fin, si no me da algo nos vemos con la conti. Y si es un Arba x Aladdin no al revés, aunque más adelante tal vez XD. Pero semejante locura y sensualidad de Arba no podría ser mejor aprovechada que con alguien pervertido pero inocente :). Hasta la próxima si aún lo quieren leer :) porque de todos modos lo voy a seguir :). Y no, no todo es lemon, así que chiste? Ja ja ja ja. Por cierto Aladdin panadero es idea de un fic de mi amiga AOI SALUJA "te quiero en mi vida" :) es que no más de imaginarlo haciendo pan me da algo ja ja ja.