One Shot.
FORCE
"Dolor es amar a una persona y no poder estar con ella."
Aunque siga pasando un día o un mes el tiempo es inútil. Aunque pudiera escuchar tu voz, no podría decir nada...
¿Cómo podría decir que podre olvidarte, si mi corazón se inquieta cada vez que te sigo recordando?
Los recuerdos de mi amor por ti, me siguen sin abandonarme, y las palabras que me hicieron tan feliz algunas veces, ahora… solo me hacen llorar…
¿Qué estoy esperando?
Cada vez que voy hacia aquel banco en las afueras de la aldea tiemblo. Mi corazón salta… pero de pronto estoy decepcionada con un suspiro.
¿Cuántas veces voy a seguir haciendo esto?
¿Cuánto tiempo voy a seguir conservando una esperanza en la que su luz ahora pareciese que se ha apagado? …
Tal vez, quizá… era mejor empezar a olvidar… Pensar que acabo de soñar por un rato, aunque sé muy bien que será demasiado difícil.
¿Qué quedará para mí?
¿Mi corazón se irá con el deseo de un milagro o simplemente con el rastro de una profunda cicatriz?
Apreté mis manos pálidas sobre mi pecho intentando ahogar las lágrimas que manchaban mis blancas mejillas; pero el dolor era tan intenso que vagamente podía respirar. Frente a mi, se encontraba después de mucho tiempo de incertidumbre aquella noticia que destrozaba mi corazón en mil pedazos, y me atormentaba por las noches una y otra vez, infinitamente.
Intente dame explicaciones entre el tumulto de emociones sin sentido que se fueron albergando en mi alma joven, pero aquel muchacho de cabellos oscuros parecía no escucharme mas, marcando el intento de mis cálidas y rotas palabras con una respuesta cruel; rompiendo mi ya quebrantado espíritu.
Desesperada grite tratando de alcanzarlo en la oscuridad que lo rodeaba, pero era demasiado tarde. Hace mucho tiempo que había desaparecido, dejando tras de él, una estala de lágrimas que jamás vería.
"Dolor... era justo lo que sentía, junto a una serie de emociones complicadas."
Escogí el lado más alto de la colina en donde así podría observar fijamente la noche. Busqué constelaciones que reconocer, mientras las estrellas brillaban como diamantes esparcidos a través del terciopelo negro en este nuevo viaje que había emprendido.
Mis ojos brillaban intensamente con la débil luz que proferían las luces de la ciudad sobre mi rostro.
Había callado muchas veces, y el silencio había comenzado como una mordaza que llevaba entrelazada entre mis labios y también en mi corazón. Abrí de pronto mis ojos nuevamente y me perdí en el vasto cielo azulado.
-Y ahora llueve… -
Los cielos se habían abierto unas horas después de que había dejado la Aldea horas atrás. Levante la mirada a las oscuras nubes en lo alto, logrando sentir una pequeña nostalgia en una parte de mí.
Sólo pude preguntarme, si llovería en aquel lugar en donde el estaría en este momento.
Por eso... mantendré vivo su recuerdo dentro de mí, sonriendo ante cada uno de sus actos mientras estuvo conmigo, creyendo fielmente que, en algún momento, me volvería a cruzar con él en el camino. Y de esta forma... podre seguir siendo fuerte sin estar completa...
"La muerte no es la pérdida más grande en la vida. La mayor perdida es lo que muere dentro de nosotros mientras vivimos"
