Caminando con los muertos
Capitulo 1: Día del final, día del principio.
Lo había echo, acababa de aplastar la cabeza de su mejor amigo.
No es como si hubiese querido hacerlo, mas no había tenido otra opción, Hisashi se había convertido en uno de ''ellos'' e intento atacarlos, por lo que para protegerse y proteger a Rei tuvo que matarlo… de nuevo.
Y en esos momentos Takashi Komuro, un chico común y corriente de segundo año de la escuela superior de Fujimi, de cabello negro y ojos marrones, corría por los pasillos vacíos de su escuela junto a Rei Miyamoto, su amiga de la infancia y novia de aquel a quien acababa de destrozar la cabeza.
La chica, de largo cabello castaño y ojos rojos, aun se veía afectada por la pérdida de su novio, pero preocupada por sus padres había decidido aguantarse el dolor y seguir adelante no importa cómo.
Después de todo, acababan de ingresar a un nuevo mundo en donde lo ''normal'' ya no existía, los muertos se habían levantado de sus tumbas y empezaban a comerse a los vivos, y si querían sobrevivir a un mundo como ese no podían tener ninguna duda acerca de cómo actuar de ahora en adelante.
A derecha e izquierda la sangre de muchos alumnos y docentes ensuciaba las paredes del colegio y muchos de ''ellos'' atraídos por los gritos de espanto de los que aun quedaban con vida deambulaban sin parar buscando más alimentos con los que saciar su hambre infinita de carne viva.
-Esto es como el infierno- Murmuro Takashi deteniéndose un instante para observar como tres criaturas devoraban a una chica en mitad del patio y los gritos de agonía de la misma cada vez que un pedazo de su cuerpo era brutalmente separado.
-Takashi, no te detengas- Le dijo Rei tomándolo del brazo y tirando de él para que continuaran avanzando y no ser ellos también parte de la cena.
-AAHHHH!- Se escucho en ese momento.
-¿Qué? Alguien acaba de gritar- Murmuro Rei asustada, el sonido se había escuchado bastante cercano.
-Es aquí cerca- Exclamo Takashi empezando a correr en esa dirección- ¡Vamos Rei!
``Je je, parece que ahora si está actuando como el viejo Takashi´´ Pensó la chica siguiendo al pelinegro.
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-Interesante… muy interesante…- Murmuraba un chico de corto cabello negro, tenía la mirada tapada por el flequillo y una sonrisa extraña en sus labios en su mano derecha descansaba una espada japonesa manchada con la sangre de los cadáveres esparcidos a su alrededor, la cual se dedico a limpiar con lentitud y colocarla luego en su funda.
La espada pertenecía al club de Iaido del cual era miembro, mas debido a ser el Capitán tenía el privilegio de practicar con ella, lo cual hacia cuando todo comenzó, siendo una verdadera suerte que la tuviera para poder defenderse… aunque lo suyo era imposible clasificar como ''solo defensa''…
-Al fin entiendo a Nee-san y su ''problema''…- Susurro.
El estudiante oía los gritos de agonía y suplica que llegaban de todas direcciones.
Los alumnos iban y venían intentando escapar desesperados llenos de miedo de que algunos de ''ellos'' los atrapasen y los convirtieran en su cena de navidad.
-Idiotas, así solo conseguirán morir más rápido- Dijo el pelinegro avanzando unos pasos hasta una escalera y comenzando a subirla deteniéndose inmediatamente despues.
Allí, ''esperándolo'' habían cuatro más de esas criaturas.
-Je, parece que este es mi día de suerte- Musito pasando tranquilamente por el medio de ''ellos'', estos se giraron hacia él en el instante en el que sus cabezas cayeron separadas de sus sangrantes cuerpos- Hmm… tengo que encontrar a Nee-chan… ¿en donde podrá estar?... seguro que está bien pero… espero que no se le vaya la mano con estos…
Sin decir nada mas el pelinegro termino de subir los últimos escalones hasta el siguiente piso encontrándose con un par de alumnos corriendo por sus vidas siendo perseguidos por caminantes, algunos de los cuales se giraron en su dirección al notar su presencia.
-Definitivamente… este es mi día de suerte- Sonrió antes de sujetar con fuerza su espada y encaminarse ante sus nuevas víctimas.
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-¿¡Que vamos a hacer!-
-¿¡Que está pasando!-
-¡No quiero morir!-
-¡Mama!, ¡papa!-
Los gritos desesperados procedían de un grupo de alrededor de media docena de estudiantes atrincherados en una esquina mas sus propios lamentos estaban atrayendo a aquellos a quienes no deseaban atraer.
-¡Ahí vienen de nuevo!- Exclamo una de las chicas- ¡Hagan algo!- Les exigió a los chicos.
-¿Hacer?, ¿¡Y qué diablos se supone que puedo hacer!-
-¿Eres un hombre no?, ¡pues entonces has algo!-
-No me fastidies, si quieres salvarte ¡hazlo tu misma!- Le replico el chico furioso.
-¡Cuidado!-
Tan fuerte era la discusión que ''ellos'' se acercaron casi sin ser escuchados y rápidamente los alcanzaron.
-¡Noooooooooooooooo!- La misma chica grito horrorizada como sintió su brazo ser atrapado por uno de los caminantes y su boca abrirse listo para convertirla en una más de ''ellos''- ¡Aléjate de miiiiiiii!.
En ese momento, la criatura cayó al suelo con estrepito, una flecha incrustada en su frente.
Inmediatamente una lluvia de flechas arrecio sobre los caminantes provocando su total exterminio.
-¿Eh?- Sin entender lo que había sucedido, los seis alumnos dirigieron la vista hacia donde habían provenido las flechas encontrándose con otra estudiante de cabello blanco y ojos somnolientos que los observaban de forma escrutadora.
-Si quieren vivir… síganme…- Sin decir más, la recién llegada paso al lado de sus compañeros rescatando las flechas de los cadáveres y continuando sin volver la vista atrás.
-Eh… que esa no era eh… ¿la campeona de…- Murmuro un chico algo confuso.
-¿Qué hacemos?- Pregunto otra de las chicas.
-Quizás deberíamos ir con ella...- Sugirió otro- ...ya saben, acabo tan fácilmente con todos estos… podríamos estar mas seguros a su lado.
Ante la idea los seis se miraron entre sí, mas su debate interno no duro demasiado como otro grupo de ''ellos'' se les apareció por la espalda arrastrando lentamente los pies en dirección a ellos, con lo que sus dudas fueron despejadas y se dieron velozmente a la fuga siguiendo a la peliblanca.
-¡Hey tu!, ¿sabes a donde deberíamos ir?- Pregunto uno del grupo ni bien alcanzaron a la arquera
-¿No deberíamos ir con los profesores?- Inquirió otra- ellos son adultos así que, seguramente saben lo que hay que hacer…
La peliblanca no respondió, dentro suyo empezaba a arrepentirse el haberles invitado a unirse a ella.
-¡Hey!, ¿¡Estas escuchando!- Rugió el primero enojado al ver que la chica seguía caminando como si nada.
Esta se detuvo mirándolo directamente a los ojos.
-Solo… no se aparten de mi…- Le susurro antes de volverse y continuar.
-¡Miren!, ¿no es esa la sala de profesores?- Llamo una de las estudiantes al resto con aire esperanzador.
-Sí, todos ¡vamos allí!- Mando el que se había enojado lanzándose sobre la puerta del cuarto seguido de los demás.
-No, esperen… -Trato de detenerlos la peliblanca.
-¡Cierra la boca perra!, ¡haz lo que quieras!, ¡ya no seguiremos contigo! – El chico comenzó a reír burlándose de ella a lo que fue inmediatamente coreado antes de abrir la puerta y…
-¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!- Un grito desgarrador lleno el aire como dentro del cuarto salieron los profesores convertidos en un montón de caminantes que atacaron a los estudiantes atrapándolos sin darles oportunidad de escaparse.
-Tch- Mascullo la chica molesta- idiotas… debieron haberse quedado conmigo…
La arquera dio una última mirada a sus ex – compañeros antes de voltearse y seguir adelante observando por el rabillo del ojo pasar por un pasillo lateral a dos personas aun vivas una de las cuales reconoció como la enfermera de la escuela.
Dudando sobre si volver a asociarse o no la peliblanca soltó un suspiro de resignación, para alguien tan fría y poco dada a socializar como ella realmente era un reto el ingresar a un nuevo grupo de gente desconocida.
-Bien… este será… el último intento- Murmuro siguiendo los pasos del par.
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-¿Sabes hacia donde nos dirigimos?- Pregunto la enfermera de la escuela Shizuka Marikawa, una bellísima mujer rubia de 26 años a su acompañante, una chica de cabello púrpura mientras ambas caminaban en el mayor silencio posible por los pasillos de la escuela.
-Primero deberíamos buscar a más sobrevivientes - Respondió la joven con voz pausada caminando con rapidez, había rescatado a la mujer en unos pasillos a punto de ser devorada por al menos una media docena de ''ellos''- mientras mayor sea el grupo más probabilidades habrá de sobrevivir y además…
``Aun no me eh cerciorado… aunque si es el debería de estar bien´´ Pensó la chica levemente preocupada ``Espero que este bien´´.
-¿Huh?-
-Como sea - Continúo la pelimorada sacudiendo apenas su cabeza para alejar los malos pensamientos- debemos seguir o si no…
Saeko se interrumpió, delante suyo seis de ''ellos'' habían salido de un salón y se dirigían hacia ellas.
-Marikawa-sensei colóquese detrás de mi- Le ordeno sin levantar la voz, a lo que la rubia obedeció de inmediato.
``Bien, esto me ayudara a despejar un poco la mente´´ Cavilo la chica, antes de levantar su espada de madera y golpear con fuerza la cabeza del más próximo a ella enviándolo al suelo con el cráneo partido en dos, acto seguido se dio la vuelta y golpeo a dos más que cayeron junto al primero.
-Increíble- Susurro la enfermera observándola admirada- eres realmente fuerte Busujima-san.
Tan absorta estaba mirando luchar a la estudiante que no se percato que otra de las criaturas habia aparecido y se le acercaba por detrás.
Saeko acabo con uno más al tiempo que por el rabillo del ojo noto al caminante detrás de la enfermera.
-¡Marikawa-sensei!, ¡detrás de usted!- Grito para prevenirla mientras se deshacía de los últimos dos y corría para ayudar a la mujer.
Demasiado tarde, el caminante había tomado por los hombros a la desprevenida mujer.
-¡Demonios!- Grito Saeko levantando su espada por encima de su cabeza, sin embargo el cuerpo de la enfermera se interponía entre ella y su objetivo- tch…
-¡AAHHHHH!- Gritaba Shizuka tratando en vano de zafarse, pero el ser la tenia fuertemente sujeta y la acercaba a él mientras habría su boca sanguinolenta listo para morderla.
Y justo en ese momento se escuchó un silbido y el zombie dio con su cuerpo en el suelo con su cabeza atravesada por una flecha.
-¿Huh?- Saeko y una aun aterrada Shizuka voltearon la cabeza para ver a una chica vestida con el uniforme de la escuela y un arco en sus manos, la joven, de cabello blanco largo hasta el cuello y brillantes ojos azules tenía una mirada insípida en su rostro mientras les devolvía la mirada.
-Gra… gracias…- Le dijo Shizuka tomándose de su enorme busto para calmar a su agitado corazón- hmm, este… ¿tú eres?
-Yuki… Nishihara… segundo año clase A- Se presento la chica con tono apagado.
-¿Yuki Nishihara?- Musito Saeko sorprendida- eh escuchado de ti, la genio de primero que el año pasado gano el campeonato nacional de tiro con arco ¿cierto?
-También pensaba hacerlo este año- Musito Yuki- pero parece que eso ya será imposible- Agrego mientras observaba los cadáveres desparramados en el suelo.
-Así parece- Convino Saeko en tanto la recién llegada se acercaba a ellas- por cierto, yo soy.
-Sé quién eres- La interrumpió la peliblanca- de tercer año, capitana del club de Kendo y también campeona nacional, Saeko Busujima… y usted es la enfermera de la escuela Shizuka Marikawa… hmm…
-¿Pasa algo?- Le pregunto esta al ver que la joven se le había quedado mirando fijamente.
-No, es solo que… ahora entiendo porque mis compañeros solían lastimarse tanto…- Murmuro dirigiendo la vista hacia los atributos delanteros de la mujer.
-Vaya, así que los de mi salón no eran los únicos- Aporto Saeko divertida.
-¿Huh?- La rubia ladeo la cabeza sin entender.
En ese momento las tres escucharon sonidos guturales de varias gargantas destrozadas y al voltear la vista vieron a varios de ''ellos'' aproximándose.
-¿Cuántos de más de ellos habrán?- Pregunto Yuki a nadie en particular.
-Seguramente casi tantos como alumnos habían en este colegio- Contesto Saeko- no es necesario enfrentarlos a todos, por ahora retirémonos…- Aconsejo.
-Me parece una buena idea- Dijo Shizuka.
Las tres empezaron a caminar en dirección opuesta de donde las criaturas venían, y al pasar por el caminante al que había ultimado, la peliblanca le retiro la flecha de la cabeza.
-Solo tengo unas 30 flechas- Se explico tras recibir una mirada cuestionadora de las otras dos señalando a su espalda en donde tenía un carcaj lleno de flechas - mientras tenga la oportunidad de recuperarlas es mejor que lo haga… si aun hay tantos de ''ellos'' no quiero quedarme sin municiones.
-Sí, tienes razón, y ahora continuemos- Dijo Saeko y la peliblanca, tras limpiar la sangre de la flecha con la ropa del cadáver y guardarla en su carcaj la siguió.
Y justo cuando doblaban un pasillo un grito desgarrador se elevo en el aire.
-Parece que alguien está en problemas- Dijo Shizuka.
Saeko y Yuki se miraron entre si y al mismo tiempo se lanzaron en la dirección de donde había provenido el grito seguidas muy de cerca por la enfermera.
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-Aquí también hay varios- Exclamo un chico obeso de cabello negro y anteojos llamado Kohta Hirano al ver a un grupo de ellos en su camino.
-¡No grites gordo estúpido!- Le grito Saya Takagi, una chica delgada de cabello largo rosa que usaba en dos coletas, dándole una patada que lo envió al suelo.
-Tú también estas gritando Takagi-san- Musito el chico frotando su adolorido trasero.
Las voces de ambos atrajeron a las criaturas las cuales, tras dar un pequeño giro se encaminaron hacia los dos estudiantes.
-Se están acercando- Gimió la chica con miedo- tu levántate rápido y mátalos- Le ordeno al pelinegro tirado en el suelo.
-¡Si señora!- Exclamo el chico de forma militar y aun desde el piso tomo su pistola de clavos que se había fabricado el mismo hacia pocos minutos y empezó a disparar con gran precisión a la cabeza de los caminantes quienes cayeron al suelo y obstaculizaron a los que venían detrás haciendo que también se cayeran y dándole tiempo a pararse y huir del lugar con la chica por delante de él.
-¿Que haremos Takagi-san?- Le pregunto a la pelirrosa- los clavos se me están acabando.
-¿Huh? ¡¿Acaso tengo que pensar en todo yo?- Se molesto la chica.
-Bueno, tú eres la inteligente así que…- Murmuro Kohta lentamente
-¡Hmph!- La chica volteo el rostro aunque parecía que le había agradado el comentario como una pequeña sonrisa pareció en la comisura de sus labios- ¡por supuesto!, yo soy una genio, no hay nada que yo no sepa.
-Y entonces, ¿Qué haremos?- Inquirió dubitativo.
La pelirrosa se detuvo un instante y desvió la vista hacia el patio en donde una horda de ''ellos' paseaban libremente a plena luz del día, unos cuantos aun disfrutando de la suave textura de la carne de los estudiantes.
``Diablos, será muy difícil escapar de esta escuela´´ Pensaba Saya sintiéndose un poco irritada ``ahhh, ¿Dónde diablos esta Komuro cuando lo necesito?´´
-Takagi-san, no deberíamos detenernos- Murmuro Kohta.
-¿Huh?, ¿estás diciéndome lo que tengo que hacer?- Se enojo la chica.
-No es eso… es que detrás tuya aparecieron mas de ''ellos''- Se explico señalando atrás de la pelirrosa.
Esta dio un grito de miedo y se oculto detrás del chico en tanto, el pelinegro levantaba su pistola y comenzaba a disparar.
Y tras ultimar de certeros disparos a cuatro caminantes, al arma se le acabaron las municiones.
-Ups!, esto no es bueno Takagi-san-
-¿Qué cosa?-
-Se me terminaron las municiones- Le informo.
-¿Huuuuuuuuuuuuh?, pues pelea con ellos entonces…- Le grito entre molesta y asustada.
-¡Eso es imposible!, no soy bueno en el combate cuerpo a cuerpo- Se lamento Kohta con pequeñas cascaditas saliendo de sus ojos.
-¡ERES REALMENTE UN INUTIL!- Grito la chica, y ambos se volvieron sobre sus pasos para volver por donde habían venido, pero, con gran horror vieron que de ese lado también venían unos cuantos.
-Son los que habíamos perdido antes –Dijo el pelinegro- no importa lo lentos que sean, te alcanzaran si te quedas mucho tiempo parado.
-¡Cierra la boca! Tu… ¿eh?- La chica se cayó al sentir una mano fría sobre su hombro y al voltear la vista vio una cara deformada y sin vida acercándose a su cuello con las fauces abiertas- ¡AHHHH!.
-¡¿Takagi-san?- Grito Kohta horrorizado para acto seguido pasar a la sorpresa al ver la cabeza del ser desprenderse de su cuerpo y salir volando hasta golpear una ventana manchándola de rojo.
La pelirrosa en tanto, salvada en el último suspiro sintió como sus piernas temblaban y sin poder aguantar un segundo más el peso de su propio cuerpo, se doblaron quedando arrodillada junto al cadáver maloliente de un desdichado estudiante.
-¿Están ambos bien?- Pregunto una voz llamando la atención de Kohta y Saya.
Y allí, de pie delante de la pelirrosa, había un chico aparentemente de su misma edad, vestido con el uniforme típico de los chicos de la escuela al igual que Kohta, tenía el cabello negro corto y ojos verdes oscuros, de su cintura colgaba una espada japonesa dentro de su vaina y tenía una expresión pacifica en el rostro mientras los observaba.
Detrás de él yacían los cuerpos de los caminantes que tenían a su espalda, ninguno de los cuales mantenía la cabeza sobre sus hombros.
Sin embargo, aun quedaban los zombies delante suyo.
-Esperen un segundo aquí- Les dijo a los dos que lo miraban y ante el asombro de estos se acerco a los caminantes y, tras un instante de silencio tres de ''ellos'' habían perdido su cabeza.
-¿Eh? ¿Qué acaba de pasar?- Se sorprendió Saya
-Conozco a este tipo- Murmuro a su lado un igualmente asombrado Kohta- lo eh visto antes.
-¿Quién es?- Le pregunto la chica en el mismo momento en el que los últimos dos de ''ellos'' caían al suelo decapitados.
-Es de segundo año como nosotros pero está en la clase C...- Comenzó el chico- ...el capitán del club de Iaido y actual Campeón Nacional, Keiji… Nakamura…
-¿Nakamura del club de Iaido?- Se sorprendió Saya- si, ahora que lo mencionas eh oído de él…
``¿Con que Iaido eh?´´ Pensó observando los cadáveres en el suelo, ``Y más aun el Campeón Nacional, bueno viendo esto no me extraña que lo sea, ni siquiera pude ver en qué momento desenvaino su espada´´.
El recién llegado se acerco a ellos, en tanto Kohta ayudaba a la pelirrosa a levantarse.
-Hola- Los saludo de forma amistosa- mi nombre es Keiji Nakamura y soy el capitán y actual campeón de…
-Ya lo sabemos…- Lo interrumpió la chica de forma impaciente- no repitas lo que otros acaban de decir hace solo uno segundos.
-¿?...-
-Ah, este yo soy Kohta Hirano de segundo año clase B- Se presentó rápidamente el chico tendiéndole la mano, la cual el otro estrecho con efusividad- gra… gracias por salvarnos… si no hubieses pasado por aquí de seguro habríamos muerto.
-Ah, ni lo menciones- Le dijo Keiji sacudiendo la mano- estaba buscando a mi hermana y escuche sus gritos por lo que vine a ver qué pasaba je je je.
-¿Tu hermana?, ¿También viene a esta escuela?- Se intereso el chico de lentes.
-Sí, actualmente está en tercer año y de seguro debe de andar por ahí- Murmuro el chico.
-Oh, ¿así que es tu hermana mayor?-
-Si…-
-Tú, hablas con mucha confianza- Hablo Takagi- ¿no has pensado que tu hermana pueda ser ya uno de ''ellos''?, ¿Qué te hace pensar que aun sigue con vida?.
-¿Nee-san?, aja ja ja ja- Sonrió el chico con humor como si la chica hubiese dicho una broma estupenda, lo que ocasiono que una pequeña venita apareciese en la frente de la pelirrosa- si te refieres a ella no hay ni una posibilidad en un millón de que este muerta, al contrario estoy más preocupado por ''ellos'' que por mi hermana en caso de que lleguen a toparse ja ja ja, ya que después de todo ella es…
Y en ese momento un grito aterrador se escucho desde el piso inferior de donde estaban.
-¿Alguien vivo?- Pregunto Kohta.
-No creo que los muertos tengan una voz tan melodiosa- Comento Keiji para acto seguido empezar a correr en la dirección en la que había venido el grito.
-¿Qué? ¡¿A dónde demonio vas?- Le grito la chica sintiendo un poco de miedo, aunque el chico no le gustase a su lado podía estar segura.
-Pues a ayudar al que a gritado ¿A dónde más?- Fue lo último que dijo antes de perderse escaleras abajo.
-Takagi-san ¿no deberíamos ir con él?- Probo Kohta en tanto se acercaba a un bolso que se le había caído y recargaba su pistola con mas clavos- yo puedo protegerte, pero si se me vuelven a acabar las municiones es mejor estar con un buen combatiente como el ¿no crees?
-Por supuesto, de todas formas no puedo esperar mucho de ti- Le dijo antes de seguir al espadachín- ¡vamos!.
-Ta.. Takagi-san…- Lloro el pobre chico tomando el bolso y empezando a correr detrás de ella.
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-¡Ahhhhhhh!- Grito el chico sintiendo como los dientes de su mejor amigo le mordían con fuerza el brazo y tiraba de él intentando arrancárselo.
-¡Shuji-kun!- Lloro una chica viendo la escena ante ella.
Perseguidos por un grupo de sus antiguos compañeros, los tres intentaron escapar hasta que uno de ellos, que había sido mordido se desplomo en el suelo escupiendo sangre y aparentemente muriendo segundos después.
Su mejor amigo se le había acercado llorando en silencio hasta que el muerto revivió y empezó a morderlo ante el espanto de la única chica del grupo.
Llorando, la chica se dejo caer de rodillas en el suelo sin notar como uno de los caminantes se le había acercado y sin dejarla reaccionar la tiro al suelo y empezó a morderle el cuello.
-¡Maya!- Grito el muchacho intentando aun safarse de su antiguo mejor amigo, atraídos por el ruido dos más de ellos se acercaban por detrás y otro tres por el frente.
Y de repente, una flecha cruzo el aire y la presión de su brazo desapareció, viendo como el cuerpo inerte de su amigo se desplomaba en el suelo con una flecha incrustada en la cabeza.
Con la vista algo nublada y un poco de sangre saliendo de su boca, el chico vio llegar a tres mujeres, dos estudiantes y la enfermera de la escuela.
``Are, ¿esa no es la enfermera Marikawa?´´ Pensaba el chico esbozando una pequeña sonrisa ``vaya, parece que está bien´´, al chico siempre le había gustado la inocencia que desprendía la docente y era uno de los continuos ''heridos'' que atascaban la enfermería en busca de sus cuidados.
-Tch, parece que llegamos tarde- Murmuro Yuki observando a los caminantes, uno de ellos se le acerco por detrás y antes de que pudiese dar la vuelta un clavo se le había incrustado en la frente cayendo al suelo en donde se quedo inmóvil- ¿huh?.
La peliblanca levanto la vista para ver desde unas escaleras cercanas aparecer tres estudiantes, uno de los cuales tenía una pistola de clavos en su mano.
Al mismo momento otros dos estudiantes, un chico y una chica llegaban desde el otro lado del pasillo.
-Vaya, parece que el ruido no solo atrajo a los muertos- Comento Saeko con agrado.
Y tras cruzar sus miradas, Takashi, Rei, Saeko y Keiji se lanzaron sobre los caminantes que quedaban, terminando rápidamente con ellos.
Luego de eso Saeko se acerco lentamente al chico mirándolo a los ojos.
-¿Has visto lo que les pasa a los que son mordidos verdad?- Le pregunto con voz suave.
El chico no respondió, limitándose a darle una sonrisa triste.
-¿Te gustaría que tus padres o tus amigos te vieran en ese estado?- Le susurro en tanto se levantaba y sujetaba su espada de madera con ambas manos- yo puedo ayudarte pero es tu decisión.
El estudiante la miro unos instantes antes de cerrar los ojos y sonreír con agradecimiento.
-Po… Por favor…- Musito.
-¿Cuál es tu nombre?- Le pidió.
-Shuji… Takano…-
-Descansa en paz, Shuji-kun…-
Un fuerte sonido se escucho y el estudiante cayó al suelo sin vida, ante la asombrada mirada del resto.
-¡Komuro!- Exclamo Saya viéndolo en el medio del grupo recién formado.
-Oh, Takagi, ¿estabas bien?, que alegría verte...- La saludo el chico solo para recibir una patada en la espinilla por la chica- ...¡AHH!, ¿¡Por qué hiciste eso!?.
-¡Hmph…!- La chica volteo el rostro sin responderle- ...veo que tu también estas bien Miyamoto-san.
-Sí, igual tu- Le respondió la castaña con una sonrisa, en tanto Kohta se acercaba a Takashi mirándolo con un poco de lastima.
-Parece que se ah formado un buen grupo...- Susurro Saeko llamando la atención de todos- ...hola, no sé si alguno me conoce, mi nombre es Saeko Busujima y soy de tercer año.
-Uh, claro que te conozco Busujima-sempai- Le dijo Takashi con una sonrisa que provoco que tanto Rei como Saya fruncieran el ceño.
-Y de seguro todos deben de conocer a la enfermera Marikawa- Siguió la pelivioleta señalando a la mujer para luego pasar a la chica a su lado.
-Oh, hola- Musito esta al darse cuenta de que era observada por el grupo- soy Yuki Nishihara segundo año clase A.
-Oh, tu eres la capitana del club de arquería- Se sorprendió Kohta mirándola con admiración- supe que el año pasado ganaste las nacionales.
-Hmm, sí, bien... eso ya forma parte del pasado...- Susurro la chica con algo de indiferencia.
-Yo!, Saeko-sama...- Dijo de pronto Keiji acercándose a la pelimorada.
-Keiji!- Se sorprendió la chica abriendo grande sus ojos.
-Oy, oy, ¿a que viene esa mirada?, ¿tanto te desilusiona el que siga vivo?...- Se quejo el chico- ...seguro que ya esperabas verme con la boca llena de sangre y arrastrando los pies no?... ya hasta puedo imaginar tu sonrisa sádica mientras cortabas mi cabeza…
Un segundo después el chico yacía en el suelo producto de un certero golpe de la espada de la joven.
-¿Puedes dejar de decir estupideces?...- Murmuro Saeko cansada- ...por supuesto que me alegro de que estés con vida idiota…-Agrego con un claro alivio en su tono.
-Ah, hmm, este, Busujima-sempai ¿ustedes se conocen?- Pregunto Takashi dubitativo al ver la escena delante de él, y no era el único, todos en el grupo también se veían sorprendidos.
-Oh si, el aun no se a presentado-Sonrió la chica- este chico es Keiji Nakamura, el actual campeón nacional de Iaido y mi hermano menor adoptivo- Explico la kendoka.
-¿Hermano menor adoptivo?- Musito Takashi sorprendido.
-EHHHH ¿ELLA ERA TU HERMANA?- Gritaron Kohta y Saya estupefactos.
-Si – Contesto el chico levantándose en tanto se sacudía la ropa- ¿ahora ven porque les dije que no estaba preocupado?
-Oh, ¿así que no estabas preocupado por tu hermana?- Le pregunto Saeko con un aura demoníaca envolviéndola.
-N- no, cla.. claro que estaba preocupado- Se corrigió el chico- es solo que… tu sabes… a veces no existe nada que de más miedo que tu je je je...
-Oh, así que tienes un hermano Busujima-san- Se alegro Marikawa sonriendo.
-Si- Suspiro la chica en tanto otro golpe de su espada volvía a enviar al chico al suelo- sus padres murieron en un accidente cuando apenas tenía un año de vida, mis padres que eran sus mejores amigos se hicieron cargo de él y lo adoptaron, por supuesto fue mi madre quien le dio su apellido de ahí que no lo compartamos…
-De lo cual estoy muy agradecido- Murmuro Keiji desde el suelo.
-Por supuesto que si cualquiera estaría agradecido- Aporto Kohta.
-No- Negó el chico - de lo que estoy agradecido es de que fuera su madre quien me diera su apellido… Busujima no va con mi nombre.
-…-
-…-
Tercer golpe…
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Luego de las presentaciones, los ocho se refugiaron en el salón de maestros para analizar la situación y ver de qué modo poder escapar de la difícil situación.
-Wow ¿no es increíble esta escuela teniendo tantos campeones nacionales?… si te lo pones a pensar es genial ¿cierto?- Le comentaba Keiji a Kohta.
-Ah, Hmm…-
-¿Y tú qué?... – Le pregunto a Rei, la había visto pelear con esa lanza improvisada y era realmente buena- ...¿eres la campeona nacional de Soujutsu?
-Claro que no- Respondió esta.
-Me lo imaginaba, este grupo no podría ser tan perfecto- Sonrió el chico
-Pero quede entre los cuatro mejores del campeonato el año anterior...- Añadió Rei causando que el chico se fuera de espaldas.
-¿Alguien podría callar al idiota?- Se quejo Saya molesta.
-¿¡A quién llamas idiota!?-
-¡Pues por aquí no veo a ningún otro imbécil que se pone a decir estupideces a cada instante!...-
-¿Y qué diablos pretendes que haga?- Inquirió con sorna- ¿acaso esperas que me deprima y me ponga a gritar de forma histérica como ellos?.
El chico señalo afuera hacia el patio en donde muchos alumnos yacían convertidos en una multitud de ''ellos''.
-Muchos ya lo han hecho y no les ah servido para nada- Continuo el joven sonriendo con superioridad lo que aumento la ira de la pelirrosa.
-Hmm, ¿tu hermano siempre es así?- Le pregunto Takashi a Saeko en tanto Keiji discutía con Saya y los demás trataban de que ambos bajaran la voz.
-Sí, es un buen chico, pero tiene la costumbre de hacer bromas extrañas en los momentos menos indicados- Suspiro la chica.
-Aja ja ja, suena como alguien con el que nunca te aburrirías- Se rió Takashi en tanto la chica se levantaba y se dirigía hacia su hermano.
``Vaya, ¿así que este es el grupo final eh?´´ Pensó el chico observando a las otras siete personas en la sala ``Sea como sea, todos debemos sobrevivir a como dé lugar y encontrar a nuestras familias´´.
Takashi se acerco a la ventana observando el cielo azul claro rodeado de algunas nubes pasajeras.
Hacia tan tolo unas pocas horas todo estaba bien, el mundo era ''normal'', los únicos que caminaban por las calles eran personas de sangre caliente.
Hacia tan solo unas pocas horas… el mundo había cambiado.
Hacia tan solo unas pocas horas… el mundo había terminado… y había vuelto a empezar.
Y solo aquellos con la voluntad inquebrantable podrían aspirar a seguir viviendo, en ese nuevo mundo que había comenzado… la pregunta era… ¿serán capaces de sobrevivir?.
########## T-SRSS-xd- ##########
Hola, hola ¿Qué tal? ¿Cómo están?, aquí les traigo una nueva historia, la primera de la Serie de High School Of The Death que escribo y que espero haya llamado medianamente su atención, lo suficiente al menos como para alentarme a seguirla XD.
Sobre la historia, pues seguirá el arco argumental del manga con obvios cambios (debido obviamente a la inclusión de los personajes creados por mi), hasta que abandonen la casa del padre de Takagi en donde la historia se separara totalmente del manga y seguirá su propio curso.
Ahora, dos preguntas que probablemente estén teniendo son ¿por qué Saya con Takashi y no con Kohta? (después de todo el HdP ya tiene para escoger entre Saeko, Rei y la enfermera Marikawa). y ¿Por qué Kohta con la amiga francotiradora de Shizuka-sensei?.
La primera se debe a que seamos sinceros Saya también ah mostrado interés por Takashi, (hasta se pone celosa y todo cuando Saeko se le acerca a su amiguito de la infancia je je), si también ah mostrado cierto interés por nuestro muy querido Kohta-chan (XD), pero no al mismo nivel que el mostrado por Takashi (quizás más adelante en el manga quien sabe). Además de que la relación de Saya con Kohta está muy cercana a la de un ama y su perrito fiel XDDD, por supuesto el chico ah demostrado ser un poco masoquista (sin mencionar la parte psicótica) y realmente no creo que le importe ser tratado de esa forma por la bellísima pelirrosa, pero, aun así pienso que el pobre Kohta merece algo mejor XD.
La segunda, Kohta x Rika, pienso que podría llegar a ser una pareja bastante explosiva, ambos excepcionales francotiradores, lo que me lleva al punto principal de por qué elegí a la pareja, recuerden cuando el compañero de Rika (Tajima creo era su nombre), le dijo algo acerca de tocarle los pechos, ¿Cuál fue la respuesta de la amiga de Shizuka?, ella respondió que no tenia problema con eso siempre y cuando FUESE MEJOR FRANCOTIRADOR QUE ELLA, ahora bien nuestro Kohta-chan a mostrado ser un verdadero espécimen a la hora de volar cabezas a larga distancia ¿y si Rika lo viera en acción? ¿Tan difícil seria que sucediera algo entre estos dos personajes? Después de todo el mundo ya se fue al carajo y dudo que a alguien le importe mucho la diferencia de edad je je je.
Bien esas han sido mis razones para elegir las parejas.
Sin nada más que agregar salvo que espero ansioso sus reviews para saber si les agrado y si continúo o no con la historia, me despido hasta el siguiente capítulo, Sayonara.