【N/A】; Este es un FanFic de tres Universos Alternos mezclados, que serían el AU! Demonios, AU! Ángeles y el AU! Humanos. Las parejas serán EUAxChile en su versión1p! y su versión 2p!. En cuanto a BrasilxArgentina, la pareja aún no es confirmada.
Desde ya gracias por leer, espero que les guste.
Prólogo; Luz y Oscuridad.
Traición, eso es lo que obligó a los demonios a irse al infierno. Traición es lo que cometieron contra Dios, escuchando a Lucifer, el ángel envidioso del Señor, y el más hermoso creado por este. Antes llamado Lucero, claro, por su belleza. Al blasfemar contra la divinidad, él y sus seguidores fueron enviados al averno, a pasar vidas eternas haciendo atrocidades, sirviendo con tres diferentes funciones al Amo y Señor del espantoso lugar instalado en lo más profundo de la Tierra. Una de las tareas era Guardia, lo que consistía en procurar que ningún ser divino se acercara al infierno. Si alguno lo hacía debía convertirse o ser asesinado. Para convertirse, sus alas se le eran cortadas o quemadas, volviéndose negras. Además, debía jurar lealtad al Señor del Infierno, a Lucifer, y servirle.
La segunda tarea era la de Acompañante, tarea que consistía en tomar las almas de personas que habían sido malvadas durante toda su vida y dirigirlas a donde correspondía —dentro del Infierno, claro —.
La tercera tarea era la de Corrompe Almas, y aquí un demonio podía elegir si quería ser Voz o Infiltrado. Un Corrompe Almas se hace cargo de instaurar sentimientos, pensamientos o deseos de hacer algún mal, algo que desagrade a Dios, que le parezca una aberración. Siete demonios se encargaban de los Siete Pecados Capitales que llevaban su nombre, y estos eran Lujuria, Pereza, Gula, Ira, Envidia, Avaricia y Soberbia. Eran majestades junto a Lucifer en el Infierno, y ellos asignaban una persona a un demonio y su deber específico.
Allen, como era llamado un demonio de morena piel, rojos cabellos y ojos carmesí era un Corrompe Almas, uno que no estaba seguro si ser Voz o ser Infiltrado. Ser Voz era acompañar a la persona a todos lados, pero no dejarse ver, y siempre que esté entre el bien y el mal, insistirle en que haga el mal, mientras que ser Infiltrado era tomar la misma forma de un humano, dejarse ver, ser alguien en su vida, e indirectamente "ayudarlo" a pecar.
—Allen —resonó por todo el lugar, el jefe permanecía sentado en su trono —, ve con Los Siete, tienen a una persona para ti.
El aludido se arrodilló, y solemne contestó.
—Me parece excelente, señor —dijo, sonriendo levemente —. Ahora mismo iré hacia allá.
Se levantó, y abriendo una puerta que quedaba unos pasos atrás de él, se mostró una sala gigantesca donde tres hombres y cuatro mujeres descansaban. Todos bien vestidos, con sonrisas altaneras, brillantes. Eran atractivos, mas también imponentes y de gran altura. Una de las mujeres llamó al pelirrojo, y sin perder su sonrisa comenzó a hablar.
—El humano que a ti te corresponde es...
CONTINUARÁ. . .