Disclaimer: Harry Potter y todos sus personajes, incluidos estos que nunca salieron en los libros, pertenecen a J. .

Está historia participa en los Desafíos del foro La Noble y Ancestral Casa de los Black. Para la lista de La Chistera Explosiva. Me toco Lucy Weasley, Genre Family y Rated K.


En medio del silencio.

Son cerca de las tres de la madrugada y Lucy Weasley aun no puede dormir. No es que no este cansada, simplemente está demasiado nerviosa como para poder hacerlo. Por eso se levanta con cuidado y se calza sus pantuflas.

La casa está en oscuras y le da un poco de miedo, no le gusta que todo este oscuro y en silencio, sobretodo lo último. Lucy odia el silencio, odia la idea de que no haya nada haciendo ruido, nada ni nadie. No le gusta estar sola. Avanza lentamente hasta el cuarto contiguo, abre la puerta despacio y se acerca a la cama donde duerme Molly. Estira su mano y toca su hombro con suavidad, tratando de despertarla, no funciona. La zarandea levemente, no funciona. Lo hace con más fuerza, tampoco funciona. La toma de los hombros y la agita, nada.

Molly se parece mucho a papá, pero si tiene algo de Audrey es el sueño pesado, ridículamente pesado. A papá lo despierta una leve brisa, pero a ellas no las despierta ni una explosión, y eso le es molesto dadas las circunstancias. Porque Lucy quiere que Molly despierte, no su padre. Y si grita o hace mucho ruido él la oirá, por eso debe ser cuidadosa, pero no es fácil ser cuidadosa y a la vez despertar a Molly.

Al final se resigna y simplemente se acuesta al lado de su hermana, la que emite un leve quejido antes de abrir los ojos.

–¿Lucy?

–¿Te despertaste?

–Es obvio. –Molly se levanta un poco para poder ver mejor a su hermana–. ¿Qué haces aquí?

–No podía dormir.

–¿Estás muy nerviosa? –Lucy solo asiente. Molly pasa sus brazos alrededor de su hermana pequeña–. No te preocupes, todos estamos nerviosos cuando vamos a ir por primera vez a Howgarts, pero si no duermes mañana te costara levantarte temprano.

–¿En qué casa crees que quede? –pregunta la menor claramente preocupada.

–Eso no puedo saberlo.

–¿Como crees que sean mis compañeros?

–Eso tengo menos posibilidades de saberlo, no deberías pensar en esas cosas, así es obvio que no puedas dormir.

–No me gusta estar sola –dice, algo avergonzada de haber revelado sus inquietudes.

–A nadie le gusta estar solo. –La mayor se recuesta nuevamente para quedar frente a su hermana y poder mirarla a la cara–, además no estarás sola, me tienes a mi y a nuestros primos.

–Da igual en que casa quede.

–Por supuesto que da igual. –La pelirroja abraza con más fuerza a su pequeña hermanita–, eres mi hermana, eso no va a cambiar no importa en que casa quedes.

–¿De verdad?

–Por supuesto, como podría afectar tu casa al hecho de que eres mi hermana.

–Te quiero Molly.

–Yo también te quiero, ahora duérmete y dejame dormir a mi, mañana nos tenemos que levantar temprano.

Lucy sonríe y se acurruca junto a su hermana, Molly se duerme casi inmediatamente y la casa vuelve a estar en completo silencio. Lucy odia el silencio porque se siente sola cuando no hay ruido alrededor, pero al lado de Molly se siente acompañada y segura. No tarda en dormirse junto a su hermana.


FIN