Una poción.
Hola! Bueno, aquí traigo mi primer fic de Tennis no ohjisama... lo cual me tiene muy feliz. Esta idea la tenía hace mucho tiempo, y espero que les agrade...
Disclaimer: bueno, lo de siempre, la serie no me pertenece... si no las cosas sería muy diferentes...
Summary: Luego de 3 años y medio, en que las cosas no habían cambiado entre ellos, Sakuno se sentía más desanimada que nunca... aunque las cosas estaban por cambiar; sus destinos estaban trazados... Sakuno x Ryoma
&&&&&&
. Oh Sakuno que emoción! –gritó de costumbre Tomoka, mientras llegaba corriendo junto al puesto donde se había sentado silenciosamente Sakuno, luego de haber visto, que al igual que siempre su querido príncipe no la miraba en lo más absoluto. Y a pesar de que hace ya más de medio año, se había prometido que no lo iba a querer más, el amor seguía igual.
. ¿Qué sucede Tomoka? –murmuró algo apesadumbrada Sakuno.
. Ayer mi mamá me contó que llegó a la ciudad una anciana, que es bruja –al ver la cara interrogante de Sakuno continuó. - ¿Entiendes? Ella es una bruja... te puede ayudar en lo que sea... y quiero ver si me puede ayudar a que al fin Kaoru me comience a hablar. –sí, desde hace un año que su amiga se había dado por vencida con Ryoma, en especial después de que supo que su mejor amiga lo quería de verdad, y se había enamorado de Kaidoh Kaoru. Lo que era más impresionante, es que a pesar del animo extrovertido, nunca se había atrevido a hablar con él.
. ¿Y, eso que tiene que ver conmigo?
. Por favor, acompáñame... quiero ver si logro encontrar algo... mi mamá me contó que esa señora aparece por muy poco tiempo, y muy rara vez. Y que siempre ayuda a las parejas, aunque no me explicó muy bien cómo.
. Está bien, yo te acompañaré –dijo con una sonrisa, su amiga no tenía la culpa de que ella no pudiera sacarse de la cabeza a ese muchacho con ojos gatunos.
. Bien! –gritó emocionada Tomoka, atrayendo toda la atención del salón. –ehhmmm, lo siento. –susurró sentándose en su puesto junto a Sakuno.
Unos ojos color ámbar fueron atraídos producto de los gritos animados de esa chica tan extraña que lo persiguió por tanto tiempo, y con lentitud se desviaron a la chica que se encontraba junto a ella. Sakuno... El nombre revoloteaba alrededor de su mente. Hace tanto ya que la conocía, podía reconocer cada uno de sus sonrojos, de sus tartamudeos, pero no llegaba a entender que era lo que le atraía de ella. Sería su capacidad para perderse... o su timidez... no lo sabía. Pero de todas formas sentía que era... tierna. Con rapidez abrió sus ojos, al darse cuenta del rumbo que tomaban sus pensamientos. Y algo de asco le dio al ver que pensaba que alguien era tierno... TIERNO!
. Puaj – susurró girándose a ver por la ventana. Ya estaba aburrido de que le pasara eso. Había tratado de alejarse de ella, pero no lo lograba, o tenía que acompañarla a los entrenamientos los días Domingos, que ya no tenía, o a comprar alguna cosa para el colegio. Afortunadamente desde hace casi medio año que eso ya no ocurría... o lamentablemente, por que la extrañaba... LA EXTRAÑABA? De nuevo sus ojos se abrieron con asombro.
. Debo dejar de pensar –susurró algo enojado Ryoma, al ver el rumbo que siempre tomaban sus pensamientos.
&&&&&&&
Con lentitud salieron de la escuela Seishun Gakuen, o Seigaku... ambas chicas iban conversando animadas acerca de la sorpresa del día.
. No puedo creer que hayan dejado entrar a ese chico a estas alturas del año... y en especial con lo conflictivo que es –decía enojada Tomoka. –además recuerdas cuando él jugó contra Ryoma... parecía que lo único que querían era sacarse los ojos entre los dos.
. Bueno, yo creo que todos se merecen una oportunidad. –dijo suavemente Sakuno, al ver a su amiga tan exaltada.
. Además, entró a un curso por sobre nosotros, y lo más seguro es que va a querer entrar al club de tenis. –susurró enojada Tomoka.
. Ahh... –suspiró sin ganas Sakuno. –deja, que si él entró es por que a cambiado. Gin Akutsu... bueno, sólo espero que no se empiece a pelear por cualquier cosa con Ryoma. –una sonrisa extraña se asomó en el rostro de Tomoka. Ella había estado presente cuando su amiga se había jurado que no quería seguir nunca más enamorada de Ryoma, y había hecho de todo por ayudarla, desde hablar en secreto con Sumire, para que Ryoma no entrenara más a Sakuno, hasta que otros de los del club de tenis la acompañaran en las compras. Pero en el fondo sabía que su amiga no lo olvidaba... y quizás eso fuera lo mejor, talvez pronto podrían estar los dos juntos.
&&&&&
. Mira, aquí es! –dijo alegre Tomoka.
. Es... un lugar algo... místico –susurró Sakuno. Era una pequeña tienda ubicada cerca de un parque, sus ventanas se veían cubiertas de hermosos velos de distintos colores, y con muchas velas. Una pequeña campanilla sonó al entrar a la tienda.
. Buenas tardes –susurró una voz suave, oculta entre un dosel de velos que colgaban desde el techo. –Pasen y siéntense con confianza. –ambas chicas observaban con asombro las estanterías llenas de pequeñas botellitas de distintos colores, y hermosas formas. Cada una tenía una cinta de un color especial, y del techo colgaban pequeñas velas que alumbraban toda la habitación. –creo que les gustó este lugar –dijo una mujer bastante anciana. Su pelo era de un color gris, bastante gordita, con un brillo alegre un sus ojos negros. Sus ropas eran una falda ancha roja y una chaleca blanca.
. Buenas tardes –dijeron ambas chicas.
. ¿Y díganme... qué las trae por aquí? –dijo la anciana, mientras se sentaba frente a ellas y sacaba una mesita donde colocó unas tazas con un té bastante aromático. –pero antes tomen, un poco de té, es relajante y sube el ánimo. –Ambas chicas cogieron las tazas que se les ofrecía. -¿Y bien?
. Etto –lucía algo nerviosa Tomoka –pues quería saber si tenía algo que me ayudara a hacer que un chico me hable... señora...
. Kaede –dijo la anciana. –pues creo que para eso... necesito saber si tú alguna vez has hablado con él.
. Pues... yo... no, nunca le he hablado.
. Entonces cambia la cosa... primero necesito que al menos una vez tu le digas hola, y luego yo te puedo ayudar. –dijo Kaede con una sonrisa. -¿Y tú, pequeña?. – la mirada de Kaede se dirigió sobre Sakuno, dándose cuenta de inmediato del aura de pena que rodeaba a la niña.
. Pues... yo, no yo no necesito nada. –susurró bajando la vista sintiéndose mal por mentirle a una señora tan amable.
. Dime, ¿Cuál es el nombre del chico que te tiene así? –susurró imperceptiblemente Kaede, al ver que Tomoka se ponía de pie, viendo cada frasco que tenía en las estanterías.
. Etto... él... él se llama Ryoma... –susurró sonrojándose un poco.
. Ahh... ya veo... – luego de dirigirles una mirada a ambas chicas una idea cruzó por su mente. –niñas... me gustaría saber... ¿quieren ser mis ayudantes mientras estoy aquí? Pueden venir cuando quieran, y ayudarme.
. Sí, claro –dijo animada Tomoka.
. ¿Y tú qué dices...? –le preguntó Kaede.
. Sakuno, me llamo Sakuno... y pues... –una mirada confundida se reflejó en sus ojos color rubí –está bien –dijo con una sonrisa.
. Perfecto... –dijo Kaede.
&&&&&&
. Muchas gracias por todo –dijeron ambas chicas al marcharse de la tienda, con la promesa de volver al día siguiente.
. Me agradó demasiado la señora Kaede. –dijo con una sonrisa Tomoka. – además me va a ayudar con Kaoru, ¡gratis!... bueno, en realidad, con la ayuda que nosotras les demos a ella. –pero una duda asomó en el rostro de Tomoka. -¿Pero si tu no quieres nada... La vas a ayudar gratis?
. Pues... en realidad es que ella me agradó bastante, y te voy a acompañar a ti. Sólo por eso –dijo bajando la vista un momento. No quería reconocer que en el fondo esperaba que la anciana Kaede la ayudara, solamente si se daba cuenta de lo que ella quería. Si era de verdad tan buena, se daría cuenta de que era lo que ella necesitaba.
. Sí, es cierto, es una anciana muy simpática. –de pronto el sonido característico de una pelota de tenis siendo golpeada en un partido llegó a sus oídos.
. ¿Lo escuchaste, verdad Tomoka? –preguntó Sakuno aguzando aún más el oído.
. Sí, creo que es desde ese lado del parque, parece que hay un partido. –susurró emocionada. –ven, vamos, creo que Kaoru vive en esta zona, quizá sea él... y así mañana la anciana Kaede me va a poder ayudar. –dijo con una sonrisa mientras echaba a correr desesperada.
. Espérame! –gritó apenas Sakuno, al ver la velocidad que llevaba su amiga. –Tomoka... –pero la chica ya había desaparecido de su vista, y para variar ya se había perdido dentro del parque tan gigante.
&&&&&
. Está bien... Sakuno relájate, lo único que debes hacer es tratar de escuchar el sonido del partido de tenis, y encontraré a Tomoka. –murmuraba nerviosa la chica, mientras veía como el camino se dividía en dos delante de ella. Poniendo todo su empeño en escuchar algo que no fueran los fuertes latidos de su corazón, terminó dándose por vencida, al darse cuenta de que ni siquiera el canto de los pájaros lograba escuchar. – oh... por Kami, mi abuela se va a preocupar, no le avisé que vendría con Tomoka para acá, y ya está oscureciendo. – la angustia se reflejaba en sus grandes ojos rubí, no sabía ni siquiera que camino le convenía tomar. –lo mejor será devolverme donde la anciana Kaede, y desde allí orientarme. –lentamente comenzó a devolverse, hasta que el sonido de un búho la asustó y terminó por salir corriendo.
&&&&&
. Ahh que lastima, no era Kaoru, Sakuno, y yo que pensé que podría hablar con él de inmediato. –pero no le llegó ninguna respuesta desde la boca de su mejor amiga. Con temor se dio vuelta, para ver que se encontraba sola. – Kuso! Sakuno no está! – con temor empezó a ver en todas direcciones si la chica llegaba algo atrasada, pero nada. –Sakuno... Sakuno! Sakuno RESPONDE! –el temor ya la dominaba, pues sabía que la chica se perdía con extrema facilidad, y si le ocurría algo nunca se lo perdonaría. –Sakuno... por favor aparece... –las lágrimas estaban a punto de correr por sus ojos, cuando algo llamó su atención.
. Pssssss que haces tú por aquí. –susurraron junto a ella.
. Ka... Kaoru –dijo algo emocionada Tomoka. Pero la imagen de su amiga sola en el parque regresó a su mente. –Sakuno... Sakuno, ella se perdió. –dijo con temor.
. ¿Qué no ven las noticias? Pssss... este barrio se ha vuelto peligroso desde que una banda de ladrones a empezado a asaltar a la gente por las noches. –dijo Kaoru al ver, irritado las lágrimas que ahora corrían por la cara de Tomoka. –pero no es para que llores... hay que avisarle a Sumire-sama para que nos ayude. –dijo, y con una delicadeza poco usual en él, tomó a Tomoka del brazo, llevándola en silencio por un camino.
. ¿a dónde vamos? –preguntó, ya sin ninguna lágrima en los ojos.
. A mí casa, debemos avisarle a Sumire-sama... pssss si no, se puede preocupar si no la ve en su casa a la noche. (digamos que eran como las cinco de la tarde, pero faltaba aún dos horas para que oscureciera... y a las seis sale Sumire de Seigaku)
&&&&&&
. Mochi mochi –contestó Sumire su celular, viendo que no quedasen personas dentro de las canchas, hasta que logró ver a un chico de gorra que aún le pegaba a la pelota . –espere... Echizen! Sal ahora, ya me voy. –en cierto modo comprendía los esfuerzos de Ryoma por mantener su supremacía, desde que Tezuka se había ido del colegio, Ryoma había sido el capitán, y ahora que venía este chico nuevo, Gin Akutsu, a dar una pelea directa por ese título. Era una cosa natural que quisiera mantenerse bien. –ahora sí... hola Tomoka... ¿Qué sucede? –preguntó Sumire, sintiendo un escalofrío.
. Tía Sumire, hay un problema... estaba con Sakuno, cuando... –pero no pudo terminar de hablar cuando el grito de Sumire se escuchó fácilmente.
. LE SUCEDIÓ ALGO A SAKUNO! –preguntó con temor... o más bien gritó. De inmediato atrajo la mirada dorada de Ryoma que se acercó disimuladamente a ella.
. Bueno... algo así, estábamos las dos en un parque, cuando... salí corriendo... creí que ella me seguía... pero me di cuenta muy tarde –no pudo terminar, por que empezó a llorar de preocupación por su pobre amiga. –Sumire-sama... pssss... soy yo, Kaidoh Kaoru... estoy con Osakada, lo mejor será que empiece a buscar yo, y que usted avise a la estación de policía... Sakuno se perdió en el parque donde han estado asaltando últimamente. Si ellos nos ayudan será más fácil. Venga a mi casa, aquí la esperará Osakada. Pssssayounara. –fue lo último que escuchó, antes de que se cortara la comunicación.
. Oh, no. –fue lo único que atinó a decir Sumire, una vez que cortó la llamada.
. Anciana... ¿Qué es lo que ocurre? –preguntó Ryoma, al ver a Sumire tan pálida. Pero ella ni siquiera reaccionó al "insulto"
. Sakuno –susurró. –Sakuno se perdió, cerca de la casa de Kaoru, en un parque.
. ¿En casa de Kaoru? –el temor se reflejo un los ojos ámbares por un instante. Recordaba que su padre últimamente decía que si no le diera tanta lata, saldría con su raqueta a noquear a cada ladrón, en especial a esos que asaltaban a chicas bonitas en el parque cerca de la casa de Kaoru. –déjeme acompañarla, quizá la pueda ayudar.
. Sí... sí lo que sea, vamos –dijo mientras salía corriendo rumbo a su auto.
&&&&&&&
Empezaba a hacer frío, y ya estaba bastante oscuro, según su reloj ya eran las seis y media. Al salir corriendo, terminó por perderse más, y salir por un lado del parque del que no tenía idea a donde llevaba.
. Debo encontrar un teléfono público. –murmuraba con temor. A cada momento veía como la calle se llenaba de gente extraña e incluso de alguno que otro borracho. Hasta que sintió que una mano le sujetaba el hombro –NO! Por favor, déjeme! No tengo nada de valor, sólo mi reloj. –dijo mientras cerraba fuertemente los ojos. –pero por favor no me haga nada.
. No te voy a hacer nada –dijo una voz ronca. Lentamente Sakuno abrió los ojos para encontrarse con unos ojos dorados que rayaban en lo amarillo.
. Gin... Akutsu –susurró al verlo delante de ella.
. Sí... soy yo. –dijo de mala gana. -¿Eres de Seigaku? –preguntó al ver el uniforme verde.
. Sí, soy Sakuno Ryusaki. Gracias a Kami que me encontré con alguien que conozco. –Gin atinó a hacer una mueca al ver la confianza que la niña le daba, sin apenas conocerlo.
. Ryusaki... Ryusaki... no es el apellido de la anciana entrenadora –dijo con una sonrisa sarcástica. Las mejillas de Sakuno se sonrojaron un poco.
. Bueno, no es tan anciana, y es mi abuela –murmuró. La cara de Gin no pudo evitar olvidar la sonrisa, por asombro. Esta chica si que es despistada, no se dio cuenta de que era una broma. Pensó Gin, mirándola atentamente.
. Tú no deberías andar por aquí a estas horas –dijo serio Gin, mientras se iba caminando lentamente. Eso trajo de vuelta a la realidad a Sakuno. Con rapidez corrió hasta llegar junto a él.
. Espera, me perdí... me puedes... me puedes –le daba vergüenza pedirle algo a una persona que apenas conocía, pero, era eso, o quedarse ahí sola. –me puedes prestar tu teléfono. –a penas lo dijo y Akutsu se detuvo de improviso. ¿No me tiene miedo? Apenas me conoce, y no le intimida mi presencia... ¿quién demonios es en realidad esta chica? Pensaba Gin.
. Está bien, sígueme... –susurró a penas – iremos a mi casa. –en el fondo estaba esperando que la chica le dijera que no, que mejor se quedaba sola, antes que seguir con él. Pero nada de eso ocurrió. Al verla vio que solo le dedicaba una gran sonrisa.
. Gracias. –y ambos desaparecieron entre toda la multitud.
&&&&&&& continuará &&&&&&&&
hola! Bueno, como les decía arriba este es mi primer fic en el príncipe del tenis. Espero que les guste la trama, por que en verdad creo que es muy buena... además que ya que los personajes son un poco mayores... pues puede haber lemon (y es que en el fondo, no hay fic en el que no le haga un poco de lemon... ) haber, una aclaración... bueno, como dice arriba, han pasado tres años y medio... o sea que tienen aprox. Unos dieciséis, y es su penúltimo año en Seigaku. Por otro lado del antiguo club, los únicos que quedan son Ryoma, sus amigos, Momo y Kaoru, y Sadayaru que va solamente a dejarles botellas de jugos especiales. Respecto a Gin, luego de que se fue del club de Banji, pues estuvo estos años en distintas escuelas, hasta que decidió entrar a Seigaku, para llegar a ser mejor que el o'chibi que lo derrotó.
Bueno, déjenme sus rws, para saber su opinión...
Besos!
Atte. Piri-chan.anti-kikio
