The music in my heartEste fic es completamente yaoi y shonen ai. Por eso..."homofobicos salgan por las buenas, despues no hay derecho a reclamo!"
RenxHoro
xel
texto que este asi es un recuerdox ------
Prólogo
La silueta de un chico de cabellos celestes se reflejaba en la ventana. Este miraba hacia la calle con una expresión de tristeza mezclada con preocupación. La lluvia se hacia cada vez mas intensa y el cielo estaba completamente oscuro, esto dificultaba la visión pero él seguía ahí. Pendiente.
- ¡Basta, deja de hacer eso de una maldita vez! -
La voz retumbo en la sala del departamento.
Un chico de cabello castaño oscuro y corto lo observo risueño.
- Esta bien -
Y detuvo su golpeteo continuo en la mesa con la punta de los dedos.
- Porque tarda tanto... -
Apretó sus puños con fuerza y exhalo sonoramente.
- En serio creíste que iba a venir? Horo... sabes que Taichi es orgulloso. Aun mas que tu -
Yoh se rasco la cabeza mientras se reía de la cara que puso el peliceleste.
- Si el dijo que vendría, vendrá. Yo lo se... Tenemos que solucionar esto -
Bajó un poco su mirada, la culpa comenzaba a embargarlo, sabia que la discusión que habían tenido había sido culpa suya. Y es que no se sabia controlar... había dicho cosas horribles.
- Si así lo crees... entonces ya llegara -
Se acomodo en su silla y puso los pies sobre la mesa.
-,-,-,-,-,-,-,-,-,-,-
En la ciudad, la lluvia aumentaba su fuerza. Y lo normal es que la gente en días así este en sus casas, refugiándose del frío y la humedad. Pero un auto iba a toda velocidad por la carretera.
Un chico de profundos ojos verdes y cabello café muy oscuro, casi negro iba en su auto. A pesar de lo bello de sus ojos su mirada parecía perdida... casi vacía, esto hacia que su rostro se viera totalmente inexpresivo. Llevaba la mano fuera del auto, fumaba un cigarrillo y una botella de vodka reposaba a su costado.
- Maldita sea... -
Cerró los ojos un instante, una lagrima corrió por su ojo derecho y la limpio.
No se podía sacar de la cabeza el hecho de que había dejado plantado a su novio, aunque estuvieran peleados... él había prometido ir. Pero sentía rabia, sentía pena y un profundo resentimiento hacia Horo.
Giró su cabeza un poco y lanzo el cigarro, este voló unos cuantos metros en el aire antes de caer en la húmeda pista de la carretera. No se veían autos alrededor.
Tomó la botella de vodka y de una sola vez vertió todo el contenido de esta en su garganta, al terminar la tiró hacia el asiento de atrás y sacó otro cigarrillo.
Manejaba cada vez mas rápido y su mente solo pensaba en una persona... "Horo" y la pelea que habían tenido.
Cerró sus ojos de nuevo y comenzó a recordar el momento, su cuerpo estaba totalmente lánguido. El alcohol comenzaba a surtir efecto.
- ¿Sabes? Este fin de
semana pensé que podríamos ir a la playa... la casa de
mi familia estará vacía. Lleva a tus amigos si así
lo quieres. - Horo lo observo algo serio y se sentó a
su lado.
- No puedo - Dijo simplemente y miró al suelo.
-
¿Eh? ¿Tienes algo que hacer? Quedémonos entonces
en la ciudad, yo te acompaño - Una sincera sonrisa
adorno su rostro y sus ojos mostraron ese brillo tan particular que
siempre habían cautivado a Horo.
-
No, eso tampoco será posible Tachi... - Se levanto del
sillón al ver la expresión de su chico y lo miró
de frente. - Necesito decirte algo ... - Respiro
profundo, como preparándose para decir lo que saldría
en ese instante de sus labios. - Quiero que nos demos un
tiempo... - Le dio la espalda al concluir.
El
de los ojos verdes abrió los ojos sorprendido. - ¿QUE?
- Elevo un poco su tono de voz, y es que ¿había
escuchado mal?
- ¿Por que?
¿Que sucede? - Se levanto y le dio la vuelta. Quería
que lo mirara a los ojos.
- No te
estoy diciendo que terminemos ni nada de eso... es solo que, necesito
estar solo un tiempo - Lo miro algo triste pero se notaba que
hablaba en serio.
- ¿Acaso
ya no sientes nada por mi? ¿Ya te aburriste o algo así?
Por que si es así, no dudes en decírmelo - Ahora
hablaba algo agresivo, sentía impotencia. ¿Se había
vuelto loco? Le pedía un maldito tiempo y ni siquiera podía
dar una razón de peso.
- No
digas estupideces, ¡tu sabes que te amo! Pero necesito estar
solo un tiempo, pensar, aclarar unas cosas. ¿Tanto te cuesta
estar un tiempo solo? ¡Me exaspera eso de ti! No puedes hacer
nada solo, ¡No quieres hacer nada solo! - Lo último
lo dijo gritando y acercándose imponente.
Ambos chicos median casi lo mismo, Horo le ganaba solo por unos cuantos centímetros, pero siempre se aprovechaba de eso demostrándole esa pequeña diferencia.
- ¡Me gusta estar contigo! ¿Acaso es algo malo? Somos novios ¿te suena? ¡ESO HACEN! Están juntos, si te molesta es que en en realidad no sientes nada por mi. A mi también me molestan cosas de ti, pero te amo de todos modos. ¡PARA MI ESAS COSAS NO IMPORTAN Y LAS DEJO PASAR! -
-
¡Cállate! - Levanto su puño con
intenciones de golpearlo pero se contuvo.
-
¿Acaso quieres pelear? - El chico lo miraba desafiante,
ardía en rabia. Y es que aun no entendía por que Horo
quería que se separaran.
-
No - Hablo pausado e intento relajarse. - No voy a caer
en semejante estupidez, solo quiero que entiendas lo que te dije.
Quiero un tiempo Y PUNTO. Entiéndeme -
- ¡¿Como quieres que te entienda si no me das una jodida razón?! -
- ¡Ya te la
di! Quiero pensar. ¿Acaso tu maldito cerebro no puede procesar
esa información? QUIERO QUE ME DEJES RESPIRAR UNOS MALDITOS
DÍAS- Dijo esto gritando a todo pulmón y se fue
de la habitación en la que estaban.
Taichi quedo atónito. ¿Que estaba pasando con "SU" Horokeu Usui?
Fumó de su cigarrillo y siguió manejando, maldijo por dentro lo que había sucedido y volvió a maldecir por lo cínico que había sido días después su novio.
El
celular sonaba en su velador, estaba durmiendo así que tardo
algo en contestar. Cuando logro sostenerlo y abrir esos profundos
ojos verdes del sueño hablo algo adormilado. - ¿Si?
- Se rasco los ojos al tiempo que bostezaba.
- ¿Taichi? Habla Horokeu... -
Guardo silencio. ¡Que bonito! Lo manda a la mierda y ahora lo llamaba una semana después a las 3 de la mañana. Fantástico, era sin duda alguien de una inteligencia totalmente avanzada.
- ¿Que quieres? -
- Yo... necesito que hablemos -
- Ah, claro
- Sus palabras estaban totalmente tapadas en sarcasmo e
ironía.
- Cometí un error, jamás debí decirte las cosas que te dije. Lo lamento... Pero necesitaba pen.. -
- Pensar, si claro. Y tardaste 7 días en pensar -
- ¿Podemos vernos mañana? -
El chico revolvió sus cabellos cafés y no contesto a la pregunta del peliceste.
- ¿Taichi? -
- Si, lo que sea - No
podía contestarle de otra forma, él no era así
pero no podía reaccionar de otra forma. Sentía rabia
por lo sucedido.
- ¿Prometes
que vendrás? - - Si, si ahora déjame dormir
- Cerro el celular, lo apagó y se acomodo en su cama.
Esa noche no durmió, pensaba mil cosas. Esos 7 días habían sido un infierno. Horo no se había aparecido en su casa, no había llamado, no le contestaba los mensajes. NADA, ¡por un demonio! Y ahora quería verlo.
Apretó sus ojos con fuerza intentando contener las lagrimas. No. No quería verlo en ese momento, lo odiaba.
Comenzó a buscar otra botella de vodka en el compartimento del copiloto y al encontrarla la bebió de inmediato. Estaba totalmente ebrio y se sentía acalorado.
Aumentó la velocidad a lo máximo que su auto daba "285 Km./hr" y abrió la ventana. Al sentir el viento en su cara respiró algo mas tranquilo pero el grado de alcohol en su sangre comenzó a armar estragos en su cuerpo.
Su visión estaba algo confusa, veía dos luces adelante. ¿Un auto? Derepente vio 6 luces. ¿Tan rápido y eran 3 autos? Se rasco los ojos y no presto atención.
Apretó el acelerador y subió la música que iba escuchando. Al subir la mirada a la carretera el miedo se domino de su cuerpo. Un camión, un gran camión venia frente a él y la bocina de este retumbaba en sus oídos, la luz lo iluminaba por completo. No alcanzó a girar el auto, el camión ya sobre él.
Todo se volvió oscuro.
-,-,-,-,-,-,-,-,-,-,-
Horo seguía en la ventana.
Yoh se había quedado dormido y hablaba entre ronquidos.
- Naranj...Aja...una más -
El peliceleste tomó por milésima vez en la noche su celular y de repente este le dijo un mensaje diferente al de antes.
- El numero al que esta llamando se encuentra fuera de servicio -
- ¿Eh? Pero si toda la noche ha estado apagado. Maldita sea quiero dejarle otro mensaje... -
Volvió a marcar el numero pero el mensaje era el mismo.
El teléfono comenzó a sonar en la cocina. Horo corrió hacia el y al contestar su cara se puso pálida.
- ¿Q..que? -
Fin Prólogo.---- Nikiih
Por ser el prologo no quise alargarlo mucho, mas que nada es
para que entiendan las razones principales del Fic, el porque de las
cosas.
:D Se viene el capitulo siguiente y con ese podran entender
el titulo del fic y el resumen tmb okis?? D paciencia! que esto se
va a poner buenoooo
Se cuidan!
R.E.V.I.E.W.S
