¡Hola, bebés! (:
Hoy vengo con un drabble de Free! Sigo siendo fiel al HaruGou, pero de alguna manera, después de ver lo poco de la relación que se ha mostrado entre Sousuke y Gou en esta nueva temporada del anime, no pude evitar escribir esto. Supongo que también terminaré escribiendo algún MakoGou y SeiGou en algún momento (qué quieren, Gou está bendita entre hombres, hay que aprovechar (?)), pero ya hablaremos de eso luego.
Dislcaimer: Los personajes de Free! pertenecen a su respectivo creador. Aquí sólo la historia es mía.
Por ahora no los distraigo más. Espero que disfruten la lectura.
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Bostezó con los ojos entrecerrados. Hacía tanto calor que no podía dormir, así que se levantó para buscar un vaso de agua fresca con la esperanza de que eso ayudara. Bajó con pasos perezosos la escalera, tanteando la pared con la mano para no encender la luz, pero estaba tan somnolienta que tropezó a dos escalones del final; estaba lista para poner las manos al frente y recibir el golpe cuando un par de manos, muy grandes y fuertes para pertenecer a su madre, la sujetaron. Hubiera pensado que se trataba de Rin, pero la silueta frente a ella era de alguien mucho más alto. Eso solamente le dejaba una opción.
Oh, no.
-S-Sosuke-kun -tartamudeó, irguiéndose tan rápido como pudo. Rin lo había invitado a pasar el fin de semana en casa de su madre, como en los viejos tiempos-. Pensé que estabas durmiendo.
-Sigues siendo exactamente la misma- respondió él. No podía ver su rostro, pero hubiera jurado que tenía una sonrisa en él.
-¿De qué hablas?- frunció un poco el ceño, ya completamente despierta.
-Cuando éramos niños siempre despertabas a media noche. En aquella época ibas a la habitación de Rin para que te acompañáramos, porque tenías miedo- sus ojos comenzaron a adaptarse a la oscuridad, así que distinguió claramente cómo él pasaba a su lado y se recargaba en la pared.
-Bueno, ya no somos unos…- estaba a mitad de la frase cuando la luz se encendió. Sousuke llevaba el pantalón gris de su pijama y el torso desnudo, mostrando su perfecto cuerpo de nadador nacional. Ella, por su parte, usaba unos pantalones cortos y una blusa de tirantes, con tiburones rosas estampados. Terminó con voz seca, sintiéndose un poco apenada de que él la viera así- niños.
Sousuke recorrió la distancia que los separaba con un solo paso, mirándola con esos ojos que no te dejan apartarte fácilmente. Y ella se quedó ahí, de pie, con la cabeza inclinada hacia atrás y los pensamientos perdidos en él..
-Ciertamente, ya no lo somos- murmuró… o tal vez no, tal vez había gritado, pero quién hubiera podido saberlo en ese momento. Yamazaki rió un poco, con una mezcla de satisfacción y ternura-. ¿No vas a decir nada?
Por supuesto que sí. Respiren, pulmones. AHORA.
La pelirroja entreabrió la boca como si fuera a suspirar.
-Mi hermano está arriba- soltó, en un susurro que recuperó el control de todos sus sentidos. El chico sonrió y le dio un beso en la frente antes de dar dos pasos atrás.
-Ten cuidado la próxima vez- dijo, como esperando que ella interpretara lo que mejor le pareciera-… no vayas a tropezar de nuevo en la oscuridad, a menos que esté aquí para ayudarte.
Y con las últimas palabras, desapareció subiendo la escalera.
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¿Qué les pareció? Si les gustó o no, recuerden que sus reviews son muy importantes y nos ayudan a escribir mejor. Ahora estamos en receso escolar y yo estoy planteándome un reto muy serio sobre fanfics, así que espero leerlos por aquí muy frecuentemente.
Espero que tengan un excelente día, y recuerden que para hacer bien el amor hay que venir al sur (8)… ah no, eso no era.
¡Besos y abrazos apachurradotes para todos!