Capitulo 1

Disclaimer: El show de TV lady Bug no me pertence, solo escribo historias con relación a este universo.

Ya habían pasado cerca de 8 años desde la última vez que lo ví, a mi compañero de batallas, a mi gato negro. Aún recostada en la parte más alta de la torre Eiffel, contemplaba con tristeza la ciudad de la luz, mientras la soledad parecía cernirse a cada paso más y más en mi. Admito, que una parte de mi sabía que con mis constantes desaires al gatito, tarde o temprano lo lastimaría. Lo único que no me imaginé es que su partida iba a mostrarme la verdad. Empecé a extrañar sus chistes, su voz… su compañía y amistad. Sé que suena duro, pero me había acostumbrado a su presencia, sin pensar en algún momento, que tal vez él fuera más importante para mi de lo que yo creía. Mi corazón o más bien mi obsesión había llevado a que me engañara y creyera mis mentiras como si fueran una verdad irrefutable. Lo cual no evitó que sintiera un gran vacío en mi corazón que me hace querer gritar lo estúpida que soy y mostrarme como lastimé a una persona de gran corazón.

Despierto al escuchar el tono de mi teléfono y me levanto algo asustada, mientras que mi mente trata de reconocer el entorno que me rodea. Busco a tientas el celular, en un vano intento de callar ese molesto ruido que me alejaba de la tranquilidad de mis sueños. El pequeño minueto se escuchaba cada vez más fuerte, mientras que con manos temblorosas lo sujetó con frente a mi rostro, tratando que mis ojos enfoquen con claridad lo que dice en la pantalla. Al parecer tengo varias llamadas perdidas y son de mi mejor amiga. Alya me va a matar.

Rápidamente, marqué el número de mi amiga tratando de buscar una excusa medio creíble, del porque no le había contestado ayer y por ende no le había ayudado a con su trabajo.

-Marinette Dupain-Cheng, ¿Dónde diablos estabas? me tenías preocupada- Me gritaba mi amiga - Me prometiste que anoche me ayudarías con una entrevista y cuál fue mi sorpresa que no me respondiste. Te llame tantas veces...

-Alya… de verdad lo siento- dije con una voz temblorosa - La verdad es que no me sentía muy bien, y apenas llegue de clase me recoste un poco. Supongo que me dormí del cansancio de la gripa, porque me acabo de despertar- Dije rogando que sonara lo más convincente posible.

-Esta bien, Marinette, voy a hacer como si te creyera, solo porque ayer en mi completo estres, de que no me respondias, decidí salir y dirigirme a tu casa-

Sentí un escalofrío que pasó por todo mi cuerpo. Acaso Alya sabía que no estaba en casa o tal vez vio llegar a Lady Bug al altillo de mi cuarto. No esto no podía ser cierto, siempre era muy cuidadosa y la prueba era que ya habían pasado nueve años sin que alguien se enterara de la identidad de civil de Lady Bug. No obstante, había algo que me molestaba, y era que no recordaba como había llegado a mi habitación, más exactamente sólo recordaba estar recostada en la parte más alta de la torre Effiel.

-...Y no creerás lo que ví- la voz de Alya me sacó de mis pensamientos, a la vez que mi cuerpo se tensaba - Ví ni más, ni menos que a nuestro héroe perdido, a Chat Noir.

Un suspiro salió de mis labios a la vez que mi corazón no dejaba de latir, como si estuviera en una carrera desenfrenada.

- Marinette, ¿Sigues ahí?-

-Si, perdoname, solo que no te escuche bien, dijiste que Chat Noir regresó. ¿Estás segura?-

-Claro que estoy segura. Además pude comprobar una de mis teorías -

- ¿Qué teoría?-

- Lady Bug y Chat Noir tienen algo, estoy más que segura- dijo Alya con voz orgullosa -Y antes de que me digas que me estoy imaginandome algo… tengo pruebas.

Casi me atraganto, cuando esas palabras salen de sus labios.

-Mira lo que te acabo de enviar, es una foto donde se puede ver más claro que el agua que ellos solo amigos no son-

- Alya, solo te estas imaginando cosas- dije tratando de sonar lo más convencida posible- Tu sabes que Lady Bug y Chat Noir no han peleado juntos desde hace años, como van a tener algo si no se ven.

-Amiga, eso es cierto, pero tal vez ellos si siguieron viendo todos estos años. Que nosotros no sepamos sus identidades, no significa que ellos no.

Me quedé en silencio, tratando de darle sentido a sus palabras.

-Bueno, te tengo que dejar amiga, tengo clase temprano y ya se me hizo tarde. Te parece si nos vemos este sábado en la biblioteca y me ayudas con mi entrevista-

-Si, claro. Por supuesto-

-Okis, entonces nos estamos hablando para…

-Espera, Alya- dije - Siento no haberte ayudado ayer con tu trabajo-

-No te preocupes, no estoy molesta, más bien preocupada por ti, últimamente has estado rara-

-Alya lo siento mucho, no quería preocuparte-

-Marinette, se que tienes secretos, y no te estoy pidiendo que me cuentes cada uno de ellos. Solo quiero que sepas que puedes confiar en mí y yo haré cualquier cosa para ayudarte-

-Lo se- susurré, sintiendo como la culpabilidad se apoderaba de mi ser.

-Bueno te dejo, nos estamos hablando el sábado- dijo Alya- No lo olvides.

- Si, nos vemos-

Colgué el teléfono y sin perder tiempo busco la fotografía que Alya me envió de la supuesta prueba de la relación entre Lady Bug y Chat Noir. Abrí el archivo de la fotografía y por un momento casi se me cae el celular de mis manos. En la imagen se alcanza a ver efectivamente a Chat Noir cargando en sus brazos a una lady Bug mientras que corre. No puedo creer lo que veo, en que momento paso y porque no recuerdo. Es verdad que estos últimos días he tenido una fuerte gripa, que a veces me hace actuar como si de una zombie se tratará, pero no puedo creer que olvidaría algo así.

-Así que regresó- dice una dulce voz detrás mio.

-Tikki… así parece- suspiré-

-¿Qué vas a hacer?- Me preguntó mi dulce amiga.

- Me imagino que pronto lo volveré a ver, así que hablaré con él- dije viendo con tristeza la fotografía.

-Tikki por cierto, ¿Recuerdas como llegué ayer a casa?-

Mi amiga me miro confundida y dijo - Llegaste como Marinette y entraste por la puerta principal, se que nos transformamos a unas pocas calles de aquí-

-¿Y estaba sola?

-Si preguntas si Chat Noir te vio como Marinette, no lo creo- dijo de forma segura- Cuando nos transformamos estábamos solas, además que aunque estabas enferma fuiste muy cuidadosa.

La mire por un momento, relajandome. Lo que menos quería era que después de tantos años se entera de mi identidad y yo estando medio inconsciente. Quería que si se enteraba poder explicarle todo y poder hablar. Me levanté y comencé alistarme, después de todo ya era tarde y yo también tenía clases.

A pesar de que el día había comenzado de cierta forma extraña y que yo seguía enferma, me sentí como si mis energías se hubiesen renovado. Era de esperarse que todo el mundo en el campus de la universidad se encontrarán eufóricos, después del avistamiento del héroe de París, que al parecer ha vuelto. Alya ha sido rápida y lo ha subido a su Lady Blog. A pesar de que los últimos días la mayoría de mis viejos compañeros de preparatoria estaban emocionados porque hace más de una semana nuestro viejo compañero había regresado a París. Adrien había estado fuera de la ciudad desde hace varios años, así que no fue de esperarse el gran alboroto que causó. Si no más Alya y Nino estaban curiosos de ver mi reacción al ver a mi antiguo amor platónico. Platónico porque nunca le dije los sentimientos que creí tener por él. A pesar de eso, mi comportamiento no se vio afectado por su presencia, más bien pude de alguna manera tener una conversación que pude llegar a disfrutar solo como amigos. Obviamente los cambios no se hicieron esperar y pude comprender que de alguna forma todos habían continuado sus vidas y sueños.

Sin darme cuenta ya era de noche y me encontraba eufórica. Era la primera vez en años que me emocionaba así por una simple ronda nocturna y lo peor es que nadie me garantízaba que él iba aparecer. Después de todo, estos años luchando contra Hawk Moth han sido difíciles sin su apoyo.

-No te preocupes Marinette- dijo Tikki - Todo va a salir bien-

Sonrio y le agradezco a mi amiga su constante apoyo, mientras con voz firme digo - puntos fuera-

Salgo saltando por el altillo de mi habitación y me dirijo al último lugar que visité ayer y que recuerdo: La torre Eiffel. Trato de no darme falsas esperanzas, ya que lo más seguro es que él no se encuentre alli. Cuando ya he alcanzado la cima me siento un momento, tratando de apaciguar el mar de emociones que me invaden, mientras que mis ojos se estrechan buscando la silueta de mi amigo. No está aquí.

¿A quién buscas My lady?-dijo una voz profunda detrás mío - ¿Acaso se te ha perdido algo? -

¿Chat me asustaste?- sonrío río tratando de sonar lo más normal posible mientras ante mis ojos veo al hombre en el que se ha convertido. Esta mucho mas alto, su cabello aún conserva sus visos dorados y parece mucho más largo. Lo que me sorprendio mucho más fue sus ojos. Seguían siendo tan verdes como mis recuerdos, pero su mirada reflejaba una frialdad que nunca había visto en él.

Chat me alegra que estés aquí de nuevo-

La verdad mi lady he regresado por un asunto que nos incumbe a los dos-

Si te refieres a Hawk Moth, no han sucedido grandes problemas con él. Desde hace años que sus akumatizados no causan gran problema en la ciudad. De hecho parecen más débiles. -

¿Y por qué crees que eso ha pasado?

Me quedé callada de inmediato, por supuesto que me había hecho esa pregunta hace mucho, pero no tenía muchas pistas, donde empezar a buscar. Los akumatizados no recordaban mucho de sus experiencias como ayudantes de Hawk Moth. Chat parecía molesto.

-Ya lo suponía-

-¿Qué sucede?-

El suspiro y me miró con preocupación. -LadyBug, estamos en peligro. Necesito hablar contigo… maldición. No entendí el porque de su grosería hasta que vi un ligero destello a lo lejos. Una mariposa muy conocida volaba lentamente en nuestra dirección. Antes de siquiera darme cuenta la mano enguantada de Chat lo sujetó y la apretó hasta hacerla polvo. La mariposa se desvaneció entre los guantes negros para desaparecer. Lo mire confundida, a la vez que no entendía lo sucedido.

Chat pareció percatarse de mi confusión y todavía mirando sus guantes negros dijo.

Los akumas no solo posesionan a los civiles, también pueden ser buenos espías-

-Como ves él mantiene una vigilancia cercana. Por eso te pido que seas más cuidadosa. En este momento estoy tan agradecido de que nunca me hubieses dicho tu identidad.-

Asiento con mi cabeza, mientras que el se sienta a mi lado y se queda con la mirada fija en el firmamento.

-My lady, regresé porque a pesar de que estos años no te he ayudado a luchar, yo seguí con investigaciones acerca sobre Hawk Moth, y me temo que he sido descuidado-

-¿Acaso él sabe quién eres?- mi voz sonó entrecortada.

- No, creo que no. Pero sé que sospecha de mi. Por eso te pido que seas más cuidadosa my Lady. Lo de ayer no se puede repetir, quedarte dormida en la torre Eiffel, es como si lo invitarás a que robará tu miraculous.

Me sonroje en cuanto recordé la foto que Alya nos había tomado, después de todo el me había cargado, mientras me llevaba en sus brazos.

- Pero hay algo que no entiendo. ¿Tú sabes quien es Hawk Moth? y lo de ayer...

El se quedo callado por un momento, seguido de levantarse.

-Lo siento my Lady, pero me tengo que ir. Nos vemos pronto.

La sorpresa tomó mi cuerpo y cuando reaccione él ya se había ido. Su silueta apenas se podía discernir entre las sombras de la ciudad. Era verdad que a pesar de los años y de los evidentes cambios que ambos habíamos sufrido, era bueno ver que aún podíamos mantener una "conversación" un poco civilizada. Me levanto de mi lugar e início con lo que se supone fue la ronda nocturna de ese día.