Tercer lugar en el concurso
Sanar
- ¿Dónde estoy¿Es una ilusión?
El niño buscaba a tientas en la oscuridad. Ver o caminar más allá era imposible.
- Tengo frío...
No había luz ni calor en aquel lugar. Soledad era todo lo que reinaba. Se agachó en posición fetal.
- Soy fuerte. Un... asesino -titubeó-. Debo poder salir de aquí...
Pero no sabía que la oscuridad era su propia alma, tal como la habían preconcebido sus antecesores.
- Killua!
De pronto pudo ver. Unos ojos alegres y castaños lo observaban.
- Vamos -le dijo sonriendo.
Al final, veíase luz por el resquicio de una puerta. Ambos amigos avanzaron juntos, sabiéndose acompañados.
