N.A: Aquí traigo otro fic, de humor por supuesto :D… eso ya era obvio, ¿no?

Pareja: AlfredxArthur [AmericaxEngland]

Disclaimer: Ninguno de los siguientes personajes me pertenecen… porque si fueran míos, Hetalia, sería solamente yaoi X3

PRÓLOGO

América entró escandalosamente en la casa de su novio, Inglaterra, mientras gritaba su nombre; nadie contestó. Raro, ya que normalmente un Arthur, echando humo por las orejas, le gritaba que dejase de ser tan infantil e idiota, claro, después de intentar tirarle algún objeto que tuviera a mono y darle en la cabeza.

-¡Iggy, sal de una vez! -volvió a gritar por segunda vez, pero seguía sin haber ninguna respuesta- ¡AAAAA! ¡A lo mejor se fue y me dejo por otro! Seguro que se fue con un narcotraficante musculoso con una cicatriz atravesándole el rostro…. y… ¡ahora mismo se estarán casando en las vegas! ...y… y…. ¡Después tendrán un montón de bebes adorables y cejones! -se tiró de rodillas al suelo mientras lloraba nada afeminadamente, es decir, lloraba como el macho-cachas-pelo-en-pecho que era- ¡NO, ESPERA! Eso no puede ser verdad, porque sí se hubiera ido habría cogido, por lo menos, sus CDs de porno gay-razonó mientras se levantaba del suelo animadamente, aunque, la verdad, los CDs que habían tirados en la mesa de la esquina se los había dejado él hace dos días.

Para tranquilizarse del todo, Alfred, se puso a pensar; cosa no muy común a decir verdad, hasta se podía ver el humo que salía de su cerebro por sobre esforzarse. A pesar de todo eso, llegó a una conclusión útil: sí su Inglaterra no le oía, es porque no estaba dentro de la casa y, por tanto, debía estar en el jardín trasero. Se encamino hacía allí con una sonrisa, feliz por haber resuelto el misterio.

-¡Amor, por fin te encuentro! -Alfred, nada más entrar en el jardín, y ver a Arthur, dijo estas palabras para después correr a abrazarlo- No sabes lo preocupado que me tenías -ahora restregaba su mejilla contra la del inglés.

-¿Qué haces, idiota? -un enfadado Arthur le pego un puñetazo a Alfred para alejarlo- ¡Asustarás a mi unicornio! -después de decir esto se giró hacía su izquierda, para acariciar a la nada, o por lo menos es lo que veía Alfred- Tranquilo, bonito

-¡Estúpido y monopolizador de cejones sexys, unicornio! -gritó un celoso Alfred mientras pateaba en el lugar que estaba acariciando el inglés

-¡Idiota! -es lo último que pudo oír antes de que algo le golpeara tan fuerte que lo mandó volando unos metros más para allá, además de perder la conciencia; lo que es seguro, es que Arthur no fue.

A América le pitaban los oídos terriblemente y, también, podía sentir a alguien llamándolo.

-Loveeeeee, despieeeerta -era una voz chillona, aunque parecida a la de Inglaterra, cosa muy extraña a decir verdad- Loveeee, venga

-WHAT? -gritó Alfred al abrir los ojos y ver a su novio pegado a él mientras le besaba el cuello.


¿Qué tal? ¿Queréis una conti? Una cosa: no puedo prometer una actualización muy seguida, aunque prometo que daré mi máximo esfuerzo.

Gracias por leer.

Chao!