CAPITULO 1

Hola soy Quinn Fabray, tengo 21 años y vivo en Los Ángeles, la ciudad perfecta para mi trabajo, todos los seres que salen del inframundo hacen de esta ciudad su hogar. ¿Quieren saber a qué me dedico? Se los diré así…si estás muerto, si tienes el cuerpo cubierto de pelo, si eres verde y de apariencia horrible o si te gusta la magia negra sin dudas eres mi objetivo a seguir, por si no entendieron…cazo criaturas nocturnas.

Pero no me mal interpreten, no les doy caza a todos, hay criaturas que no le hacen mal a nadie y tienen tanto derecho a vivir como los humanos. Como por ejemplo mi amiga Alexa, paciencia más adelante podrán conocerla.

Como les decía, cazo vampiros, hombres lobo, brujas, etc, vivo en L.A. pero muchas veces tengo que viajar por todo Estados Unidos, como ahora: me encuentro en San Diego a 179 km de Los Ángeles, viaje hasta aquí porque había unos vampiros que debía poner en su lugar. Faltaba una hora para el amanecer y antes de partir decidí detenerme en el bar que estaba a unas cuadras de la bodega donde ellos habitaban, para recuperarme de la agotadora pelea de la que salí vencedora, una buena taza de café me ayudaría aún más. Otra cosa que me estaba ayudando era el coqueteo de Wendy, la camarera que me atendía, por suerte mi cara estaba intacta así que le devolví el flirteo sin preocuparme por moretones o arañazos.

WENDY-mi turno termina en una hora pero vivo lejos de aquí (me guiño un ojo)

QUINN-yo tengo auto puedo llevarte hasta tu casa (le digo con una sonrisa coqueta)

WENDY-perfecto (me sonrió y se marchó)

Sin dudas me iría de San Diego con un lindo recuerdo. Mi sexy camarera había vuelto a llenar mi taza con café, lo bebía tranquilamente mientras la esperaba.

El bar se ubicaba enfrente de una parada de autobús, miraba como la gente bajaba, algunos medios dormidos, otros apurados, pero quien más me llamo la atención fue una chica morena y de baja estatura, se bajó del bus discutiendo con el chofer, no podía escuchar la conversación pero por los gestos de la chica, parecía que le rogaba por algo. Al parecer al conductor no le importo la súplica y se marchó dejándola sola en la vereda.

MORENA-(entro al bar) disculpen…hola (inmediatamente todos nos dimos vuelta para prestarle atención) me preguntaba si alguien aquí es tan amable como para llevarme a Los Ángeles

Algunos camioneros comenzaron a sonreír, yo por mi parte me quede callada, me gusta viajar sola escuchando mi música favorita. Pero si descubría que alguno de esos tipos tenía malas intenciones si haría algo al respecto.

MORENA-me quede sin dinero para tomar otro bus pero al llegar allá les pagare

Mala elección de palabras, si esperas que alguien te lleve no digas que no tienes dinero, en estos tiempos nadie confía en nadie y además la gasolina esta carísima. Lógicamente todos los presentes le dieron la espalda y siguieron con sus asuntos.

MORENA-gracias, estoy anonadada por la solidaridad (frustrada se acercó a la barra y siguió protestando)

Déjenme que se la describa, era bajita, de piel morena y de bonito rostro. Pero su ropa era horrenda, vestía un jersey rojo con rombos blancos y llevaba una falda a cuadros, por suerte la falda era corta y pude disfrutar de sus piernas…y que piernas…morenas, contorneadas, suaves…pff de seguro lo pasaría muy bien con Wendy y esa morena.

Una voz ronca me saco de mi menage a trois, un tipo de traje negro se acercó a la morena y se ofreció a llevarla, ella acepto encantada.

Verán…esta escena no tenía nada de malo, un tipo de unos veintitantos vestido como un ejecutivo le ofrecía su ayuda a una indefensa chica, todo estaba bien excepto que el sujeto era un vampiro y esa morena era su cena…o desayuno dada la hora.

Desgraciado, debía de haber entrado en ese momento, porque si no yo hubiera sentido su presencia. No podía dejar que eso pasara, nadie merecía ser devorado por un vampiro, bueno…los políticos si se lo merecían, pero ella estaba lejos de ser un político.

QUINN-(haciendo uso de mi mejor sonrisa y mi voz más amable me acerque) yo puedo llevarte

Me miro de arriba abajo y con una sonrisa forzada me dijo que ya había encontrado ayuda, su pálido chofer me sonrió con arrogancia y yo regrese a mi mesa.

No podía culparla por haberme rechazado, cualquiera en su sano juicio excepto esa linda camarera habría escogido al tipo de traje. Olvide contarles como luzco, soy rubia pero un rosa brillante cubre mi dorada melena, llevo un piercing en la nariz; mala idea…duele horrores cuando me golpean, y mi ropa es negra y de estilo punk, antes usaba borcegos pero decidí que unas Convers negras eran más cómodas, soy la versión femenina de Los Sex Pistols.

A pesar de haberme juzgado no podía dejar que muriera, pensaba como podía acercarme cuando ella sin saberlo me dio la respuesta.

Se levantó y fue al baño, segundos después su nuevo amigo la siguió, sin dudas esa era mi entrada. El vampiro no sabía quién era yo, peor para él, el factor sorpresa era mi mejor arma…eso y una estaca de plata. Fingiendo temor entre al baño justo antes que la mordiera, al verme la soltó y se me acerco, al sentir su aliento gélido en mi cuello sabía que era el momento.

Una patada en sus partes que ya no reproducen lo alejo de mí y otra patada a su cara lo hizo caer de rodillas, una última patada voladora lo dejo tirado en el piso, listo para el golpe de gracia; podía haberlo matado cuando se me acerco pero me gusta golpearlos un poco sino que diversión tiene. Este había sido fácil, al parecer lo habían mordido recientemente.

Cuando la plata hizo contacto con su cuerpo solo bastaron unos segundos para que se hiciera polvo, mientras tanto la morena seguía en un rincón mirando aterrada la situación.

Los vampiros se hacían polvo pero su ropa y demás accesorios no, por eso luego de una pelea hurgaba los bolsillos en busca de dinero, anillos o relojes, los accesorios los vendía y así ganaba dinero, estaba sola en esto, nadie me pagaba por limpiar la ciudad de monstruos.

QUINN-(mientras lo revisaba mire a la chica) ¿estás bien?

MORENA-(asintió) ¿Qué…que sucedió?

QUINN-solo 20 dólares…muerto y pobre. Te pusieron un alucinógeno en la bebida, todo esto no es real es producto de tu mente que delira

MORENA-¿crees que soy estúpida?

A veces es mejor no responder.

MORENA- un hombre se hizo polvo ante mis ojos

QUINN-si le cambias unas palabras le darás otro significado a la frase

MORENA-(no le hizo gracia) ¿no me escuchas? ¿Qué acaba de pasar?

QUINN-el tipo que te ataco era un vampiro pero para tu suerte yo lo mate

MORENA-si claro (rio irónicamente)

QUINN-(me quedaba muy poca paciencia) un hombre de 1.90 está hecho cenizas a tus pies y dudas de lo que te digo

MORENA-pe…pero…los vampiros no existen

QUINN-y las depiladoras automáticas no duelen pero ¿sabes qué? Ambas cosas son mentira

Camine hacia la puerta pero ella aun tenia preguntas.

MORENA-estoy aterrada ¿Qué voy a hacer ahora? ¿A dónde iré?

QUINN-yo te solucione la mayor parte, ahora arréglate sola

Salí del baño, tenía prisa por irme pero otra voz me detuvo.

WENDY-ya estoy lista

QUINN-(rayos me había olvidado) lo siento linda, tengo que irme es una emergencia

WENDY-(me miro decepcionada) de acuerdo

No podía irme con las manos vacías, la tome de la cintura y la bese con pasión, a lo que ella respondió abrazándose a mi cuello, deje los 20 dólares entre su piel y la solapa de su uniforme.

Toda fantasía de ella desnuda en el asiento trasero de mi Mustang se había esfumado. Enojada y algo excitada me subí a mi auto dispuesta a largarme de ahí, pero mi sufrimiento no había acabado.

QUINN-¿QUE CREES QUE HACES? (la morena se había subido a mi auto)

MORENA-estoy muerta de miedo, no sé qué hacer, pero siento que a tu lado estoy segura

QUINN-antes me ofrecí a llevarte para evitar que te fueras con ese vampiro, pero la oferta acaba de expirar

MORENA-por favor, te pagare cuando llegue a Los Ángeles

QUINN-no me importa el dinero, viajo sola

MORENA-no me moveré (se puso el cinturón de seguridad)

QUINN-ok

Con tranquilidad me baje, abrí su puerta, tome su bolso y lo arroje al suelo.

MORENA-ES UN LOUIS VITTON

QUINN-tienes dinero para un bolso pero no para el pasaje, no me engañas sé que es falso

Años de revisar bolsos y carteras de mujeres vampiro o brujas me habían dado buen ojo para descubrir si eran marca original o imitaciones.

MORENA-no me bajare (se cruzó de brazos)

QUINN-como quieras

Metí medio cuerpo dentro del auto, destrabe el cinturón, la tome de las piernas y la cintura y la baje.

MORENA-¿QUE HACES? SUELTAME (movía con furia los brazos y las piernas)

QUINN-listo, ya estas abajo. Que tú y Luigi (señale el bolso) tengan un buen viaje. Ya amaneció la luz del día te protegerá.

Luego de esas palabras me marche, había impuesto mi autoridad. Me repetía una y otra vez que no debía mirar hacia atrás, pero mis ojos escaparon de mi control y le dieron una fugaz mirada al espejo retrovisor. No iba rápido y aun la podía ver parada sola e indefensa.

Rayos, cuando quise reaccionar ya estaba retrocediendo.

QUINN-sube antes que me arrepienta

MORENA-(se subió a toda velocidad) muchas gracias, no te arrepentirás, te lo compensare lo prometo

Su hablar rápido y su voz aguda estaban logrando que me arrepintiera de haberla subido.

QUINN-guarda silencio, quiero viajar en paz

MORENA-claro ya me callo (hizo el gesto de cerrar su boca con un cierre) Por cierto…soy Rachel Berry

QUINN-Quinn Fabray (me presente sin mirarla)

Hacia una hora que viajábamos en silencio, no la miraba, pero por el rabillo del ojo veía que no perdía detalle del auto y de mí. No había hablado pero yo estaba segura que su mente era un gran sigo de interrogación, tarde o temprano soltaría esa verborragia indomable y el silencio se vería interrumpido por una voz chillona y cientos de preguntas.

RACHEL-¿Cuánto hace que cazas vampiros? (se los dije)

QUINN-hace muchos años

RACHEL-¿Cuántos?

QUINN-muchos

RACHEL-¿Cómo terminaste haciendo esto?

Voy a contar la historia de por qué cazo vampiros solo porque ustedes no la conocen.

QUINN-hay cazadores como yo en todo el mundo. No existe una organización que recluta gente. El destino es el encargado de escoger a un elegido, ese elegido cuando muere o se retira porque ya es muy viejo le hereda su poder y conocimiento a alguien de su misma sangre; un hijo o un hermano. En este caso mi padre me lo heredo, mi tatarabuelo, mi bisabuelo y mi abuelo fueron cazadores.

RACHEL-entiendo y cuando tu padre se retiró te otorgo su poder

QUINN-no se retiró por voluntad, lo asesinaron

RACHEL-lo siento mucho

QUINN-yo también. Desde que era pequeña él me entreno en artes marciales mixtas y en armas, me había contado porque me entrenaba, yo creía que estaba loco, pensaba que se preparaba para una tercera guerra mundial o algo así, pero una noche de octubre con solo 13 años me di cuenta que lo que me había dicho era verdad

RACHEL-¿desde esa edad cazas? (me miro sorprendida)

QUINN-los niños de mi edad jugaban y hacían estupideces pero yo cargaba con el peso del mundo en mis hombros (me miro y me sonrió con una dulzura que hacía tiempo no veía)

RACHEL-¿Qué hay de las personas? ¿Los gobiernos saben de la existencia de estos seres?

QUINN-solo muy pocos lo saben, el resto no tiene idea y los gobernantes tampoco. Por suerte los gobiernos más poderosos están entretenidos mirando hacia el cielo en busca de extraterrestres que no se dan cuenta de mirar bajo sus pies

RACHEL-¿has visto algún alien?

QUINN-espero nunca tener que hacerlo, esos enanos de enormes ojos negros y cuerpo gris me ponen los pelos de punta

RACHEL-jaja increíble

QUINN-hablo en serio, los odio. Cambiando de tema…aún tenemos muchos kilómetros por delante ¿Cuál es tu historia?

RACHEL-soy de Lima, Ohio, vine a Los Ángeles porque quiero ser famosa

QUINN-la fama hoy en día se gana fácil, sube un video porno a internet o si eres hueca y frívola puedes tener tu propio reallity show como las Kardashians

RACHEL-yo tengo talento de verdad, sueño con ser actriz o cantante, hacer algo así solo me daría fama efímera y no lo quiero, sé que puedo ganármela sanamente

QUINN-te estas metiendo en una jungla donde si no comes te comen, mostrarte como una niña de pueblo dulce e inocente no te ayudara, debes tener una actitud firme y fuerte, tienes que imponerte para que te respeten como quieres

RACHEL-gracias, lo tendré en cuenta

Mi radio solo marcaba una frecuencia, la mejor radio del mundo, pasaban rock y heavy metal del bueno las 24 hs. del día, justo en ese momento Kickstart My Heart de Motley Crue sonaba a todo volumen.

RACHEL-por dios (apago la radio) me va a explotar la cabeza

QUINN-me estoy conteniendo para no empujarte del auto

RACHEL-como puedes escuchar eso, son solo gritos y ruido a lata

QUINN-es una canción increíble, Nikki Sixx la escribió porque estuvo unos minutos muerto y dos inyecciones de adrenalina directo al corazón lo revivieron (ella fingía que no escuchaba) ¿a ver y que clase de música escuchas?

RACHEL-yo escucho a Barbra (me dijo con un rostro sonriente y soñador)

QUINN-¿Quién?

RACHEL-Barbra Streisand (me fulmino con la mirada)

QUINN-ahhh siii escuche ese nombre en algún lado, es la narigona que enamora a Robert Redford en una película ¿verdad?

Me había enfrentado a muchas criaturas maléficas pero tener al lado a una morena de metro y medio a punto de saltarme a la yugular era algo nuevo para mí y de verdad asustaba.

Pasamos el resto del camino discutiendo. ¿Qué clase de poder tenia esta chica? Primero logro que retrocediera y la subiera a mi auto y ahora estaba consiguiendo que me disculpara con una cantante que no conocía. Para que acabara con su perorata cedi y le dije que sentía mucho haber insultado a su ídolo, mis disculpas la calmaron y guardo los colmillos…hipotéticamente.

Miles de horas después…

QUINN-llegamos, estas en el centro de L.A

RACHEL-wow es más hermoso de lo que imagine (miraba a su alrededor)

Ella se bajó del auto y yo hice lo mismo sin saber por qué, sin dudas muchas horas sin dormir comenzaban a afectarme.

RACHEL-gracias por salvarme la vida

QUINN-de…de nada (le sonreí)

RACHEL-déjame abrazarte

Antes que pudiera reaccionar me había abrazado, pego su cuerpo al mío y me rodeo con sus brazos, si se lo están preguntando…yo también la abrace… no soy un ogro ni soy de piedra. Me siento en confianza para confesarles que una parte de mí, una recóndita parte de mí no quería deshacer el abrazo.

QUINN-buena suerte

RACHEL-espera…un nuevo mundo se abrió ante mis ojos y ¿me dejas a mi suerte?

QUINN-(saque de mi bolsillo una pequeña linterna con cuerpo de aluminio) mira…esta linterna es diferente a las otras porque tiene un foco que emite rayos UV, son tan letales como la luz solar. Es todo lo que puedo darte, al menos te protegerá de los vampiros

RACHEL-¿y qué hay de las cruces o el agua bendita? Soy judía pero puedo aceptar una cruz

QUINN-nada de eso funciona, es invento de las películas. Lo único que los mata es una estaca de plata directo al corazón, cortarles la cabeza o la luz del sol

RACHEL-gracias (nuevamente me sonreía con dulzura)

No soy tan insensible como parezco, la linterna la protegería, pero no le daría de comer, así que le di los últimos 50 dólares que me quedaban, no era mucho, pero al menos ese día no pasaría hambre. Al principio no quiso aceptarlos, pero logre convencerla y finalmente los tomo.

QUINN-cuídate

RACHEL-tu también

Me dio un beso en la mejilla y emprendió su camino, la observe hasta que llego a una esquina, se dio vuelta, me saludo con la mano y desapareció de mi vista y de mi vida…al menos eso era lo que yo pensaba mientras me dirigía a mi casa.