Las Garras del Destino
Mizuho
Capítulo 1
Dolor Permanente
-Vamos, amor, tú puedes!
-Duele!
-Rin, yo sé que puedes hacerlo… yo sé que eres fuerte…
-No puedo, Sesshoumaru, no puedo…
-Su pulso está a 220 latidos por minuto!
-AAAAAAAAAHHHHH!
Con aquel grito, Rin pujó con todas sus fuerzas y logró que su hijo, estancado en el canal de parto, encontrara la vía para salir.
-Es un niño!
Sesshoumaru la llenó de besos mientras sus ojos se inundaban de lágrimas.
-Te amo, mi amor!
-Te amo, Sessh…
-Rin…
Rin dejó de responderle.
-Rin?
Los médicos se apresuraron a asistirla.
-RIN!
…………………………………
-RIN!
Sesshoumaru se sienta de golpe en la cama, está empapado en sudor y su melena rubia platinada se le pega al cuerpo.
-Kami, Sessh, estás bien?
Sesshoumaru la abrazó con fuerza llenando de tiernos besitos la cabeza de su esposa.
-Tuviste otra pesadilla?
-Sí…
-Qué fue?
-Volví a soñar… cuando… cuando Max nació…
-Estás bien?
-Sí…
-Quieres agua?
Sesshoumaru asintió y se levantó para ir por ella.
-Sessh, aquí hay agua…
Sesshoumaru tomó el agua que Rin le ofreció. La abrazó.
-Gracias, preciosa…
Rin sonrió y lo besó en la cabeza.
-Mama!
Rin se levantó y fue por su pequeño que la llamaba a gritos.
-Max, es de noche, qué haces despierto?
-Papa, guito…
-Si, papá se asustó. Vamos a dormir…
-Mama, tigo…
-Vamos…
Rin lo cargó y lo llevó con ella a su habitación.
-Papa!
-Max…
Rin lo dejó en brazos de su esposo mientras se acomodaba en la cama. Sesshoumaru lo besó en la mejilla y le apretó el cachete con sus labios haciendo ruidos de animales. El pequeño rió a carcajadas. Posó sus manos en las mejillas de su padre y apretó su nariz.
-Papa…
Sesshoumaru sonrió y lo acomodó entre ellos. Max vio a ambos lados sin poderse decidir por alguno de sus padres. Tomó una mano de Rin y una de Sesshoumaru y se acostó sosteniendo ambas manos.
-Mama to papa, eien. (Mama y papa, siempre).
Ambos rieron, Rin lo besó en la mejilla.
-Sí, mami y papi siempre estaremos juntos.
-Mama…
-Dime…
-Aishiteru… (Te amo…)
-Yo también te amo, mi amor…
-Papa…
-Dime…
-Aishiteru… (Te amo…)
Sesshoumaru sonrió.
-Boku mo… (Yo también…)
…………………………………………
Pocos días después del tercer cumpleaños de Max, el mismo enfermó. El doctor sólo encontró una salida a su enfermedad. Un trasplante de riñón.
Dos años más tarde, Rin acaricia la cabellera de su pequeño, quien espera en la cama de hospital que lo dializaran.
-Mama, quiero jugar afuera!
-Hoy no puedes, sabes que tienes que cuidarte, sino, te me enfermas más.
-Mama, papa no puede comprarme un riñón nuevo?
-No, mi amor… los riñones no los venden en las tiendas…
Estuvieron jugando un buen rato hasta que Sesshoumaru llegó a la vez que el doctor.
-Hola, Max…
-Hola doctor, Kensai.
-Cómo te sientes hoy?
-Bien!
-Qué bueno. Después de esto, te sentirás mejor. Señora Kazami, quiere hacerlo usted?
-Está bien.
-Hay que cambiar la vena. No quiero abusar.
Rin se puso unos guantes estériles y le insertó los dos catéteres en el bracito que Max le ofreció.
-Qué valiente eres, mi amor…
Rin lo besó en la frente. Le colocó los tubos del dializador y encendió la máquina. El pequeño hizo una cara de desagrado pero luego se calmó.
-No les gustaría hacerle el tratamiento en la casa?
-Se puede?
-Sí… ya creo que tienes edad suficiente para cuidarte en casa. No es así, Max?
-Sí!
-Tengo que comprar la máquina?
-No. Me refiero a otro método. Se llama diálisis peritoneal. A ver si quieres, Max. Te hacemos una pequeña operación, donde inserto un catéter en tu barriguita. Te molestará un poco al principio, pero después, no lo sentirás. Y ya no habrá que inyectarte.
-En serio!
-Sí. También podrás caminar.
-De verdad!
-Sí. Verás… Esto es lo que pondré dentro de ti…
El doctor le mostró un tubo de algunos 20 centímetros.
-Pero sólo se verá esta partecita. Estará al lado de tu ombligo. Tu mami, te inyectará un líquido especial a través de este catéter. Y tendrás una bolsita conectada, sujeta a tu barriguita por una correa.
-Y la tapo con la ropa?
-Sí, la tapas con la ropa. Cada 4 o 6 horas, tu mami te cambia la bolsita y te pone líquido nuevo.
-Pero se tarda mucho!
-No, lo puede hacer en la mañana, cuando llegas del colegio, antes de la cena y antes de dormir. Y es mucho más rápido que la de la máquina. Y podrás jugar.
-Papi! Por fa! Yo lo quiero! Papi, sí se puede, verdad!
Sesshoumaru asintió.
-Cuándo se puede hacer?
-Si desean, mañana mismo. Tendrá que seguir con la máquina hasta que cicatrice.
-Mañana! Mama! Mañana!
Rin sonrió y besó a su pequeño en la frente.
-Mañana mismo, mi amor.
La cirugía fue según lo pautado y todo un éxito. Días después, Rin recibió un entrenamiento para el cuidado de Max y fue enviado a la casa.
2 meses después.
Rin le cambió la bolsita a Max y lo besó de buenas noches.
-Te amo, mi amor. Dulces sueños.
-Te quiero, mama…
Rin lo besó nuevamente y salió de la habitación. Al entrar en la suya, se acomodó al lado de Sesshoumaru.
-Aún nada?
-No… maldita sea! Es increíble que no pueda hacer nada!
-Mi amor… tranquilo. No es tu culpa… Ya sabemos que no es genético, ni que nada se lo causó…
-Aún así… con tanto dinero…
-Qué harías? Buscarlo en el mercado negro? Sesshoumaru, estamos haciendo todo lo que podemos por Max. Y eso me tiene en paz. Y con este tratamiento nuevo, mi hijo es feliz…
-Rin…
-Es feliz, Sesshoumaru, corre, juega, come, dibuja… hace tantas cosas que nunca creí verlo hacer… Aprende tanto! Ya lee de corrido…
Sesshoumaru sonrió.
-Le hacemos una fiesta de cumpleaños?
-Le quiero hacer la mejor fiesta del mundo… porque será su primer cumpleaños feliz. Es como si mi bebé volviera a nacer…
Sesshoumaru la abrazó y la besó en la sien.
-Nuestro bebé, Rin…
-Así es…
Rin lo besó en la mejilla.
-Además… es la primera vez que puedo dormir tranquila, sin el miedo a que mi bebé no despertará al día siguiente…
-Encontraré la salida, mi amor… te lo prometo…
Sesshoumaru la besó con ternura.
-Sessh…
-Hm?
-Te amo, mi amor…
-Yo también te amo, preciosa…
Se besaron apasionadamente, Sesshoumaru rodeó su rostro con sus manos mientras profundizaba el beso. Rin dejó escapar un suspiro mientras sentía la lengua de su marido recorrer el interior de su boca.
-Sessh…
-Eres hermosa…
Se besaron nuevamente y quedaron acostados aún entre besos. Sesshoumaru la fue desvistiendo mientras llenaba su pecho de besos y caricias, su estómago, su vientre. Rin acarició su cabellera mientras su cuerpo se estremecía con cada caricia.
-Ah! Mi amor!
-Deliciosa…
Se amaron durante toda la noche, dejando salir ese deseo reprimido por tanto tiempo, donde incluso se sintieron culpables de provocarse placer mientras su pequeño sufría. Ahora era diferente. Sin remordimientos.
………………………………………
Rin despertó y vio a Max frente a ella, sus ojos dorados examinaban sus facciones con detenimiento, su pelo negro con sus rizos ensortijados.
-Mama…
Le habló en un susurro.
-Max… hoy es sábado, no?
-Sí, mama, pero me tienes que cambiar…
-Qué hora es?
-Las 5, mama, mi reloj sonó, pero el tuyo no.
Rin se restregó los ojos y se sentó en la cama.
-Kami, qué sueño!
Max se quedó viendo a su madre desnuda.
-Mama, porqué no tienes ropa?
Eso terminó de despertarla y de inmediato alcanzó una yukata para cubrirse.
-Déjame lavarme la cara y voy a cambiarte…
-Sí…
Rin entró al baño y se lavó la cara y los dientes. Luego fue a la habitación de Max y se esterilizó las manos.
-A ver, mi amor…
Rin hizo el procedimiento usual. Luego de colocar la bolsa en su lugar, le acarició la cabeza.
-Qué tal si duermes un poco más?
-Mama?
-Dime…
-Papa y tú estaban haciendo el amor?
-M-Max…
-Papa me dijo que los papás y las mamás hacen el amor…
-Eso te dijo? Y no te dijo como es?
-No… me dijo que es como probarte cuánto te ama… mama, porqué necesitas pruebas? Cómo yo te lo pruebo?
-No, mi amor… no es una prueba. Es una manera de decirlo. Tú me lo dices y eso me hace feliz.
-Yo te amo mama…
-Y yo a ti, cariño…
-Mama…
-Dime…
-Si no encuentran un riñón… yo me voy al cielo?
-No te irás a ninguna parte. Porque encontraremos ese riñón.
-Mama…
-Dime.
-Yo quiero pedirte perdón…
-Por qué?
-Porque yo sé que cuando me enfermé, tú querías otro bebé… pero después le dijiste a papa que no porque me tenías que cuidar. Mama, enséñame a hacerlo yo… y así podrás cuidar al bebé…
Rin sonrió mientras acariciaba sus mejillas.
-Tengo a mi bebé justo aquí. Ese otro bebé lo tendremos cuando tú te mejores, mi amor… Ahora descansa, es muy temprano.
-Mama…
-Dime…
-Eres muy bonita…
-Gracias, mi amor…
Rin lo besó con ternura y salió de la habitación. Al volver a la cama, Sesshoumaru la abrazó dormido. Ella sonrió y acarició su mano que reposaba justo sobre su vientre.
……………………………………
Sesshoumaru sonrió cuando al llegar a la casa, Max lo recibió corriendo hacia él con un examen en las manos.
-Pasé! Papi! Pasé!
-Sí? A ver… vaya! 95! Eres todo un genio!
Max sonrió.
-Es porque mami es la mejor profesora del mundo!
Sesshoumaru rió y dejó sus cosas de la oficina sobre un sillón. Fue al estudio y saludó a Rin con un beso.
-Hola, preciosa.
-Hm! Hola, mi amor…
Rin sonrió mientras terminó de corregir el examen de matemáticas.
-Rin, esa es la nota de Max?
-Sí.
-Mí Max sacó perfecto en matemáticas?
-Sí.
Sesshoumaru abrazó a su hijo y lo felicitó por sus calificaciones.
-Vamos a salir a cenar. Qué quieres comer?
-Mama, puedo comer carne?
-Sí, mi amor, hoy puedes comer toda la carne que quieras.
-Sí! Quiero lo que come papa!
-Y eso es?
-Costillitas!
Sesshoumaru sonrió.
-Pues costillitas serán!
Rin sonrió al ver a su pequeño tan feliz, Sesshoumaru llamó a su hermano y quedaron de encontrarse en el restaurante. Al ver a su tío, Max se volvió loco de alegría y brincó a sus brazos.
-Tío!
-Hola, Max!
-Hola, Max…
Su actitud fue mucho más tímida con la esposa de su tío.
-Hola…
-Kagome, Inuyasha, cómo están?
-Todo va de maravilla. Qué me dicen de Max?
-Está bien…
-Qué tal el tratamiento nuevo?
-Lo puedes ver. No duele, no molesta… hasta se olvida de que la tiene.
Kagome acarició la cabellera de Max.
-Me alegra saber que estás tan bien.
El pequeño se sonrojó a todo dar. Rin sonrió sospechando que la razón de su comportamiento era que a Max le gustaba la esposa de su tío.
-Y cómo estuvo Francia?
-La verdad? Muy bonito para ir de paseo. Pero horroroso para vivir allá. Nadie sabe conducir!
Rin rió.
-Entonces? Se quedarán aquí?
-Sí.
-Me alegra.
-Inu, no les vas a decir?
-Ah! Sí… Serán tíos.
-Qué! Felicidades!
-Felicidades, Kagome!
Kagome sonrió dándole las gracias. Max parecía desubicado ante el tema, y sentándose al lado de su madre le preguntó lo que pasaba.
-Van a tener un bebé.
-Pero quién?
-Kagome y tu tío.
El pequeño sonrió le dio a Kagome un gran beso en la mejilla.
-Felicidades, tía.
-Gracias, mi amor.
Max volvió a sonreír y volvió con su madre.
……………………………………………
Al llegar a la casa, Sesshoumaru cargó a Max a su cama ya que se había dormido en el auto. Rin le comenzó a cambiar la bolsa, como no se sentía nada, no lo despertaría. Sesshoumaru se quedó con ella mientras lo hacía.
Entraron en su habitación, donde Sesshoumaru abrazó a Rin.
-Te amo, preciosa…
-Y yo a ti, mi amor…
-Estoy orgulloso de ti…
Rin se dio vuelta para verlo a los ojos.
-Sessh!
-Así es… estoy orgulloso de ti por todo lo que haces como madre… pero en especial porque no te olvidas de ser mi esposa…
-Sessh…
-Me acompañas a un baño?
-Sí…
Estaban en la tina, donde Rin reposaba sobre el pecho de su esposo quien la llenaba de besos.
-Le estuviste hablando a Max sobre sexo…
-Pues sí… En realidad encontró un canal pornográfico en la parábola y pues, tuve que explicarle lo que hacían.
-Creí que los habías bloqueado todos.
-Yo también, parece que es nuevo. Te preguntó algo?
-Sí… la semana pasada, me quedé dormida y él vino a despertarme para cambiarlo… y yo había olvidado vestirme… me preguntó que si habíamos hecho el amor.
Sintió a Sesshoumaru reírse.
-Lo que más me extrañó es que le dijiste que es una forma de demostrarme que me amas…
-Yo no le dije eso. Le dije que es una forma de nosotros mostrar nuestros sentimientos.
-Sessh…
-Yo te amo, preciosa…
Rin lo vio sobre su hombro y él la besó apasionadamente. Acarició sus mejillas. Rin dejó escapar un suspiro. Sesshoumaru la abrazó.
-Qué pasa? Porqué esa mirada tan triste?
-Kami, Sesshoumaru, ya quiero que todo esto termine… no soporto más el ver a mi bebé sufrir… Sessh… me estoy muriendo de la tristeza…
Sesshoumaru la abrazó con fuerza.
-Perdóname… perdóname, perdóname…
-Sessh?
-Te ofrecí toda la felicidad del mundo, pero sólo te he dado una desgracia detrás de otra…
-No! Mi amor! No es así!
-Cómo es entonces? Casi mueres en el parto y para colmo nuestro hijo nace enfermo…
-Sesshoumaru, no es tu culpa, por Kami, compréndelo ya, no es tu culpa, mi amor… Yo sólo te lo dije para desahogarme… pero no es tu culpa…
-Sin embargo, el tiempo corre en nuestra contra y no consigo una solución…
Rin se aferró a su pecho.
-No… no quiero pensar en eso…
-Rin…
-No…
-Rin, mi amor… debemos ver ambas caras de la moneda.
-Si mi bebé se me muere, yo me muero con él… no quiero pensar en eso…
Sesshoumaru removió sus lágrimas de sus mejillas.
-Lo siento…
Cuando el agua se enfrió, salieron de la tina y poco después se acomodaron en la cama. Rin se pegó como lapa del pecho de Sesshoumaru y sin querer hablar más, se comenzó a quedar dormida. Sesshoumaru acarició su cabeza y espalda todo el tiempo.
-Sessh?
-Hm?
-Dime la verdad, me la dirás?
-Sí…
-Estás conmigo por Max?
-No.
La manera tan inmediata de contestarle, hizo que Rin levantara la mirada.
-Mi amor…
-Estoy contigo porque te amo. No por que Max esté enfermo. Rin…
Sesshoumaru la besó en la mejilla.
-No dudes de mí, mi amor… eso me duele…
…………………………………………
Qué tal? Les anuncio desde ahora que éste fic no será todo color rosa. Estoy probando una nueva forma de escribir, en la que no todo es estilo televisa, todo sale mal primero y al final se arregla. Esto va apegado a la realidad con la que vivimos día a día. (Claro que le meteré un poco de fantasía). Espero que les guste como mis demás trabajos y recuerden, si no dejan reviews, no sabré por dónde voy…
Besitos
Mizuho
