Los personajes le pertenecen a Kishimoto, creador del manga de Naruto.
Diálogos "Bla, Bla, Bla"
Pensamientos "Bla, Bla, Bla"
©Ares-sama
Importante: Esta será la primera vez que cambiare la forma como escribo e identificó los diálogos. Leer las notas de autor al final del capítulo. NaruFem y otros personajes también podrían cambiar su genero, es una historia oscura. Todos los personajes serán canon o se intentara apegar a este con respeto a sus personalidades. Voy hacer todo lo necesario para no introducir personajes oc
Summary: Era increíble que nadie antes lo hubiera notado, la contextura de su rostro, el tamaño de su mano, su pudor y su forma de sonrojarse, esa manera de actuar de las mujeres Uzumaki. ¿Por qué Naruto esconde quien es realmente? Hay un oscuro secreto sobre de este.
Cronología: Esta historia transcurre una semana antes de los exámenes Chunnin.
Importante: Esta historia tiene una versión Beta que pueden encontrar en mi perfil que pronto sera borrada.
Prologo
Fue esa pequeña sonrisa que le dio a sus compañeros de equipo tal vez la mayor muestra que algo no era normal en él, pero nadie estaba realmente enfocado en la manera como se estaba expresando tan tímidamente. Estaban celebrando su éxito en la misión del país de las Olas, disfrutando del mejor Ramen del mundo el cual era de Ichiraku.
Debería estar más emocionada, después de todo habían sobrevivido al enfrentamiento contra uno de los más temibles espadachines de la niebla.
Derrotaron a Zabusa, era cierto y por ello debería estar saltando de alegría, salvaron a Inari, a su abuelo y la aldea, fue una gran misión pero sentía su pecho oprimirse ante los pensamientos sobre Haku, su forma de dar la vida por alguien más que solo lo valoro en el último instante.
"Naruto, ¿estás bien?" Sakura le había hablado, preocupada por el reciente silencio de su compañero de equipo, por lo general Naruto ya debería estar en su séptimo plato, pero apenas llegada al cuarto, algo no estaba bien.
Pero el rubio solo levanto lentamente el rostro intentando dar una de sus falsas sonrisas, aquellas que al principio la Haruno, como el distante Uchiha miembros de su equipo le creían, pero ya no. Lo conocían muy bien y sabían que algo estaba ocultando.
Pero para Sasuke los problemas del Dobe, eran eso, sus problemas, nada por lo que tuviera que estar preocupado o interesado, Naruto siempre se reconfortara solo y sonreirá, para él lo más importante era recuperar energías. Además no era como si Naruto pudiera entender su dolor.
Kakashi solo leía su libro, fingía que la mirada distante del chico no le correspondía, no era su obligación. Aunque realmente no sabía cómo tratar con él, lo que le había dicho el tercero Hokage luego del regreso de su misión lo había dejado demasiado perturbado.
"Estoy bien Sakura, créeme ttebayo" la pelirosa no estaba muy segura de las palabras de su compañero, iba a refutar estas pero sintió un fuerte empujón por su espalda para voltear y mirar con molestia a Ino quien no dudo en colgarse de los brazos de Sasuke y mirar de manera desafiante a Sakura.
Luego apareció ingresando al restaurante un aburrido Shikamaru y Chōji, disfrutando un paquete de papas fritas, todos se animaron, se sentaron comenzaron hacer sus pedidos de Ramen, al finalizar parecía ser que el grupo ocho se les uniría luego de ver como Kurenai ingresaba con una sonrisa seguida por sus estudiantes.
Antes de darse cuenta todos estaban en una gran mesa disfrutando y gritando en celebración del equipo siete, por su gran misión en el país de las olas, con una Ino y Sakura alabando a Sasuke como el gran héroe, este solo permanecía en silencio.
Hinata estaba intentando no dejarse consumir por su timidez pero podía ver claramente el estado de animo de Naruto, era demasiado deprimente tanto que no podía disimularlo como en otras ocasiones, muchas veces había sido testigo de cómo el rubio cuando sentía que sus fuerzas le faltaban en la academia se retiraba a un salón abandonado y lloraba con fuerza, desahogándose de todas sus dolencias quería hablarle e intentar reconfortarlo pero no pudo, rápidamente Kiba paso sus manos por los hombros de Naruto y comenzó hablarle de trivialidades.
En el fondo Hinata agradeció que las intenciones de Kiba eran animar al Uzumaki y estas estaban funcionando, Shikamaru prontamente noto aquello y se unió a la conversación, estaba realmente cansado y sobre todo agotado de decir lo problemático que era todo, sobre todo de los actos de fans de sus amigas sobre el Uchiha. Eran shinobi, no estudiantes ordinarios.
Naruto era experto en fingir y fingía el agrado de la compañía.
Pero Shikamaru no se dejó engañar, observo con detalle cada acto y comportamiento del rubio, no se había dado cuenta del rostro del Naruto era ovalado tal vez demasiado para ser el de un hombre, eso era una tontería pensó. Sus labios eran algo delgados, le recordaban en cierto modo a los de Ino, luego noto un pequeño tic en sus manos, como de jugar con las uñas, mientras que Kiba mas abrazaba con fuerza al rubio y le contaba sobre sus grandes hazañas el tic o el movimiento involuntario era cada vez más notable, estaba incomodo lo cual era algo difícil de creer sobre todo de Naruto y las manos de este, eran demasiado raras, no por que tuvieran un dedo de más o estuviera naciendo otro dedo entre ellas, si no por lo delgadas de esta.
Recordó el Nara que en la academia había notado lo mismo sobre el rubio, pero su definición sobre aquello, era el Naruto sufría de desnutrición algo que se lo informo a los maestros pero al ver tan poco apoyo o incluso interés recibido, este comenzó a llevar algo de comida extra en su almuerzo, pronto la idea la siguió Chōji para darle al rubio, pero cuando llego Iruka-sensei aquello dejo de ser necesario.
Pero ahora notaba que los brazos de Naruto habían crecido pero conservaban la misma estética. Todos esos pensamientos eran demasiado problemáticos.
La celebración continuo, una hora más hasta que todos se retiraron. Tal vez no era una generación muy unida pero estaban cerca de cumplir su año de haber salido de la academia y este fue un reencuentro para todos.
Kiba caminaba con una sonrisa en su rostro, como si hubiera hecho una travesura, Shikamaru pensaba en lo molesto de ello, tal vez no quería saber sobre esto.
Pero el silencio era demasiado problemático, sobre todo porque Kiba lo miraba de forma risueña esperando, impaciente que le preguntara lo que hubiera descubierto.
Al final el Nara se dio por vencido y miro al Inuzuka, tendría que aguantárselo un par de cuadras más hasta que llegaran al camino que separaba sus destinos.
"¿Qué te pasa ahora?"
"Jeje, mi olfato ha descubierto algo, parece ser que una de nuestras compañeras está creciendo, de seguro que es Ino" Kiba se rio con fuerza y Shikamaru pareció no entender, para un genio aquello fue estresante y caminaron en silencio mientras pensaba en todas las opciones de aquellas palabras, ¿están creciendo? Que hubiera querido decir con eso.
Un momento, y Shikamaru se sonrojo con fuerza ante aquello volteo para mirar a Kiba con cierta repugnancia mirada que no pasó desapercibida por este.
"Oye porque me miras así"
Akamaru ladro en señal de apoyo.
"Eres un enfermo" dijo Shikamaru mientras caminaba hacia su casa. El en verdad no necesitaba saber eso.
Ambos prosiguieron en silencio, no necesitaba aquello tenía poco o nulo interés en colaborar con las tontas especulaciones de Kiba y además de eso Ino era su compañera de equipo, aunque también podría ser Sakura hasta Hinata quien parecía la más desarrollada de las tres. En verdad Shikamaru maldecía a Kiba por poner aquellos pensamientos en su mente.
Era demasiado problemático.
"Oye Shikamaru"
Este volteo con cara de irritación a mirar a Kiba, que tontería iria a decir ahora pensaba el Nara.
"Naruto huele últimamente mucho a jazmín, lo habías notado"
Shikamaru alzo una ceja en señal de extrañeza pero Kiba se rio con fuerza de lo nervioso que estaba, luego de eso decidido comenzar a correr y gritar algo sobre que su madre y hermana lo iban a matar.
Ahora que lo pensaba se dijo el Nara. El en verdad olía algo interesante en el rubio.
"Que problemático"
Se dijo mientras se rascaba la cabeza, solo era Naruto.
Naruto caminaba por las solitarias calles, paso por un pequeño parque y vio un columpio que le traía duros recuerdos, lo ignoro intento continuar, este lugar no le gustaba, le traía malos pensamientos, circunstancias que por algún motivo no conseguía recordar, tal vez había un parque lleno de chicos de su edad, eran cercanos a él, lo recordaba pero no sus rostros, solo sus sonrisas.
Llego a su barrio, si era suyo. Era pequeño pero lujoso, un amplio espacio, tal vez unas seis casas la principal donde vivía era en palabras cortas una pequeña mansión, dos pisos, un amplio patio, casi ocho piezas habían en estas, pero Naruto no dormía en ninguna de ellas.
¿Por qué un huérfano necesitaría algo tan espacioso? Era algo que no entendía, caminaba por los fríos pasillos, cada vez más apresurado, era como si tuviera miedo de los fantasmas de quienes antes Vivian en ese lugar.
Llego a lo que era su habitación, la más pequeña de todas, prendía las luces cercanas a esta, no quería que la oscuridad le recordara constantemente lo solo que estaba en este mundo.
Se organizó para dormir, se quitó la chaqueta que era dos tallas más grandes que su cuerpo.
Su pecho que era aplastado por las vendas que cubrían su torso, no quería que nadie se enterara, si la gente supiera nuevamente seria lastimada.
Toco con lentitud, su cabello extrañaba tenerlo largo, hubo una época en que llego a tenerlo, se sentía bien pero a la vez seco y demasiado grasoso. Se supone que así los chicos deberían tenerlo pensó para sí misma.
Miro todo su cuerpo estaba lleno de cicatrices, lleno de las marcas dejadas por los golpes y los látigos, todos ocasionados por las mujeres que cuidaban de ella. Era demasiado flaca, tal vez era la mala alimentación que intentaron tantas veces corregirle, miro con detalle como podría ver con lujo de detalles la marca de sus propios huesos.
Llego a tener en un año casi una veintena de mujeres que la cuidaban, nunca se quedaban mucho, nunca le agradaban pero no se sentía realmente tan solo en este gran lugar, todas le decían una y otra vez "monstruo, eres un vil monstruo".
No era un monstruo, claro que no lo era, jamás lastimaría a nadie, jamás permitiría que el Kyubi lastimara.
Jamás, ojala pudiera creer en esas palabras.
Abrió el armario y se acostó sobre las cobijas y las almohadas almacenadas, los espacios pequeños le gustaban, se sentía más segura.
Fue una noche como las demás, un fuerte dolor de estómago debido al hambre que tenía, debió haber aprovechado más y comer más Ramen pero su estado de ánimo se lo impidió, bueno no sería la primera vez que comería poco o nada.
Tomo el pequeño cuento de la princesa de la luna. Lo leyó en silencio, no diría nada, u opinaría lo conocía al derecho y al revés, solían leérselo, no recordaba quien lo hacía pero había alguien que llego a quererla, se preguntaba si en verdad existía una princesa en la luna que cumplía los deseos. Cuando era niña solía observar la luna en silencio y rezaba, pedía e incluso suplico un par de noches que le concediera su deseo no nunca más estar sola.
Pero al final como siempre sus ojos se cerraron, debilitados por el cansancio.
Sasuke miraba la luna con intensidad, era igual que aquella noche, la noche cuando lo perdió todo. Su sharingan se activó y con ello el odio que sentía hacia todo su entorno, todo no estaba funcionando como deseaba.
Cerro con fuerza la ventana de su casa, mientras caminaba por las solitarias habitaciones. Hasta que llego a su antigua habitación hacía tiempo que había decidido dormir en la sala y no sabía por qué sus piernas lo habían traicionado. Miro el pequeño peluche que estaba sobre su cama, lo tomo entre sus manos y sin poder evitarlo lo apretó con fuerza hasta que lo lanzo contra la pared.
Era el peluche de la princesa de la luna, eran tonterías. Cosas idiotas que antes solía leerlo a esa estúpida. Que le habría pasado a esa niña, pero Sasuke le dejo de importar mientras se quitaba su camisa, ese largo cuello le daba demasiado calor últimamente, pero no importaba era gracias al estilo de esta que nadie veía su largo cabello.
Notas del autor.
Primer capitulo, algo corto pero no olviden que es una introducción.
Como muchos ya saben hace un par de días, había anunciado que iba a reformar y volver a retomar las ideas inicias de muchas historias. Este fic es uno de ellos.
He cambiado muchas ideas por que no estaba de acuerdo con el giro que estaba dando. Espero que le den una verdadera oportunidad a esta historia, en mi opinión en verdad la merece.
