Los personajes no me pertenecen. son Dan Signer
Esta historia inicia al día siguiente de los acontecimientos de Mr. Memory y esta historia es un One-shot, pero si le va bien pueden aparecer más capitulos
Escuela Finnegan. Adam se encuentra en su salón de clases, sus estudiantes se encuentran en el recreo. Aun pensando en las cosas que habían pasado, al fin tenia a Echo. Pero por su estúpido plan de borrarle la memoria a Derby, para que no revelara que estaba saliendo con Echo.
Pero todo, salieron mal y Echo fue quien olvido que estaba saliendo con Adam y para colmo de males. Llego a la escuela una nuevo joven profesor que provoco al parecer que Echo se sintiera atraído por él. En ese mismo momento sonó el nuevo teléfono móvil de Adam
Si. Adam Young – respondiendo desanimado el pobre. Lo llamaba una amiga que había hecho en la universidad, creo que recordaran a Sidney Finkelbaum
Adam. Que sucede, te siento deprimido – se le escuchaba muy preocupada por su amigo
Respiro y trago saliva. Respondiéndole – Sid. Han pasado algunas cosas
Haber, creo saber que pasa. Es por alguien de nombre, Echo – pregunto la rubia
Adam sentado arriba de su mesa. Asintió con la cabeza y le dijo – Si
Aun no… sucede nada entre ustedes – pregunto más tranquila, pensando que era eso
El rio con amargura – diciéndole – La verdad es que fuimos novios, pero ahora no y dejo mi clase, yéndose a la de otro chico profesor
Que…explícame – le pregunto tosiendo
El comenzó a recordar y le conto la historia – Bueno, todo comenzó en el día del cumpleaños de Echo…
Pocos minutos después.
Pero Adam, no puedes inventar un experimento, para que ella recuerde – Sid le consulto a Adam
Adam miraba los papeles que estaban en su mesa, eran planos de ideas no concretas – Estoy demasiado deprimido, para inventar algo
Vas a permitir que otro chico te la gane, después de todo lo que han pasado – le regaño
Claro que no, pero – estaba diciendo, pero se detuvo al escuchar a Sid
Lucha por ella, como lo vienes haciendo desde el primer día – le contesta tratando de motivarlo
El se movía el cabello – No sé, tal vez. Deba irme y dejarla tranquila
Pero tú la amas y ella a ti – le respondió – mientras que Adam trataba de aguantarse las ganas de llorar
Claro que la amo, desde el primer día en que la vi. Aun lo recuerdo, era mi primer día y ella estaba llegando tarde, pensó que era un alumno nuevo y no su profesor. Pero ella ya no recuerda que me ama
Hazle recordar, ese amor. Debo dejarte, pero mañana te llamo para saber que paso. Cuídate Adam, un beso – ella colgó y Adam, guardo su teléfono móvil
Te extraño. Echo – pensó en voz alta, mientras que fuera del aula de clases. Alguien había escuchado la conversación. Ella era Echo que se encontraba detrás de la puerta
Adam – susurró ella y le cayó una lágrima por la mejilla. La castaña se tocaba la cabeza, mientras tenía recuerdos borrosos de ella con Adam
