Aquí les traigo otro fic, si alguien leyo "Confia en Nosotros", esta será la pequeña continuación, espero les guste...
Besitos ^^
La brisa marina golpea mi cara con delicia, los últimos rayos del sol dan directo en mi cuerpo, calentando y dándome exquisitos escalofríos en la espalda, la explanada en la que me encuentro es de un verde esmeralda precioso, mis pies descalzos sienten la suavidad del césped, mi vestido oscila por el viento y mi mirada aun sigue perdida entre esa belleza.
No sé hace cuanto que me encuentro en este estado de trance, tampoco me importa mucho, pero podría apostar que cuando llegué, el sol calentaba mas fuerte.
De pronto el frío se hace insoportable, el sol a lo lejos se despide con un color anaranjado maravilloso, me abrazo y froto mis brazos tratando inútilmente de transmitirme calor, una puntada atraviesa mi corazón dejándome una sensación de soledad en mi pecho, siento que mis ojos se inundan y cuando ya me es imposible contener las lagrimas cierro mis ojos y estas desobedientemente se deslizan por mis mejillas.
Y lloro, por no poder sacar la basura que tengo dentro de mi, lloro por que me niego día a día a ser feliz, lloro por que me aman y no sé si puedo amar.
Recuerdos inundan mi mente, me hacen sentir vacía y llena a la vez, tengo una vida envidiable, un trabajo de ensueño, una familia amorosa, y amigos que me apoyan constantemente, pero algo dentro de mi no me deja estar tranquila, y lamentablemente sé que es.
El llanto persiste, se hace insoportable, me ahoga, hace que me atragante, puedo saborear la sal de ellas, y esto solo hace que llore más.
Siento que mis piernas flaquean, ya no puedo soportar mi propio peso, y cuando me rindo a sostenerme en pie, unas calidas manos aferran mi cintura, brindándome el apoyo que necesito.
- Deberías volver a casa – me dice con esa suavidad de la que es dueño, pero en el fondo sé que es una orden – Se hace tarde
- Lo sé – recuesto mi espalda en su pecho y la tibieza de ese cuerpo tan familiar aminora solo por el momento la angustia de mi corazón
- Tu esposo te estará esperando – "Tu esposo" siempre que estamos a solas le dice así – Vamos
Siento que me toma por un brazo con delicadeza, pero al no obtener reacción por mi parte, tironea bruscamente para llevarme a casa.
Me encamina por el frondoso bosque, sé que en unos minutos saldremos al claro donde cada verano venimos a acampar con nuestros viejos amigos, y a pesar de que podríamos habernos Desaparecidos en la orilla del mar, él que quiere alargar nuestra compañía con esta estupida caminata.
Llegamos al claro y nos detenemos aun con los árboles alrededor, me da la espalda y aprieta los puños haciendo que sus nudillos se vuelvan blancos, su cuerpo se sacude con pequeños temblores, y eso me confirma que esta llorando.
- Perdóname – susurra apenas audible – Soy un idiota
- Si, lo eres – digo con resentimiento en la voz, y es que alguien debe tener la culpa en todo esto, y para mi es mas fácil que él la tenga.
Se voltea mirándome con esos ojos verdes que enamoraron a mi mejor amiga, los que me tientan cada vez que los veo, se acerca peligrosamente a mí y antes de que pueda decir algo, le tomo de la camisa y me desaparezco con él.
Después del sentimiento vertiginoso que se me produjo en el estomago, alzo la vista a una casa pequeña pero preciosa, las luces están encendidas, supongo que esperando a alguien.
- Nos vemos – le digo soltando su camisa – dale cariños a Ginny
- Hermione – posa su mano en mi hombro – te quiero
Y solo esas dos palabras bastan para destruir mi coraza, me aferro a su pecho como una pequeña, las lágrimas me inundan y su camisa se empapa, me siento mal, y mi corazón suena como si se estuviese quebrando, el llanto vuelve a absorberme y no puedo hacer nada mas que maldecir entre dientes, a los pocos minutos me controlo, ahora solo debo salir dignamente de esta situación.
- Gracias – le digo mientras poso mis ojos en lo suyos – Yo también te quiero, por algo somos amigos
- No lo digo en esa forma – baja la cabeza – ya sabes como, te lo dije ese día en la tienda
- Lo sé – suspiré
- Ginny me espera – se voltea y me dirige la última mirada antes de Desaparecerse
- Lo sé Harry – "Demonios" ¿tendré siempre que saberlo todo?
Miro de nuevo a esa pequeña casa, me acerco a la cerca blanca y con mis manos temblorosas por alguna extraña razón la empujo y cierro al entrar, me adentro por ese camino angosto de piedras planas, llego a la puerta y me dispongo a golpear, pero pronto recuerdo algo muy importante.
- Es mi casa, tienes llaves Hermione – digo para mi misma
Saco mis llaves que supongo en algún momento habré puesto en mi bolsillo trasero, giro la cerradura y en menos de un segundo estoy en la salita de mi hogar, cierro tras de mi y los susurros llegan a mis oídos.
- Te digo que yo no lo tome, no molestes – reprochaba
- Pero no esta en mi alcoba Hugo, solo tu me gastas bromas – replicaba
- No es mi culpa que seas una desordenada – le saco la lengua
- Sabes que no lo soy, de hecho, en esta casa soy la mas ordenada – se puso las manos en las caderas, típico de mi
- Mamá – exclamo
- Bueno, a parte de ella claro –
- No sabelotodo, es mamá, atrás tuyo Rose - me apunto
Les sonrío en cuanto me prestan atención, mi Rosie corre a abrazarme y con un puchero comienza a recriminar.
- Mamá, estoy segura que Hugo me ha sacado el libro de Hogwarts que tu me regalaste – lo apunta
- Cariño, no apuntes a tu hermano con el dedo, es de mala educación – Hugo le saca la lengua – y tu, devuélvele a tu hermana su libro – la cara de mi Hugito se descompone – sé que tu lo tienes, no me hagas ir a buscarlo.
El silencio reina, rose esta cabizbaja mientras observa con falso interés sus zapatos, y mi Hugo me mira tratando de descifrar como descubrí lo del libro.
- Esta bien – dice rindiéndose – pero no es mi culpa que mi hermanita sea una obsesionada con los libros
- Recuerda que tu madre también lo es – le reprendí
- Bah – bufó y sin más subió dando zancadas las escaleras, recordándome otra vez quien es su padre
- Gracias mamá – me dice mi pequeña – ahora iré a terminar de recoger mis cosas
Y se va, dando pequeños saltitos, me deja sola preguntándome si Luna será una buena influencia, a lo que sonrío abiertamente
- Amo verte sonreír – unos brazos me sostienen por detrás
- Amas todo de mí – le digo coquetamente
- Cierto – me besa el cuello – pero te amo aun mas cuando estamos en la cama
Me sonrojo, y lo siento sonreír aunque esta a mi espalda, no puedo evitarlo, aun a pesar de todos estos años, cada vez que se me insinúa, un rubor en mis mejillas se apodera de mí.
- De…debo ir a…ver a los niños – digo con un calor en mi estomago
- No, debes ir directo a mi cama – me voltea y me seduce con sus ojos – Amor, nuestra cama esta necesitando atención, tal vez podemos darle un hermanito a Hugo, o hermanita a Rose ¿Te parece?
- Ron – le digo aparentando indiferencia – sabes que no podría lidiar con cuatro niños
- ¿Cuatro? – me pregunta sin entender
- ¡Claro! Rose, Hugo, tu y mas encima ¿Quieres otro? – le contesto con una sonrisa
- ¡Hey!, que no soy un niño – alegó con falso aire ofendido – si quieres te lo demuestro ahora mismo
Siento sus manos bajar a mi parte trasera, dejando mientras baja un calorcillo delicioso, aprieta mi trasero con descaro mientras su lengua traza figuras en mi cuello, haciendo que mi garganta emita rebeldes gemidos imposibles de reprimir, y cuando estoy por rendirme a aquel placer una tos nos devuelve los pies a la tierra, o por lo menos a mi.
- Hmmm…no quiero interrumpirlos pero…necesito que papá me ayude en algunas cosas – mi huguito esta con cara molesta – y he de recordarles de nuevo que en esta casa vivimos mas personas, para algo tienen una habitación para ustedes – dicho esto se va con aire molesto
- Oops, ¿Qué mosca le ha picado? – pregunta mi esposo
- Solo no le gusta que te acerques mucho a mamá – dice mi pequeña acercándose y abrazándonos – el es muy celoso, sobre todo con mamá y…pensándolo mejor, es igual a ti papá
- ¿A mi? Pero si yo no soy tan celoso – le dirigí una mirada de "Amor, si lo eres", él bufo y se fue en dirección a la pieza de Hugo, "son iguales"
- Emmm… ¿mami? – me dice rose con la cabeza gacha – puedo hacerte una pregunta
- Claro cariño – le digo arrastrándola hacia el sillón – dime
- ¿por que llorabas al legar a casa?
- ¿Cómo? – pregunte desconcertada
- Te vi, con el tío Harry, no era mi intención espiar, pero justo te vi aferrarte a él, y comprendí que llorabas ¿Por qué mami?
- Merlín Rose, sabes que no me gusta que te metas en los asuntos de grandes – le acaricie el cabello
- Lo sé, pero debía preguntar
- Mira cielo, el tío Harry y yo somos muy buenos amigos, y a pesar de que nos queremos mucho, hay ocasiones, como la que presenciaste, en que uno discute y dice cosas sin querer, o que duelen, él y yo solo conversábamos de algo que paso hace muchos años, cuando yo era demasiado joven, aun así, ese problema no se ha resuelto, pero tu tranquila, que eso es asunto nuestro.
- No me gusta que llores mamá, sé que soy pequeña para comprender lo que tu has vivido, tengo 10 años y también sé que no es mucho, pero sé que si lloras es por algo de suma importancia, recuerda que soy muy parecida a ti, y no me gustaría que me tomaras como una idiota.
Me sorprendieron en demasía las palabras de mi hija, sabia que era muy inteligente, pero no que era tan sensitiva, no puedo engañarla, tampoco mentirle, pero si puedo omitir.
- No pienso que seas idiota, solo te digo lo que puedes saber, a pesar de las peleas, siempre seremos amigos, Harry, ron y yo, somos inseparables
- Me agrada que digas eso, me dejas mas tranquila, no quisiera que mi tío y tu se molestaran y no hablaran mas
- Descuida – le consolé y la atraje a mi regazo, peinando su cabello con mis dedos – eso no pasara
- ¿Mami? – Pregunto después de un minuto o dos - ¿Por qué no puedo acercarme a ese chico Malfoy?
- Bueno, no es que no puedas acercarte mi amor, solo que tu padre con lo cabezotas que es, se niega a creer que alguien de esa familia pueda llegar a ser agradable
- ¿Tu que piensas?
- Yo…creo que debes darle una oportunidad, si lo conoces podrás juzgarlo sin perjuicios, pero hija, que la decisión sea solo tuya, que ni yo ni tu padre influenciemos en tu decisión.
- ¿Pero porque tan mal ojo le tiene papá a esa familia? – se separo de mi y me miro ceñuda
- Digamos que el padre de ese niño, no nos hizo la vida color de rosa, sobre todo a mí, pero sabiendo algo de su madre, podría apostar que no será tan terrible como el padre
- Astoria ¿Verdad?
- Si, ella siempre fue bajo perfil, una chica un poco temible, pero jamás se metía conmigo, tal vez y le haya enseñado bien a su hijo
- Esta bien – dijo satisfecha
- ¿Algo mas cariño? – pregunte sabiendo a lo que quería llegar con toda esa cháchara
- Bueno…es que…yo…-
- Sabes que puedes confiar en mí –
- Cuando tía Ginny me llevo a Diagon a comprar las cosas para mi año escolar, yo…me encontré con ese chico Malfoy
- ¿Y que te pareció? – indague calmada
- Es…es…interesante
- Bien
- ¿Crees que quedare en Gryffindor? – pregunto con una sonrisa esplendorosa, "Si ron la viese sonreír así por ese chico lo mata, y a ella igual" pensé
- En donde quedes, será perfecto para mi cariño, tranquila, que siempre te apoyaremos – respondí
- Gracias – me beso en la mejilla – me iré a dormir
Se retiro dando brinquitos nuevamente y la sonrisa volvió a adornar mi rostro, mi pequeña iría a Hogwarts a su primer año mañana, y a pesar de lo serena que se veía, por dentro se moría de ansiedad.
- Amor, vamos, que no podremos despertarnos temprano mañana – dijo Ron bajando las escaleras
- Claro
Me levante del sillón y le tome de la mano dándole un pequeño y casto beso en los labios, nos dirigimos a nuestra habitación en la planta baja, entramos cerrando e insonorizando la puerta, cortesía de ron por supuesto, supe en ese instante que no pretendía dormirse luego.
- ¿Qué haces? – le interrogué
- ¿No es obvio? – se acerco a mi e introdujo una mano por mi vestido, haciendo que este se subiera mostrando mi ropa interior – quiero tener una buena noche con mi amada esposa
Y solo eso basto para que dejara de lado la apariencia de niña buena, el deseo por ese hombre me segó, le quería tanto, le necesitaba tanto que levante una pierna y rodee su cintura, con un movimiento ágil, mis manos se apoderaron de su cinturón y con maestría logre desprenderlo.
- Entonces, ¿a que esperas?
Sonrío de lado, y en menos de lo que puedo decir Hogwarts me alzo y llevo hasta nuestra cama, nos besamos con intensidad, recorrí su piel de pies a cabeza llevando al suelo cada una de sus prendas. Me senté de horcajadas sobre él, bese su cara, su cuello, sus hombros y su pecho, le oía suspirar y reprimir gemidos de placer, y eso solo logro excitarme mas, amo tener el control, y ¿que mejor que ver a tu hombre derritiéndose en tus brazos?.
En un movimiento repentino me vi atrapada por el suave colchón a mis espaldas y por el cuerpo desnudo de ron en mi delantera, observe sus ojos y un enorme placer vi reflejado en ellos, comenzó a recorrerme con sus suaves manos, desde los pies, subiendo despacio por mis piernas y dando pequeños masajes detrás de las rodillas donde me gusta tanto, llego a mi ropa interior, sabia que moría por desprenderse de esa tela, y lo hizo, en un momento ya nada tapaba esa parte.
Mi vestido voló por el aire, dejándome completamente desnuda, para asombro de mi marido se percato de que no llevaba brasier, nunca me gusto usarlos con vestido, además que no los necesitaba. Recorrió con su lengua cada parte de mi anatomía, dándome un placer difícil de describir, la excitación nos segaba, y a pesar de que nuestros hijos no podían escucharnos, inconcientemente tratábamos de hacer el menor ruido posible.
Cuando entro en mi, sentí tanta alegría que hasta hubiese podido llorar de dicha, pero estaba tan concentrada en nuestros movimientos, que deje las tonterías para después. El vaivén de ron es impresionante, si no lo conociera y solo fuese una mujer pasajera en su vida creería que es un dios en la cama, pero sé que el es solo así conmigo, por que sabe que así me gusta, de hecho, yo lo insito a que sea mas rapito o mas lento, hasta en la cama soy la que tiene el control.
Un mordisco en mi cuello me hace volver a la realidad, me sonríe insinuante, sin detener el ritmo, me pregunto cuanto tiempo estuve un poco ausente, porque aun que parezca extraño, él sabe que me gusta pensar en como lo hacemos mientras lo hacemos, y siempre, siempre me devuelve a la tierra (o a la cama) con un mordisco travieso.
Me aferro a sus hombros y con la habilidad de todos esos años de intensa relación, logro que el quede abajo mío, me mira impresionado, son pocas las veces que tomo la iniciativa, pero esta vez, le toca a él gozar.
Mi ritmo no cambia, sus manos se aferran a mi cintura, apretándome y produciéndome un pequeño pero persistente dolor, no le digo nada, a el le encanta afirmarme así, y estoy segura que mañana me despertara con besos en donde sus manos están ahora, besando las marcas que ahora esta produciendo.
Un sonoro gemido de su boca y el apretón mas duro de sus manos me indican que esta por llegar, me voltea quedando él encima, y arremete en mi interior, con movimientos constantes. Acelera mi excitación besándome el interior de las muñecas, me derrito, pronto pierdo el control y me aferro a su espalda enterrándole mis uñas, siento que me desvanezco y con la ultima embestida de su parte me dejo arrastrar por el maravilloso orgasmo.
Mi respiración se empieza a normalizar, él sigue en mi pecho respirando agitadamente, aun no sale de mi interior, sé que le encanta quedarse ahí unos momentos, me besa en la unión de mis senos, y se sale para abrazarme posesivamente.
- Creo…que eso de no hacerlo…durante un tiempo…es lo mejor que podemos hacer – dice aun agitado
- Si…tienes razón – me volteo y él se aferra a mi cintura
- Te amo Hermione – susurra en mi oído, para después bostezar y apoyar su frente en mi espalda, en unos instantes ya esta dormido.
- Te quiero Ron – un nudo en mi garganta me prohíbe decirle te amo
Somnolienta me remuevo en las sabanas y ron me aprieta más contra él, mi mente comienza a desconectarse y antes de que Morfeo me atrape en sus brazos, unos ojos verdes luchan por acaparar mi mente, y con el último susurro, Morfeo gana y me lleva con él.
"Harry"
Espero lo hayan disfrutado, si les gusto comenten, si no...también ^^
JoJo...cariños.
