FELIX FELICIS
Capítulo Uno
Por las ventanas del Gran Salón caían las gruesas gotas de lluvia que dominaban el ambiente de un frío día domingo. A la hora del desayuno uno que otro estudiante se encontraba comiendo pero en general todos aún no bajaban de sus respectivas salas comunes. A la salida del Gran Salón estaba el celador Filch con su gata retando a Hermione Granger que desparramó su tonel de libros en la entrada del recinto. El morral de ella estaba roto.
"No se preocupe, voy a arreglar esto" dijo Hermione de mala gana.
Filch se alejó molesto por la respuesta brava de la chica que entró al Salón para sentarse en la mesa de Gryffindor que se hallaba vacía. Dejó los libros delante de ella ignorando el pequeño vaso de jugo de calabaza que había. Eran libros muy gruesos que más de alguna vez había leído pero se afanaba en examinar todas las palabras con prisa. Harry apareció en la entrada con unos pergaminos.
"Hola…tan temprano te abrieron la biblioteca" dijo Harry saludando con un palmazo en el hombro.
"Los tomé prestados ayer. Debo reconocer que la escasa información que se obtuvo de las hebras de plata del profesor Slughorn es demasiado grande para estos libros. Ni rastro de esa palabra francesa que Dumbledore te pidió que averiguaras" dijo Hermione con sorna.
"Veo que te refieres a Horcrux. Voldemort le preguntó eso cuando estaba con el grupo de los mortifagos"
"En ese entonces era Tom Riddle y el grupo de amigos puros con que presumía. Aún no se convertía en Lord Voldemort..." dijo Hermione reparando en el gesto burlón de Harry. "Nada es malo en un principio, ni siquiera Voldemort lo era. Piensa que tú también andas interesado en averiguar todo sobre los Horcrux como tu honorable nemesis"
"Deja esa solemnidad, por favor. Que estés maldita por el no significa que vas a defenderlo. A propósito yo ando buscando respuestas para evitar que Voldemort consiga el máximo poder. Voldemort quería partir su alma desde entonces." Dijo Harry muy molesto y apartando algunos de los libros para sentarse en la mesa.
Hermione hojeaba un libro y Harry otro y muy pendientes de encontrar lo que buscaban. El jugo de calabaza cayó sobre la mesa mojando los pergaminos.
"Hermione…calmate por favor. No se va a ir mundo si no encontramos la respuesta" dijo Harry cerrando de golpe el libro que Hermione leía.
"¿Por qué diablos piensas que Dumbledore te pide hacer todo esto? Nada más importante para él debe ser encontrar la verdad. Si no lo ves así piensa en mí. Yo necesito saber como defenderme si Voldemort me ataca y tú no podrás impedirlo porque todos te protegeremos. Serás el último en caer."
"Oh, que pitonisa. Ya te imaginas mi cuerpo profanado por el Innombrable…no le llamó así por miedo sino porque me canso de Voldemort."
"Es más fácil cansarse de recitar de memoria El que tu sabes que no debe ser nombrado jamás"
Harry se quedó mirando a Hermione que volvió a abrir el libro y así se quedaron leyendo toda la mañana hasta que el amigo debió bajar a los campos de quidditch para una practica con el equipo de Gryffindor. Ronald se había levantado tarde y Hermione lo vio por primera vez en el estadio.
"¿Cómo te fue en la mañana?" preguntó Ron que estaba lesionado y no participaba de la práctica.
"Nada…esa palabra sólo es mencionado y ahí acaba. Sin definiciones terminó la mañana…lástima que esos libros no nos hayan servido porque los demás de magia negra u oscura los hemos leído con Snape que nos prepara para quien sabe que" dijo Hermione mirando a Harry atajar pelotas.
" A Harry se le acaban los días para la reunión con Dumbledore y va a querer que Harry le traiga la respuesta. Él te cuenta lo que hace con el director" dijo Ron en tono de pregunta.
"Todo el último mes ha sido conseguir recuerdos de Slughorn y hecho está. No entiendo porque Dumbledore quiere que Harry averigue esto por su cuenta. Quizá tiene cosas más importantes que hacer….A propósito me acordaba que Harry dijo esta mañana que Tom Riddle pensaba partirse el alma en los recuerdos del profesor. Eso nos puede servir….¡HARRY!
El grito de Hermione hizo caer a Harry de la escoba pues el muchacho estaba distraido viendo a su amiga conversar con Ron.
Todo el equipo de quidditch corrió a socorrer a Harry junto a Hermione que ayudaba a caminar a Ron.
"¿Estás bien?" preguntó Hermione al ver el rostro de dolor de Harry.
Harry apenas contestó y era trasladado en camilla hasta la enfermería en donde la encargada del lugar lo acostó en una cama. El equipo de quidditch lo rodeó y al rato estuvo solo con sus dos amigos. Ronald apoyó los pies en una silla pues seguía adolorido.
"Ya somos dos dentro del equipo que no estarán en el partido del próximo martes…Me ves caminar pero apenas monte la escoba y las acrobacias empiecen...Pierdo las piernas." Dijo Ron con temor.
"No hay que moverse…Tu hermana se hará cargo de todo…es buena buscadora…esa parte está solucionada" dijo Harry mirando como Hermione dejaba su mochila en el suelo luego de cargarla todo el rato.
"Cuando te llamé en el estadio pude encontrar una respuesta al misterio de los horcruxes de lord Voldemort…tú mismo mencionaste que Tom iba a partirse el alma. A lo mejor los horcruxes sirven para eso." Dijo Hermione con cuidado.
"Pensabas que iba a explotar porque tus palabras me hicieron caer de la escoba.." se interrumpió Harry al ver el rostro escrutador de Ron que advertía un tono diferente en las palabras de su amigo.
"¿Todo anda bien con Hermione, cierto?" preguntó Ronald.
"Nada raro hasta ahora..Ron." dijo Hermione con voz segura.
Harry miraba fijamente a Hermione que recordaba su grito en el estadio y se partió de la risa pero no le dijo a nadie. Ron se mostró desconfiado con ella.
"Harry se rió porque el Innombrable sentía lo mismo…¿Qué te pasa?" dijo Ron de mala gana.
"La cicatriz de Harry es así. No llevo una cicatriz de esa especie. Me reía de una conversación de pasillo en que las chicas de quinto año y se sexto..no estaba yo en todo caso..Hablaban de pociones de amor que fabrican tus hermanos Ronald. Vi los frascos, ellos están haciendo mercadeo ilegal y me gustaría saber quien es el intermediario acá" dijo Hermione con actitud de detective.
"No hay caso contigo Hermione. Sé que no olvidas el asunto de los horcrux pero igual te das maña de delatar a tus amigas o colegas. No seas así" dijo Harry sonriente.
" ¡Faltan a las reglas! ¡Los Weasley están en esto!" exclamó Hermione.
" Por respeto a la enfermería…intenta que gente de autoridad de Hogwarts no se entere de lo que pasa en sala común de Gryffindor" dijo Ron sonrojado.
"Eres testigo de todo..proteges a tus hermanos que filtran pociones para atolondradas chicas que desean conquistar al galán de turno o quizá que" dijo Hermione molesta.
"Ronald habla por él y no por tu grupo de amigas" dijo Harry animado.
"Grupo de…..
"¡Maldición! Eres igual de chismoso que Hermione. Ambos son iguales…sí tomé un frasco de esa poción pero no diré a quien deseaba conquistar de una vez. Tengo las intenciones más que claras" dijo Ron dirigiendo una mirada asesina a Harry.
"Intenciones hay muchas, Ronald. ¿No lo crees Hermione?" dijo Harry sintiendo la tensión.
"Si tu lo dices Harry"
Pasaron dos días y Harry logró salir de la enfermería en mejor estado de lo que salió Ronald la semana pasada del lugar. Era mediodía y las campanas terminaban el bloque de la mañana de las clases y venía la hora del almuerzo. La mesa de Gryffindor estaba llena y muchos se acercaban a saludar a Harry que no podía jugar y le expresaban el apoyo a él y al equipo que de verdad lo necesitaría. A su lado estaba Hermione que comía con entusiasmo y Ron que comentaba los detalles del entrenamiento unos puestos más allá. Al término del almuerzo Hermione ayudó a Harry para ir al estadio en donde Gryffindor enfrentaría a Slytherin.
"La casa de la serpiente" dijo Harry sentado en la galería y apuntando un estandarte de la otra casa.
"Sí. Riddle era de allí como el resto de sus mortifagos en incubación. No me digas que los llame de otra forma…aún tengo pudor de hablar esto en público" dijo Hermione.
"Es una misión secreta que ambos estamos delatando de lo lindo" dijo Harry.
"Disculpa. Me enciende mi espiritu investigador…supongo que las pociones ilegales suena mejor" dijo Hermione arrepentida.
"Eso tampoco"
Gryffindor terminó ganando el partido gracias a la hermana buscadora de Ron que se llevó el equipo al hombro. Cuando todos iban de bajada, Harry fue rodeado por un grupo de chicas de cuarto año que lo compadecían de la lesión y criticaban a Hermione de eso.
"Estabamos en ese momento cuando ella te gritó y tú la atendiste. Pensamos que Hermione tiene malas intenciones contigo porque se la pasa en la sección de hechizos oscuros. Como si su profesor de artes malas les diera mucha tarea" decía una muchacha.
"No te imaginas el profesor que tenemos de esa asignatura" dijo Harry.
"El asunto es que te caiste cuando ella te habló…¿qué pasa?" preguntaban las alumnas.
"Nada. No hay mejor compañera que ella para hacer los trabajos más difíciles" dijo Harry abrumado.
Hermione alcanzó a Harry cuando el grupo de chicas lo dejó en paz. Ella lo llevó hasta la sala común en donde leyeron algunas páginas más de ese caluroso martes. Más tarde tenían clase de Artes Oscuras con el profesor Snape en las mazmorras.
En la entrada de la sala de Snape estaba Ron que hablaba con dos compañeras acerca de sus hermanos gemelos que tenían la tienda. Todavía era temprano para que comenzara la clase pero un extraño movimiento de gente se producía.
"Ellos mandaron cuatro botellas de Felix Felicis de buena calidad. Cobro por ellas el 10% del valor porque es difícil conseguirles los ingredientes eróticos" dijo Ron.
"¿Eróticos?" se extrañaron las jóvenes.
"Digamos que ellos son algo griegos para sus cosas…se refieren al dios del amor. No hay nada pasado de revoluciones dentro de estos frascos" Ellos me informan de todo. ¿Quién compra?"
La mayoría de las compañeras compraban entre varias un frasco porque pocas gotas de la poción Felix Felicis rendían bastante para sus propósitos. Ron tenía una botella más que se guardó con fines misteriosos.
En la clase de Artes Oscuras de Snape Harry se sentó a pedido de Ron junto a él detrás porque unas cuantas compañeras iban a comprarle frascos de la poción. Harry ni idea tenía de que Ron era el intermediario de los productos de la tienda de "Sortilegios Weasley".
"¿Qué haces?" preguntó Harry impresionado y viendo como Ron recibía varios billetes a través del suelo.
Snape estaba concentrado tomando unos hechizos a los alumnos de los puestos de adelante.
"No le digas a Hermione por favor" dijo Ron apenas dejó de transar en la sala.
"Tranquilo. Ella sigue estudiando los horcruxes en la sala y si Snape la pilla, imaginate" dijo Harry llamando la atención de Ron
Hermione estaba detrás de ellos y sola con todos los libros en la mesa. Harry no dejaba de mirarla y ella siempre le respondía con una sonrisa pero la felicidad se le borró cuando Snape la sorprendió.
"Señorita Granger..deje lo que está haciendo o mejor dígame que se propone en mi clase" dijo Snape con la voz pesada.
"Entre estos libros trataba de saber el origen de…una poción que seguramente usted conoce muy bien como nos enseñaba pociones el año pasado y todos los anteriores. Se llama Felix Felicis y se que enamora de forma muy rápida a la persona deseada. Eso quiero saber" dijo Hermione de pie junto a su asiento.
"Vamos a algo menos feliz…trate de hechizar a su compañero de adelante sin mencionar el hechizo en voz alta..hágalo" ordenó Snape.
Hermione tomó su varita mágica y apuntó a Harry que se levantó muy nervioso. Antes de todo su amiga le dirigió una sonrisa.
"Acabo de hechizarlo señor..pero no resulta" dijo Hermione.
Snape la retó varias veces más y al final terminó por salir del salón a mitad de la clase. Harry sólo quería ver como estaba Hermione y la encontró al frente de la puerta de Artes Oscuras.
"Hola. No tenías porque hacer eso..podías esperarme porque siempre sacas conclusiones antes que yo y quiero que lo hagamos juntos. Eso te pido…Yo sabía perfectamente que estudiabas sobre eso…y la excusa de la poción que Ron trae de sus hermanos fue buena" dijo Harry.
"Que bueno que no te enojaste más…pero no delates a tu amigo" dijo Hermione al ver pasar todo el curso por el pasillo. Ron salió de último.
"¿Cuánto ganaste?" preguntó Hermione dejando patidifuso a Ronald.
"Veo que es imposible tener secretos entre los tres. Lo admito yo vendo la poción de la felicidad y de veras funciona. También las pruebo"
En la biblioteca estaban Harry y Hermione examinando libros pues Ron tenía practica ligera de quidditch o eso dijo al menos. Tras los kilos de libros los dos compañeros estudiaban los antecedentes sobre horcruxes y se encontraban con la misma frase. "Contenido no valido en este colegio"
"Slughorn igual se muestra evasivo cuando le preguntas por horcrux. Debe saber porque se le nota" dijo Hermione.
"Buena tu teoría. No pienso sacarle más cosas de la mente. Al final va a quedar loco" dijo Harry.
"Sé que se lo has dicho a Dumbledore. No entiendo que desea" dijo Hermione dejando de leer.
"Algo con lord Voldemort, sin dudas" dijo Harry levantándose de la mesa.
"¿Adónde vas?" preguntó Hermione.
"Tenemos Transformaciones con McGonagall. No te lleves los horcruxes a esa sala porque quizá en que te puede transformar ese gato"
Hermione se quedó perpleja con las palabras de Harry que salió de la biblioteca a toda velocidad.
En el corredor de entrada a la clase de McGonagall Hermione se encontró hablando a Harry con Ron que le entregaba una botellita de Felix.
"Saliste corriendo y llegas como tortuga…el cuento al revés. No me traje los horcruxes porque ni idea de que son pero tú andas raro ahora. ¿Qué pasa?" dijo Hermione encarando a Harry.
"Déjalo en paz. McGonagall debe de haber escuchado tus gritos. Terminaba de vender la poción que tu opinas que es farsa. Da resultados…Harry me consultó por ella" dijo Ron separando a sus dos amigos.
"Ya veo. Buena suerte con tu hechizada" dijo Hermione entrando al salón.
"De ofuscada a depresiva" dijo Ron interpretando la mirada asombrada de su compañero.
"Va a estar investigando en plena clase. No entiendo porque se lo toma tan a pecho.."
"Como el enigma del huevo de tus pruebas del torneo de los tres magos" dijo Ron para empatar la situación.
Ambos amigos no entraron a la clase y se marcharon a la sala común que se hallaba desierta. Ron le pidió a Harry sacar la botella de Felix Felicis. Harry la miró de cerca pero preocupado.
"Ahora..dime para que la quieres." Dijo Ron en tono de pregunta.
"Es curiosidad..siempre te veo vendiendo que debe de resultar"
"Resulta si tienes alguien claro en quien aplicarla. No me la habrás pedido sólo por ver su funcionamiento porque si lo haces tendrás que soportar unas cuantas horas con la chica pegada a tu cuello y quizá que otra parte más. Generalmente es para conquistar o dar ese paso final. Me asombra la cantidad de personas que la necesitan para anotar el punto final" dijo Ron bajando la voz.
"Lo que dijiste es tan enredado y…como decir Innombrable. La quieren para tener relaciones con otra gente, no es así"
Ron asintió pero advirtiendo que quienes deseban ese poderoso efecto les daba otras botellas más fuertes y con ingredientes de verdad eróticos.
"¿Qué pasa si te atrapan?" preguntó Harry guardando la botella.
"Me sacan de Hogwarts y peores sanciones para Sortilegios Weasley. Piensa que ellos no serían nada sin la tienda como se fueron del colegio" dijo Ron pensativo.
"Podría pagarte por esto Ron. Si me la das con la demanda que tienes es porque la cantidad de botellas que tienes es enorme" dijo Harry tanteando la botella en la mano.
"Uso los tablones sueltos debajo de la cama de Neville como depósito. Él nunca esconde nada" dijo Ron.
"Neville esconde mucho, Ron" dijo Harry.
Hermione estaba por entrar a la sala común cuando vio a sus dos amigos saliendo de ella.
"Que novedad…ustedes juntos…Harry deberías usar tu botella de la poción feliz con Ron" dijo Hermione muy agresiva.
"Que tengo botella la tengo…pienso usarla" dijo Harry sonrojado y ofuscado.
Su amiga entró a la sala común sin decir nada más. Ron se quedó mirando a Harry.
"¿Con quién vas a usarla?" preguntó Ron.
"Hermione Granger. Creeme…tengo curiosidad por saber como nuestra sabelotodo podrá reaccionar...me lo tenía super guardado. Tuve el valor de decirtelo luego de sus gritos porque siento que le importo mucho..no creo que sólo sea la aventura de resolver un acertijo o pelear contra Voldemort. Ella debe tener otro interés" dijo Harry con voz clara.
"Te gusta. Terminas un poco ingenuo con lo último…quizá dentro de todas esas horas leyendo ella pueda haber empezado a sentir algo por ti. Siempre andas en peligro..Hermione tiende a seguirte sin importar el peligro" dijo Ron con actitud resignada.
"Debo hacer que ella tome esa poción…últimamente bebe y come poco...Debo estar en ese momento junto a ella porque si ve a cualquier otro hombre…esto falla" dijo Harry aproblemado.
"Tendrás que ver tú. No puedo comprometerme más porque muchos lo lamentarían"
Esa noche Harry fue el último en quedar en la sala común y esperaba a Hermione que apareció por las escaleras de caracol que llevaban a las habitaciones de las mujeres. Harry se levantó con un vaso de agua en la mano. Muchos libros estaban en la butaca de Harry.
"Veo que quieres seguir buscando. Yo perdí la esperanza de encontrar algo que sirva a Dumbledore porque en el fondo él te entregará la siguiente pista. Simplemente di lo que sabes o mejor lo que piensas…a Dumbledore va a importarle más como está tu cabeza que otra cosa. Teme que Voldemort sepa lo que piensas, sientes, sueñas y más. Ve y dile eso" dijo Hermione que estaba parada en el primer escalón.
"Tienes razón…me dejaste tumbado, Hermione" dijo Harry aguantando la rabia.
"Anda a dormir porque mañana Dumbledore va a llamarte a su oficina" dijo Hermione.
"Se me había olvidado" dijo Harry borrando de la mente la poción.
"Cuidate" dijo Hermione que subía lentamente.
"Voy a hacerlo pero no vamos a sus recuerdos sino que realmente salimos de Hogwarts donde las cosas son muy duras. Lucharé contra quien aparezca porque siento que Dumbledore quiere que me defienda o aprenda en este momento. Voldemort puede estar en persona..." dijo Harry con pena.
Hermione volvió a bajar las escaleras y miró a Harry con lágrimas en los ojos y se paró frente a él que sostenía el vaso de agua con la poción. Harry sentía su corazón latir con mucha fuerza porque sabía que su amiga estaba muy preocupada y al final de todo eso recordó al mirar el vaso.
"Hermione…no quiero quedarme sólo. Tú no vas a estar conmigo cuando salga con Dumbledore y debo reconocer que cada vez se me hace más duro" dijo Harry que sentía el deseo de acercarse más a Hermione y ella lo hizo al sentir la extraña mirada amorosa de Harry.
"Dura es la espera…las noches que salías a buscar…Quizá un día no regreses más…Quisiera que te quedaras conmigo por siempre." Dijo Hermione que agarró la mano despejada de Harry.
"Por las noches que te debo..la espera..el miedo..y lo que siento por ti" dijo Harry que con su rostro tocó el de Hermione. Ella quería darle un beso pero el vaso estaba entre ellos.
Hermione se tomó el agua del vaso y lo dejó en el piso….Se besaron un largo rato hasta que el candelabro de la sala común se apagó. Las tinieblas los separaron.
"Te amo, Harry" dijo Hermione con una voz distinta.
"Yo…también"
Harry atribuyó esa sinceridad Hermione a la poción pues la chica volvió a besarlo de forma apasionada y ambos cayeron sobre la butaca y sobre los libros. Harry sentía la espalda adolorida con Hermione encima y los besos seguían y las manos de cada uno buscaban soporte en el otro al perder el equilibrio en la butaca. Cayeron al suelo sin hacer ruido y bajo la oscuridad. Un pensamiento racional fue disociado por Harry que sentía las manos de Hermione en su espada y las de él estaban en la espalda de la chica y Harry quería más. Se volteó poniendo a Hermione contra el piso y pudo ver su mirada. Era de inocencia y temblaba.
El joven le besó lentamente el cuello a Hermione que se dejó estar y acariciaba los cabellos del otro y Harry seguía avanzando encontrandose con la camisa de Hermione y los botones. Uno a uno fueron desatados y la piel de Hermione quedaba al descubierto. Terminó el impulso en la falda.
Hermione se sacó el sostén y sus pechos quedaron al aire. Harry los besaba haciendo gemir a Hermione que alucinaba cosas a estas alturas. El joven seguía mamando y sentía que Hermione intentaba sacarle su camisa pero el propio Harry lo hizo dejando su pecho enfrente de Hermione que se abrazó.
Ambos se sacaron lo que quedaba de ropa pero los ojos de ambos se acostumbraron a la oscuridad así que no había problema en verse completamente desnudos. Estaban de pie y se miraban y cada uno de ellos sentía excitación dentro de su cuerpo pero la vergüenza apareció en Harry que se tapó sus crecidas partes íntimas pero Hermione se mostraba tal cual y se abrazó a Harry y cayeron sobre el piso y se quedaron un rato sintiendo su respiración mutuamente.
Hermione se sentó arriba de Harry y con sus manos recorría el pecho de Harry que estaba latiendo de forma asombrosa. Harry movía sus manos en el aire pero hallaron el cuerpo de Hermione. Empezó con la espalda y siguió hasta su trasero y lo acariciaba hasta que Hermione le llevó sus manos a sus pechos y la cara. Ella se acomodó sobre Harry y empezó a bajar y subir lentamente y al rato de esto los dos empezaron a gemir y suspirar lentamente. Harry intentaba hacer el menor ruido posible pues Hermione estaba poseida por la poción. En un punto Hermione se detuvo acostándose al lado de Harry que la abrazó con el cuerpo temblando. La miró a los ojos y creyó ver un destello de inocencia detrás de ellos. Su corazón daba mil vuelcos esa noche. Luego ambos se levantaron y se acostaron en una butaca con la ropa desordenada por el piso. Pronto Hermione empezó a tocarlo en el pecho y Harry se vio encima de ella.
Mientras besaba a Hermione observaba de reojo la botella de Felix Felices que seguía muy llena y la tomó con la mano que tenía libre. Hermione detuvo sus besos apasionados y tomó la botella de la mano de Harry y la abrió con la boca. Se miraron y los ojos de Hermione se hinchaban de excitación aún cuando Harry no estaba haciendo nada. La botella quedó vacía.
Hermione apretaba fuertemente a Harry y este estaba sofocado y manoseaba a su compañera por todos lados y pronto sus cuerpos fueron uno solo porque Harry creía estar haciendo gimnasia sobre el cuerpo de Hermione. La chica cerraba sus ojos y pasaba sus manos por toda la espalda de Harry y este seguía dandole hacia delante. La butaca iba corriendose poco a poco hasta la escalera y el joven que estaba entusiasmado como si hubiera bebido de Felix Felicis. Su compañera no dejaba de gemir pero de forma controlada y perfecta. Esa poción estaba demasiado bien hecha.
Todo terminó con los dos acostados y escuchando sus corazones agitados en la butaca y las tinieblas iban pasando porque la noche daba paso al día de forma rápida. Harry se puso la ropa observando con ojos satisfechos a Hermione que se vestía y sin ser dueña de su voluntad subía la escalera y antes de perderse por la curva que describía la curva en altura le mandó un beso a Harry que le respondió pero exhausto.
Llegó a la habitación en donde todos los muchachos dormían y se acostó en su cama con la ropa que traía y recordaba cada momento y no podía dejar de sentir su cuerpo revolucionado otra vez. En el otro extremo del asunto Hermione se sentía muy cansada y dejó caer en la cama hasta que el sol salió y el efecto de la poción cedió. Con la mente abierta y suya se levantó como resto de sus amigas y salieron al Gran Salón para tomar el desayuno. Se encontró con Harry que no cabía en felicidad de verla.
"¿Cómo dormiste?" preguntó Harry con un dejo de preocupación.
"Bien..Lista para otra semana…No me desvelé estudiando y es bueno porque ni fecha de exámenes es" dijo Hermione acomodando su morral.
"Que bueno que te tomes las cosas con más relajo o más normales. Hoy tengo la sesión con Dumbledore…Diré lo poco que sé y lo mucho que pienso o siento" dijo Harry más tranquilo.
"Te va a ir bien…Cuidate.."
"Eso es en la noche…guarda tus buenos deseos.."
´Sé perfectamente que los nervios van a estar carcomiéndote todo el día"
La primera clase era de Adivinación Avanzada en la torre de Astronomía pero Harry no asistió al igual que Ron puesto que su amigo le había pedido que era urgente hablar con él. Ambos estaban en la biblioteca simulando estar leyendo.
"Empiezo a ver que vas pareciendote a Hermione porque tu espíritu….
Harry interrumpió a Ronald.
"Ayer probé tu poción con Hermione cuando no había nadie en la sala común" dijo Harry repasando los eventos de esa noche.
"No puedo creerlo…De verás resultó porque Hermione está igual que siempre" dijo Ron perplejo.
"Entiendo que quieras saber su real efectividad en tu amigo…Me gustaría contarte como fue porque ni yo era racional esa noche…Ni te imaginas como estaba Hermione…todo el tiempo buscando como darle más emoción al asunto sin medirse..A veces dejaba de gemir porque alguien podría estar viendonos…Pronto caí y nada del resto del mundo me importó. Fue demasiado…Como si no lo quisiera…al final todo fue ideal porque en la mañana me moría de miedo por saber si Hermione habría quedado bien..No quiero que lo recuerde porque ella no hubiera accedido. Ojalá nunca sepa"
"Yo se que nunca se confesaron sentimientos y lo hace más complicado. Todos compran la poción para conquistar a su persona amada…vaya a saber uno sobre sus verdaderas intenciones. Si Hermione lo recuerda eres hombre muerto Harry. Tú mismo deja de darle vueltas al asunto porque sólo vas a buscarte lo que no quieres que pase.
Los dos amigos que quedaron un buen rato en silencio hasta que Harry hojeaba unos libros sobre magia negra que ya Hermione había visto. Justamente ella estaba en la entrada de la biblioteca mirandolo con los ojos llorosos y temblaba. Sostenía una botellita de líquido roja.
"¿Qué es eso Ronald?" dijo Harry apuntando a Hermione.
"Ella toma una poción para recordar los malos sueños…nos olvidamos de eso Harry"
"¿Qué soñaste?" preguntó Harry asustado cuando Hermione caminó hasta estar frente a él.
"Voldemort me sigue molestando porque en la clase de McGonagall pronuncié un hechizo que hizo volar varios sapos…No era mi voz…Tomé la poción y no sabes lo que me reveló…Algo que pasó en la noche….
Hermione no sabía como detener su llanto que se escuchaba en toda la biblioteca más que molestando a esas horas de profunda lectura, producía una sensación de curiosidad de ver al famoso Harry Potter enfrentando a la amiga que parecía estar lastimada. Ronald no sabía que hacer porque sus dos amigos se miraban como enfrentándose pero ninguno de los dos decía lo que en verdad estaba pasando.
"Por favor muchachos. Los problemas que tengan resuelvanlos afuera…hay mucha gente mirando y esto no es el teatro farándulesco" dijo la bibliotecaria tomando el hombro de Hermione.
"No se preocupe señora. Yo me voy…" dijo Hermione que salió corriendo de la biblioteca.
"¡Qué les pasa!" gritó Harry a un grupo de niñas que se reía por debajo.
Ron llevó a su amigo hacia la puerta y ambos respiraron aliviados pero todos vieron la escena sin entender nada.
"Hermione no te dijo nada en la cara. Debe de pensarlo mucho antes de venir a encararte en la biblioteca" dijo Ron en voz baja.
"Ella estaba muy mal y con razón. Jamás hubiera accedido a tener relaciones conmigo porque no sé si le gusto o no" dijo Harry pegándose la cabeza en la pared.
"No vas a poder enterrarte seis pies bajo tierra ni que la pared te trague. Deja de pegarte, Harry. Tengo el presentimiento de que Hermione va a calmarse un poco porque ella no soportaría que el resto se entere de que tuvo relaciones contigo en plena sala común" dijo Ron consolando a Harry.
"Ron...ella no fue conciente de nada. Yo la drogué con la poción y todos van a decir que terminé por….violarla…van a solidarizar con ella. No importa las cosas que sienta yo.." dijo Harry viendo como el problema seguía creciendo.
"Lo pienso ahora y eso que dices puede ocurrir. Tienes que hablar con Hermione urgente"
Harry dejó a Ron en la entrada de la biblioteca pues fue directo a la sala común sólo encontrando a un par de alumnos estudiando en una de las mesas. Eran de primer año y se pusieron nerviosos cuando Harry se les acercó.
"Hola. ¿Han visto por casualidad a Hermione Granger? Es la chica que anda siempre conmigo y Ronald.." dijo Harry.
"Lo siento Harry" dijo uno de los niños.
Harry se sentó en una butaca aguantando la aflicción y siempre miraba la puerta pero entraban otros alumnos. Ronald entró y fue directo a ver a su amigo.
"Supongo que no has visto a Hermione..Ella puede estar en cualquier lugar" dijo Ron con voz abatida.
"No sé que hacer Ron.."dijo Harry ocultando el llanto entre las manos.
"Vas a tener que enfrentarlo no más" dijo Ron abrazando a Harry.
Llegó la noche y todo el colegio estaba en el gran salón pero Hermione no estaba y la cena se volvía insoportable para Harry que sentía las miradas de varios que se sentaban en la misma mesa o aquellos que hacían el rodeo por la mesa Gryffindor para saber más del llanto de Hermione. Ronald se levantó antes que Harry y se fue directo a la sala común en donde estaba Hermione que tenía el rostro todo ojeroso y tenía en la mano derecha la botellita de Felix Felicis. Ella miró a Ron con el mismo odio con que trató a Harry.
"Esta botella vino de tus manos, Ronald. Yo se que sólo las vendes pero necesito saber si tú sabías que Harry iba a usar la botella conmigo" dijo Hermione aguantando las lágrimas.
"Sí. Harry me dijo que iba a usar la botella contigo…Quizás mi error fue vendérsela"
"Todos son generales después de la batalla o la guerra. Claro que esa guerra en donde le diste el armamento a Harry se libró conmigo…dentro de mi cuerpo..se apoderó de mi mente e hice cosas que yo no hubiese hecho con Harry. Que no se te olvide que mi cuerpo estuvo en esto..toda una noche y cada vez que me vea en el espejo...va a estar…No digo nada más."
Los dos se quedaron en silencio hasta que entró Harry y dejó caer la mochila en el suelo.
"No tenías tanto miedo cuando estaba yo en ese lugar anoche" dijo Hermione con pesadez.
"Estaba nervioso antes de todo. No sabía si seguir" dijo Harry.
"Hecho está, Harry. Me robaste mi cabeza y mi cuerpo y yo volví a la habitación siendo presa de esa poción…Yo fácilmente no probado la otra poción y nada saldría a la luz.."
"¿A quién más se lo dijiste?" preguntó Harry.
"Todavía sigues cubriéndote…Te estoy reclamando que me violaste, Harry. Di que me violaste"
"Yo..lo hice porque te quiero mucho. Nunca encuentro las palabras para decirte lo que siento..Sé que di un paso más allá" dijo Harry.
"Me violaste…Nunca sabrás lo siento realmente por ti. Tengo un síntoma de…"
Hermione empezó a llorar cuando entraban algunas amigas de Hermione como Angelina Jonson y Ginny Weasley. Harry se apartó a la escalera y Ginny se le acercó.
"¿Qué pasó Harry?" preguntó Ginny con cariño al ver a su amigo triste.
"Hermione está mal...Mal" dijo Harry sollozando.
Angelina Johnson abrazaba a Hermione que estaba muy desconsolada y ambas subieron al piso de las chicas de la casa. Ginny se reunió después con Ron.
"Hermione se peleó con Harry...él estaba igual de mal. ¿Qué se dijeron ellos dos?" preguntó Ginny.
"Yo también tuve la culpe porque avivé el fuego…He estado haciendolo desde hace tiempo con las pociones…Conectas Ginny" dijo Ron resignado.
"Harry usó tu poción con Hermione…Tan fuerte fue que Hermione se diera cuenta que Harry siempre ha estado enamorado de ella" dijo Ginny.
"Yo creo que a Hermione eso ya no le importa. Harry usó la poción para tener relaciones con Hermione" dijo Ron esperando la reacción de Ginny.
Ginny no podía creerlo y subió corriendo a la habitación de las chicas.
Harry no pudo conciliar el sueño en su cama porque las chicas podrían estarse enterando de los detalles de la pena de Hermione pero confiaba en que su amiga guardaría silencio no por una cuestión de amenaza sino por honor. Ronald escuchaba las miles de vueltas de su amigo en la cama contigua y pensaba que Hermione estaba muy dañada y que Harry había ido demasiado lejos.
A la mañana siguiente, la primera clase era de Pociones y el profesor Slughorn estaba allí como siempre convenciendo a los sobresalientes de que se unieran al Slug Club. Harry fue objeto del favoritismo del profesor que siempre le preguntaba y el muchacho salía del paso gracias al Príncipe Mestizo. Hermione estaba sentada en el primer asiento tomando apuntes. Tocaron la puerta. Era Dumbledore.
"Que tal Horace…necesito a Harry Potter" dijo Dumbledore.
Slughorn no tuvo ningún problema en dejar salir a Harry que estaba más que nervioso cuando el director lo miró.
"Vamos a mi oficina" dijo Dumbledore.
Harry estaba apesadumbrado cuando Dumbledore lo miraba a los ojos porque pensaba que el daño de Hermione era la razón para sacarlo de clases.
"¿Por qué no viniste a la sesión anoche?"
"Se me olvidó...No crea dejé de investigar porque lo hice todos los días después de ver juntos los pensamientos de Slughorn…Me ayudaron porque sólo no me la podía…Hermione me ayudó…Hermione…" dijo Harry que se quedó paralizado.
"Es una buena amiga" dijo Dumbledore.
"Claro que lo es"
"Me gustaría saber que te tuvo tan ocupado anoche. No digo que era urgente que tu y yo saliéramos de Hogwarts" dijo Dumbledore.
"Tengo un problema con Hermione. Eso pasa" dijo Harry.
"No te sientas obligado a contarme. Estoy disponible para cualquier problema que tengas Harry"
"Me harta ser una persona malcriada, director. Nunca me mimaron..."
"Te estaban protegiendo, Harry. No es bueno que te guardes los sentimientos que tienes ahora porque…lo digo por ti. Difícilmente van a dejarte tranquilo y más si es una persona con la que siempre estás conversando, viviendo cosas" dijo Dumbledore con un brillo en los ojos.
"Señor yo soy un violador de mentes...Sólo he hecho cosas que los demás no querían como el profesor Slughorn que algo tiene con el tema de los horcrux que no habla de eso. De no ser por su insistencia lo habría comprendido porque sentimientos debe detener Slughorn, verdad. Al propio Voldemort le he podido leer la mente…algo desagradable porque sus sentimientos están en mí. Lo hice con Hermione…lo peor fue hacerlo con ella" dijo Harry muy afligido.
"No es muy aconsejable tratar de adivinar el pensamiento de una mujer. Lo peor es volverse obseso con la mente de las mujeres. Sólo hay que entenderlas. Creo que por ahí va tu problema" dijo Dumbledore.
"Usé algo de ayuda para entender a Hermione…se me pasó la. mano porque no sólo me metí con su mente sino con el cuerpo. Nada de lo que sienta puede justificarlo ahora. Yo usé una poción que enamora a la gente o quien uno desee…Desee señor" dijo Harry.
Dumbledore miró a Harry por largo rato sin decir nada. Pronto se levantó y con gesto severo se acercó a la silla en donde estaba sentado Harry,
"Por favor dime que sólo la usaste una vez" dijo Dumbledore congestionado.
"Sí, señor. Pero Hermione está muy mal…la lastimé. Hermione tomó toda la poción de felicidad y yo no lo impedí" dijo Harry.
"¿Dónde está Hermione?" preguntó Dumbledore paseando por la oficina.
"Estaba en la clase con el señor Slughorn…no sé más"
"Nunca pensé que tendrías un problema así, Harry. Hermione debe de estar muy triste y lo soporta en medio de clases y pasillos. Lo peor es que te ve…Tuviste la mala fortuna de que recordara lo que pasó mientras tomaba esa poción que por cierto es absolutamente ilegal dentro de las paredes de Hogwarts"
Harry se dio cuenta de que el nombre de Ronald podría caer.
"Puedo irme profesor" dijo Harry.
"No se que panorama vas a encontrarte allá abajo. Nadie soportaría saber que una mujer fue violada…Es muy importante saber lo que piensa Hermione en este momento"
Harry no dijo nada. Dumbledore le ordenó que saliera.
Cuando el muchacho llegó a un corredor cualquiera del primer piso del colegio se encontró con el típico bullicio de cambio de clases. Mucha gente conocida y él caminaba sin rumbo. Se encontró con Ron que venía lleno de cuadernos y pergaminos. Muchos eran de Hermione.
"Ronald" dijo Harry.
"Hermione tuvo un ataque de pánico porque un chico se le declaró. Eso era algo que no me esperaba…que alguien aparte de ti se interesara en ella. Siempre la ven como la estudiosa…ese chico tenía los ojos desorbitados…tomó la poción. Hermione se asustó y varias chicas la ayudaron a controlarse, la llevaron a la enfermería"
"Ahora estoy muerto de verdad, Ron. Todos van a saber lo que hice" dijo Harry empuñando las manos.
"Ella está paralizada todavía. Quizás no sea ella quien revele lo que ocurrió sino otra persona que quiera ayudar a Hermione. Deben estar viendo que ella está muy mal" dijo Ron entregando sus cosas a Harry.
"Veo que te harás cargo de sus cosas. No me puede ver" dijo Harry con pena.
Ronald bajó con Harry al corredor en donde estaba la enfemería y una que otra persona salía de él. Harry se quedó detrás de Ron.
"Voy a verla…Quédate acá"
Hermione estaba acostada en las camas del final. Una manta verde la tapaba y estaba despierta con la mirada en los ventanales que dejaban entrar la luz del sol. Ron se sentó en la silla que había al lado de la cama.
"¿Cómo estás?" preguntó Ron dejando las cosas de Hermione en la mesita de noche.
"Cuando vi a ese alumno…pensé que era Harry" dijo Hermione calmada.
"Debo reconocer que ese estaba un poco apasionado. Pude ver que se tomó la poción"
"Seguramente vino de ti. Vi a Harry y me asusté porque me acordé de las cosas que pasaron en la noche…con Harry sobre mí y yo…Yo no habría hecho eso…" decía Hermione que le saltaban las lágrimas.
"Ya tranquila. Hermione le has dicho esto a alguien" dijo Ron en tono confuso.
"¿Te mandó Harry? Quiero ver si puede mantenerme controlada..dile que no…quizás nadie más lo sepa…pero yo y mi cuerpo nos acordamos de ello siempre" dijo Hermione perdiendo el control.
Madame Pomfrey miraba desde lejos cuando entró Harry con rostro de impaciencia. Hermione alcanzó a verlo. Se levantó de la cama con un aplomo inesperado.
"¿A qué vienes?"
"Quiero saber como estás" dijo Harry.
"Tú la pasaste fantástico..ladrón"
La enfemera se acercó donde los chicos que iban a discutir cuando entró una camilla con una chica de Gryffindor. Estaba el propio Dumbledore.
"Es Katie Bell" dijo Ron yendo a la otra cama.
Por un momento la tensión de los ojos de Hermione pasó hacia el otro lado pero Harry no podía dejar de sentir que otros ojos lo miraban. Se volteó y encontró la mirada de Dumbledore que caminó hacia Harry se sentó en una silla algo oculto.
"Harry…Tu compañera de Gryffindor fue lastimada por una maldición..usó un collar extraño pero maldito"
"En serio.."
Dumbledore sabía muy bien que le pasaba a Harry y posó su atención en Hermione que junto a Ron miraban a Katie que tenía muy mal aspecto. El director de la escuela vio como la amiga de Ron temblaba y pronto de apartó de la cama contigua. Miró a Dumbledore con una mezcla de respeto pero se afectó más cuando miró a Harry que no dejaba de mirarla. Ella sola volvió a su cama.
Ron estaba sentado en una butaca de la sala común con una carta en la mano. Harry entró viendo acongojado a su amigo.
"¿Qué dice?" preguntó Harry al ver la carta.
"Encontraron cajas de Felix en la tienda de Fred y George ayer. Gente del ministerio revisó cada local del callejón Diagon y descubrieron las pociones. Tú dirás que no hay nada malo en que una tienda de ese lugar venda, en realidad es así, pero descubrieron un pedido desde Hogwarts. Alguien estúpido de aquí mandó un correo por lechuza a esa tienda y mis hermanos no supieron deshacerse del correo a tiempo..todos fueron unos estúpidos" dijo Ron con mucha rabia.
"¿Qué pasó con tus hermanos?"
"La tienda clausurada…la carta con esa noticia me la mandó mi padre que está haciendo gestiones para que el ministerio quite los cargos..pero van a venir a Hogwarts. Eso no lo pudo impedir"
"Espero que sólo vengan a encontrar las botellas, nada más"
"También el intermediario"
Harry se dio cuenta del lio en que estaba Ron.
"Diré que estaba contigo en esto"
"Nadie te ha pedido sacrificarte, Harry. Mis padres no soportarían verte fuera de Hogwarts…No sé que harían con otro hijo desertando de la escuela"
"Te dije eso recién porque la culpa me persigue…siento que cualquiera de estos días Hermione decide denunciarme a quien sea"
Era la noche y nada de los pergaminos de Artes Oscuras tenía listo Harry que acostaba la cabeza en una de las mesas de la sala común cuando Ginny bajaba del dormitorio de las chicas. Se acercó donde Harry que se incorporó.
"Me dolería verte peor de lo que estás por…lastimar a Hermione" dijo Hermione con la voz muy baja.
"Dime de una vez que te gustaría verme pagar por eso"
Ginny suspiró y volvió al dormitorio acongojada. Ron entra en la sala común con una caja de cartón.
"Harry…yo estaba completamente dispuesto a dejar esta caja en donde estaba…debajo de la cama de Neville pero nadie creería que el fuera el intermediario…no puedo hacerle algo así. No prefiero tener esa culpa por la que estás pasando tú. Disculpa…puedes ayudarme a ir al baño de Myrtle a botar todas las pociones"
"Vamos"
Durante el camino ambos estuvieron en silencio y se iban por corredores desiertos. Llegaron al baño descompuesto y entraron. Nadie estaba allí a excepción de Myrtle que se acercó a los chicos que estaban más asustados por gente del ministerio que por Myrtle.
"Hola" saludaron los dos chicos.
"¿Qué vienen a botar aquí?" preguntó Myrtle.
"No es poción multijugos esta vez. Necesitamos deshacernos de las pociones que nos salieron mal en la clase de Slughorn. ¿Podemos?" dijo Ron.
"¿Qué poción es?"
"Felix Felicis" dijo Harry.
"¡Imbécil…los de del ministerio también le preguntan a los fantasmas! Exclamó con rabia Ron.
Ron estaba como loco porque pescó cada botella de la caja y la vació en los lavamanos que dan a la cámara secreta. Todas las botellas fueron vaciadas allí. Myrtle daba vueltas y vueltas por el baño de mujeres y después se metió por una cañería.
"A ver..Díganme..Porque quieren botar el elixir del amor…"
"Deja de molestar" dijo Harry que ayudaba a Ronald.
Pronto todas las botellas estaban vacías y la oscuridad era insoportable cuando no estaba Myrtle porque el fantasma emitía una especie de luz espectral. Los dos amigos salieron el baño rumbo a la sala común cuando en el camino se encontraron con la profesora McGonagall. La docente los miró muy atentamente.
"¿De dónde vienen?" preguntó la profesora.
No había muchas excusas para que ellos dos anduvieran solos a esa hora.
"Venimos de la enfermería. Vimos a Hermione" dijo Harry sintiendo la respiración nerviosa de Ronald.
"Lo último que supe fue que su amiga estaba muy nerviosa. No quiero pensar si son los examenes porque falta mucho" dijo McGonagall.
"Navidad está cerca" dijo Ronald.
Harry estaba con miles de ganas de irse porque Ron empezaba a hablar de Hermione y McGonagall hacía preguntas a esas horas de la noche. Finalmente la profesora McGonagall se desvió por un pasillo y los dos amigos llegaron sin encontrarse a nadie en el camino pero había muchos estudiantes estudiando en la sala común. Ginny andaba por ahí y fue donde su hermano apenas llegó.
"Recibí una carta de mamá" dijo Ginny mostrando el sobre abierto.
Ron la tomó y la leyó. Harry miraba a Ginny que evitaba al joven.
"No te preocupes, ya estoy prevenido" dijo Ron.
"Esto seguramente saldrá mañana en El Profeta. El escándalo de los Weasley con los filtros de amor y que varios de ellos se vendieron en Hogwarts" dijo Ginny abrazando a su hermano.
Ginny se retiró donde unas amigas la esperaban y una de ellas sostenía una botellita de algo que no era Felix pero puso en alerta a Hermione.
"Ronald…nos faltan las botellas que los demás compraron. Ellos pueden ser registrados" dijo Harry al oído de Ron.
"Ya somos suficientemente enigmáticos…habla normal" dijo Ron atribulado.
Ambos se sentaron en una butaca de la sala común hasta que de a poco fue despejándose y sólo pululaban las polillas alrededor del candelabro. Harry recordaba los hechos de la noche pasada que justo habían ocurrido en el piso de la sala común.
"El plan era que tú te vinieras a La Madriguera con nosotros para las vacaciones de navidad. Papá va a estar muy ocupado con la defensa de Fred y George. Me da pena porque ellos dos van a atribuirse toda la culpa. Nunca dirán que soy su intermediario en Hogwarts. Mis padres no tienen idea de eso…ni de lo tuyo"
"Ginny puede contarles la verdad a ellos dos" dijo Harry con tono lúgubre.
"Tienes razón. Ginny todavía no sale de su asombro con lo tuyo. No me quiere decir que piensa como si pensara que ella va a delatarte con alguien más que mis padres" dijo Ron dando vueltas por la sala común.
Los días que siguieron fueron tormentosos para cualquiera de los tres amigos porque el caso de las botellas ilegales de Felix decomisadas a los gemelos Weasley del callejón Diagon se supo en todo Hogwarts porque uno de los hermanos Weasley estudiaba allí…mejor dicho dos hermanos Weasley estudiaban ahí. Cada cual que compró la poción supo la noticia de que lo mejor era deshacerse de las evidencias porque todos podrían verse afectados. Harry hacía lo posible para hablar con la gente que compró la poción para advertir. Hermione se paseaba entre las clases con una pena que pocos sabían.
Hogwarts empezó a llenarse de ramas de muerdago, farolitos, guirlandas, árboles parlantes y coronas del jardín del colegio que daban a entender que comenzaban las festividades navideñas. En ciertos momentos del día el gran salón se nublaba en el techo y caían copos de nieve sobre las mesas. Los copos desaparecían con el contacto y brindaban un bonito espectáculo. Pronto iban a empezar las salidas para aquellos alumnos que escogieron pasar navidad con sus familias. El día 20 de diciembre era la fecha en que el castillo empezaba a desocuparse pues como ningún otro año los alumnos habían escogido pasar navidad fuera de Hogwarts. Harry estaba ese día en la sala común cantando en voz baja el cancionero de villancicos que un alumno de segundo año había hecho. Hermione bajaba por la escalera de caracol de las chicas y se miraron un segundo. Llevaba sus cosas en una mochila de excursionista que se cargó a la espalda. Harry sólo miraba.
"¡Perdóname!" exclamó Harry.
"Quizás debas perdonar a dos personas. La otra no querrá saber nunca como fue su origen"
Hermione dejó la sala común con lágrimas en los ojos mientras Harry se tocaba el estómago con un pensamiento muy interior. De recordó esa noche de pociones y abrazos y de dio cuenta del error que originaba las palabras de Hermione.
