Nota de autor: comence a publicar esta histpria en Wattpad y posiblememte se actualice primero haya antes que aqui. Espero que disfruten esta historia como yo disfrute escribiendola.
Capitulo 1
La farsa de la varita
—¿Como te atreves a intentar engañarme?—Uma tiro la varita y la rompió con sus dos manos—¡Harry!
El muchacho del garfio se abalanzó hacia Mal y el rey Ben tomando a este de la chaqueta y arrastrándolo de nuevo al barco junto a su capitán. Jay no tuvo suficiente tiempo como para detener a psicótico hijo del capitán Hook.
Mal dio dos pasos atrás mirando a Uma horrorizada. —Espera..— intento decir, pero su adversaria se veía cansada de ella.
Las cosas se habían salido de control, tenia que actuar rápido para recuperar a Ben.
— ¡No!—la muchacha le apunto con su espada. Su paciencia se había agotado por completo. Ya sus deseos por salir de esa asquerosa islas eran demasiado fuertes como para poder ser racional—¡Harry¡
Con una gran sonrisa el primer oficial tomo a Ben de las manos nuevamente atadas y lo arrastro hasta la plancha. Era sorprendente como podía seguir perfectamente cada orden de su capitán sin que esta siquiera las pronunciara. —Estoy en eso.
—¡Te daremos la varita!— Mal grito— Fue un error darte una varita falsa.
Los piratas a su alrededor golpeaban las espadas contra la madera exigiendo una respuesta digna de su único y temido capitán. Mal se encontraba unos pasos lejos de Uma y de su numerosa tripulación.
Atacarlos directamente nunca había sido una opción, eran demasiados.
—No—Ben batió su cabeza culpable y enojado de su situación — Esto es mi culpa—gruño para si mismo. Harry reía sínico mientras que con una mano lo sujetaba de ser comido por los tiburones, su fuerza era pervesa—Uma por favor—suplico Ben—Puedo ayudarte a salir de esta isla por buenas.
pero Uma estaba sorda para esas palabras.
La reina de la isla avanzo unos pasos dispuesta a matar a Mal con su espada. Tomando acción lanzo su brazo en la bonita cara de la chica. Esta utilizo su arma para defenderse del rápido y furioso ataque de Uma.
—Siempre has sido tan confiada— escupió Uma las palabras mientras luchaba por ganar el control en la pelea. Mal incluso por un segundo cedió tropezando con sus pies.
—¡Mal¡— grito Evie acercándose a la chica en apoyo junto a los demás.
Gil y varios de sus camaradas salieron en defensa de Uma detrás de su capitán. Mas ella con una simple seña de su mano detuvo el fiero ataque de su tormentosa tripulación. —¡Atrás¡
Evie lanzo su espada en ataque en dirección a Uma haciendo que la hija de Ursula retrocediera hacia atrás de forma sigilosa.
—Ahora necesitas que te defiendan— se burlo Uma de la Mal.
—Me das pena ¿Donde esta esa Mal que hacia que todos en la isla le temieran? Veo que tu tiempo en Auradon te ha ablandado. Ya no tienes lo que se necesita para enfrentarme.
Mal sintió su orgullo herirse tras el brutal ataque de Uma que apenas pudo evitar. Sin embargo esto ya no era una simple riña entre dos niñas. Ahora era algo mas, mucho mas.
—Deja al príncipe Uma— Mal se levanto furiosa. —Se coherente nunca ganaras.
Uma fruncio el ceño, tanto ella como sus hombres descendieron por el puente hacia el barco de nuevo. De una patada el puente que los separaba del enemigo cayo dejando sin acceso a Mal, Evie, Carlos, Jay y a Lonnie.
—Exiges mucho para tu posición — Uma se giro y fue en dirección hacia su primer oficial y su rehén.
Harry soltó una risita impaciente y a la vez divertida. Uma puso su mano en su hombro para calmarlo.
Mal y los demás la miraron enojados, pero también aterrados. —Uma te daremos la varita— Mal grito nuevamente, pero esta vez desesperada por recuperar a su ex-novio.
Uma tomo la chaqueta de Ben y lo jalo hacia ella.
Ben suspiro aliviado de pisar de nuevo tierra y de no estar balanceándose hacia un futuro incierto en el agua. Aunque su despreocupación no fue mucha cuando sintió la fría navaja de la cuchilla de la bruja marina en su piel amenazándolo de muerte.
—Ya no confió en ustedes—Uma les miro estrechando sus ojos sobre los hijos de los villanos. —Nacieron en esta asquerosa isla al igual que nosotros. Sin embargo el...—se acerco a Ben de manera peligrosa, toqueteando su rostro y su cuerpo de manera incomoda. —El pagara todas sus mentiras.
Uma tomo su espada y la paso por la mejilla del rey dejando un rastro de sangre y una cicatriz que tardaría años en cicatrizar. Ben gimió cerrando los ojos aguantando las lágrimas que amenazaban con salir de sus ojos.
Harry y la tripulación subieron sus espadas junto una ovación que se hizo escuchar por todo el puerto.
—¡Detente¡— Mal grito llorando – Te daremos lo que quieras pero por favor no le hagas nada mas.
Evie abrazo a su amiga y todos los demás pusieron su mano en sus hombros para consolar a la chica. La situación era dura, la culpa que sentía en su interior había explotado y colapsado haciéndole romperse frente a su peor enemiga y rival.
Uma río divertida ante la suplica y la actitud de Mal, algo se sentía satisfecho en su interior al ver a su peor enemiga derrotada ante ella. Ben quien hasta hace pocos momento no estaba tan al tanto de su situación, sintió verdadero terror por la bruja del mar y su risa siniestra. Ahora sinceramente prefería ser lanzado hacia los tiburones que estar en la manos de Uma por mas tiempo.
Harry bailo alrededor de Uma y Ben sonriente, divertido, carcajeándose y mirando a Uma con ese amor-orgullo-respeto que todo primer oficial le debería tener a su capitán. Uma inhaló y sintiendo como el príncipe temblaba. "Ahora por fin entiendes" pensó. Sin embargo aun quería esa estúpida varita para derribar la barrera y salir al mundo con su tripulación. Por lo que aun requería un trato.
—Quiero la varita— soltó exigente—La real, y la quiero rápido. Si no tu Rey muere.—para ser mas intimidante lamió el rostro del príncipe y saboreo su sangre. — Dejame decirte que cuando acabe con el, tu Rey deseara haber muerto con los tiburones.
—Están en graves problemas—Jay alzo la voz haciéndose escuchar—Nosotros pensábamos que podíamos solucionar esto sin la intervención del reino. Ahora veo que fue un error.
—Si chico listo—Uma soltó frunciendo el ceño nuevamente. -¡¿Que tan idiota crees que seria¡? ¿Una varita falsa? No soy estúpida.
Jay asintió con la cabeza. —Ahora ya nada de esto esta en nuestras manos—Jay afirmo, Evie bajo la mirada y Carlos entendía perfectamente porque las palabras de Jay no eran amenazas como las de Mal. El chico estaba negociando pasivamente.
—Nosotros no podemos robar la varita. Pero le notificaremos al reino tus condiciones.
—Tienen un mes. Si no me entregan la verdadera varita para ese momento el estará acabado.
Jay asintió sin nada mas que hacer—Haré llegar el mensaje.
Uma inhaló lentamente tras escuchar esas palabras. Esas palabras cambiaban todo. Absolutamente todo. El juego se expandía a niveles superiores.
Mal se giro para mirar a su amigo. ¿Que demonios estaba diciendo Jay? No podían hacer eso, si hacían eso no solo sus compañeros les culparían por esto, también el hada madrina y la realeza. Los echarían del reino a esa isla de nuevo en el mejor de los casos si lograban recuperar al príncipe sano y salvo.
Jay asintió una vez mas, tenso miro a Evie y a Carlos resignado. —Vámonos de aquí chicos—sugirió—Aquí ya no obtendremos nada.
—Estas loco—Mal dijo– Yo no me voy de aquí sin Ben.
Evie la tomo del brazo, moviendo la cabeza hacia los lados. Mal pudo observar que en su mirada se hallaban ciertas lágrimas amenazando con salir de su rostro. Carlos por su lado no se atrevía a levantar la mirada por la frustrante situación. Todo se había echado a perder y todo había ocurrido por su culpa.
—Vámonos— esta vez fue la hija de Mulan quien se había mantenido en silencio observando toda la situación.
Mal miro una ultima vez a su ex-novio antes de marcharse con los demás a Auradon.
"Lo siento mucho Ben" pensó afligida.
Uma tiro al príncipe Ben enojada al suelo. Bebió de una botella de alcohol que Gil le había traído a su capitán para que celebrara junto a la tripulación no dejarse engañar por esos traidores.
El líquido ardiente nunca había sido de su agrado, pero había algo de costumbre en beberlo cuando algo le salia bien. Y aunque las cosas no habían salido bien, tampoco había perdido ante Mal y de hecho había logrado humillarla, algo que siempre había soñado tras todo lo que hija de Maléfica le había hecho previamente.
—Esos TRAIDORES— dijo realmente furiosa. —Creen que soy estúpida.
El príncipe la miro aterrado. —Amarrenlo a una columna— pidió Uma, rápidamente Gil y Harry lo ataron a un columna del barco inmovilizándolo.
—Uma—Harry menciono poéticamente, como una canción que amaba cantar— ¿Que haremos ahora?—Uma le ofreció la botella y su primer oficial la acepto sin queja alguna.
—Hablaremos de eso luego— la capitana camino por la cubierta. Aun recibía aplausos, silbidos y gritos de admiración de su tripulación. Gil la abrazo felizmente orgulloso de su capitán y mejor amiga. Uma sin embargo no dejaba de pensar en las palabras de Jay.
El juego ha cambiando por completo. Mas no podía descifrar si para bien o si para mal. Ahora su situación era peligrosa, ahora ponía en juego las vidas de todos sus tripulantes si cometía cualquier mínimo error.
Ben observo a la bruja del mar sin quitarle la mirada por un segundo. Su mejilla dolía y aun continuaba sangrando. Todo esto era demasiado para el. No podía moverse ni un centímetro, tenia hambre y sed. Pero lo que realmente lamentaba fue haber observado a Mal y a sus amigos rendirse de esa forma frente a los piratas. ¿Tan poco valía para ellos? ¿Tan poco valía para Mal? Su corazón dolió y por primera vez no le importo si Uma clavaba esa espada en su corazón asesinándolo.
Ahora las cosas, estaba seguro no volverían a hacer como antes para nadie.
Mal continuo llorando en el camino a Auradon en la limusina. Solo que ahora era acompañada por el llanto de Evie quien asimilaba su triste situación.
Jay se hallaba sentado en su asiento sin mirar a ninguna. Estaba frustrado, perdido, agotado. Había nadado en un mar inmenso y ahora no solo el, si no todos parecían morirse ahogados en la orilla.
—Debe haber otra solución—Carlos hablo lleno de impotencia —No podemos rendirnos y ya. Debemos intentarlo una vez mas.
—Se acabo para mi—dijo Jay—Todos en Auradon nos culparan por esto. ¿Y para que negarlo? es la verdad. Ahora todos sabrán que nunca le debieron abrir las puertas del reino a unas personas como nosotros.
El llanto de Evie se intensifico. Recordó a Doug, su bello Doug. ¿Como podía siquiera explicárselo? La hija de Mulan la abrazo intentando inútilmente callar sus sollozos.
—Desde ahora todo esto ya no esta en nuestras manos— Jay menciono una vez mas. El camino hacia la Auradon prep fue el viaje mas eterno que pensaron haber tomado en sus vidas.
