Me encontraba ridícula viéndome llorar por él. Siempre supe que acabaría siendo infiel, pero no esperaba que fuese con Lanie, mi mejor amiga.
Ambos abogan que estaban borrachos que no sabían lo que hacían que debía perdonarles que no fuera infantil, y que mañana nos acabaríamos riendo de todo esto.
Sé que suena a tópico pero yo estoy enamorada de él. Esto me ha dolido demasiado para pensar con cordura. Sólo quiero morirme y acabar con todo esto sumiéndome en el más oscuro de los sueños.
Cogí una cuchilla , una hoja de afeitar y comencé por mi muñeca izquierda, viendo como la sangre corría por mi piel. Y luego procedí a rasgar la otra con el mismo ímpetu.
Me estaba mareando, mis fuerzas se debilitaban y mis párpados cada vez pesaban más. Escuché que alguien tocaba la puerta antes de dormirme.
Una muy intensa luz recaía sobre mi rostro, estoy en el cielo –pensé, era tan incómoda esa luz que terminé por abrir los ojos. No era el cielo era un puto foco de hospital.
¿Qué coño estaba yo haciendo allí? ¿No había muerto? Soy fracasada hasta para suicidarme.
Él entró a la habitación llorando como un niño pequeño se posicionó a mi lado y me dio un beso en la frente.
Mi padre no dejaba de llorar y de decirme que me quería , que era una estúpida por querer arrebatarle de mi vida, de querer arrebatarme a mí misma la vida , y de dejar a mi hijo sólo en el mundo.
Mi padre y mi hijo eran lo único que me importaban pero en ese momento no pensé y sólo quería terminar.
No podía hablar, una lágrima se escapó de uno de mis ojos y se dirigió hacia mi mejilla.
Mi padre me secó la lágrima con su mano y me abrazó a él.
Cuando me iban a dar el alta, 4 días más tarde, la enfermera me informó de que alguien me había donado sangre debido a que yo había perdido mucha.
Ella me dijo que fue un hombre y que yo entre delirios lo llamaba gatito. Yo sabía perfectamente de quien se trataba.
Salí del hospital y fui a casa de mi padre a ver a mi pequeño que estaba a su cuidado. Me quedé a solas con él y le pedí perdón, aunque solamente tenía 2 años, y estaba aturdido por mis palabras y mis llantos, el niño se abrazó a mí con más fuerzas que nunca.
Preparé su mochila y me fui a mi casa , mi padre insistía en acompañarme para cersiorarse de que no volvía a cometer una 'imprudencia'. Le corté el rollo de una, y seguí caminando.
Nico estaba viendo la tele y yo me disponía a echar la siesta en el sofá, estaba muy cansada. Me levanté para ir a la cocina a buscar un vaso de agua y me encontré debajo de la cafetera una carta.
La carta era de él, de mi marido, del hombre de mi vida, del padre de mi hijo.
Mi amor:
Espero que algún día me puedas perdonar, te amo.
Yo doné sangre para que tú pudieras vivir.
Me arrepiento muchísimo de que hayas querido perder tu vida por mi culpa , TU VIDA Kate. No me lo perdonaré nunca a mí mismo.
Dale un beso a Alex de mi parte, no le hables de mi nunca más ni le enseñes fotos, búscale otro padre, otro que te merezca y que pueda darle todo eso que yo he decidido perderme, ustedes son mi vida. No merezco seguir viviendo, te amo, hoy y siempre.
Rick.
Ella no podía permitir que él muriera después de haberle salvado la vida, y al salir corriendo de la cocina se tropezó.
Caí de bruces, y me desperté, había soñado todo esto, Castle era un simple compañero de trabajo por el que no sentí ni pizca de amor. Jamás tendría un hijo con él.
